Lunes en la mañana y un adormilado Yoongi se apegaba fuertemente al pecho de su Alfa, las feromonas de tranquilidad estaban por todos lados y Yoongi luchaba por levantarse, pero Jimin olía tan bien, su aroma se colaba fuertemente por su nariz y le encantaba sentir el calor que emanaba el Alfa.

La cara de tranquilidad que tenía al dormir y que siempre le recordaba a su lindo cachorro, una linda y tierna característica que había conseguido de su padre Alfa.

Jimin se removió y Yoongi se acomodó mejor sobre su pecho, el corazón de su pareja palpitaba lento y calmado y eso lo tenía tranquilo y a punto de ronronear pero lo bueno nunca dura y justo cuando la idea de marcar a Jimin con su aroma y renovar aquella marca que jamás se había ido pasó por su cabeza; Hoseok despertó y el llanto no tardó en escucharse por toda la habitación.

— ¡Hobi! ¡Pañal! ¡Comida! — Jimin se levantó de repente arruinando el cálido momento.

El Alfa tenía sus ojos hinchados ya que últimamente dormían más que los primeros meses de tener a su hijo, trataban de aprovechar que últimamente Hobi dormía más en las noches que antes.

— Jimin, cariño, todo está bien. — Yoongi se sentó sobre la gran cama matrimonial mientras el Alfa revisaba el pañal de su hijo en busca de una respuesta a su llanto.

Jimin cambió el pañal por uno nuevo e instantáneamente su bebé dejó de llorar, sin embargo se quejó segundos después de ser cargado por su padre nuevamente, sus grandes ojos admiraban todo a su alrededor ya que en esa etapa sus curiosos orbes admiraban todo, incluso reconocía perfectamente los rostros de sus padres ya que eran con quien pasaba la gran parte del tiempo.

Hobi tenía oficialmente tres meses desde que había nacido, últimamente Jimin y Yoongi dormían más en las noches, más que los primero meses en los que Hoseok se encargaba de desvelarlos.

— ¿En serio irás? — Yoongi se quejaba desde la cama mientras Jimin le hacía diversas caras a su hijo intentando hacerlo reir.

Hobi lo observaba curioso y dejó salir una tierna carcajada que llenó de alegría el pecho de Jimin.

— Cariño, he estado en casa cuatro meses, el trabajo es mucho más pesado aquí de lo que puede serlo directamente en la empresa.

— No quiero que te vayas...

Yoongi hizo un tierno puchero y Jimin sonrió al ver que se trataba de un berinche de su otro bebé.

— Volveré antes de la cena y dejaré prendas con mi aroma para que Hobi no lo tome de mala manera. — Yoongi frunció su ceño al escucharlo y Jimin dejó salir una risilla — También dejaré prendas con todo mí aroma para ti, mi vida.

Yoongi suspiró y Hobi se removió molesto entre los brazos de Jimin, tenía hambre, no le importaba por qué sus padres peleaban solo quería su comida.

— Es tu turno. — Jimin dejó en sus brazos a su lindo bebé y Yoongi sonrió al ver los pucheros que hacía el pequeño, estaba enojado por no recibir su comida.

Descubrió su pecho y sus rojos e hinchados pezones se dejaron ver, su pecho no era tan grande como el de una mujer pero se lograba observar la diferencia.

El bebé tomó en su boca el rosáceo pezón y succionó fuertemente, estaba tan hambriento.

— Iré a arreglarme. — Jimin desvió rápidamente su mirada de aquel lugar, no quería un problema en esos momentos.

Yoongi sonrió, sabía cuan nervioso se ponía Jimin cada que daba de comer a su hijo frente a él.

Horas después...

— Dejé prendas con mi aroma sobre la cama, si es imposible calmar a Hobi no dudes en llamarme, es difícil que se acostumbre a mi ausencia, recuerda revisar bien sus encías; aún no hay señal de algún diente pero sabes que debemos estar atentos o puede hacerte daño cuando le des de tu pecho, si invitas a alguno de los chicos recuerda que Hobi aún se está adaptando a ellos y sus aromas... Aunque últimamente ama a SeokJin y a Jinyoung, no hagas demasiado esfuerzo con nada y no te estreses cariño, te amo, te estaré llamando. — Jimin besó su frente después de hacerle un sin fin de recomendaciones que ya sabía pero que no le hacía mal recordar.

Y Jimin estuvo a punto de dejar su hogar hasta que escuchó la voz de Yoongi trás él.

— Despídete bien. — Yoongi tenía en brazos a su cachorro mientras estaba en la entrada de la gran casa.

Jimin sonrió, giró su cuerpo y corrió hasta el de su Omega, sus labios se unieron y pudo sentir las mariposas volar en su estómago, sus labios se movían en sincronización, a un ritmo que solo ellos podían llevar y si no fuera por el quejido del bebé no se hubieran separado.

Jimin sonrió hasta que sus ojos desaparecieron y se convirtieron en dos tiernas líneas, dejó un beso en la pequeña cabeza de su bebé y por fin se dirigió hasta su lujoso y costoso auto.

Después de que el auto despareció de su vista Yoongi se adentró a la gran casa, hablaría un rato con Taehyung.

•

Jimin salió de su costoso y lindo auto arreglando su traje, se veía elegante como siempre, la empresa estaba frente a él e incluso antes de entrar sus empleados ya se encontraban dándole la bienvenida nuevamente.

Jimin sonrió y con una corta reverencia en forma de agradecimiento se adentró a la gran empresa, como siempre, los pisos limpios y brillantes, sus empleados en sus puestos trabajando y él estaba lleno de gozo al ver que todo seguía funcionando a la perfección.

Poco después estaba saliendo del elevador hasta llegar al último piso y por fin llegar hasta la recepción donde Jennie siempre se encontraba atenta a lo que necesitaran, claro, cuando Yoongi trabajaba junto a él.

— Señor Park es un placer tenerlo nuevamente aquí. — Jennie se levantó de su asiento y Jimin pudo ver que casi lloraba al verlo.

— Oh vamos Jennie, somos más que jefe empleada, ven aquí. — Jimin abrió sus brazos esperando el abrazo que la omega estaba aguantando darle.

