El Alfa abrió sus ojos entrecerrandolos gracias a la molesta luz que se colaba por el gran ventanal, se sentía extrañamente caliente tal vez tuvo algún sueño húmedo mientras dormía y no recordaba, o simplemente su lindo Omega aún estaba en celo y gracias a su marca podía sentirlo.

Tanteó a su lado buscando a Taehyung y sin encontrar nada, frunció un poco su ceño al sentir su miembro duro y mojado, intentó moverse hasta que sintió un caliente aliento chocar contra su dura erección.

Levantó las sábanas que cubrían su cuerpo encontrándose con una escena digna de admirar, su lindo Omega tenía su miembro en su boca mientras acariciaba sus testículos y lamía la punta.

Jungkook mordió su labio inferior observándolo, se veía tan tierno pero a la vez tan sexy.

– Mierda~ – un jadeo escapó de su boca y el Alfa gimió gustoso al sentir la experta boca de su esposo engullir su miembro hasta lo más profundo de su linda boquita, Jungkook pudo jurar que tocó su garganta.

– Jungkook~ – Taehyung gimió gustoso al sentir como el Alfa movía sus caderas marcando un ritmo mientras follaba su boca.

– Podría acostumbrarme a despertar así~ mghm Oh mierda amor~ – jadeos roncos abandonaban la boca de Jungkook, Tae succionaba la punta mientras lo observaba, su mirada denotaba deseo. – N-no es justo del todo así... – Jungkook lo apartó de su goteante erección para después acomodar el lindo cuerpo desnudo de su Omega de manera que su culo quedara sobre la cara del Alfa mientras Taehyung observaba su miembro.

– Sigue con lo que hacías mi vida. – Jungkook hablaba con su voz ronca, cosa que al Omega le encantaba.

Taehyung volvió a su tarea de succionar el miembro del Alfa, daba lamidas y de vez en cuando ahuecaba sus mejillas succionando, haciendo que Jungkook delirara de placer.

Jungkook se encargó de la rosada entrada del Omega, a pesar de la noche anterior se veía apretada y deliciosa a los ojos del Alfa.

– ¿Te pusiste así de húmedo solo por hacerme una mamada? – Jungkook movía sus caderas follando la boca del Omega.

– Mghm~ – Taehyung seguía concentrado en su tarea mientras meneaba su trasero.

Jungkook entendió el mensaje, pasó uno de sus dedos sobre la pequeña entrada de su Omega acariciándola,  para después llevar su boca hasta el estrecho agujero y dar una lamida.

– ¡Ahh~! – Taehyung sacó el miembro de su esposo de su boca mientras deliraba de placer, se sentía caliente y necesitado.

Jungkook llevó su boca nuevamente hasta la estrecha y húmeda entrada del Omega, esta vez adentró su lengua acariciando con ella las paredes anales del Omega, no pasaba desapercibida aquella joya en su lengua la cual hacia delirar de placer al Omega.

– ¡Dios, Jungkook~ si~! – chillaba Taehyung de placer, para ese punto se había olvidado del miembro de su esposo.

– Sigue con lo tuyo amor~ – ordenó Jungkook volviendo a su tarea.

Y sin pensarlo dos veces Tae volvió a su tarea, esta vez acariciando la joya que decoraba el miembro ajeno.

Taehyung acercó su boca hasta la pequeña joya y la atrapó entre sus dientes jalando un poco.

– T-taehyung~ – habló un jadeante Jungkook.

El Omega hizo caso omiso y esta vez se encargó del área del piercing lamiendo y succionando, deleitándose con la sensación de la pequeña bolita en su lengua.

– Ahh~ Tae n-no hagas eso mghm~ – el Alfa tomó los negros cabellos del Omega entre sus dedos, acomodó al Taehyung sobre su vientre y lo besó.

Se besaron apasionadamente, sus lenguas se encontraron en una batalla la cual no querían que terminara, sus respiraciones erráticas, sus pechos subiendo y bajando, y sus cuerpos sudados acariciándose.

Taehyung tomó el miembro de su Alfa entre sus manos, guiandolo hasta su ya dilatada y lubricada entrada, se sentó completamente sobre él y apoyó sus manos sobre el pecho del Alfa.

– Ahh~ s-se siente tan Mghm~ p-profundo. – Taehyung dio pequeños saltos, para después subir su velocidad y terminar saltando rápidamente sobre la gran polla de su Alfa.

Jungkook tomaba fuertemente la cintura del Omega mientras el último mencionado saltaba sin parar sobre él, Taehyung era un desastre, sus negros cabellos pegados a su frente gracias al sudor mientras saltaba y gemía gustoso al sentirse lleno.

– ¡Ahh J-jungklok me voy a venir! – Taehyung seguía con sus saltos mientras Jungkook movía sus caderas al ritmo de ellos.

– Correte amor~ – Jungkook podría jurar que estaba dejando marcas en las caderas del Omega al tomarlo tan fuerte, pero la imagen frente a él no podía excitarlo más, Taehyung se vino manchando el abdomen del Alfa mientras sus ojos se cerraban y gritaba su nombre.

