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ꕤ「capítulo 53」


Abrió sus ojos de golpe, su cabeza dolía a horrores, se sentía mal y muy mareado, tomó su cabeza en sus manos intentando olvidar el increíble dolor, la luz blanca frente a sus ojos no ayudaba.

– Despertaste. – una reconocible voz se dejó escuchar por todo el lugar.

– ¿Dónde estoy Namjoon? – Jungkook intentó sentarse sobre la camilla en la que se encontraba recostado sin embargo notó la aguja enterrada en su piel, supuso era suero.

– En el hospital, te desmayaste. Por Dios Jungkook no cuidaste ni un poco de tu salud. – Nam se encontraba sentado en un pequeño sofá de brazos cruzados.

– ¿Y qué mierda que querías que hiciera? ¿Que me sentara a esperar y que Taehyung volviera mágicamente? No Namjoon, estaba tan preocupado, en verdad amo a ese chico y lo que menos me importa ahora es mi salud. – Jungkook habló un tanto enojado.

– Jungkook, estabas por entrar en un cuadro de desnutrición ¿Siquiera comías? – Nam lo entendía, claro que sí, sin embargo su mejor amigo estaba muy mal.

– Sí, no mucho pero lo hacía. – Jungkook rodó los ojos mientras cruzaba los brazos – ¿Puedo verlo? – preguntó está vez.

– Él también se encuentra un poco débil, sin embargo debo preguntar y también por ti. – Nam se levantó de su asiento organizando su traje.

– Nam, necesito verlo, por favor. – Jungkook puso sus ojos suplicantes, aquellos hermosos ojos que brillaban como nada, no estaban, sus hermosos ojos color chocolate eran de un tono apagado y triste, Namjoon pudo verlo en ese momento y desde hacía unos días esos hermosos ojos no brillaban.

– Veré que puedo hacer por ti, por ahora descansa amigo. – Nam salió dejando una pequeña caricia en el cabello de Jungkook.

Jungkook gruñó insatisfecho, quería ver a Taehyung, quería esconderse en su cuello y aspirar su dulce aroma, el embarazo lo hacía mucho más fuerte y le encantaba, quería ver a su Omega, quería acariciar su lindo vientre y sobre todo quería asegurarse de que se encontrara bien.

Se preguntarán ¿Que sucedió después del desmayo del Alfa? Fue simple, Taehyung gritó por ayuda, la preocupación del Omega al ver a su Alfa en ese estado era grande, los oficiales se percataron no solo del estado del Alfa sino también del embarazo del Omega y llamaron rápidamente a las ambulancias.

Jimin y Yoongi quienes permanecían fuera del asqueroso lugar observaban la escena, poco después corrieron dentro del asqueroso lugar, Jimin corrió hasta su mejor amigo abrazándolo entre lágrimas mientras pedía incontables veces que lo perdonara, Taehyung lo abrazaba de igual forma mientras lloraba, había sentido tanto miedo durante aquellos días que parecía un sueño el tener entre sus brazos a su mejor amigo.

Entre la emoción y felicidad Taehyung advirtió a la pareja el fuerte mareo que tuvo de repente, Yoongi se percató rápidamente de lo pálido que se encontraba Taehyung, mucho más de lo que acostumbra a estar.

Por suerte las ambulancias llegaron a tiempo, ayudando al Omega en gestación y al Alfa, al llegar al hospital los atendieron rápidamente, Jungkook estuvo a punto de entrar en un cuadro de desnutrición ya que el Alfa no se alimentaba para nada bien.

A pesar de que Jimin y Yoongi lo intentaron, terminaban por irse ya que Jungkook pedía que lo dejaran solo y prometía comer, sin embargo tal parece que el Alfa no cumplía con su promesa.


꒰  🐾  ꒱



Aquellos hermosos ojos se abrieron lentamente, la luz blanca chocó contra sus ojos haciéndolo parpadear varias veces, se sentía bien, después de mucho se sentía bien, sentía que había pasado demasiado desde que su cuerpo descansaba tan cómodamente sobre el colchón.