Jennie salió de su lugar y Jimin abrió sus ojos sorprendido, su secretaria estaba esperando un cachorro y lo supo al ver el abultado vientre que se marcaba en su vestimenta de trabajo.

Ambos se abrazaron fuertemente, Jennie estaba un tanto ocupada últimamente con el hecho de que Jimin ya no podía asistir a la empresa, el trabajo de ella y de Jimin incrementaba y estaba aliviada de verlo nuevamente, además, era triste estar en aquella planta sola todo el día, aunque a veces bajaba a revisar las demás plantas.

— ¡Dios, felicidades! Me fui tan solo unos meses pero tú no perdiste el tiempo.

Jennie se sonrojó ante el comentario y asintió, acarició su vientre y habló nuevamente.

— Sí, bueno, Lisa ha estado un tanto ocupada en el hospital y yo aquí, así que no había podido contarte... Queremos que seas el padrino.

Jimin sonrió enternecido — Estaba esperando que me lo pidieras, claro que quiero ser el padrino, va a ser un cachorro o cachorra muy consentido o consentida. Por otro lado, debiste decirme, debes descansar, no me imagino lo molesta que debe estar tu pareja conmigo por hacerte trabajar de más.

Jennie hizo un gesto indicando que no le importaría, segundos después dejaron salir una tierna risilla y el sonido del elevador interrumpió el momento.

Un lindo chico con cabello azúl apareció, poseía unos lindos y grandes ojos, se veía tímido y avergonzado, su aroma lo delataba, estaba nervioso.

— Jimin, te presento a Soobin, es un interno, ya sabes son sus practicas universitarias, recién está aprendiendo y lo tendremos con nosotros un tiempo. Soobin, te presento a Park Jimin, uno de los jefes y dueños de la empresa.

Soobin hizo una reverencia hacia su jefe y Jimin sonrió con ternura, le recordó cuando tuvo sus prácticas universitarias, no fueron buenos tiempos ya que las personas que estuvieron con él en ese momento no lo trataron de la mejor manera, una sensación de querer ayudar y hacer sentir bien al chico se instaló en su pecho.

— Es un gusto señor Park, daré lo mejor de mi para mantener mi puesto de manera honesta y justa.

El Omega hizo una reverencia perfecta y Jimin respondió con una igual.

— No lo dudo Soobin, gracias por tu arduo trabajo y sabes que lo que sea que necesites estaré en mi oficina.

Jimin se despidió y Soobin suspiró tranquilo, su jefe no era como lo había pensado.

— Te lo dije, Jimin es una gran persona.

⋆★⋆

Su oficina estaba llena de feromonas cargadas de nervios y miedo, estaban por todos lados y Jimin sentía que se ahogaba, sí, tiene una marca en su cuello y tiene un esposo que portaba su marca, sin embargo sus sentidos no se pierden del todo, es cierto que nadie podía percibir sus feromonas de excitación (como en sus celos) además de su Omega, pero Jimin tenía un perfecto olfato, el Omega junto a él estaba dejando salir feromonas fuertes y eso le causaba un gran conflicto.

— Soobin, no debes sentirte nervioso, puedo explicarte esto rápidamente si te incómoda mi presencia.

El Omega le dedicó una mirada asustada para después empezar a negar.

— No, no, no, no, señor Park lamento mucho eso, en verdad. Soy un Omega recesivo, me presenté hace dos años y en verdad me cuesta controlar a mi lobo y las feromonas, lo lamento, iré a otro lugar, yo-

Jimin sonrió, era tan tierno, le recordaba a Yoongi, sin embargo era como ver al hermano que nunca tuvo.

— Está bien, no te preocupes, lo entiendo. Mi Omega ha tenido un problema similar, hace poco tuvimos a nuestro primer cachorro y le ha costado regular su aroma y feromonas, estoy acostumbrado a estar rodeado de aromas fuertes, no te preocupes.

Soobin se sonrojó fuertemente, vamos, toda persona en su sano juicio debe darle una buena mirada a Jimin, es atractivo y Soobin no desaprovechó la oportunidad, sin embargo ahora que sabía que estaba enlazado su atracción desapareció y sorpresivamente también sus nervios, Jimin le había hecho sentir en confianza.

— Gracias señor Park... — Soobin sostenía fuertemente aquellos documentos contra su pecho.

— Escucha Soobin, no me gusta que me traten de señor, me hace sentir viejo, puedes  decirme Hyung, obviamente no, fuera de la oficina. Me agradas y no tengo problema en ayudarte, no me gusta solo ser un jefe molesto para mis empleados, me gusta más ser un amigo.

Soobin se había relajado notablemente, el Alfa tenía una voz y un aura tan tranquila, a pesar de haberlo llenado de su aroma a él y toda la habitación, estaba completamente tranquilo.

— Muchas gracias... Hyung. — Soobin se sonrojó ligeramente y Jimin rió revolviendo sus cabellos azules.

— Tierno.

Minutos después el ambiente era más tranquilo mientras Jimin le explicaba algunas cosas, era tan buena persona, no importaba cuantas veces le pidió que volviera a explicar alguna parte ya que no entendía, él solo sonreía y lo hacía.

Jimin quitó el saco de su elegante traje, desabrochó los primeros botones de su camiseta de vestir y Soobin la vio, Jimin tenía una marca en la unión de su cuello y hombro, estaba perfectamente cicatrizada, era perfecta, casi como la de un Alfa.

— Siento mucho si es descortés, pero creía que a los Alfas les hería su orgullo portar una marca en su cuello.

Jimin elevó sus cejas sorprendido y luego sonrió.

— Esas son reglas estúpidas que impuso la sociedad, es como que un Alfa no pueda estar con otro Alfa, ¿Cuál es el problema? Y no, soy un Alfa, pero no por ello cualquier cosa heriría mi orgullo, amo portar la marca de mi Omega, eso lo hace sentir seguro a él y a mi me hace feliz verlo feliz y obviamente sentir nuestra unión aún más fuerte; a pesar de que está obsesionado con morderme.

Soobin sonrió, la mente abierta de Jimin le sorprendió de sobremanera.

— Creo que no podemos vivir bajo los estándares de los demás, si eres feliz con un Omega, Alfa, beta o lo que sea, mientras sea un amor sano y consiente toda persona merece ser feliz sin importar sexo, casta, raza e incluso idioma.