El Omega se recostó sobre el pecho del Alfa, mientras Jungkook dio unas cuantas embestidas más y se corrió dentro de su lindo Omega, anudando y clavando sus caninos en su cuello.

Jungkook acarició la espalda del Omega esperando que el nudo de desinflamara.

Taehyung cayó rendido sobre su pecho con una sonrisa en sus lindos labios, una linda imagen mental para Jungkook.

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Pasadas algunas horas la pareja se encontraba completamente arreglada, se dirigían hasta un elegante restaurante, ese día hablarían con sus padres y les darían la noticia sobre el cachorro, cabe recalcar que Tae tomó un supresor ya que su celo aún no terminaba.

No era algo que debiera importarle a sus padres, para ambos simplemente era su felicidad, el decirles a sus padres era por simple rutina.

Jungkook conducía viendo fijamente el camino, el silencio reinaba en el auto, uno completamente cómodo para la pareja.

– Tae... – lo llamó el Alfa.

Taehyung volteó a su dirección observándolo expectante.

– ¿No crees que para cuando cumplas al menos cinco meses de embarazo deberías dejar de trabajar? – Jungkook habló aún con su vista hacia el camino.

– ¿Qué? – Tae lo observó alzando una de sus cejas.

– No me malintepretes, te creo completamente capaz de trabajar mi vida, solo que no quiero que te sobre esfuerces, hablo de que no vayas todos los días al trabajo, es tu decisión amor. – Jungkook habló sereno hacia su esposo.

– No lo sé, sé que te preocupas por mi y nuestro cachorro pero sabes perfectamente que puedo seguir trabajando. – Tae hizo un puchero, no quería dejar solo a Jungkook.

– Lo sé, solo que el esfuerzo y el estrés que manejas en la empresa podría hacerles daño, podrías ir cuando quisieras sin embargo sin sobre-esforzarte. – Jungkook se preocupaba mucho por su lindo Omega y eso a Taehyung le parecía muy tierno.

– Bien, lo pensaré. – Tae sonrió y tomó la mano de su pareja.

Pasados algunos minutos llegaron hasta su destino, al bajar del auto Taehyung tomó la mano de su pareja y se adentraron al elegante restaurante.

Al entrar pudieron visualizar a ambas parejas de padres conversando amenamente.

– Padres, señores Kim. – Jungkook hizo una reverencia ante sus progenitores y suegros, Tae imitó su acción segundos después.

La pareja tomó asiento y todos ordenaron sus comidas mientras hablaban, pasados unos minutos sus órdenes ya estaban sobre la mesa.

– Bueno, nos reunimos aquí el día de hoy porque queremos darles una noticia muy importante para nosotros. – Jungkook tomó su copa levantandola.

Taehyung sonrió y tomó su copa al igual que él, los demás presentes imitaron sus acciones.

– Tendremos un lindo cachorro. – Taehyung chocó su copa con la de su esposo y sonrió junto a él.

El señor Jeon fue el primero en hablar – Que bien, los felicito. – el señor chocó su copa con la de los contrarios junto a la de su esposa.

Los señores Kim observaban con algo de "orgullo" a su hijo.

– Por fin hiciste algo bien. – sonrió la señora Kim mientras tomaba de su copa.

Jungkook frunció su ceño al escuchar aquello.

Taehyung levantó una de sus cejas y rió falsamente. – Siempre he hecho las cosas bien, solo que para ustedes todo lo que tenga que ver conmigo sin hacer lo que quieren es una mierda. – Tae dejó su copa sobre la mesa y se levantó de su silla – Si me disculpan. – habló hacia sus suegros dándole una última mirada a sus padres y corriendo hasta el baño más cercano.

Jungkook dejó su copa sobre la mesa dandole una mirada de decepción a los progenitores de su Omega, sin más corrió tras el mismo.

– Taehyung. – Jungkook entró a los elegantes baños.

Los pequeños pero audibles sollozos del Omega se escuchaban, corrió hasta el último cubículo y abrió encontrándose con un Tae vaciando lo poco que había comido.

– Lo hiciste muy bien amor. – Jungkook acarició la espalda de su Omega.

La mirada del Alfa viajó hasta el pantalón del Omega, estaba completamente mojado.

– Creo que el efecto del supresor se fue. – habló Jungkook observando los ojos llorosos de su lindo Omega.

Taehyung asintió y se abrazó a su Alfa, su vientre bajo dolía como el infierno y el aroma de Jungkook lo volvía cada vez más loco, se sentía mal por haber vomitado recientemente sin embargo su Omega le exigía a su Alfa.

– Vámonos de aquí mi amor, te daré lo que quieres. – Tae gimió gustoso al sentir las manos de Jungkook tomarlo de su trasero y levantarlo.

Ya en su hogar se despojaron de sus prendas y terminaron en un apasionado encuentro bajo las sábanas, terminando abrazados y sudados sobre su gran cama matrimonial.

Ya no importaban sus padres, ahora su amor es mucho más fuerte que todo y todos, eran felices y pronto lo serían más gracias a su lindo cachorro.

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