Capítulo 46. Confesiones
Todos se encontraban en el día siguiente desde la amenaza del veneno mortífero.
Era todavía plena mañana, y cierta pelirroja acababa de despertar.
Lara-Mm... *Despertándose poco a poco, abre los ojos y a su lado encontró a su novio, llevando una bandeja con el desayuno* ¿Raph?
Raph-Buenos días, mi bella durmiente. *Le dedica una cálida sonrisa*
Lara-Por favor, no me llames como a las princesas Disney, las odio. *Diciendo con desprecio, indicando lo poco que le agradaban* ¿Y esto?
Raph-Un desayuno para la reina de la casa. *Le deja la bandeja en la cama*
Lara-Eso suena mejor. *Retórica con una sonrisa, mientras se sienta sobre la cama* ¿A caso me estás pidiendo algún favor? *Preguntándole frunciendo el ceño*
Raph-Quería aliviarte ese gran susto que tuviste anoche. *Diciéndole con una sonrisa*
Lara-Tampoco estuve tan asustada. *Respondiendo retórica*
Raph-Eso no es lo que hizo demostrar aquel abrazo. *Respondiendo con una leve risita, lanzando una sonrisa burlona*
Lara-Bueno, ¿puedo desayunar ya? *Preguntándole retórica ladeando la cabeza*
Raph-*Ríe por la reacción de su novia, esquivando el hecho de aquel abrazo* Claro. *Sonríe pícaro y la besa*
Lara-*Reacciona y corresponde el beso*
Raph-*Se separa y la mira con una sonrisa* ¿Qué tal el desayuno?
Lara-Bien, pero quiero comida de verdad. *Diciendo retórica con una leve risita, y empieza a desayunar* ¿Qué vas hacer mientras?
Raph-No te preocupes por el rey, está satisfecho de ver que su reina está bien. *Diciéndole con una leve risita*
Lara-Cállate ya. *Lo golpea levemente mientras se reía*
Raph-¿Qué? ¿No quieres que te trate cómo una reina? *Preguntándole burlón*
Lara-Nah, paso. *Ríe leve* Pero, si quieres que me comporte como una de esas estúpidas y presumidas princesas, solo tienes que decirlo. *Diciéndole retórica*
Raph-No, ni se te ocurra. Así ya eres perfecta. *Le sonríe y la besa*
Lara-*Sonríe y corresponde el beso. Después de unos cuántos segundos se separa* ¿Tienes pensando dejarme desayunar en cualquier momento? *Preguntándole con una risita*
Raph-Pensé que mis labios eran tu desayuno, pero puedes desayunarme entero. *Le sonríe pícaro*
Lara-¿Sabes qué? No me apeteces. *Respondiendo burlona*
Raph-Bueno, de todas formas, solo estoy disponible para ti. *Le responde con una risita, y dedicándole una sonrisita*
Lara-Bueno saberlo. *Ríe leve y le da un beso en la mejilla* ¿Quieres desayunar conmigo?
Raph-Por supuesto, mi reina. Sus deseos son órdenes. *Le responde con una leve risita*
Lara-*Ríe* Déjalo ya. *Le da un corto beso en los labios*
Raph-*Ríe leve por la reacción de su novia* Adoro este tipo de mañanas. *Le dice con una sonrisa*
Lara-Yo también. *Le sonríe y le da otro beso en los labios, para después dar comienzo al desayuno junto a él*
Mientras tanto, la otra parejita estaba teniendo casi la misma mañana.
Sara-¿Tus hermanos ya estarán levantados? *Preguntándole mientras se levantaba de la cama*
Leo-Seguro. *La mira y sonríe*
Sara-*Al verlo suelta una leve risita* ¿Qué pasa?
Leo-Nada, solo que, adoro despertarme a tu lado. *Le confiesa avergonzado, dedicándole una cálida sonrisa*
Sara-*Reacciona levemente asombrada al escuchar a su novio, y su pequeño sonrojo en sus mejillas se debe a aquella sonrisa que le dedicaba* Leo, ¿es en serio?
Leo-¿Por qué si no lo diría? *Preguntándole con una leve risita, se acerca a ella y la abraza por la cintura*
Sara-Es que, me parece demasiado bueno escuchar eso, y de ti. *Le admite avergonzada con una leve risita*
Leo-Me pasa igual cuando te veo a mi lado. *Le sonríe y le acaricia la mejilla*
Sara-Leo, si sigues diciendo cosas así, voy a ser la bandana de Raph en persona. *Diciéndole retórica con una risita*
Leo-Igualmente, no pararé. *Ríe leve y la besa en los labios*
Sara-*Sonríe levemente sonrojada y lo abraza por el cuello*
Leo-*Sonríe también, disfrutando de los labios de su novia*
Sara-*Como siempre hacía, se echaba hacia atrás, aterrizando de espaldas en la cama, y con su novio sobre ella, sin interrumpir el beso*
Roth-*Se detiene delante de la puerta, y la golpea levemente, tratando de captar la atención de su hija* ¿Sara, estás ahí?
