👑♡cuarenta y nueve♡👑
Taehyung y MinGyu después de escapar de algunos hombres de Simón, llegaron a una cabaña, por casualidad la lluvia había empezado a caer.
Entraron al lugar para protegerse.
El Omega se echó a llorar sentado en el piso de la madera — me obligaste a salir, quería quedarme a su lado — reclamó llorando.
— Hoseok lo traerá, tenía que salvarte eso es lo que Jungkook quiso, deben de estar en camino — respondió y se sentó para abrazarlo — yo confío en el guardia real de Hanan, él no sería capaz de dejarlo, pronto llegarán — trató de consolarlo.
Taehyung solo lloró, recordando el horrible momento de momentos atrás que le hizo vivir Simón.
— Jungkook — repitiendo el nombre del Rey trató de estar tranquilo.
Hasta que unos ratos después abrieron la puerta de la cabaña con desespero, MinGyu por inercia tomó la espada que brilló.
Era Jungkook, entrando por la puerta ya un poco mojado lleno de sangre en su ropa, pero parecía estar bien — ángel — dijo al ver a su Omega sentado en el piso — mi niño — corrió a abrazarlo.
Taehyung se levantó — mi Rey — también corrió a los brazos seguros de su amado y sentirse protegido, empezó a llorar — pensé que no llegaría.
— mi bebé, te amo — dijo sintiendo alivio de al fin tenerlo en sus brazos sano y salvo — yo hubiera acabado con ese imbécil, pero me golpeé la cabeza y regresé a mi mundo.
— pensé que lo perdería, pero está aquí — se abrazó con fuerza, volviendo a llorar en silencio — no sé, que sería de mi vida sin usted.
Después de eso se miraron a los ojos y juntaron sus labios, muy aliviados de haber superado la prueba de que tal vez el destino les puso.
— te extrañé mucho — susurró Jungkook y lo llevó un poco a la pared para apegarlo y agarrar su cintura con posesividad.
— yo también — respondió en sus labios volviendo a unir sus labios en un necesitado beso.
Al parecer habían olvidado la presencia del Alfa, que los miraba curioso e incómodo.
La pareja siguió besándose, mordiéndose los labios y acariciando un poco de sus cuerpos. Jungkook bajó al cuello del Omega y mordió el lugar.
Taehyung gimió un poco, disfrutando de Jungkook.
Unieron nuevamente sus labios, dejándose llevar, Jungkook tomó una pierna del Omega y lo llevó a su cintura, levantó un poco mostrando su acaramelada piel.
— tal vez actúan de esa forma, por no verse en dos días — susurró, el no quería ser espectador de la unión de la pareja, carraspeó un poco fuerte.
Taehyung y Jungkook se detuvieron al escuchar un ruido tercero en el lugar, recordó que MinGyu estaba con ellos.
El Rey rápidamente soltó la pierna del Omega y lo cubrió, volteando para ver al chico, quien les sonrió.
— si quieren me voy — dijo un poco avergonzado.
Jungkook estaba por decir si, pero se le adelantó su Omega.
— no — dijo avergonzado — el Rey siempre es intenso en cualquier momento — bajó la mirada.
— lo entenderás cuando te enamores — dijo Jungkook y llevó a Taehyung a una grada, se sentó con el Omega en su regazo.
— ¿Hoseok dónde está? — preguntó Taehyung al recordar al Alfa. Miró a Jungkook esperando una buena respuesta.
El Rey suspiró — es un gran guerrero, me sacó del incendio y después luchó con los enemigos cuidando de mi — contó — en cuando recobré la conciencia me dijo que me fuera, se quedó luchando, supongo que ya debe estar en camino. Me dijo que lo esperemos aquí.
Taehyung acomodó su cabeza en el pecho del Rey y cerró los ojos, pensando en Hoseok, realmente el Alfa demostraba su lealtad, a pesar de todo.
Suspiró de cansancio.
— duerme — Jungkook se dedicó a acariciar su cabello y espalda, hasta que su respiración se volvió tan tranquila, indicando que había alcanzado el sueño.