Soobin sonrió y asintió de acuerdo.

— Y-yo, a mi me gusta un Omega, su nombre es Yeonjun y es el Omega más hermosos que he podido ver en mi vida, pero mis padres están totalmente en contra, dicen que debo casarme con un Alfa y tener muchas crías así que… me alejé de él hace un tiempo... usted acaba de motivarme para intentarlo.

Jimin sonrió, una sonrisa cálida y llena de amor, le recordaba tanto a Yoongi, su Omega y él habían sido una completa coincidencia en la vida del otro, en ese momento no se amaban y Jimin se arrepiente de cada segundo que pasó sin ver el gran amor que sentía por su lindo Omega.

— Te ayudaré.

[🥀]

Decir que Yoongi estaba emocionado era poco, Jimin le había llamado para decirle que estaba de camino a casa y él estaba a punto de explotar de felicidad, Hobi había estado todo el día molesto e irritable, no quería recibir de su pecho, había llorado un buen rato después de dejar de sentir a su padre Alfa cerca, solo había dormido durante la mayor parte del tiempo; apegado a aquellas prendas llenas del aroma de Jimin.

Y cuando la puerta se abrió y un cansado Jimin entró por ella, Yoongi no pudo evitarlo más, casi corrió con su cachorro en brazos (el cual despertó al sentir el sonido de la puerta abrirse) hasta el cuerpo de Jimin, el Alfa los recibió con cariño sin embargo no esperaba el fuerte empujón a los segundos de sentir el cálido tacto de su familia.

A Yoongi le bastó unos segundos saber que en las ropas de Jimin había un asqueroso y desconocido aroma, su nariz picó y su lobo se removió molesto, su aroma casi no se percibía en el cuerpo de Jimin, estaba lleno de aquel aroma fuerte y horrible.

— Hueles diferente... No hueles a mí, ni mucho menos a Hoseok.

Jimin frunció el ceño al escuchar a su esposo, él no olía nada diferente en él.

— Cariño, no tengo idea de a qué te refieres.

— ¿No tienes idea de a qué me refiero? ¿Te estás escuchando? — Yoongi se alteró rápidamente y Hobi no tardó en comenzar a llorar fuertemente en sus brazos, no le gustaban las feromonas amargas que estaba dejando salir su padre, además del aroma extraño del Alfa.

— Yoongi, por favor relájate, estás asustando a Hoseok.

— ¡Maldición Jimin! ¡Es el puto primer día que vas al trabajo y ya tienes un maldito aroma en tu cuerpo!

Yoongi lo observaba con una mezcla de decepción y dolor en sus ojos y Jimin no sabía como reaccionar a algo que siquiera había hecho.

— Cariño, Jennie está embarazada, puede que sean sus feromonas maternas...

Las pupilas de Yoongi se dilataron rápidamente y el sentimiento de ira recorrió cada maldita célula de su cuerpo.

— ¡Eres un hijo de puta! ¡¿Cómo te atreves a decir que una Omega enlazada pueda llenarte de sus feromonas maternas?! Por Dios Jimin, nadie puede sentir esas feromonas además de su pareja.

Jimin hizo un gran esfuerzo por recordar en qué momento de su día se impregnó de un aroma y para cuando lo supo, Yoongi ya estaba llorando.

— Eres un idiota... Hazme un favor o al menos a tu hijo, date una maldita ducha, apestas a ese asqueroso aroma.

Y sin más, Yoongi se fue a su habitación dejándolo con la palabra en la boca. Los empleados observaban la escena atónitos, el matrimonio Park jamás peleaba.

Jimin suspiró y decidió tomar la ducha, debía hablar con Yoongi, pero no mientras ambos estaban enojados.

🤺

Jimin secaba con una toalla su cabello recién lavado con abundante shampoo, su cuerpo desprendía su aroma natural y aquella marca en su cuello dejaba salir el aroma de su Omega y el propio juntos.

— Yoongi...

El Omega lo ignoró olímpicamente mientras mecía al bebé ya dormido en su cuna.

— Cariño, debemos hablar.

— No hay nada de que hablar Park, deberías dormir en alguna de las habitaciones que tenemos.

— Yoongi, siquiera me has dejado explicarte.

— Dijiste una maldita excusa estúpida cuando te di una oportunidad, no quiero escuchar más.

— Yoongi, en verdad no tenía idea que estaba lleno de aquel aroma, si lo hubiera sabido me hubiera dado una ducha en la oficina, lo siento amor.

— ¡No me llames de esa forma! ¿Tienes el descaro de decir que te darías una maldita ducha? ¿Qué hiciste, fóllaste con alguien?

Jimin frunció el ceño, su cuello ardió, podía sentir la ira de Yoongi mediante su marca, el Omega estaba enojado y triste; ahora sus sentimientos se combinaron, Jimin acababa de sentir su corazón agrietarse ¿Había escuchado bien? ¿Follar? ¿Alguien más?

La tristeza invadió su cuerpo y una pequeña pizca de ira también se unió.

— Para este punto no me duele el hecho de que no me dejes hablar correctamente, me duele que desconfíes de mi de esa forma. No, no follé con nadie Yoongi, creo que sabes perfectamente qué pasaría si lo hiciera y como explicación de este problema que creaste en tu cabeza sin siquiera dejarme hablar, el día de hoy conocí al nuevo interno; su nombre es Soobin, es un Omega recesivo y le cuesta manejar sus feromonas, estoy lleno de sus feromonas porque estaba nervioso, es su primer trabajo y temía arruinarlo así que hablé con él, sus feromonas estaban en todos lados y no quería asustarlo más así que no puse problema y sobre Jennie, sí está esperando un bebé por si quieres felicitarla, que tengas una buena noche. — Jimin se acercó a la linda y grande cuna y dejó un beso en la cabeza de su cachorro como despedida.

Yoongi observó el cuerpo de Jimin desaparecer por la puerta y sus lágrimas cayeron, sus acciones tomaron fuerza contra si mismo, lo había arruinado.