Leo, Sara-*Reaccionan sobresaltados al escuchar al padre de la chica. Mirándose entre ambos, se temían que entrara, y los viera en esa posición*
Sara-¿S-si? *Preguntándole un tanto nerviosa*
Roth-Pensaba que estabas durmiendo. Bueno, te he hecho el desayuno. No tardes mucho en ir. *Diciéndole detrás de la puerta*
Sara-Vale, ya salgo. Espérame en la cocina, si quieres. *Diciéndole temerosa porque abriera la puerta*
Roth-Está bien. *Al escuchar a su hija, se aleja de la puerta, yéndose a la cocina*
Sara, Leo-*Suspiran aliviados, al escuchar cómo se alejaba de ellos*
Leo-¿Lo ves? Te dije que nos pillaría así. *Diciéndole avergonzado*
Sara-No ha llegado a entrar. *Se queda viviendo como su novio se la quedaba mirando frunciendo el ceño* Bueno, vale... *Suspira resignada, y se sienta sobre la cama* Tenemos que decírselo, pero ya.
Leo-Y al maestro Splinter también, esto no puede seguir así. *Diciéndole seriamente, aunque le aterraba la idea*
Sara-*Se pone en pie y lo mira* Tengo que hablar con Lara. No podemos esperar más, hay que decírselo ya. *Le responde igual, aunque igual de temerosa que su novio*
Leo-Yo también hablaré con Raph. *Suspira resignado*
Sara, Leo-*Ambos salen de la habitación, dirigiéndose a la cocina. Donde ahí se encontraron a los demás*
Sara-Buenos días. *Saludando con una sonrisa*
Lara-Hey, buenos días. *Le devuelve el saludo, igual que el resto*
Roth-¿Cómo has dormido? *Le pregunta con una sonrisa*
Sara-Muy bien. *Le sonríe*
Roth-Me alegro *Le sonríe* Oye, Leonardo. *Llamando al líder, tratando de captar su atención*
Lara, Raph-*Reaccionan y se quedan mirando a la tortuga, esperando la reacción de este. Pues pensaban que le iba a decir algo sobre la relación con la hija menor*
Leo-¿Si? *Preguntándole tratando de mostrarse sereno ante el padre de su novia. No quería hacer mostrar que se ponía nervioso*
Roth-No te lo dije anoche, y debo decírtelo: Estuviste impresionante, cuando salvastes a tus hermanos y tus amigos. Es fascinante tu logro, felicidades. *Le sonríe orgulloso a la vez que impresionado*
Leo-Oh, eh... Gracias, señor Cheryl. Se lo agradezco mucho. *Le agradece con una pequeña sonrisa*
Sara-*Resopla disimuladamente, pues estaba exactamente igual que su hermana y Raph*
Mikey-Alguien está un poco tenso. *Ríe levemente al susurrarle a Donnie*
Roth-¿Decís algo? *Pregunta confundido al escuchar un susurro*
Raph-Decimos que alguien está un poco contento. *Ríe levemente y golpea disimuladamente a Mikey*
Lara-Es normal, Leo logró una buena hazaña ayer. *Dice apurada por la extraña situación, tratando de arreglarla*
Leo-Bueno, tampoco es para tanto. *Ríe leve con una sonrisa*
Roth-Claro que lo es. Tú y el maestro Splinter sois increíbles. Vosotros también, claro. *Diciéndoles a los demás con una sonrisa*
Mikey-Nos ha dicho increíbles. *Repite emocionado*
Donnie-Se lo agradecemos. *Le sonríe*
Lara-Eso ya lo sabíamos nosotras, papá. *Ríe levemente*
Sara-Sí, desde luego. *Dice mirando a su novio con una sonrisa. Al ver cómo la miraba su padre, mira a otro lado disimuladamente*
Lara-Bueno he... Voy a darme una ducha, que me apetece mucho. *Dice tratando de captar la atención de su padre, ya que estaba mirando pensativo a su hermana*
Roth-Espera, Lara.
Lara-*Reacciona apurada y se detiene*
Sara-Oh, oh... *Susurra disimuladamente*
Raph-... *Mirando un tanto nervioso a su novia y a su padre*
Lara-*Le mira* ¿Si...?
Roth-¿Has desayunado? *Preguntándole inocentemente*
Raph-*Suspira aliviado*
Lara-Oh, sí, antes en la habitación.
