-Ángel - el niño pelinegro de cabellos largos se sentó a su lado con seriedad.

-Príncipe Jeon - sonrió con ternura y pellizcó su mejilla - no me gusta verte triste, al menos sonríe... ¿Qué te causa tanto dolor?

-Saber que un dia dejaré de ver tu delicado rostro... - suspiró - pero recuerda que siempre estaré contigo a donde vayas - se levanto, para caminar dejándolo sentado.

-Príncipe Jeon espere - el castaño lo alcanzó corriendo con rapidez, lo tomó de su brazo y sonrió muy alegre - si dejas de ver mi rostro será solo por un determinado tiempo.

El niño alejó sus manos y continuó caminando.

(...)

-¿podrías soltar el cuchillo por favor? - preguntó llorando.

-No quiero, suelta tú, te lastimaras.

El niño lo tomó de su filo - no - las sangres salieron de la palma de sus manos manchando el cuchillo y luego llegando al piso.

-Lo siento... Angel - quitó con fuerza el cuchillo y ratos después el filo llegó a su corazón.

-No... Jungkook - gritó el niño.

El otro cachorro, cerró los ojos y cayó al suelo, sin vida dejando un gran dolor en su futura pareja.

(...)

Taehyung despertó en los brazos de Jungkook, con tanto miedo, empezó a removerse en su lugar llorando en silencio.

Empezó a moverse más, sudando un poco, en eso provoca que el beta despierte.

Jungkook sentía un poco agrio el aroma de Taehyung, abrió los ojos sonriendo, había sido una noche muy hermosa, después de haber tomado y entregado en cuerpo y alma al chico tierno entre sus brazos.

Pero su sonrisa se borró al instante cuando vio llorar al omega, mientras lo escuchaba repetir su nombre.

-bebé aquí estoy es una pesadilla, despierta precioso - lo abrazó con fuerza - muñeco despierta - besó sus mejillas y limpió sus lágrimas.

Taehyung al despertar se abrazó de Jungkook con fuerza empezando a llorar fuerte, respiró con profundidad recordando ese horrible sueño, le dolía el pecho como en ese instante.

-Yo no quería... - dijo llorando - me duele el pecho... Siento que me va ahogar en unos segundos, hay un nudo en mi garganta que impide mi respiración - contó entre fuertes lágrimas.

-Yo estoy aquí, yo te cuidaré solo es un sueño, no le tomes importancia - besó sus labios para tratar de calmarlo.

Taehyung intentó corresponder, pero simplemente no pudo, solo lloró, la escena de la muerte del otro niño se repetía una y otra vez en su cabeza.

-¿Por qué duele tanto? - preguntó tratando de calmar la punzada en su pecho - Sí solo es un sueño no debería lastimarme.

-Bebé no le tomes importancia... Estamos aquí tú y yo muy sanos - limpió todas sus lágrimas - mírame a los ojos y dame una sonrisa.

Taehyung intentó, pero las ganas de llorar más, lo ganaron.

Jungkook se dedicó a acariciar su delicado cuerpo, besando su cuello y hombros para hacerlo sentir mejor - tu olor se siente en la melancolía, algo triste - lamió su oreja - te amo ángel.

Taehyung recordó la primera vez que Jungkook le había dicho amarlo, miró a los ojos y el dolor ya estaba pasando poco a poco.

Jungkook hincó la puta de su nariz - I love you forever - dejó besitos en toda su carita delicada.

-¿Qué dijo su majestad? - preguntó un poco confundido.

-Dije que te amo para siempre - atrapó sus labios y se posó sobre su cuerpo desnudo - forever... My life - bajó sus besos por todo su cuello y pecho dejando un poco de sus marcas - eres solo mío.

-Lo sé... Su majestad - mordió sus labios, reteniendo sus bajos gemidos - tengo hambre.

-¿deseas darte un baño antes? - preguntó con dulzura.

Taehyung movió la cabeza con timidez - ¿me lleva en sus brazos? - pidió un poco apenado, pero le gustaba ser tratado como un bebé y mimado cómo un cachorro.

Jungkook se puso de rodillas y levantó con facilidad al chico, lo llevó con una sonrisa, al baño y lo dejó en la tina.

Soltó las aguas, para que mojaran sus cabellos desordenados.

-No entiendo porque hay duchas y baños en esta época - dijo Jungkook.

Finalmente el beta entró, lavó a su omega con mucha ternura, mientras le daba unos cuantos besos, ambos se divirtieron mucho en la tina.

-Según dicen, hubo un hombre extraño que vino de un lugar extraño hace muchos años atrás, se trata del padre de su abuelo, cuando él murió dicen que no vieron su cuerpo, que desapareció por arte de magia.

-Entonces que hizo esa persona aquí.

-Bueno dicen que como rey, mejoró este reino e instaló baños con aguas adentro, y ganó mucho dinero por su inteligencia.

Después de un rato salieron juntos, está vez Taehyung tenía que caminar, sintiendo un poco de ardor en su parte baja.

Jungkook se vistió primero y salió para traer la ropa del omega, lo estaba consintiendo mucho, eso pensaba Taehyung.

Suspiró y se acercó a la cama para encontrar las sábanas sucias , con sus fluidos y un poco de sangre en ellas, el claro indicio de haber perdido su virginidad.

Se sonrojó al recordar la noche anterior y cubrió la cama, después tendría que limpiar ese desastre.

El beta regresó con su ropa, traía uno de color rosa muy bajo, el rey le regaló una sonrisa y le entrego para dejar un beso en su frente.