Con sus ojos llenos de lágrimas y sin darse cuenta, avanzó hasta quedar frente a la puerta de aquella habitación la cual dejaba salir un fuerte y amargo aroma desde adentro, un aroma que se extendía por todos lados. Sus sollozos se escucharon fuertes mientras recostaba su frente en la gran puerta de madera.

A los pocos minutos Jimin se encontraba observándolo con los ojos llenos de lágrimas y los brazos abiertos.

— Lo siento tanto Jimin, lo siento, no debí decir aquello, no desconfío de ti, es solo que estaba tan asustado y dolido, no lo pensé y fui un estúpido, perdóname Alfa.

Yoongi lloraba en el fuerte pecho de Jimin embriagandose con su fuerte aroma.

— Está bien Yoonie, te perdono lindo.

Jimin sonrió acariciando los negros cabellos de su pareja mientras ambos lloraban abrazados, se había sentido tan mal pelear después de tanto, ese sentimiento amargo y doloroso, lo odiaban.

Poco después ambos se encontraban abrazados bajo las sábanas, Yoongi se escondía en el pecho de Jimin y el último mencionado apoyaba su mentón sobre la cabeza de su Omega.

— Te amo Jimin, lamento haber desconfiado de ti Alfa.

— También te amo hermoso.

Poco después cayeron en un profundo sueño.

♡

Había pasado un largo mes después de su discusión, Jimin no quería siquiera recordar las palabras de Yoongi y el último mencionado se sentía culpable después de todo aquello, y no solo eso, su lobo aún estaba enojado y celoso, se sentía como cuando estuvo en su etapa territorial durante el embarazo.

Jimin despertaba lleno de feromonas, desde la punta de sus cabellos azabaches hasta los dedos de sus pies, su cuello tenía marcas moradas y algunas aún rojas, sin mencionar que su marca se renovaba diario sin siquiera saberlo ya que Yoongi hacía todo esto mientras dormía.

— Yoongi basta, creo que absolutamente todas las personas que pasen a mi lado sabrán que tengo Omega, literalmente tengo tatuado en la frente: "pertenece a Min Yoongi, no tocar"

Jimin se quejaba mientras el Omega succionaba fuertemente su cuello y se frotaba constantemente contra su cuerpo dejando salir fuertes feromonas.

Yoongi gruñía bajo al escucharlo, sabía que eso no mejoraría las cosas, Jimin aún se sentía incómodo por su desconfianza además de sus palabras pero Yoongi no podía evitar sentir celos, celos por cada vez que salía hacía su trabajo, celos de pensar en aquel Omega cerca de él, celos porque aquel Omega podía pasar horas junto a Jimin, celos de que cualquier persona se atreviera a coquetear con Jimin.

— Bien, basta, iré a arreglarme. — Jimin se levantó y el cuerpo de Yoongi se sintió frío al dejar de sentir el cuerpo de su Alfa bajo el suyo.

Un puchero se dejó ver en sus labios y esta vez: Jimin no cedió.

Horas después...

Yoongi terminaba de arreglar a Hobi, tenía su pañalera lista con varios cambios de ropa por si lo necesitaba, muchos pañales, algunos biberones con leche extraida de su pecho (por si no podía amamantar a su hijo fuera, ya sea por Alfas en celo o por posesividad de parte de su Alfa) pañitos húmedos, zapatos de su bebé, crema, entre otras cosas. Yoongi iría a visitar la empresa, obviamente no era una excusa para ver a Jimin y conocer a ese tal Soobin, no, él es un hombre adulto que sabe controlarse.

Acomodó a Hobi en su silla para auto y los guardaespaldas subieron el lindo cochecito en la parte trasera del auto.

El auto partió poco después siendo conducido por el chófer y Yoongi estaba en los asientos traseros ansioso por ver a Jimin.

✨

Jimin observaba los documentos en sus manos detenidamente, estaba algo estresado con el trabajo además de que no esperaba recibir aquella visita inesperada.

— Maldición Jimin, creo que nadie podría acercarse a ti, hueles como si Yoongi te hubiera orinado encima.

— No está muy lejos de eso Nam.

— Créeme que nadie que no tenga pareja querrá acercarse a ti, es como si te hubiera marcado de todas las maneras posibles y yo estoy enlazado.

Nam se fijaba en aquella marca en el cuello de Jimin y las muchas más que adornaban su cuello.

— No me molesta que me marque, me molesta que sea un posesivo hasta el siguiente nivel, desde que Soobin trabaja aquí me marca diario, me duele el cuello y estoy lleno de sus feromonas a donde quiera que vaya. El chico de la cafetería estaba a punto de vomitar, tuve que salir del lugar y esperar por mi café ¡Fuera del maldito lugar!

Nam hizo una mueca, él no estaba muy lejos de abrir la gran ventana tras el Alfa, Jimin en serio tenía feromonas demasiado fuertes en su cuerpo.

— ¿Jin es celoso contigo?

Nam asintió rápidamente — En el embarazo lo era más, creo que últimamente también lo ha sido pero no hasta el punto de llenarme a diario de sus feromonas, cada uno o dos días lo hace, él se siente seguro y a mi me gusta sentir su aroma a pesar de que estemos lejos.

Jimin suspiró, debería hablar con Yoongi, nunca le había molestado que el Omega fuera posesivo, le parecía tierno, pero últimamente era demasiado, estaba afectando su vida laboral y social por unos celos sin sentido.

Poco después de hablar con Nam de algunos negocios, su Alfa amigo dejó el lugar y Soobin entró con una gran sonrisa en sus labios.

Los ojos del Omega se abrieron cuando estuvo cerca de Jimin, olía demasiado fuerte.

— Lo sé, siento mucho eso, Yoongi ha estado en sus etapas de querer marcarme cada que puede.

Jimin quería que se lo tomara como algo gracioso, no le contaría a Soobin que era el causante de sus problemas con su pareja últimamente.

— Ignora eso y dime qué sucede.

— Mi universidad dijo que podré graduarme dentro de poco, solo necesito saber si puedo seguir trabajando aquí como algo fijo.

Jimin sonrió y abrazó fuertemente al Omega, Soobin trataba de ignorar el fuerte aroma y lo abrazó de vuelta.

— Estoy muy orgulloso de ti y sobre el trabajo creo que es algo que deberías saber.

