Jungkook empujó al omega a la cama y se posó entre sus piernas entreabiertas, agarrando con fuerza su cadera para luego rozar sus miembros a través de la ropa.

-Solo disfruta - dijo el beta acariciando sus tiernas mejillas - recuerda que te amo y que nunca te dañaría - dejó un casto beso para alejarse y luego traer unos juegos de un armario.

Taehyung pasó saliva sintiendo su cuerpo quemar, quemaba tanto como si estuviera en celo, quemaba por querer ya tener al rey dentro suyo, sus ojos brillosos estaban muy dilatados, mordiendo su labio, con sus manos agarrando las telas, con su respiración acelerada.

-Quítate la ropa - ordenó empezando a desabrochar su camisa, mientras sus ojos miraban su delicado rostro.

Taehyung obedeció al instante, no estaba dispuesto a esperar más, solo quería estar gimiendo de placer, escuchar la voz del rey muy ronca soltando también gemidos de placer.

Jungkook se quedó en su pantalón se quedó quieto observando la excitante forma en la que el omega se quitaba su ropa para verse desnudo para él, su piel acaramelada era muy provocativa, esas curvas que eran de infarto, ese olor tan fuerte que le hacía sentir una comida muy provocativa.

Taehyung después de estar completamente desnudo para su rey, lo miró a los ojos, para notar ese deseo carnal en ellos, se mordió los labios respirando lentamente, el latido de su corazón latiendo aceleradamente, su entrada mojada pidiendo ser consolado.

Jungkook sonrió al chico inocente, se acercó lentamente para tomar su cara con ambas manos - recuerda que soy el único que debe de tener de esta forma - no apartó sus ojos, Taehyung movió la cabeza perdido en los ojos del beta - soy el único que debe de estar metido entre tus hermosas piernas, soy el único que debe de mirarte con ojos de lujuria - rozó su nariz con las de Taehyung.

El omega sentía más excitación cada vez que escuchaba las palabras salir de la boca de Jungkook, se sujetó con fuerza de su cintura, cuando sintió un mordisco en su hombro, dolió tanto que le gustó.

-Soy el único que debe besarte - mordió otra parte de su piel - soy el único que puede hacerte daño - llevó sus labios por su hombro - soy el único que te puede hacer llorar de placer - continuó besando mientras daba caricias - soy el único que puede tocarte - estiró sus manos y tomó las esposas - soy el único que debe decirte te amo - las esposas se cerraron en las muñecas del chico - soy el único que puede darte placer de todas las formas inimaginables Taeángel - abrió sus piernas acomodándose en ellas - soy el único el que te hará conocer el cielo- entró de una sola estocada provocando el fuerte grito del omega - soy el único para ti - penetró con fuerza - entendido - Taehyung movió la cabeza, sintiendo mil emociones en su cuerpo - habla.

-. Entendido su majestad.- se movió junto a Jungkook.

El beta muy satisfecho salió del omega y tomó un látigo, sonrió imaginando al omega llorar de placer.

-Para qué es- - se quedó en silencio cuando el rey puso un dedo en sus labios.

-Juguemos a un juego en el cual lo único que tienes que hacer es mantener la boca cerrada, solo tienes que observar sentir y disfrutar, ¿entendido?

Taehyung movió la cabeza muy confundido.

Jungkook acarició el plano vientre del omega con la yema de sus dedos - tan frágil, es bueno corromperla, mi niño - después empezó a acariciar con el látigo de cuero.

Taehyung siseó ante el toque del cuero, era suave, se removió un poco inquieto cuando notó la acción seguida e inspirada de Jungkook, sintió un pequeño golpe en su vientre.

-Ah.. - se quejó ante el dolor.

Jungkook sintió mucha excitación al ver la cara del omega, volvió a tirar un pequeño golpe, esa era lo más suave.

-No - dijo el omega un poco adolorido - duele - sus lágrimas salieron de sus ojos rodando por su tierna mejilla.

Jungkook no habló, volvió a posarse sobre el omega para acariciar el lugar en el cuál se encontraban marcar rojizas - a mi me encanta jugar a esto eres perfecto para estos juegos en la cama, eres el único que me despierta estos deseos - juntó sus labios en un beso apasionado.

Abrió sus piernas pidiendo con esa acción a Jungkook estar metido entre ellas, el beta lo hizo, entró en el omega, mientras lo penetraba con lentitud volvió a golpear con el látigo en sus muslos, Taehyung esta vez gimió conforme - ¿otro más...?

-Ah.. más - pidió el lmega tirando de las esposas.

-Sabía que terminaría gustandote - volvió a tirar y el omega soltaba gemidos más fuertes.

Dejó el látigo en otro lugar para acariciar las nalgas del omega y darle una fuerte azotada.

Taehyung mordió sus labios evitando el grito que quería salir de sus labios, le encantaba y su cuerpo pedía más de esos, Jungkook volvió a arremeter.

Ambos disfrutaron del sexo como las veces anteriores, descubriendo más cosas, disfrutando de todo, las poses, juegos, azotadas, mordiscos, nalgadas...

Taehyung llegó al éxtasis al igual que Jungkook, sus piernas se sentían débiles al igual que todo su cuerpo, en ese momento no sentía el dolor, pero al día siguiente no se imaginaba lo que sentiría.

El beta soltó las esposas y lo atrajo a su firme pecho para abrazarlo y acariciar un poco las marcas en su cuerpo pero ambos estaban muy cansados, solo se dejaron vencer por el sueño, durmiendo como unos niños después de hacer una travesura.