— se nota desde lejos lo mucho que se aman — dijo MinGyu con una sonrisa — ¿como empezó a gustarte? — preguntó.
— no sabría que responderte, porque cuando lo conocí, sentí que ya lo quería.
— ¿que te gustó de él, la primera vez que lo viste?
Jungkook sonrió recordando la madrugada en la que conoció a Taehyung — su cuerpo — respondió recordando ese momento como si fuese el ayer.
— ¿acaso estaba desnudo para que te gustara su cuerpo? — preguntó curioso y extrañado.
— si — respondió mordiendo un poco su labio. MinGyu abrió los ojos en grande ante su respuesta — es la verdad, Taehyung estaba desnudo cuando lo ví por primera vez y su cuerpo fue mi atracción favorita y sigue siendo hasta ahora.
— ¿y es verdad que ustedes tuvieron intimidad a poco tiempo? — estaba siendo muy entrometido — es que hay cosas que dicen en el castillo.
Jungkook rió — ¿tu que harías si estuvieras a solas con una persona como Taehyung?, tierno, sexy, inocente pero tentador— preguntó mirándolo fijamente.
El Alfa se quedó pensativo — bueno, enamoraría al Omega.
— y si el Omega ya no necesita eso, porque ya le gustas, ¿después de eso que más harías?
— jugar, conocer a la persona, cuidarlo.
Jungkook rió — yo hice lo mismo, pero cuando estas a solas con alguien, las cosas se vuelven aburridas.
— entonces, ¿puedo tomar tu respuesta como un si de la primera pregunta?
Jungkook sonrió y movió la cabeza, mirando al Omega dormir como un cachorro en los brazos de su mami — él es demasiado especial para mi, es mi complemento de vida en este mundo.
La puerta se abrió con fuerza.
Los hermanos miraron a Hoseok entrar con unas naranjas en sus manos.
— me alegra verte bien — dijo Jungkook.
— a mi no me alegra verte vivo — respondió sorprendiendo a los hermanos — es una broma — rió fingidamente — si no quisiera eso, no te hubiera sacado de entre los fuegos — empezó a caminar hacia ellos.
El Alfa se veía herido.
Jungkook sonrió — gracias, muchas gracias por todo — agradeció — no sé cómo pagarte esto que hayas cuidado de nosotros y sobretodo salvar a Taehyung.
— solo hice mi deber de ser un guardia — miró a Taehyung y sonrió al verlo dormir con ternura en los brazos de Jungkook — seguro durmió con hambre, solo pude encontrar está naranja entre los árboles.
Jungkook bajó la mirada a Taehyung y lo despertó con delicadeza acariciando sus mejillas, al verlo abrir los ojos sonrió con ternura.
—príncipe — le habló Hoseok llamando su atención — le traje estás frutas para que pueda mantenerse estable hasta que regresemos a killa — lo dejó en su regazo.
Taehyung bajó la mirada, sintiéndose mal por el Alfa, realmente Hoseok le demostraba ser una gran persona — no se hubiera molestado, pero muchas gracias.
— ¿y para nosotros? — preguntó MinGyu.
— eres Alfa y puedes mantenerte firme — respondió indiferente y volvió a mirar al Omega — come su alteza.
Jungkook se quedó pensativo al ver el cuidado de Hoseok hacia Taehyung, a pesar de todo desconfiaba de las intenciones del Alfa.
Taehyung tomó con timidez la fruta y peló con lentitud, mientras tenía la mirada profunda de Hoseok sobre él.
— ¿mató a Simón? — preguntó un poco preocupado de que el Alfa hablará de él, si estuviera vivo.
— si, su alteza — respondió recordando ese momento —se quemó junto a la cabaña, se lo merecía — aun sentía enojo por ese idiota.
Taehyung comió por rebanadas la naranja, eran un poco ácidas, miró a Jungkook y le dió uno en la boca.
El Rey recibió con una sonrisa y comió a gusto, era la primera vez que su niño le daba algo en la boca.
Ambos se sonrieron con ternura y mucho amor, mirándose a los ojos.
