— no puedes entrar — la mujer alzó la voz — el Omega está en celo y ningún Alfa o Beta tiene que estar a su lado, es un raza pura y te dominará apenas entres — explicó un poco — sabes lo que ocurrió esa tarde.

Jungkook cerró los ojos muy frustrado, apretó las manos en puños, y respiró calmado, luego miró a la pelirroja — quítate, ya es suficiente con que me hayan impedido verlo dos malditos días y ya no aguanto más sin ver su rostro angelical, sin sentir su respiración, sin besar sus labios, sin escuchar su dulce voz — lloriqueo un poco — no dijeron que el tal celo pasaba en tres días.

— su majestad — habló bajo su guardia personal — es que su Omega es un raza pura y sus celos duran días.

— yo siento que el me necesita, oigo su llamado, algo en mi interior se regocija, por estar con él, se desespera por querer ayudarlo, solo siento la necesidad de tenerlo en mis brazos, en mi cabeza una voz grita Omega mientras chilla, se que no me entienden, pero yo siento esas ganas de estar con él, es algo inexplicable— trató de explicar.

— nos disculpará, pero no permitiremos que entre.

— ustedes no deben tener intimidad, sin antes estar casados, sería una deshonra para el Reino y para el omega mismo — se escuchó una voz fuerte desde atrás.

— Rey MinHyuk — Jungkook volteó a verlo — usted debería entender que es sofocante y desesperante no ver a la persona que amas y que solo escuchar el grito bajo de su voz llamando tu nombre, sin saber que sucede.

— entiendo muy bien, pero tienes que soportar no verlo, a mi también me impidieron estar con mi Alfa en mi juventud, solo porque no estuvimos casados — respondió fríamente.

— por favor, ya no aguanto más escuchar que me llame, déjame pasar — intentó apartar a los Alfas, pero estos eran fuertes.

Jungkook bufó molesto y fue a su habitación, rápidamente tomó la espada colgada en la pared y regresó donde los guardias, sacó la espada de su estuche y apuntó a los hombres.

— abre la puerta y largo de aquí, si no quieres salir herido, soy tu Rey, muévete — lo miró con ojos de furia.

Por otro lado Taehyung llamaba al Rey, mientras lloriqueaba y se quejaba del dolor en su vientre.

Jimin y BeomGyu lo calmaban con paños de aguas frías, secaban el sudor de su frente y su cuello, le daban hierbas para calmar el calor de su cuerpo.

— su majestad — volvió a llamar al escuchar su voz en la puerta.

— ¿su alteza que hace? — Jimin lo detuvo cuando Taehyung bajó de la cama. BeomGyu se unió para detenerlo e intentar hacer que regrese a la cama.

— mi Rey — Taehyung volvió a llamar y evadió a los Omegas, era un raza pura y por lo tanto tenía fuerza, empujó a los dos a cada lado y corrió a la puerta, tomó la manija y lo abrió — mi Rey — pronunció respirando lentamente.

Todos se quedaron sorprendidos.

Jungkook rápido corrió a abrazarlo y respiró de su aroma que inundaba la habitación.

Los guardias Alfas se taparon la nariz ante el fuerte aroma del Omega y abandonaron su posición, ya que no podían ser capaces de controlarse.

Taehyung dejó la nariz fundida en el cuello del Rey, respirando su aroma a café, sintió calma y tranquilidad en sus fuertes brazos, el malestar disminuyó un poco.

— debemos separarlos — dijo MiYun — BeomGyu llama a los guardias Betas — ordenó al Omega quien obedeció.

— nadie llamará a nadie — dijo la Reina NaRan que acababa de llegar al lugar después de enterarse de la situación — pronto se casarán y todos salgan de aquí — ordenó en voz alta.

— pero NaRan — intervino MinHyuk — van contra las leyes de Killa.

— Killa permitió esto — dijo firme — todos vayan a sus lugares y dejen a la pareja solos, que nadie se acerque aquí.

Nadie más puso oposición.