Suspiró relajado hasta que se percató de una de las cosas más importantes, sus manos viajaron hasta su vientre encontrando el gran bulto en el mismo, suspiró profundamente, estaba allí, su bebé estaba bien, justo en ese momento se percató de la aguja incrustada en su piel, su mirada siguió el cable que conectaba con su mano encontrando a una linda enfermera cambiando el suero.

– Oh! Señor Jeon ¿Cómo se siente? Sus familiares estaban muy preocupados por usted, les llamaré. – la chica le sonrió dulcemente.

– Gracias, pero... ¿Podrías decirme si mi bebé se encuentra bien? – Taehyung la observó con ojos suplicantes y la chica solo atinó a asentir.

– Llegó con un cuadro de desnutrición severa, usted se encontraba en un estado terrible ya que usted debe comer por dos o al menos alimentarse a sus debidas horas, sin embargo el bebé se encuentra en perfecto estado, ambos son muy fuertes. Les traeré comida también. – la chica aparentemente Alfa le regaló una última sonrisa antes de salir.

Taehyung suspiró aliviado, su bebé se encontraba bien sin embargo su corazón se oprimió al recordar todo lo sucedido, el rostro triste de su Alfa mientras esa perra intentaba tocarlo, sus lágrimas y sus innumerables palabras llenas de perdón.

"Te amo mucho TaeTae, Y-yo no quería hacer nada de esto, por favor perdóname." Las palabras de Jungkook resonaron en su mente.

– ¡Tae Hyung! – Jimin entró interrumpiendo sus pensamientos.

– Jim... – no terminó de hablar ya que su amigo estaba abrazándolo fuertemente.

– Dios, estaba tan preocupado, esa perra no te volverá a poner un maldito dedo encima Taehyung, lo prometo. – Jimin se aferraba fuertemente al cuello de Taehyung.

Taehyung sonrió en verdad se sentía bien abrazar a su mejor amigo, inhalar el embriagante aroma que este desprendía y aferrarse con todas su fuerzas a su espalda, sin embargo lo único que más quería era tener a Jungkook así, en abrazarlo y besarlo repitiéndole una y mil veces cuanto lo amaba.

– Jimin quiero ver a Jungkook, ¿Cómo está él? – Tae habló hacia su mejor amigo con un rostro lleno de preocupación.

– Él se encuentra a unas habitaciones de esta, se encuentra bien, sobre verlo aún no sabemos concretamente cuando puedas hacerlo, pero lo traeré de inmediato apenas pueda. – juró el de cabello azúl, uno ya desgastado por cierto.

Taehyung asintió volviendo a abrazarse a su mejor amigo.

– Tae, Jungkook en verdad estaba muy mal, él no se alimentaba correctamente y te juro que con Yoongi lo intentamos cientos de veces, pero él se negaba a comer y en vez de hacerlo solo trabajaba aún más en la empresa y después de ello hablaba con los oficiales encargados de tu caso o simplemente vagaba por las calles con la esperanza de encontrarte. – Jimin no quería hacerlo sentir mal y Taehyung lo sabía sin embargo cada palabra se clavó en su pecho como un afilado cuchillo.

Las lágrimas de Taehyung no tardaron en salir, se sentía tan mal por su hermoso Alfa, había pasado por tanto y todo por su culpa.

– Y-yo tuve la culpa Jimin. – las lágrimas de Taehyung resbalaban por sus mejillas cayendo sobre la fina camiseta de su mejor amigo.

– No. Tú y Jungkook son los que menos culpa tienen en esto, la culpa la tiene esa perra. – Jimin repartía caricias sobre la espalda de Taehyung.

Taehyung en verdad quería ver a su Alfa, anhelaba besarlo y abrazarlo, quería embriagarse con su exquisito aroma.

꒰  🐾  ꒱



Un animado Jungkook terminaba de arreglar su ropa, Namjoon había conseguido que le dieran salida, claro con la condición de que cuidara de sus comidas y de él mismo.

– ¿Estás listo? – Nam se recargó sobre el marco de la puerta.

– Más de lo que crees. – Jungkook peinó sus rubios y desgastados cabellos, estaba pensando en tinturarlo de otro color.