-Iré a preparar algo - avisó y se retiró.

Taehyung empezó a ponerse la hermosa y lujosa prenda, que lucía espectacular en su cuerpo .

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Ambos comían mirándose a cada segundo, en sus mentes podían repetirse la escena de la noche anterior.

-Eres mi inocente pecado - le mandó un beso volado - mi muñeco ángel.

Taehyung solo parpadeó y se mordió descuidadamente sus labios, era tan tierno y sin mucha información sobre la vida que Jungkook llevaba.

-¿qué es un inocente pecado mi rey?

Jungkook sonrió con ternura le encantaba el respeto que le mostraba el omega, que le obedezca bastante, sin importar la situación o momento, solo lo obedecía.

-Solo come mi niño - miró sus ojos - tu eres un inocente pecado, la pregunta eres tú y la respuesta también - se levantó para acercarse, tomó la cuchara y llevó a la boca del omega para alimentarlo.

Taehyung comió con ternura frente a los ojos de Jungkook, pasó lentamente cada porción, se preguntó de cómo era capaz de resistir semejante mirada, lleno de amor, combinado con varias emociones.

El beta esta vez tomó una fresa que se encontraba en el centro de la mesa, puso en su boca hasta la mitad, ante la mirada curiosa de su omega, llevó sus labios a los del otro.

Cuando la fresa rozó los labios de Taehyung, abrió su boca al caer en cuenta de que su rey quería alimentarlo en la boca, mordió hasta la mitad.

Acercó un poco más cuando vió que había quedado una parte, en eso sus labios rozaron los del beta, pero antes de que reaccionará, Jungkook juntó apresuradamente sus labios, tomando con firmeza su nuca, para profundizar el beso.

La fresa pasó por completo a la boca del omega aún en medio del hermoso beso, Jungkook sonrió muy satisfecho, no se cansaba de sentir esos suaves y dulces labios.

Se detuvo un momento y levantó al omega para subirlo en la mesa, volvió a besarlo con avidez, tocando con fuerza todas las partes de su delgado cuerpo.

Taehyung cerró los ojos, para disfrutar los hermosos y estremecedores besos de Jungkook, apretó el agarre en su ropa para no dejarse caer sobre la mesa y pedirle a Jungkook que lo haga suyo otra vez.

-Ángel, tu aroma otra vez está volviéndose fuerte - dijo en sus labios -me encanta ese olor que sueltas ¿Por qué no lo hiciste antes? - mordió su labio inferior - te amo mi niño - bajó sus labios a su cuello, allí succionó con fuerza dejando un chupetón grande, en cambio Taehyung había soltado un gemido.

-Más su majestad~ - pidió como pudo, su respiración ya se había vuelto errática.

Jungkook volvió a morder otro lugar, el omega solo gimió gustoso, encantando los oídos de su rey, bajó hasta su pecho y mordió el lugar para succionar otra vez dejando otra marca.

-Ahm~ah mi rey - se agarró con fuerza de sus hombros.

-Eres un poco masoquista ángel - siguió con sus duras caricias por todo el cuerpo libre del omega, quién solo gemía con su frente sudorosa y su cara muy roja.

-¿ma..soqui..sta~? - preguntó sin entender ninguna de sus palabras.

Jungkook ignoró su pregunta y continuó besando duramente el cuerpo de su omega, quien no paraba de retorcerse soltando gemidos de pura satisfacción. Sus besos regresaron por su cuello y mandíbula hasta llegar a sus labios y morder un poco, Taehyung soltó un quejido, pero dejó pasar esa acción para disfrutar el grandioso beso que hacían volar un montón de mariposas en su estómago.

-Quiero experimentar algo está noche contigo - susurró Jungkook apretando los muslos contrarios y siguió continuando con sus besos y caricias.

Pasaron unos minutos de pura caricia con mucho deseo de ambas personas, pero uno de ellos detuvo ese momento, porque no quería que pasará a más.

Jungkook lo miró con una sonrisa y acarició sus mejillas y labios, dejó un último beso.

-¿quieres hacer algo? - preguntó Jungkook con dulzura y Taehyung asintió - dime lo que deseas, ángel.

-Quisiera montar a Yuraf junto a usted y después ir al río, porque quisiera darme un baño bajo el sol pero junto a usted - sonrió un poco.

Esa pequeña sonrisa, logró sacar una gran alegría al rey, porque Taehyung no era de sonreír, lo había hecho recién desde hace mucho tiempo, sonrió en grandeza y se dijo internamente, que haría todo lo posible para hacerlo sonreír por completo.

-Sonríes muy hermoso - dijo cautivado.

Taehyung puso su cara seria, nunca había sonriendo hasta ese día que mostró solo un estiramiento de sus labios.

Jungkook le había sacado eso, porque el rey era alguien que podía darle mucha alegría y felicidad y él no iba a negarse a ese afecto.

El rey tomó la mano del omega para llevarlo a las caballerizas, fueron en total silencio apreciando la presencia de cada uno.

Por primera vez en mucho tiempo se sentían completos, no había algo que les preocupe solo valoraban la compañía de ambos.

Al llegar a las caballerizas primero alimentaron a Yuraf, después se miraron para darse un beso fugaz y luego subir al lomo del hermoso caballo blanco, para empezar un recorrido al río.

Jungkook en camino iba dejando besos en la nuca y cuello del omega, acariciando su cintura tras la tela.

Taehyung solo disfrutaba arrimando un poco de su cabeza en el hombro del rey, no le preocupaba nada, solo le importaba estar con Jungkook.