— para más rato queremos comprobar la prueba de virginidad — diciendo eso el Rey MinHyuk se retiró — haber si es tan puro como lo ve el Rey.

Cuando todos se fueron Jungkook terminó de ingresar con Taehyung aún con su rostro hundido en su cuello, cerró la puerta y alejó un poco al Omega para acariciar su roja cara.

— ¿que tienes, cariño?, ¿por qué me llamas con desesperación?, ¿que te hicieron?, ¿tienes fiebre? — empezó a tocar su frente mientras hacía preguntas — ¿te sientes bien de salud?

Taehyung movió la cabeza — lo necesito ahora mismo — dijo con voz audible — necesito que me haga suyo — con sus manos intentó quitar la ropa del Rey.

Jungkook lo detuvo tomándolo de sus muñecas — bebé no ahora, tenemos que esperar la boda, no tienen que sospechar, nos pueden descubrir.

— por favor — suplicó otra vez llevando sus manos a su ropa para intentar quitarlo — quema todo mi cuerpo.

Jungkook suspiró y tomó el cuello del Omega, y observó sus azules ojos, bajó la mirada a sus labios rojizos y se mordió el inferior.

— eres tan provocativo — susurró acercando su rostro, lentamente rozó sus labios con el Omega quien suspiró de calma — eres tan delicioso — empezó a mover sus labios con despacio y soltó su cuello para llevar sus manos a su cintura y acariciar toscamente, apretando con fuerza. Jungkook llevó su boca al cuello del Omega y mordió suavemente.

— ah~mgh — Taehyung soltó un bajo gemido, su cuerpo estaba tan sensible, que con el mínimo toque del Rey sentía placer — más por favor~

— es suficiente — Jungkook lo soltó y se alejó — ¿por qué estás con ganas de hacer el amor? — preguntó mientras volteaba a ver su rostro lleno de sudor.

Taehyung volvió a acercarse — ¿por qué me rechaza ahora?, estoy en celo y necesito de su ayuda para calmar el calor de mi cuerpo, que lo único que pide es a usted — se abrazó de su cintura y respiró de su olor para calmar un poco de su deseo.

Jungkook llevó sus manos a su espalda y acarició con cariño — mi niño, entiende que los de la realeza-

Jungkook no pudo terminar ni de decir ya que el Omega lo empujó con fuerza a la cama, y terminó de subir a su cuerpo, con sus piernas a cada lado.

— que agresividad, bebé — rió un poco, estaba por sentarse pero el Omega se inclinó y besó sus labios, tomando sus manos con firmeza — ángel basta — Jungkook alzó la voz, quitó sus manos y tomó los cachetes del Omega para alejarlo un poco de su rostro — paremos, ¿bien? — pidió con ternura y sonrió.

Los ojos del Omega brillaron en un azul intenso asustando a Jungkook, el lobo del chico había tomado control.

— tengo hambre aún no he comido, por estar entrenando.

El Omega ignoró sus palabras — Alfa por favor, te necesito — con rapidez y fuerza quitó la ropa del Rey, quien se rindió, dejándose envolver por el fuerte y dulzón aroma que inundaba la habitación.

Taehyung suspiró pesadamente en el cuello de Jungkook y muy satisfecho terminó de quitar su ropa, mordió un poco la piel ajena y gimió a gusto cuando las manos traviesas del Rey acariciaron su delicado y necesitado cuerpo.

Jungkook atrapó los labios contrarios y le dió un beso tan apasionado y ardiente, que hicieron soltar gemidos al Omega, mordió el inferior antes de alejar su boca y llevarla a su cuello, terminando de quitar sus ropas, ambos quedando en desnudez total.

Taehyung acarició el pecho del Rey y se inclinó hacia el lugar para besar suavemente — mi rey, eres un Alfa, mi Alfa, nuestro Alfa — era el lobo que dominaba ahora.

Jungkook ignoró las palabras del lobo, la voz era más dulce, y extraña, solo se dejó llevar por el calor de su cuerpo, y las ganas de estar nuevamente con su ángel.