Ambos se separaron y se observaron fijamente a los ojos mientras sonreían, la gran mayoría creería que es una escena de enamorados pero era más como dos hermanos apoyándose.

El sonido de algo cayendo al suelo los hizo observar hacía la puerta y un Yoongi casi rojo de la ira los observaba, Jimin suspiró y observó al tierno bebé en su coche, dormía plácidamente.

Jimin cerró aus ojos sabiendo lo que se aproximaba, sus ojos chocaron con los azules brillantes de su Omega, Yoongi estaba enojado y su lobo también.

— ¡Aléjate de nuestro Alfa! ¡¿Quién mierda eres para estar así de cerca de mí Alfa?!

Soobin tembló en su lugar sin entender bien, Jimin frunció su ceño y estuvo a punto de acercarse a Yoongi para intentar calmarlo y falló en su intento al sentir las fuertes feromonas que dejó salir el Omega.

Olas de feromonas inundaban la gran oficina, Soobin temblaba de miedo al sentir el amargo aroma y Jimin tembló sobre su cuerpo al sentir las malditas feromonas de excitación que lanzaba Yoongi hacia él.

Jimin estaba enojado, era el colmo todo esto pero no quería usar su voz de mando, no con Soobin ahí.

— ¡No sé quien mierda seas, pero no te permitiré acércate así a mí Alfa!

Soobin cubrió su nariz y el sonido del llanto del bebé se escuchó fuerte y claro, Jimin respiraba agitadamente rogando que su celo no se adelantase gracias a las feromonas que el Omega estaba usando para retenerlo.

— Soobin, vete, ahora.

El Omega se levantó como pudo y Yoongi estuvo a punto de gritar nuevamente sin embargo...

— ¡Se acabó! Quiero que dejes ir a Soobin ahora mismo, este problema es nuestro y nadie tiene que salir lastimado por tus acciones inmaduras.

La voz de mando de Jimin hizo temblar a los Omegas, la seguridad de Yoongi se había ido al ver a su Alfa enojado, Jimin nunca usaba su voz de mando.

Soobin corrió fuera de la oficina y Jimin tomó a su hijo en brazos poco después, intentando calmarlo con feromonas llenas de tranquilidad, el hecho de que Yoongi haya dejado salir feromonas tan fuertes y extrañas para su hijo lo hizo entrar en pánico.

— Jimin...

— Se acabó Yoongi, estoy totalmente enojado contigo ahora mismo, Soobin es como un hermano para mi, fue la peor primera impresión que pudiste dar. Hiciste una maldita escena justo aquí, estoy marcado por ti Yoongi, no sé si lo recuerdes; estamos enlazados y marcados el uno por el otro, te tengo la suficiente confianza para dejarte tener amigos y amigas Alfas, para que salgas y te diviertas con ellos, no me molesta en lo absoluto porque confío en ti. Pero al parecer para ti es totalmente difícil darme un poco de confianza, creo que está bastante claro que nuestra marca te avisaría si tan solo dejara que alguien me bese, esto fue lo peor que pudiste hacer Yoongi ¿En serio por tus malditos celos desestabilizaste las emociones de nuestro hijo?

— Jimin, Alfa...

— No, se acabó, te dejé marcarme como un perro a diario Yoongi, sabiendo que eso generaría problemas en mi vida social y laboral, dejé que renovaras esa marca una y otra vez sabiendo que aún duele como el demonio y todo eso lo hice para que te sintieras seguro y confiado de que: no te voy a engañar Yoongi, no soy un maldito Alfa que le encanta coger con cualquier persona porque sí, JAMÁS, escúchame bien Yoongi, jamás te engañaría y lo que más me duele de todo esto es tu maldita desconfianza ¿Te he dado razones siquiera?

Yoongi negó mientras dejaba salir lágrimas, se sentía un completo estúpido de nuevo y todo por dejar a su Omega salir en el momento equivocado, sus malditos celos habían provocado aquello.

— Esta vez quiero que pienses bien las cosas Yoongi, no me molesta que seas celoso porque yo también lo soy, maldición, soy muy posesivo contigo pero no hasta este nivel, no hasta que los celos lastimen a personas inocentes, te amo Yoongi pero por ahora no quiero verte, no después de que intentaras adelantar mi celo, no después de que llevaras tus celos tan lejos. Lo sé, sé que tu lobo tomó el control, pero tú permitiste que esto llegara hasta aquí.

Jimin abandonó la gran habitación con su corazón rompiéndose, su lobo estaba triste, se acurrucaba en una esquina y él se sentía fatal al dejar a su Omega llorando, su marca dejaba sentir su dolor pero tenía a su hijo en brazos, debía estabilizarse y estabilizar su matrimonio ahora, darle un fin a aquellos malditos celos.

Yoongi rompió a llorar justo después de que su Alfa abandonara el lugar, se sentía fatal, sentía que perdía a Jimin, su Alfa, su esposo, su otra mitad.

Horas pasaron y él no paraba de llorar en aquella habitación, hasta que sintió un cálido tacto en su hombro y ese aroma que lo había llevado a la locura.

— Señor Park, siento mucho todo lo que sucedió, perdón si fui el causante de la pelea con su esposo, yo en verdad no tenía ese tipo de intenciones con Jimin hyung, él es una gran persona pero siempre lo tuvo presente, siempre hablaba de usted y su hijo como lo más precioso que tiene.

Yoongi rompió a llorar aún peor y el Omega no supo qué más hacer, iba a retirarse hasta que sintió la mano del contrario halar su camiseta.

— Lo siento Soobin, lo siento tanto, soy un maldito celoso de mierda, estoy perdiendo lo que más amo por no saber escuchar, por desconfiar de él, por ser un maldito desconfiado.

— A mi no es a quien tiene que pedir perdón, soy el que menos salió herido y lo perdono Señor Park, somos humanos y sentimos, es normal reaccionar de manera incorrecta algunas veces y también es de humanos perdonar. De esto usted aprenderá y crecerá, Jimin hyung lo ama mucho y jamás lo dejaría, solo está enojado y usted probablemente ya ha pensado lo suficiente.

Yoongi asintió, sus ojos hinchados y rojos de tanto llorar.