Roth-Ah, vale. *Le responde con una sonrisa*
Lara-Bueno, voy a ducharme... Nos vemos luego. *Le sonríe un tanto incómoda. Se dirige a las duchas y suelta un suspiro aliviada. Mientras caminaba tararea contenta*
Leo-Eh... Oye, Raph, tienes que ayudarme con algo.
Raph-¿Yo? ¿Por qué? *Preguntándole confundido*
Leo-Porque es entre tú y yo. *Le susurra y lo agarra del brazo* Disculpadnos... *Le dice apurado al padre de las chicas, llevándose consigo a Raph*
Roth-... *Mirándolos confundido*
Sara, Donnie, Mikey-*Confusos miran a Roth*
Roth-¿Hm? *Los mira, notando como estos lo miraban*
Sara, Donnie, Mikey-*Disimuladamente miran a otro lado*
Los chicos se alejaron de la cocina, para poder hablar tranquilamente, y sobre todo, que sus hermanos ni el padre de sus chicas les oyese.
Raph-¿Se puede saber qué te pasa? *Preguntándole alarmado*
Leo-Tenemos que decírselo al maestro Splinter, ya. *Diciéndole claro*
Raph-¿Qué tal el año que viene? *Preguntándole retórico, ya que no le gustaba la idea de confesarle su relación con Lara*
Leo-Es en serio, Raph. Tenemos que contárselo cuanto antes al sensei. Ya hemos esperado demasiado. Y estoy seguro de que tiene ciertas sospechas. *Diciéndole pensativo, ya que estaba seguro de que la rata tenía claras sospechas sobre la relación con las chicas*
Raph-No me extraña, tú y Sara lo hacéis muy obvio. *Respondiendo retórico, cruzando los brazos*
Leo-¿Bromeas? Tú y Lara lo resaltáis aún más. *Respondiendo con la ceja arqueada*
Raph-Bueno, vale, los dos tenemos culpa. *Admite soltando un pesado suspiro* Quizá no se haya dado cuenta.
Leo-Raph, acabas de cumplir un año con Lara, y yo 6 meses con Sara. Con el tiempo que ha pasado, y lo obvio que lo hacemos notar, ¿crees que no se ha dado cuenta? *Preguntándole obvio, frunciendo el ceño*
Raph-Bueno, am... *Sin saber qué responder, baja la mirada, rascándose la nuca*
Leo-Raph, ya conoces al sensei. Los dos sabemos de que se ha tenido que dar cuenta. *Termina la frase mordiéndose un poco el labio, temeroso de incluso por pensarlo*
Raph-Vale, vale. *Respondiendo irritado, suelta un pesado suspiro* ¿Qué tal si se lo decimos cuándo esté calmado? *Preguntándole ladeando la cabeza*
Leo-¿Quieres decir ahora? *Preguntándole retórico con una leve risita*
Raph-No. Quería decir, después de meditar. Siempre es mejor acudir a él cuando termina de meditar. *Se encoge de hombros, pensando que ese sería el mejor momento*
Leo-Está bien. Y, hazte a la idea, ¿de acuerdo? *Preguntándole arqueando una ceja, pues ya se trataba del momento definitivo para confesarle a la rata sus relaciones con las chicas*
Raph-Vale, lo haré. Y, ¿qué hay del señor Cheryl? *Preguntándole con duda, él también tenía que saberlo al igual que el maestro rata*
Leo-Les dejaremos a las chicas que se encarguen de contárselo. *Respondiendo seguro con una sonrisa*
Raph-Por una vez me alegra estar de acuerdo contigo. *Respondiendo retórica con una sonrisa burlona*
El día se estaba haciendo largo, especialmente para las dos parejas. Sabían lo que les iba a esperar al final del día, por lo que hasta entonces no se librarían de aquellos nervios que dominaban todo el cuerpo.
Las chicas tomaron la decisión de irse al apartamento, para hablar ambas lo más tranquilas posible.
Lara-Oye, papá, Sara y yo nos vamos al apartamento.