Taehyung aún sobre su regazo empezó a mover las caderas — ah~ — gimió al sentir el duro y grande miembro del Rey.

Jungkook dejó todo al Omega, parecía ido, algo en su interior le decía dejarse dominar, aunque a él no le gustaba ser sumiso, se dejó hacer por el Omega.

Taehyung tomó el pene de Jungkook y alineó en su entrada, después se sentó lentamente, mientras cerraba los ojos, sintiendo la calma en su caliente cuerpo y su palpitante entrada.

— ah~ — Jungkook gimió al estar dentro del apretado agujero del Omega, con sus manos solo acarició su caliente cuerpo — vamos bebé, tu puedes hacerlo — lo alentó a moverse.

Taehyung empezó a mover las caderas, mientras gemía ruidosamente, y mordía sus labios, así mismo apretando los hombros contrarios con fuerza.

— ah~ — gemía el Omega echando su cabeza hacia atrás, mientras continuaba con sus movimientos, que lo enloquecía.

Jungkook también gemía satisfecho, y se correría en cualquier momento por los rápidos movimientos de Taehyung, lo tomó de la cintura y se movió con él.

Hasta que el Omega, logró llegar antes que él, gimiendo en voz alta que maravilló sus oídos, lo volteó a la famosa posición y tomó el control, volviendo a provocar los gemidos ruidosos del Omega.

Taehyung empezó a gemir más fuerte sin pudor alguno de que pudieran escucharlos, lo único que le importaba era disfrutar de cada estocada en su interior.

Jungkook logró llegar, y siguió moviéndose para Taehyung, hasta que volvió a correrse entre sus vientres, cayó sobre el cuerpo del Omega y lamió su cuello.

Después continuaron con más rondas, hasta ese momento nunca habían tenido más de tres rondas, pero tal parece que el Omega no se cansaba a comparación de las veces anteriores.

Jungkook no estaba entendiendo nada, al mirar la ventana llegó a la idea de que ya era noche, pero su Omega, después de un rato de descanso quería más y él no entendía.

— ¿ya estás cansado? — preguntó sin muchas energías y muy exhausto, el Omega otra vez lo estaba montando.

Taehyung negó y siguió disfrutando, hasta que alcanzó otra más de su éxtasis, corriendose entre sus vientres, cayó en el cuerpo del Rey y lamió su cuello.

Jungkook cerró los ojos, durmió unos cinco minutos, cuando volvió a sentir las manos del Omega acariciar su cuerpo y luego sentir a su miembro ser amasado junto a los besos del Omega en su hombro.

El Rey abrió los ojos en grande — no otra vez — recién pudo entender lo del celo, al parecer tenían ganas de tener sexo a cada rato — lo mejor hubiera sido no entrar, yo mismo vine aquí por voluntad propia — subió encima del Omega y se inclinó hacia su cuello y mordió la hermosa piel dejando de su marca.

— ah~ - el Omega gimió de dolor y placer, miró a los penetrantes ojos del Rey — más~ dame cachorros, mi Rey.

— ¿quieres más? — preguntó con burla — ya no tengo mucha fuerza, pero espero que con esta ronda, que voy a follarte duro hasta que todos escuchen tus gritos, no pidas más, te dejaré sin caminar — lo volteó poniéndolo en cuatro — no soy tu objetivo sexual, mi niño — susurró en su oreja derecha.

Pero el Omega solo gemía de excitación, mientras apretaba las sábanas y deseaba más de esos tratos tan fuera de lo común del Rey hacia su persona en la cama.

— quiero cachorros Alfa — suplicó.

Jungkook ingresó en el Omega sin delicadeza alguna, provocando su fuerte grito — ¿lo disfrutas?

— si~ah~ sua..mhg..ve — pidió lagrimoso.

— yo si disfruto, mi niño, y más con tu voz de dolor— volvió a dar una fuerte estocada mientras le daba una fuerte palmada en el trasero y luego tomaba su cabello con fuerza para traerlo hacia atrás — ¿esto querías, bebé? — empezó a mover las caderas con rapidez y salvajemente.