— Muchas gracias y de nuevo siento mucho todo esto, no pensé correctamente y prometo hacerlo desde ahora, gracias por el consejo y gracias por cuidar de Jimin.

Yoongi le abrazó levemente y abandonó la empresa rápidamente, debía buscar a Jimin.

💜

Jimin trataba de calmar a su hijo, era imposible, ya que tenía hambre y eso lo sabía porque había revisado varias veces el pañal limpio, trató de jugar con él y hasta hacerlo dormir pero nada lograba calmarlo y entre sus opciones no estaba darle leche de formula ya que aún era demasiado pequeño.

Cuando escuchó el sonido de la puerta abrirse y el conocido aroma de la menta y canela calar hasta lo más profundo en su interior supo que Hobi pararía de llorar.

— Está hambriento ¿Podrías darle de comer?

Yoongi asintió desde la puerta, el hecho de recordar el rostro dolido y enojado de Jimin le hacía temblar en su lugar.

Tomó a su hijo en brazos y descubrió su pecho, sus pezones hinchados y rojos, como siempre, Hoseok no tardó en tomar la protuberancia en sus labios y Yoongi no pudo evitar hacer una mueca.

— ¿Te duele? — preguntó preocupado el Alfa.

— No, es solo que los dejará duros.

Sus mejillas tomaron un rojo intenso y Jimin dejó salir una pequeña risa.

— Iré a nuestra habitación, te espero allí.

Yoongi supuso que se vendría una gran charla, se permitió sentirse tranquilo y tomarse su tiempo mientras alimentaba a Hobi, Jimin era tan maduro, después de todo lo trataba con la misma delicadeza y amor, a pesar de haberle hecho tanto daño.

Unos treinta minutos después se encontraba en la habitación que compartía con su esposo, luego de dejar a Hobi en su gran cuna y obviamente haber acomodado el pequeño monitor para escucharlo si lloraba, estaban acostumbrando a su hijo a dormir en su habitación y a él parecía no importarle mientras pudiera dormir y alimentarse.

— Jimin yo en verdad...

Sus labios fueron apresados por aquellos labios esponjosos, se movieron rápidamente y Yoongi luchaba por seguir el ritmo.

— Hablaremos cariño, pero esta noche te enseñaré algunas cosas... — una maldita sonrisa ladina se dejó ver en sus labios ya rojos por el fuerte beso.

— Pero...

— Shh~ ve a tomar una ducha, ahora. — sentenció el Alfa después de callarlo.

Yoongi obedeció rápidamente y mientras lavaba su cabello no esperó sentir las fuertes manos de su Alfa en su cintura.

— Jimin...

El Alfa siquiera le dejó decir algo cuando ya lo tenía acorralado contra los azulejos del baño, las manos de Jimin recorrían sus definidas curvas hasta llegar a sus grandes y pomposos glúteos, tan solo rozó un poco aquellas grandes protuberancias, sus dedos delinearon su espalda baja y un suspiro escapó de sus labios cuando dos de sus dedos separaron sus nalgas dejando ver su entrada, el Alfa dejó salir una pequeña risilla al ver su entrada palpitar.

— Esta noche aprenderás a escucharme y aprenderás que yo también merezco respeto, Yoonie.

Yoongi asintió sumiso y el fuerte sonido de una nalgada resonó por las paredes del baño.

— No escuché la respuesta, lindo.

— Sí, sí Jimin.

Un golpe más resonó en todo el lugar.

— Esta noche solo podrás llamarme Alfa, nada de Jimin ¿Entendido?

— Si, Alfa~

Yoongi gimió al sentir los dedos de su Alfa pasearse por su entrada, la cual se contraía lista para empezar a lubricar y recibir algo dentro.

— No recibirás nada allí aún ¿Comprendes Omega?

— S-sí Alfa.

Yoongi sintió el aire escapar de sus pulmones al sentir la respiración de Jimin en su sensible entrada, el Alfa tomaba fuertemente sus nalgas separándolas para dejar ver aquel exquisito lugar, maldición, Yoongi en verdad sentía sus piernas temblar, sus manos se aferraban a los azulejos de la pared y su rostro intentaba girar para observar a Jimin de rodillas frente a su culo.

Su lengua se paseó una sola vez por su agujero y siquiera había entrado pero Yoongi gimoteó alto al sentir aquella traviesa lengua y no solo eso, Jimin había puesto su maldito piercing y pudo sentir claramente la pequeña bolita pasearse una y otra vez sobre su entrada, Jimin amasaba y apretaba su culo a su gusto teniendo el maldito descaro de no adentrar su lengua.

— Mghm~ Jimin — una fuerte nalgada resonó y Yoongi se corrigió rápidamente — ¡Alfa! ¡Alfa, por favor~!

— ¿Qué sucede Yoongi? ¿Te prende saber que puse el piercing? ¿Lo sentiste cariño?

— ¡Sí, sí Alfa, lo sentí! por favor~

— Yoongi no puedo saber qué quieres si no lo dices...

Yoongi se sonrojó fuertemente y apegó su rostro a la pared frente a él.

— Alfa, y-yo necesito mghm~ necesito que se coma mi culo, necesito su lengua en mi- ¡Oh mierda!

Yoongi siquiera terminó de hablar y menos al sentir la experta lengua de su esposo en su interior, Jimin movía su lengua intentando tocar las paredes del anillo de músculos, quería que Yoongi sintiera su piercing allí.

— ¡Alfa! ¡Ah~ sí, sí, me gusta mghm~!

Jimin ahora succionaba fuertemente, sus labios besaban y chupaban su entrada como si estuviera comiéndo una maldita paleta.

— ¡Jimin~ ahhh!

Esta vez Jimin no le dio una nalgada a una de sus maltratadas pomposidades, esta vez el golpe fue justo en su chorreante agujero y eso no pudo excitarlo más.

— Te quiero en cuatro, sobre la cama y nada de tocarte lindo, hoy te vendrás sin necesidad de tocar tu pene, tu pene solo lo tocaré yo ¿Entendido?

— S-sí, Alfa.

Jimin sonrió contento por la respuesta y Yoongi gimió al sentir una última nalgada antes de salir de la ducha, Jimin se quedaría para quitarse las ropas mojadas ya que había entrado vestido.