Ambos Alfas salieron de la habitación, Jungkook casi saltaba de alegría en verdad quería ver a Taehyung, su lobo estaba totalmente emocionado saltando de un lado a otro y sus feromonas llenas de alegría lo delataban aún más.

Nam abrió la puerta de la que se suponía era la habitación de su esposo, lo primero que logró visualizar fué a sus amigos, Jackson, Mark, Jin, Yoongi y Jimin, algunos en el sofá y otros alrededor de la camilla de su esposo.

Pero logró observar a su hermoso Omega el cual reía animadamente con sus amigos, Jackson contaba una anécdota muy divertida mientras sujetaba la cintura de Mark.

Nam se adentró dejando un beso en los labios de Jin y una caricia en su abultado vientre de siete meses ya.

Jungkook tragó en seco al conectar miradas con su Omega, los ojos de ambos brillaron llenos de alegría, Jungkook le regaló una sonrisa nerviosa como si fuera la primera vez que se veían, como si fuera la primera vez que sus miradas se encontraban, todos los presentes observaban la escena atentos, ya no habían risas ni la voz de Jackson resonando por el lugar.

Jungkook dio unos pequeños y cortos pasos hasta estar a escasos centímetros de la camilla donde se encontraba recostado el Omega, Jungkook pudo sentir su corazón latir rápidamente, el abultado vientre de su Omega estaba allí y se marcaba perfectamente a pesar de tener varias colchas sobre su cuerpo.

– ¿Se abrazarán o qué? – Jimin interrumpió el momento de la pareja y Yoongi lo tomó de la cintura en forma de advertencia.

Jungkook les dirigió una mirada llena de seriedad, más bien era una advertencia de que salieran o se callaran, su lobo estaba tomando el control siendo totalmente territorial.

Las feromonas llenas de su aroma llenaron la habitación, Jungkook quería marcar a su Omega con su aroma.

Sin resistir más corrió hasta su hermoso Omega, Jungkook se aferró fuertemente a la cintura del contrario mientras que Taehyung inhaló el delicioso y fuerte aroma de Jungkook.

Y tal como Jungkook lo imaginó el aroma de su Omega era como lo recordaba, tan dulce gracias al embarazo, Jungkook dejó salir sus lágrimas llenas de felicidad y emoción, sentía que había pasado una eternidad desde que abrazaba el cuerpo de su Omega.

Sus manos llegaron hasta el vientre abultado de Taehyung acariciándolo lentamente hasta acercar por completo su rostro, dejó innumerables besos por el gran vientre de su pareja, dejando palabras de perdón mientras lo hacía.

Tae sonreía, sin embargo aún necesitaba de algo para sentirse completamente feliz.

– Jungkook~ – su voz era suave y Jungkook levantó su rostro lleno de lágrimas las cuales Taehyung limpió con sus pulgares rápidamente. – Bésame, por favor. – habló casi en un susurro.

Jungkook sonrió feliz, se acercó lentamente y estampó sus labios con los contrarios, aquella calidez que emanaban los labios del contrario los hacia sentir en el cielo, sus lobos ronroneaba felices y ellos se besaban con necesidad, con ganas de sentirse de nuevo.

Jungkook se separó y dejó un casto beso más mientras conectaba su mirada llena de calidez con la de Taehyung, ambos estaban tan felices, se habían extrañado demasiado.

– Te amo tanto Taehyung, que hasta duele... – Jungkook juntó sus frentes mientras dejaba salir sollozos.

– Yo te amo aún más mi lindo Alfa. – Taehyung sonrió dejando escapar sus gruesas lágrimas.

Estaban tan felices hasta que...

– ¡Dios, Eso fue tan lindo! – la voz de Mark se dejó escuchar mientras todos los presentes reían.

Horas después...

– Nam necesito que me ayudes con algo. – Jungkook sostenía un café caliente entre sus manos mientras hablaba con Nam en la cafetería del hospital, había sido difícil dejar a su hermoso Omega, sin embargo se separó por unos minutos para beber algo y a pesar de los reproches de Taehyung terminó quedándose en una animada charla con Jin y Yoongi, quienes peleaban por el nombre del hijo de Jin.

Nam asintió mientras bebía un poco de su café.