Taehyung solo gimió a gusto, su cuerpo convulsionaba, sus piernas temblaban, su cuerpo estaba lleno de sudor.

Jungkook seguía penetrando frenéticamente, disfrutando de los bellos gemidos de su ángel, que eran una hermosa melodía para sus oídos.

Salió de su interior y lo volteó a la posición anterior, levantó sus piernas y las separó muy bien, para acomodarse entre ellas ingresando nuevamente para penetrar con fuerza.

Taehyung apretó las sábanas llenas de placer, que le hacían sentirse en la luna, abrió la boca ligeramente.

Siguió penetrando con fuerza — di, que te gusta el dolor, di que eres un masoquista — dijo con su voz ronca, mordiendo su hombro y luego su cuello.

— ah~mgh — estaba siendo muy ruidoso — más~ no

El Rey volvió a morder su hermosa piel, disfrutando de su dulce voz de dolor y queja — di, que eres un masoquista — le dió una fuerte nalgada.

Jungkook, tomó su cuello — me hubiera gustado encadenarte — al ver que el Omega ya estaba por llegar, tomó su miembro e impidió su corrida — súplica bebé — beso sus labios reteniendo sus gemidos — súplica a tu Rey mi niño, tan inocente a la vista, pero eres todo lo contrario — mordió su labio inferior, provocando que saliera sangre — ¿te gusta la agresividad no es así bebé?

— ahm~si..~ah~ — se agarró de la espalda contraria y dejó sus arañazos como siempre — por favor déjame venir —suplicó en sus labios, lamiendo la sangre y haciéndolo pasar.

— primero déjame marcarte y darte placer a través del dolor y di, que eres un masoquista — tomó con fuerza su miembro y llevó su boca a su cuello para morder y lamer, hizo lo mismo en toda su piel, hasta que estuvo satisfecho con la queja del Omega — ahora di lo que te pedí — siguió penetrando.

Taehyung sin entender esa palabra, logró decir en medio de gemidos — ~soy.. un~ masoquista~ah~

— espero que ya haya saciado el deseo de tu cuerpo — diciendo eso soltó a su miembro y penetró salvajemente.

— amgh.. si~ah... ~AH~ — fue su último gemido fuerte que fue tapado por la palma de la mano del Rey.

Jungkook al escuchar tal hermoso grito, no tardó en llenar de su semen al hermoso chico, quien volvió a gemir entre respiraciones pesadas, por sentirse lleno.

El Rey cayó en la cama muy cansado, su cuerpo ya no tenía energías, respiró profundamente, recuperando el aire.

Taehyung aún respiraba con pesadez, se abrazó al Rey cerrando los ojos — creo que ya estoy satisfecho — susurró.

— hasta que por fin — lo abrazó y cubrió ambos cuerpos, rápidamente logró alcanzar el sueño.

Jungkook al menos pensó que Taehyung ya no lo molestaría, pero que equivocado estaba, apenas empezaba la acción.

✿♡✯🐺✯♡✿

A la mañana siguiente Jungkook despertó primero, prácticamente había dormido solo una hora, ya que el Omega lo había utilizado toda la noche, ya había perdido la cuenta de cuántas veces lo hicieron, pero al sentir el toque en la puerta abrió los ojos.

Renegó y aclaró la garganta, miró a su lado, en la cual su Omega dormía, tiernamente e inocentemente, sin parecerse a lo que era en la noche.

— inocente pecado — susurró y acarició su cabello con una sonrisa — mi perdición — admiró su belleza, pero volvieron a tocar la puerta.

Jungkook cubrió a Taehyung y se puso su ropa, después regresó a la cama — pasa — dió la orden.

Era BeomGyu.

— con su permiso su majestad — se inclinó y cerró la puerta, arrugó la nariz al sentir el olor lleno de sexo, aclaró la garganta — ¿desea desayunar aquí o en en el comedor?