Yoongi en serio estaba luchando por no tocarse, le era tan difícil en esos momentos, su pene estaba apegado a su estómago, la punta totalmente brillante gracias al presemen que salía, su maldito agujero soltaba chorros de lubricante, él en verdad necesitaba algo dentro, y con algo se refería a la gruesa y larga polla de Jimin.

— Te ves tan hermoso. — la gruesa voz de Jimin resonó por la habitación, su voz ronca le hizo temblar con anticipación.

No supo cuando pasó pero ya tenía la lengua de Jimin nuevamente moviéndose en su interior mientras él apegaba su rostro a las sábanas contra el duro colchón y su culo se empinada para darle acceso a su Alfa.

Sus gemidos eran amortiguados gracias a que su cara estaba perdida entre las sábanas.

— No sabes cuánto me gustaría escucharte, pero no quiero escuchar ni un gemido de esa linda boquita esta noche, no queremos que Hobi despierte porque su padre Omega gime demasiado fuerte ¿No es así Yoonie?

— Sí mghm~ Alfa.

Yoongi cubrió su boca al sentir la de Jimin chupar nuevamente con desespero su entrada, el Omega lograba visualizar a Jimin masturbarse, sentía su saliva salir al ver el gran miembro, la linda joya decorándolo y todo esto mientras Jimin comía gustoso su culo haciendo sonidos morbosos que lograban ponerlo más.

— ¡Alfa! Dios, Jimin ahh~

Yoongi cubrió rápidamente su boca y Jimin tomó entre sus manos las grandes y pomposas nalgas, esta vez las amasó y apretó a su gusto mientras Yoongi intentaba no dejar salir gemidos.

Yoongi se sintió a desfallecer al sentir el fuerte agarre en su cuello, Jimin tomaba su cuello con una de sus manos mientras la otra tomaba su cintura y su espalda se arqueaba perfectamente.

El miembro del Alfa rozó su culo y Yoongi gimió alto al sentir una maldita embestida falsa.

— Creí decirte que no quería ruido, cariño.

— Alfa, por favor~

Yoongi empujó sus caderas contra la gran erección en su culo.

— ¿Crees que mereces que te folle ya Yoongi?

Yoongi negó sintiendo sus ojos llenos de lágrimas.

— Exacto, hoy te portaste mal, lindo, hoy no tendrás mi polla, no en tu boca y para que la tengas en tu apretado interior deberás rogar un poco... Pero dime Yoonie ¿Quieres que llene tu interior? ¿Quieres estar lleno de mi polla, de mí semen?

— Sí, sí Alfa, sí quiero, por favor, por favor Alfa, quiero su polla, quiero su semen, quiero su nudo y su marca.

Ambos lobos estaban dejando ver sus lados, uno sumiso y el otro jodidamemte dominante.

Sus pezones largaban gotas de leche, cosa que Jimin estaba odiando.

— No sabes cuánto me molesta desperdiciar la comida.

Jimin tomó en una de sus manos el maltratado pezón y dio un leve apretón, el líquido se derramó un poco más y Jimin gruñó.

— No creas que no tomaré aquello lindo, pero por ahora intenta no dejar salir más, te dejaré tan seco Yoongi que nuestro hijo tendrá que succionar más fuerte para que salga al menos una gota de allí.

Jimin soltó el duro pezón y Yoongi gimió fuerte, el Alfa sabía donde tocar.

Su cuello fue soltado y Yoongi tomó las sábanas entre sus manos fuertemente al caer nuevamente contra el colchón, su cuerpo entero temblaba y se sentía venir con el mínimo toque.

Jimin se acercó lentamente, casi ni lo escuchó, y no lo hubiera hecho, no si el Alfa no rozaba su enorme erección contra su entrada, Jimin fingió una embestida y la punta logró entrar, pero salió rápidamente.

— ¡Alfa~ mghmmm~ no, ahh~ por favor!

Yoongi estaba llorando, su saliva corría por su boca, las lágrimas nublaban su vista y su entrada palpitaba necesitada, lo quería. Maldición lo quería tanto.

Sus suplicas pararon al escuchar el sonido del teléfono sobre la mesita.

— Oh, alguien llama Yoonie, deberías responder y decirle a quien sea que esté tras el teléfono que estoy a punto de fóllarte, hazlo lindo y tendrás lo que quieres.

Yoongi asintió, veía borroso y lo único que quería era el pene de su Alfa.

— ¿H-hola?

— ¡Yoongi! Nam me habló sobre lo que pasó contigo y con Jimin ¿Está todo bien? parece que estás llorando...

— Jin, yo no- Mghm~ JIMIN, por favor~

— Maldición Yoongi no hubieras contestado, hagan sus cosas sin meter a los demás, asquerosos...

— Díselo Yoonie, hazlo.

— Jin, d-debo colgar, Jimin está a punto de mghm~ sí! fóllame, mierda.

La llamada se cortó antes de que Jin les gritara y justo en ese momento el miembro de Jimin se enterró fuertemente en el apretado agujero de Yoongi.

— ¡Alfa, sí, sí, por favor, muevete, fóllame fuerte, parteme en ahhh~

Jimin movió sus caderas fuertemente, el maldito sonido de sus bolas chocar contra los esponjosos y grandes glúteos de Yoongi era la puta gloria.

Sus aromas estaban por todos lados, las feromonas de excitación, los gruñidos de Jimin y los gemidos de Yoongi al recibir las fuertes embestidas.

— Joder, amo tu culo, es tan perfecto, se traga mi pene tan bien Yoongi, deberías verlo.

Jimin apretaba sus nalgas mientras se movía y dejaba caer fuertemente sus palmas dejando marcas rojas y Yoongi gemía fuerte, ya no le importaba en absoluto, estaba amando que Jimin le golpeara y le hablara de manera sucia.

Yoongi perdió la respiración al sentir la mano de Jimin sobre sus cabellos, su cara ya no se encontraba enterrada en las sábanas, ahora su cabeza reposaba en el hombro de Jimin mientras arremetía fuertemente contra su cuerpo.

— Dime Yoongi ¿De quién eres lindo?

— ¡Tuyo, soy tuyo Jimin~ soy todo tuyo Alfa!