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El sol entraba por la ventana, los pájaros cantaban por el maravilloso amanecer.

Taehyung se removió en la cama, intentó abrir los ojos pero se acomodó en los brazos de Jungkook que lo acogía hermosamente.

El rey abrió los ojos y sonrió al ver el hermoso rostro de Taehyung, sus cabellos alborotados que relucían.

-Eres un ángel muy hermoso - dijo con su voz aún ronca por el despertar - mi ángel - llevó su mano a una mejilla y lo acarició con ternura.

Taehyung abrió los ojos, y miró a Jungkook con un puchero - no puedo moverme bien porque me duele todo el cuerpo.

-Ángel, lo de anoche - hizo una pausa recordando que más que nada estaba pensando en él - ¿te gustó lo que hice contigo?

-Porque no me abraza con fuerza - Jungkook hizo caso a su pedido - es algo extraño la reacción de mi cuerpo cuando me hace esas cosas, mientras más duele, más me gusta, pide más mi cuerpo, simplemente lo que usted hace me gusta.

-¿entonces está bien si me vuelvo otra vez un poco más sádico? - preguntó acariciando su espalda.

-¿sádico? - llevó su cabeza al cuello de Jungkook y respiró de su olor.

Jungkook rió un poco por la inocencia de Taehyung, eso era lo que le encantaba, porque podía corromperlo fácilmente, hasta aprovecharse de su inocencia, de su confianza, de su amor, de sus sentimientos, para hacerles daño sin darse cuenta.

-Te amo ángel - dijo en una de sus orejas - te amo tanto que te quiero solo para mí, tanto que me volvería loco si un día no te viera a mi lado.

-Me hace feliz escuchar unas palabras hermosas, que nunca pensé escuchar de un Rey, mi imaginación quedó corta ante la realidad - alejó un poco su cara miró los ojos negros de Jungkook.

El beta sonrió de maravilla y unió ambos labios, siempre tenía la manía de besar con mucha pasión y brusca, pero a Taehyung le gustaba Jungkook, como fuera.

-Mi niño - mordió sus labios y empezó a tocar descaradamente el cuerpo de Taehyung - te amo - entre el beso y las caricias se subió al cuerpo contrario.

Taehyung subió una pierna, mientras sus manos se posaban en la roja espalda de Jungkook, quién ni siquiera tomaba importancia al ardor de los arañazos anteriores.

El beta ya se había puesto duro, con tan solo besar a Taehyung, porque el omega provocaba eso en él, un gran deseo y una pasión muy profunda, difícil de quitarse.

Jungkook tomó las piernas del omega y las abrió muy bien para acomodarse, tomó su duro miembro listo para penetrar a Taehyung, pero cuando apenas rozó la lubricada entrada Taehyung lo detuvo respirando pesadamente.

-No su majestad, estoy muy adolorido.

Jungkook sonrió de costado - el sexo mañanero dicen que es muy bueno y satisfactorio, dicen - sin escuchar la petición de Taehyung entró de una sola y brusca estocada - ah, esto es magnífico - habló ronco.

En cambio Taehyung solo había soltado un fuerte grito, pero le había gustado la acción de Jungkook, clavó con fuerza sus uñas gimiendo bajo, mientras Jungkook, lo follaba sin piedad alguna.

Ambos gemían al mismo ritmo de sus movimientos, sus cuerpos convulsionaban, ambos se entregaban profundamente a la pasión, el deseo y la lujuria.

Jungkook salió del omega, para quedar abajo, Taehyung ya sabía lo que quería Jungkook, así que pasó sus piernas, y tomó su miembro para descender soltando gemidos.

-Ah esto es maravilloso - soltó Jungkook ayudándolo a moverse - me fascinas, bebé - dio una fuerte presión en sus nalgas y dio una nalgada.

Taehyung soltó otro grito, que fueron abogados por los labios de Jungkook.

Ya había aprendido a montar a Jungkook y ahora se movía con rapidez y circular buscando su propio placer, al encontrar su próstata arqueó la espalda echando su cabeza hacia atrás mientras sus uñas se clavaban en el hombro del Rey.

Jungkook se fijó en el rostro lleno de excitación de Taehyung, su cabello alborotado que se movía de aquí para allá.

Jungkook se movió desde abajo tomando con fuerza las caderas de Taehyung para detenerlo y ponerlo bajo el suyo.

Sonrió y mordió la piel del omega, la cual se encontraba llena de moretones, de sus marcas, así podía ver a Taehyung como suyo porque él chico no se oponía.

-Te amo - susurró en su oreja y lamió.

Ratos después ambos alcanzaron su deseado clímax, se echaron en la cama respirando pesadamente, sus corazones latían frenéticamente.

Se miraron a los ojos y se perdieron en ellos.

-Nunca pensé sentir demasiado placer en mi vida, no hasta que lo conocí y me entregué a usted - dijo con timidez y cerró los ojos escondiendo su rostro en el pecho del rey.

El rey sonrió sintiendo una inmensa felicidad en su pecho ante las palabras saliendo con hermosura de la boca de su persona amada.

Se quedaron abrazados pensando en muchas cosas y cada uno en su propio preocupación.

"Me volví loco y me enamoré de alguien que tal vez no existe en mi mundo, solo en mi imaginación"

"Me enamoré de alguien que es muy distinto a mi, alguien que tal vez un día no sea capaz de luchar por lo nuestro"

Cada uno tenía un problema.