— quiero dormir, eso quiero — dijo casi en queja como un niño — pero este chico con aires de mujer que está aquí no me deja — refunfuño — comeré afuera, necesito alejarme de esta criatura tentadora.

— su majestad, el Rey quiere comprobar la virginidad del Omega.

— dile que era virgen y ya — sobó su cara.

— pero una dama de confianza que siempre está al tanto de la tradición quiere ver las sábanas — dijo bajo.

Jungkook rió — quiere ver la sociedad que hay en la sábanas, que asco de mujer — dijo asqueado.

—  su majestad, se que usted y el omega ya tuvieron anteriormente relaciones, por lo tanto está vez su alteza Kim ya no sangró, entonces la mujer quiere ver sangre en las sábanas — susurró.

— puedes irte yo me encargo — ordenó muy pensativo, mientras recordaba que Taehyung la primera vez si sangró.

— con su permiso — se retiró del lugar.

Jungkook se levantó y buscó un objeto que tuviera filo.

Hasta mientras el Omega empezó a despertar, abrió los ojos lentamente, sobó sus ojos y miró a sus lados.

Empezó a recordar la noche anterior y abrió los ojos en grande, el mismo se desconocía por haber actuado de esa forma.

"Di que te gusta el dolor, di que eres un masoquista"

"Soy un masoquista"

— oh no — se cubrió la cara llena de vergüenza.

— ¿que cosa oh no? — habló Jungkook acercándose a la cama.

El Omega se sonrojó y miró por el hueco de sus dedos al Rey, no sabía que responder, pero recordar que había suplicado al Rey por sexo era vergonzoso, y también haberlo hecho pasar una noche muy sofocante.

— ¿que ahora ya no puedes ser capaz de ver mi rostro después de lo de anoche? — tomó sus manos y lo alejó lentamente — pequeño sorprendente.

Taehyung cerró los ojos — digo oh no, porque mi celo solo duró dos noches, siempre es de una semana, porque soy un raza pura — dijo aún manteniendo los ojos cerrados.

Jungkook con una sonrisa subió a su encima, sobre las colchas, dejó un besito en sus labios y miró a sus ojos.

— tengo hambre — evitó mirarlo a los ojos.

— yo también tenía hambre ayer en la tarde, pero no me dejaste ir — tomó su mentón e hizo que le mire a los ojos.

Taehyung pasó saliva — no recuerdo lo que sucedió en la noche, solo cuando usted vino aquí y yo abrí la puerta — mintió, ya que no quería sentir vergüenza por su comportamiento en la noche.

— que yo sepa no estabas ebrio — dijo con burla y salió de su encima para quitar la manta y dejarlo expuesto.

Taehyung abrió la boca de sorpresa al verse completamente desnudo, se sentó sintiendo su cuerpo adolorido — duele — miró al Rey.

— pero anoche lo disfrutabas bastante y no te quejabas para nada, hasta pedías más — acarició su mejilla, sin dejar de sonreír.

Taehyung recordó sus propias palabras llenas de súplica.

— era mi lobo — llevó una mano a su labio al sentir un poco de ardor y sentir herida al lamer — me mordió — dijo fuerte y en queja — me duele todo el cuerpo.

— fue lindo dejarte todas estas marcas — empezó a acariciar la piel llena de moretones con un poco de mordidas en el hombro y cuello.

Taehyung miró a su pecho y sus piernas llenas de moretones, no supo que decir, se levantó mientras se cubría con la manta, fue al gran espejo con el dolor en su trasero y observó su cuerpo con la boca abierta, pasó saliva al ver todas las marcas.

— ¿te gusta sentirte mío? — preguntó el Rey.

Taehyung regresó a su lado y luego subió a la cama, solo miró al Rey pasando saliva.

Ambos se miraron a los ojos, Jungkook sonrió y se inclinó hacia su cabeza, para juntar sus labios — eres la perfecta creación del pecado y el inocente — susurró en sus labios.