– Quiero que me ayudes con la mudanza, nos mudaremos a la mansión que compré hace poco. – habló Jungkook.

Nam abrió sus ojos de par a par sorprendido – ¿Por qué tan de repente? – preguntó está vez.

– Quiero mantener seguro a Taehyung de ahora en adelante, ya hablé con Jennie, me ayudará a contratar los servicios de guardaespaldas y las personas de limpieza para la mansión, esto jamás se repetirá y menos con mi hijo. – Los ojos de Jungkook denotaban seriedad.

– Bien, hablaré con las personas de la mudanza, ¿Planeas decirle a Taehyung? – Nam llevó su mirada hasta Jungkook quien soltó un suspiro.

– Lo haré, cuando lo tenga en la mansión, se que no querrá mudarse tan repentinamente pero tengo algo de tiempo mientras le dan de alta, tenemos algunos días. – Jungkook habló pensativo. – ¡Oh, Si lo olvidaba! La habitación de Hobi, quiero que esté exactamente igual que en la otra casa, con Tae nos encargaremos de la decoración solo diles que organicen las cosas exactamente igual. – habló serio.

– ¡Muy bien jefe! – Nam dejó salir una pequeña risa y Jungkook rodó los ojos divertido.


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– ¡Amor! – Taehyung casi saltó de la cama al ver a su Alfa entrar por la gran puerta de la habitación.

– ¡Hey! ¿Qué estás haciendo intentando levantarte? ¿Y Jin y Yoongi? ¿Dónde se metieron? – Jungkook hablaba mientras tomaba la mano de Taehyung y enredaba su brazo alrededor de la cintura de su Omega.

– La enfermera dijo que se terminaron las visitas y yo solo quiero que tú te quedes conmigo esta noche. – Taehyung habló haciendo un puchero al ver a su Alfa llevarlo hasta el baño.

– Bien, pero al menos espera a que alguien venga a ayudarte mi vida, no puedes hacer demasiado esfuerzo. – lo regañó.

– Solo quería ir al baño, literalmente queda a unos pasos de la cama Jungkook. – Tae reprochó intentado quitar las manos de su Alfa de la bata azúl que llevaba puesta.

– Te ayudaré y no quiero quejas. – Jungkook quitó la bata por completo dejando ver el lindo vientre de su Omega, los boxers que había traído hacia unas horas sus amigos junto con más ropa y sus hermosos pezones aún hinchados y rojos.

Suspiró enamorado y tomó las prendas que habían en la maleta para ayudar a vestir a su hermoso Omega.

– Jungkook, puedo hacerlo solo, esto es vergonzoso... – las mejillas de Taehyung tenían un fuerte rojo.

– Pero si ya lo he visto todo cariño. – los dedos de Jungkook rozaron su cintura haciendo jadear.

– ¿Cariño? – Jungkook jamás le había dicho de esa forma.

– ¿No te gusta? – preguntó el Alfa terminando de poner su pantalón de pijama, hacía mucho no usaba uno.

– Me encanta si viene de ti cariño. – su rostro tomó un fuerte tono rojizo.

Jungkook dejó escapar una pequeña risita, él también se había sonrojado por el nuevo apodo.

– Te amo demasiado Taehyung. – Jungkook había terminado de poner la ropa de su Omega, tomó la cintura del mismo y habló rozando sus labios.

– Yo también te amo Kookie – Taehyung sonrió y lo besó, un beso lleno de amor.

Sus labios danzaban llenos de amor, claro hasta que sus lenguas se sumaron tornandolo algo caliente.

Jungkook empujó levemente el cuerpo de su Omega, el beso se cortó y Taehyung lo observó con duda en su rostro.

– Creo que no es el momento Tae. – Jungkook sonrió nervioso y Taehyung asintió comprensivo.

Se abrazaron por un rato más hasta que fue hora de dormir, Taehyung se recostó sobre la gran camilla que parecía más una cama insistiendo en que Jungkook subiera y durmiera a su lado, Jungkook se negó incontables veces hasta que terminó abrazando la cintura de su Omega, ambos aspiraban su delicioso aroma y dormían tranquilamente después de mucho.





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