Hoseok apretó las manos por ver al Omega ser muy tierno con ese tonto Rey, ese Rey que no merecía tenerlo a su pensar, pero que podía hacer, olvidar al Omega.
Taehyung se dió cuenta de la mirada de Hoseok, se puso incómodo y mal, para desviar la tensión le extendió dos rebanadas.
— ¿también me dará en la boca? — preguntó poniendo celoso a Jungkook, quien ya estaba echando chispas de enojo por todos lados. Se acercó al Omega.
— bueno, te daré en la boca, porque en parte fuiste mi héroe— respondió con timidez y le dió en la boca.
Jungkook pasó una fuerte saliva, viendo esa escena, acaso estaban coqueteando frente a él, tal vez era su imaginación, su ángel solo estaba siendo amable.
— toma MinGyu — llamó al chico, quien se acercó sonriente.
— yo también quiero en la boca — dijo portandose tierno.
Taehyung suspiró y también le dió en la boca sonriendo un poco por el actuar de los Alfas.
Jungkook dejó sus celos a un lado, al ver que no solo a Hoseok le daba, si no también a su hermano, presionó el agarre en su cintura y le miró con profundidad.
Taehyung al mirar al Rey sintió escalofríos en todo su cuerpo, si no fuera por la presencia de los Alfas, sabía que Jungkook en ese momento le estaría haciendo cualquier cosa, pero menos matarlo.
Bajó la mirada con preocupación y timidez.
— termina de comer — ordenó Jungkook con voz casi alta y molesta, tratando de no explotar y reclamarle que era el único que debía ser tratado de esa forma y nadie más — tendremos que partir cuando la lluvia pase.
— para el regreso será fácil, iremos al lado derecho y llegaremos al gran camino que lleva a diferentes Reinos — informó Hoseok sentándose en un lugar.
Jungkook solo movió la cabeza suspirando, sin despejar ni un solo ojo de su ángel.
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Ya se encontraban nuevamente en el Reino de Killa, después de que la lluvia dejará de salir, los guardias de Killa recién habían llegado a ese lugar.
Yoongi había ido llevando los tres caballos, para ellos fue difícil llegar a dónde estaban, ya que iban en caballos y no sabían como ir, hasta que tuvieron que regresar con la adivina del castillo, que les dijo cómo llegar.
Taehyung iba montando a Yuraf junto a Jungkook, todavía no llegaban al castillo, pasaron por el medio del pueblo saludando un poco a la gente.
— olvidé decirle una cosa — dijo Taehyung — Simón dijo que MiYun lo estuvo ayudando en todo, durante este tiempo.
Jungkook rió — no me sorprende, pero tampoco esperaba eso de ella, pensé que te molestaba porque le divertía hacer eso, no pensé que su odio fuera real hacia ti.
— ¿pensó que ella no me odiaba de verdad? — preguntó casi molesto.
— es que no pensé que una persona odiara a otra, hasta el punto de verlo sufrir, es que nunca me pasó en la realidad, nunca ví o escuché eso — respondió molesto de saber que esa mujer tenía la culpa de que su ángel, haya sufrido durante esos dos días.
Al llegar al muro del castillo, bajaron de los caballos para ir a pie, ya que los animales debían ser llevados directamente a las caballerizas.
— llamen al doctor — dijo Hoseok — necesitan revisar a Jungkook, la cabeza de MinGyu y al Omega, y a mi también.
Fui Yoongi por el doctor.
— veo que eres muy fuerte a pesar del puñal de la espada — halago Hoseok — eres muy resistente.
— aunque duela me queda soportar, de nada sirve estar quejándome — respondió sonriendo.
Cuando llegaron al castillo, entraron a la sala, la Reina NaRan corrió donde su hijo para ver cómo se encontraba.
— cachorro, estás bien, no te lastimaron — revisó su cara y se encontró con una herida — dañaron tu piel.
— sanará madre, no te preocupes — dijo un poco adolorido, creo que el caminar le hizo mal.
La mujer suspiró de alivió y pasó a revisar a Taehyung — no te hicieron daño verdad cariño — revisó su rostro y sus manos, la única herida que encontré fue en una de su muñeca, pero eso parecía tener días. Y también estaban muy rojas — te amarraron esos imbéciles — gritó enojada — espero que lo hayan matado a todos.