— soy feliz siendo suyo — respondió en sus labios.

— mi inocente tentación — profundizaron el beso — ¿quieres recordar lo de anoche? — empezó a bajar sus besos y sus caricias, llegando a su vientre para luego jugar con su ombligo.

Taehyung gimió apretando las sábanas.

Jungkook bajó su boca por sus piernas dando lamidas y mordidas suaves. Pero ese momento fue interrumpido por el sonido de la puerta.

Jungkook recordó lo que tenía que hacer.

Buscó en el piso el objeto que soltó, y subió a la cama ante la atenta y confusa mirada del Omega.

La puerta volvió a sonar — un momento, recién me estoy vistiendo — alzó la voz muy irritado.

Movió a Taehyung y acomodó su propio brazo en medio de las sábanas, luego levantó la tela que cubría su piel.

— ¿que va hacer? — Taehyung se asustó — no por favor, no lo haga — pidió muy asustado — ¿por qué? No me deje.

Jungkook rió — chico tonto, nadie muere con una cortada en el brazo, quieren sangre en las sábanas, tu tranquilo — cerró los ojos e hizo una cortada rápida, apretó los dientes ante el dolor.

Derramó el poco de sangre que salió, entre las sucias sábanas, al terminar se cubrió el brazo.

Se acercó al Omega y le regaló una hermosa sonrisa — ve al baño, yo me encargo del resto.

El Omega movió la cabeza y fue al baño, tal vez su piel necesitaba un baño en agua fría.

Jungkook con una sonrisa abrió la puerta y miró a una extraña mujer, junto a sus servidores — pueden pasar, mi Omega está en el baño — se hizo a un lado.

Los extraños se inclinaron y pasaron al interior de la habitación y fueron a la cama, para comprobar que si habían manchas de sangre.

Jungkook rodó los ojos, esa gente de esa época era realmente graciosa y entrometida, al menos se divertía con su ignorancia y la forma tan recatada de actuar.

"Si supieran que soy un hombre inteligente y de otro mundo"

— ya todo está comprobado su majestad — todos se inclinaron — más bien, discúlpanos por nuestro actuar.

— no es para tanto, vayan a realizar mejores labores que ser entrometidas — dijo con una fingida amabilidad — y manden a una sirvienta para que cambie las sábanas de la cama.

Todos salieron muy avergonzados.

El Rey decidió ir a su habitación para, darse un rico baño, también.

No demoró mucho tiempo en salir y vestirse, ya estaba más o menos acostumbrado a esas ropas finas, más finas que las telas de su mundo.

Hoy se comprometía, no le preocupaba nada, ya que su madre se estaba encargando de todos los preparativos, que empezaría a partir de medio día.

Suspiró y bostezó — ese chico no se cansó toda la noche, soy yo quien está agotado y con sueño, pero debo ir a entrenar con Hoseok un momento.

Salió de la habitación y fue al comedor real, en la cual la familia principal se encontraba desayunando.

Todos lo miraron.

Hoseok miró a Jungkook y no entendía porque se veía tan horrible, él aún no estaba al tanto de lo que sucedió con Taehyung y él en la noche.

— ¿Qué me miran? — dijo a todos y se sentó muy cansado y con sueño.

Su desayuno fue puesto en la mesa.

Unos minutos después apareció Taehyung con la típica ropa llamativa que siempre utilizaba, se sentó a duras penas al lado del Rey.

Está mañana se sentía muy extraño el ambiente.

MiYun y la Reina lo estaban mirando y él sabía el motivo.

"¿Cómo hizo para sangrar?" Se preguntó la Beta.

"Que hizo para engañar a la mujer"
"tan inocente, pero es todo lo contrario a lo que aparenta ser" dijo mentalmente la Reina.

— espero que lo de anoche no se repita otra vez hasta que esten casados — MinHyuk tomó la palabra.

— no volverá a pasar, tiene mi palabra — respondió Jungkook suspirando y luego miró a su Omega — anoche fue suficiente como para que no se vuelva a repetir.