— Y ¿A quien pertenezco yo?

— ¡A mí, mío, eres todo mío Alfa~ A-ahh~ sí justo allí!

Los dedos de Jimin se encontraban en la boca de Yoongi y su otra mano tomaba de manera fuerte su cintura, el Omega succionaba como si fuera su maldito pene y eso solo estimulaba a Jimin a arremeter más fuerte contra él.

Jimin sonrió, el cuerpo de Yoongi lo apretaba demasiado fuerte y sabía que Yoongi estaba por venirse.

Claro que no esperó que Yoongi tuviera un maldito orgasmo anal.

— ¡A-ahh~ mghmmm~ Jimin!

Sintió demasiada presión en su pene y poco después el orgasmo anal de Yoongi escurría de su entrada, una perfecta y maldita vista, le encantaría observar a Yoongi llorando mientras tenía un puto orgasmo anal pero era un castigo, así que sería para la próxima, sus embestidas no pararon a pesar de lo sobre estimulado que se encontraba el Omega.

— ¡Alfa, me vengo, Jimin~ mghmm!

— Dios Yoongi, acabas de tener un maldito orgasmo anal y estás por venirte enfrente.

— ¡Jim- mghmm~ ah, ah~ ah~ sí!

— ¿Te gusta, te gusta cómo te fóllo Yoongi, te gusta sentir mi verga hasta el fondo de tu apretado agujero?

— ¡Sí, sí, sí Alfa~ me encanta, me encanta tu pene Jimin! mghmm~ sii!

Los ojos de Yoongi estaban rojos e hinchados, sus mejillas bañadas en lágrimas saladas y cuando sintió que tocaba el cielo con sus manos Jimin tomó su rostro, sus embestidas eran potentes y duras mientras sus labios se unieron rápidamente de manera agresiva y tosca, sus salivas se mezclaban y sus lenguas peleaban.

Y se vinieron, justo cuando mordieron el cuello del contrario y ambas marcas se renovaron, el interior de Yoongi se llenaba lentamente por el fuerte orgasmo del Alfa además de su nudo y Yoongi siquiera podía respirar.

Su cuerpo cayó sobre las sábanas sucias, su saliva, semen, lubricante, sudor y hasta lágrimas estaban allí y poco le importó el nudo aún en su interior, acababa de tener dos malditos orgasmos, y unos de los mejores por cierto.

Sus cuerpos estaban bañados en sudor y lo único que se escuchaba eran sus respiraciones agitadas.

— Mierda Yoongi, cuidado.

— Jimin, acabas de llenarme como para tener diez cachorros más, me trataste tan brusco y demandante mientras follabamos y ¿Te preocupas ahora?

— Solo quería darte una lección, no hacerte daño.

— Lo sé y entiendo, te respetaré más de ahora en adelante, debo escucharte y no solo hacer lo que yo quiera, no tengo excusas para lo que sucedió con Soobin, lo siento Jimin, no quería que todo esto sucediera, mi lobo estaba enojado y yo también, me dejé llevar y terminé dañando a quienes más amo. Confío en ti Jimin, plenamente, sé que soy tuyo y tú mío, pero ¿Cómo puedo no celarte si eres la persona más perfecta en este mundo?

— No me importa que me celes, no si es hasta cierto punto "sano", nada de pasar los límites.

— Está bien Alfa, lo siento y te amo.

— También te amo, lindo. — Jimin lo habría besado pero estaban en una mala posición, Yoongi estaba abajo dándole la espalda a Jimin y aún con el nudo dentro.

— Quiero dormir con tu pene dentro.

— ¡Yoongi!

— ¡Hablo en serio!

— No quiero una maldita erección en la mañana.

— No la tendrás, porque me haré cargo.

— Yoongi no quiero dormir erecto en tu interior.

— Por favor Jimin, me fóllaste tan bien hoy, me encanta cuando eres rudo, necesito amanecer lleno, necesito despertar y al sacar tu pene dejar salir todo tu semen ¿Por favor?

— Dios, Yoongi no digas eso, está bien, lo dejaré dentro.

Jimin era un tomate y Yoongi estaba satisfecho, había arreglado las cosas con Jimin, tuvo sexo rudo y ahora tenía su etapa de mimos y sueño ¿Qué mejor que eso?

No dejaría de ser posesivo pero se controlaría de ahora en más, no quería pelear con su Alfa, estaba completamente seguro del amor que se tenían el uno al otro y eso lo hacía sentir perfecto, su lobo se sentía feliz y seguro, Jimin es y será siempre su Alfa, el Alfa más perfecto y dedicado que haya conocido, agradece tenerlo como esposo y compañero de vida.

Y claramente regalarle un lindo y perfecto: heredero.

💜 BUENASSSSSS ¿Cómo están? ¿Pasaron año nuevo y navidad con quiénes más aman? yo lxs amo mucho, feliz año nuevo, feliz navidad espero que este año sea uno muy buena para todxs.

Hace poco dejé mensajes y preguntas para ustedes en mi tablero de preguntas y nadie respondió :c así que les traje este especial, se suponía que venía el Namjin perooo hice este primero y por eso les pregunté pero no hubieron respuestas así que hice lo que yo quise.

( Por favor miren mi tablero de preguntas si me siguen, gracias)

Por otro lado quiero agradecerles por leer y esperar actualizaciones de mi historia, sé que soy muy lenta a veces pero intento escribir rápido y que les guste, espero no hayan comentarios malos hacia nadie en este capítulo, los celos son algo tóxico, sí, pero es algo que no se puede evitar en una relación sin embargo siempre deben llevar una relación sana, no quiero inculcar en ustedes toxicidad, traten a sus parejas con respeto y háganse respetar también, todo de manera sana, esto es ficción no lo lleven a la vida real por favor.

¿Qué les pareció el cap?

Tengan un lindo día y nos vemos hasta el próximo especial, heredero no ha terminado, aún faltan especiales de dos parejas y otro de la principal, coman bien, duerman a sus horas cuídense y tomen agüita, háganme saber cualquier cosa y si quieren hablar pueden hacerlo sin problema conmigo, soy como una amiga y espero poder hablar con todxs si es que quieren hacer el grupo, lxs amo mucho mucho. 💜

Lau~