— lo hice — respondió Hoseok — acabé con todos, como la mierda que son.
— pero mi vida, ve a descansar y no salgas de ahí hasta recuperarte — dijo la mujer acariciando el rostro del Omega — te llevaremos la comida a tu habitación.
Taehyung movió la cabeza.
— todos vayan a sus habitaciones, yo misma los atenderé si es necesario — se acercó a su hijo menor — mi bebé, te lastimaron la cabeza y también tu brazo — besó la mejilla de su hijo — pero estoy feliz de saber que todos estén bien.
— madre Jungkook no solo tiene lastimada su cara, también su brazo y una puñalada de espada no tan profunda en su estómago, pero no sé cómo lo soporta si para mí es difícil con mi brazo — contó.
La mujer volvió donde Jungkook, estaba muy preocupada y lo revisó otra vez — pensé que la sangre era de otras personas, mi hijo, como es que soportas... Llamen al doctor rápido — gritó entrando en pánico.
— Reina madre cálmate, el Rey está bien — Taehyung lo tranquilizó.
— si madre, estoy bien — lo calmó Jungkook.
La mujer se tranquilizó y miró a Hoseok — tu no tienes heridas verdad, si estás bien no — el Alfa movió la cabeza, no quería alterar a la mujer, ya había visto lo suficiente asustada por sus hijos.
De pronto Jungkook vió a MiYun junto al Rey MinHyuk, la sangre le hirvió de enojo, sin importar al dolor de su herida, fue directamente hacia la mujer.
Al estar a su frente lo fulminó con la mirada — eres de las peores mujeres que haya conocido en mi vida, nunca le pegaría a una mujer pero tú — levantó la mano y le dió una cachetada.
Todos abrieron la boca de sorpresa, nadie esperó eso de Jungkook.
— Jungkook — gritó MinHyuk — cómo te atreves a pegarle a mi hija — acarició la cara de la Beta muy preocupado — te acusaré con los ministros — amenazó.
— yo voy a encarcelarla, por haber actuado en el secuestro de mi Omega — alzó la voz — por el futuro Rey omega de Killa, según la leyes la traición se paga con muerte ¿no?
— haces una acusación falsa — defendió el Rey.
— Simón me confesó que tú colaboraste — dijo Taehyung.
— está mintiendo ese Omega — dijo la Beta — tú puedes decir todo, pero no hay otros testigos, el hecho de que no te caiga bien no es para acusaciones fuertes.
— me dijo de su propia boca — respondió fuerte.
— ya cállate y no hagas acusaciones falsas hacia mi hija — le gritó el Rey — no voy a permitir que le hagas daño, o me veré en la obligación de actuar de otra manera — amenazó — los Kim somos poderosos, así que andén con cuidado — diciendo eso se llevó a su hija a otro lugar.
Jungkook suspiró, sin saber que hacer para sacar a esos dos del castillo. Si no Taehyung seguiría en peligro.
Subieron cada uno a su habitación, a cambio de Jungkook que llevó a Taehyung consigo, hasta que el doctor llegó.
— revise primero al Rey — dijo Taehyung.
— su majestad debe quitarse la ropa — dijo bajo. Jungkook empezó a soltar el nudo que sujetaba la prenda exterior, pero fue detenido por el doctor — no frente al Omega.
Jungkook sin escuchar se quitó — ya me ha visto desnudo — sonrió mirando a Taehyung, quien se había quedado sonrojado, mientras miraba su cuerpo.
El doctor ordenó recostarse y se puso a curar la herida, limpiando con agua y untando con cremas de hierbas y también poniendo hierbas molidas.
Jungkook olvidó un poco el dolor que sentía al mirar a Taehyung, hasta pareció olvidarse de la presencia del doctor y le dijo — puedo apostar todo lo que tengo para afirmar que estás más concentrado en ver mi cuerpo desnudo que las heridas — le regaló una sonrisa de picardía.