Hoseok no entendía de que hablaban, no hasta que la Reina comentó.

— al parecer ya no estás en celo — miró al hermoso príncipe — seguro la ayuda del Rey bastó para que tu celo no durará una semana como las anteriores.

De pronto el guardia de Hanan soltó el vaso de agua por la impresión de haberse enterado de una noticia tan fuerte que le rompió el corazón.

Todos lo miraron, por su pequeño accidente.

— lo siento — se disculpó apenado — que descuidado soy.

Taehyung miró al Alfa y ambos cruzaron miradas, al parecer tenían una charla pendiente.

Comieron en silencio, hasta que uno por uno empezó a levantarse de la gran mesa, yendo a realizar cada una de sus tareas.

Jungkook y Hoseok se dirigieron al campo de entrenamiento, se sentía un poco de tensión entre ambos.

El Rey se encontró con Yoongi y Namjoon en el lugar, aún con sueño los saludó, se habían hecho ya amigos durante ese poco tiempo.

— hay rumores en el palacio de que pasó la noche con su alteza Kim — dijo Yoongi, aunque sabía que ellos anteriormente ya habían tenido intimidad.

— vaya los chismes corren rápido, pero es la verdad, al parecer en ese tal celo les dan ganas de tener... Ya saben.

— te ves muy cansado, al parecer la noche estuvo muy activa — dió su opinión Namjoon con una pequeña risa.

Hoseok solo apretó la mano de enojo.

— acaso no se cansa de tener sexo, osea no se que decir — pareció una queja a sus amigos.

— es un Omega de raza pura, que esperabas.

— esperaba solo verlo, ni siquiera me dejó salir cuando dije que tenía hambre, no parecía mi niño — se cruzó de brazos.

& pronto regresaré a mi Reino — Hoseok interrumpió — por favor me gustaría terminar de enseñarlo a utilizar la espada — le lanzó una.

Jungkook agarró a duras penas y asintió, para acomodarse en su lugar y esperar el paciente ataque de su amigo, pero no esperó que este lo atacará directamente y con fuerza, logró defenderse muy asustado.

Pero el ataque continúo, hasta que el Rey soltó la espada, y cayó al suelo, con la larga y filosa espada posada a su cuello, respiró pesadamente y muy asustado, al ver que el Alfa lo miraba con furia, no entendía el motivo de su actuar.

Jungkook sintió la fuerte presión de la espada en su cuello, después de eso un poco de ardor.

Hoseok alejó la espada — lo siento — soltó la armadura — no era mi intención hacerle daño — dijo al ver que el cuello del Rey había quedado rojo, había salido un poco de sangre — yo lo ataque con la intención de que usted se defendiera, de que usted pensará que era un enfrentamiento.

— está bien, necesito descansar, y curar mi cuello — se levantó muy confundido.

— amigo debes tener mucho cuidado, recuerda que le estás enseñando — habló Yoongi — para la próxima ten cuidado.

— lo haré — pasó saliva mirando sin ningún arrepentimiento al Rey.

Jungkook se fue del lugar en compañía de los nobles, Hoseok también decidió seguirlo, asi podría tener la oportunidad de hablar con Taehyung, su prometido, que ahora también sería del Rey de Killa.

Cuando el Rey llegó al palacio se encontró con su Omega, quien se acercó con una pequeña sonrisa en su rostro, la cual se esfumó en cuanto vio la herida de su cuello.

— mi Rey, ¿que le sucedió? — preguntó un tanto preocupado — ¿quien le hizo esto?

Jungkook tomó su cintura para hablar, cuando interrumpió una voz.

— fui yo — habló Hoseok desde atrás sorprendiendo a todos — yo le hice la pequeña cortada, demostré que a mí no me importa quien se enfrente a mi.

El Omega se puso tímido y volteó a mirarlo, supo el motivo del porque el Alfa de raza pura tuvo que actuar así.

Taehyung no dijo más y se quedó en su lugar muy pensativo y tenía que hablar con el guardia.