Taehyung apartó los ojos rápidamente, mientras mordía sus labios.
El doctor se incomodó un poco — parece que tienen una buena relación íntima — comentó y vendó la herida, pasando ahora a sus brazos, repitiendo la misma acción.
Jungkook rió — siempre es bueno mantener el fuego encendido en una relación, no hay que dejar que eso se apague — respondió.
— ya veo — terminó de curar la herida y le vendo, ahora curó la herida de su rostro y untó con la crema de hierbas — en su rostro tiene que untar esto todas las mañanas — indicó.
Jungkook asintió — podría ver cómo está mi niño — bajó de la cama.
— por supuesto que lo haré su majestad — ordenó a Taehyung recostarse en la cama.
El Omega subió a la cama y se recostó.
— me siento bien físicamente — informó — no creo que sea necesario.
— pero es bueno curar algunos moretones y heridas que tal vez te hizo Simón, su alteza — respondió y se acercó — podría quitar su ropa exterior.
— espera un momento — Jungkook detuvo — se verá desnudo como yo.
— si su majestad — respondió confundido por su reacción.
—si mi ángel dijo estar bien lo está, ya puede irse — dijo tratando de no mostrar su molestia.
El doctor estaba muy confundido por su repentino cambió, pero decidió obedecerle, antes de irse recomendó al Omega mantener reposo por dos días a cambio de Jungkook que le ordenó una semana por sus heridas.
La pareja se dio un lindo abrazo y luego unieron sus labios, felices de estar juntos nuevamente, se abrazaron para dormir un rato.
✿♡✯🐺✯♡✿
— mi niño despierta — Jungkook acarició sus mejillas con bastante ternura — ya es muy tarde — besó su frente.
Taehyung lentamente abrió los ojos sintiéndose fastidiado. Se sentó mirando al Rey con la frente fruncida — quiero dormir un poco más — se quejó haciendo un puchero.
Jungkook sonrió — mi madre dijo que tienes que despertar más temprano a partir de hoy porque tenemos que practicar los bailes y palabras para nuestra boda, y yo quisiera agregar algo más — el Rey quería que se pareciera un poco a los matrimonios de su mundo.
— pero tengo sueño — bostezó entre sueños, se estiró un poco para mantenerse despierto.
BeomGyu entró al lugar con una bandeja de comida, lo dejó en la mesa y se retiró al saber que Jungkook se encontraba con el Omega.
El Rey lo tomó y le acercó al Omega— come rápido, te esperaré aquí — se sentó en la cama.
Taehyung obedeció sintiéndose cansado, empezó a comer mirando raras veces al Rey, quien no dejaba de sonreír al verlo comer con ternura.
Jungkook respiró lentamente, maravillado de la inmensa belleza de Taehyung, no podía creer que un chico podía existir con esa hermosura.
Sus pestañas largas, su nariz tan perfecta, sus ojos azulejos, sus labios carnosos y rojizos, su cabello esponjoso reluciente, su piel acanelada y suave, sus dedos largos.
— eres perfecto en todos los sentidos — pasó saliva con ganas de besarlo y hacerlo suyo.
Taehyung miró al Rey y sonrió tímidamente — ¿no entiendo porque usted tiene aroma a café si es un Beta? — recién tuvo la oportunidad de prestar atención a eso.
Jungkook rodó los ojos — si tú no sabes, mucho menos lo sabré yo — respondió sin dejar de sonreír.
Taehyung suspiró — mi lobo dice que usted es un Alfa, lo reconoce como un Alfa.
— entonces soy un Alfa — tomó la cuchara y alimentó al Omega — a veces en mi cabeza hay una voz que repite Omega — contó.
— es tu lobo, su majestad — respondió — pero se me hace raro que usted sienta mi aroma, y no solo dos, si no los tres.
— pues puedo sentir el aroma de todos.
Taehyung se quedó pensativo, todo era extraño con Jungkook, su forma de actuar al no saber mucho de sus razas.
De pronto dejó de comer, porque sintió las náuseas atacarlo, no le dió ni tiempo de salir de la cama y arrojó en el plato.
Jungkook se quedó con los ojos abiertos y un poquito asqueado, de ver al Omega vomitar en la cama, el Omega parecía estar votando hasta las tripas, haciendo un gran esfuerzo.
Taehyung al terminar suspiró sin energías, y miró a Jungkook con miedo, y con sus ojos aguados, no quería ver cómo reaccionaria el Rey por su forma de actuar.
Jungkook pasó saliva y al ver eso, le contagio las náuseas, cerró los ojos dándose la vuelta — llamaré una empleada — salió de la habitación lleno de asco.
Al estar afuera suspiro, tratando de desviar las náuseas, ordenó a su guardia traer una empleada, cerró los ojos por un rato sin querer recordar ese momento.
¿Pero que había sido todo eso?
Después de un rato vinieron dos muchachas, una se ocupó de llevar el plato y la otra de cambiar la cama.
Taehyung salió de la cama casi sin fuerzas y fue al baño, para lavar su boca, suspiró un poco aliviado, lavó su rostro y se miró en el espejo que había al frente.
Jungkook entró y pasó las manos por su cintura, lo miró cuestionando su actuar, el Omega no sabía que decir, ya habían sido varias veces que arrojaba, no solo eso, sentía asco de cualquier cosa y tenía antojos y las ganas inevitables de querer estar apegado al Rey.
Taehyung se volteó hacia Jungkook y bajó la mirada — lo siento, por haber vomitado frente a usted — se disculpó muy triste — se que esos no son modales de un príncipe, pero realmente me dió asco de la nada y no me dio tiempo de venir aquí. Tal vez soy un asco.
Jungkook tomó su mentón y levantó su cabeza, le regaló una hermosa sonrisa, se inclinó y besó su frente — todas las personas tenemos defectos y a pesar de verte en ese estado hace rato, para mí sigues siendo perfecto — lentamente bajó sus labios a los del Omega.
Taehyung cubrió su propia boca — acabo de arrojar, mi Rey — se sonrojó.
Jungkook rió y lo soltó — te espero afuera, cambiate — se retiró con una gran sonrisa.
Taehyung suspiró y tocó su pecho, realmente el Rey demostraba lo mucho que lo amaba, sin importar el momento o la situación en la que estan. Salió del baño para tomar una ropa muy bonita.
La sirvienta le dió privacidad por un momento.
Taehyung no perdió oportunidad de vestirse, al estar listo se acomodó la corona de joya alrededor de su cabeza, miró la pulsera de rubí que Jungkook le había dado y recordó también lo que Hoseok le había dado, sintió una tristeza al recordar ese día, ahora que lo pensaba no había hablado desde ese día con el Alfa.
Desde ese día ya habían pasado más de una semana y aún no había tenido la oportunidad de agradecer personalmente a Hoseok por lo que hizo por él. Se dirigió a la puerta entre sus pensamientos. Tal vez iría a verlo al rato.
Jungkook sonrió ni bien lo vió salir, tomó su mano y las entrelazó — todos los días te ves hermoso — acarició sus manos.
Ambos caminaron sonrientes, y no tardaron mucho tiempo en llegar al salón de prácticas, dónde la Reina y las instructoras, esperaban por ellos.
— llegan tarde — dijo NaRan y se acercó a la pareja — Taehyung, se que no eres de la realeza y por eso no sabes de puntualidad, pero, tú ahora eres uno, entonces te quiero puntual — sonrió para no asustar al omega con su seriedad —no te parezcas a MinHyuk.
— ¿por qué me parecería a él, Reina madre? — preguntó confundido.
— bueno, es que él, siempre era impuntual a tu edad, a veces los hijos se parecen a su padre — rodó los ojos al darse cuenta de que estaba hablando de más — bueno quise decir... Mejor no me hagan caso — se puso tan nerviosa.
Jungkook se quedó tan pensativo por las últimas palabras de su madre, había algo raro y él quería descubrir ese algo que podría ocultar.
— empecemos — volvió a decir la Reina.
Taehyung y Jungkook obedecieron, ambos siguiendo las instrucciones, pero pensativos por la mención anterior de la Reina.
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