Roth-¿Al apartamento, para qué? *Preguntándole con curiosidad*
Sara-Tenemos que ir a limpiar un poco. *Respondiendo con una leve risita y encogiéndose de hombros*
Roth-Puedo ir a ayudaros, si queréis. *Ofreciéndose con una sonrisa*
Sara, Lara-*Se miran entre ellas, al escuchar el ofrecimiento de su padre. Después de ambas pensar en lo mismo, lo miraron de nuevo*
Lara-Nah, nosotras dos podemos. Además, solo será un momento. *Respondiendo encogiéndose de hombros*
Sara-No será nada. *Concluye con una sonrisa*
Roth-Bueno, cómo queráis. Pero algún día tengo que subir ahí. *Diciéndole a su hija mayor, cruzándose de brazos*
Lara-Ya veremos. *Respondiendo burlona* Hasta luego. *Al despedirse, sale de la guarida junto a su hermana*
Raph-*Sentado en el sofá, viéndolas marcharse* ¿En serio nos abandonan? *Preguntándose indignado*
Leo-Sólo quieren hablar entre ellas, tranquilo. *Respondiendo sereno a su hermano, viendo como ambas chicas salieron*
Raph-Entonces, ¿nosotros deberíamos hablar también? *Preguntándole casi susurrando*
Leo-Bueno, sería acertado, dada la situación. *Respondiendo pensativo, aunque tenía claro que tenían que hablar entre ellos cómo hablar con Splinter*
Raph-Cierto. *Resignado deja salir un suspiro* Será mejor que vayamos a otro sitio, si no queremos fastidiarla en el último momento. *Se levanta, dirigiéndose al pasillo de las habitaciones*
Leo-*Siguió a su hermano, y al reunirse con él entran en la habitación del líder*
Mientras tanto, las chicas recién llegaron al apartamento.
Sara se depositó en el sofá, sentándose con las piernas cruzadas, mientras mantenía la mirada baja, reflexionando sobre la situación.
A su manera, Lara hacía lo mismo.
De pie junto a una de las ventanas del salón, los brazos cruzados, y la vista dirigida al exterior.
El silencio se apoderó de los tres minutos que ambas le daban vueltas a la cabeza, hasta que una de ellas lo rompió.
Lara-Vale, estoy harta de comerme la maldita cabeza con esto... *Diciendo resignada y agotada, dejando de cruzarse los brazos, y paseando el salón*
Sara-Estamos igual, pero hay que pensarlo bien. *Respondiendo tratando de mantener la serenidad*
Lara-Oye, sé que no fueron muchos años, pero... ¿Recuerdas cómo era papá antes de todo? *Preguntándole pensativa*
Sara-Pues... Yo recuerdo que era muy generoso, y comprensivo. Y creo recordar también que no solía enfadarse fácilmente. *Recordando pensativa, viendo cómo era su padre anteriormente*
Lara-Lo de generoso lo daría por descartado. *Respondiendo retórica, pensaba que eso se le había perdido en este tiempo*
Sara-Bueno, tal vez siga siéndolo, en ciertos casos. Pero, yo diría que sigue siendo comprensivo. *Diciendo un tanto dudosa, ladeando la cabeza*
Lara-Ojalá. Yo sólo sé que lo encuentro serio, y eso ya me da mal rollo... *Se deja caer hasta sentarse en el sofá al lado de su hermana*
Sara-Bueno, es lógico, ha estado encerrado en una prisión durante doce años... En eso lo entiendo muy bien, la verdad. *Diciendo un tanto desanimada, agarra un cojín que se encontraba a su derecha, y abrazarlo levemente*
Lara-Vale, sí, lo entiendo, y me queda claro. Yo también me he pasado estos malditos años sin total libertad, por culpa de esos hijos de... *Se interrumpe con un abrupto silencio, mordiéndose el labio para no seguir la frase. Deja salir un pesado suspiro, tratando de calmar esa tensión*
Sara-El caso es que los tres lo hemos pasado muy mal. Pero, ¿sabes qué? *Deja a un lado aquel cojín, para ponerse en pie mientras se dirigía a su hermana* Las dos estamos aquí, vivas. Y lo mejor de todo, nos ha cambiado la vida a mejor. ¿Todo gracias a quién? *Preguntándole en un tono obvio*
Lara-*Escuchando atentamente a su hermana, no dudó ni un segundo cual era la respuesta a esa pregunta* Las tortugas.
Sara-Exacto. Pero, sobre todo, las dos tortugas que nos robaron el corazón. Gracias a Leo y Raph, seguimos respirando, viviendo las dos. Incluso estamos juntos de nuevo, los tres. Eso es más que suficiente para que acepte lo que sentimos por nuestras tortugas. *Concluyendo totalmente segura*
Lara-Excelente, has dado en el clavo. Apúntatelo para decírselo a papá, con eso se lo dejamos bien clarito. *Diciendo retórica con una sonrisa*
Sara-Sí, pero yo pensaría un poco más qué decirle, por si acaso. *Respondiendo mientras se encoge de hombros*
Lara-Agh, qué ganas tengo de que pase esta tortura... *Diciendo resignada, estrujándose la cabeza*
Las chicas siguieron reflexionando, para esa tan temida charla con su padre.
De vuelta con las tortugas, Leo y Raph estaban dispuestos a terminar con aquellos nervios constantes.
A punto de entrar al dojo, ambos se quedaron frente la entrada, tratando de mantener los nervios a ralla, con la esperanza de que todo saliera bien.
Leo-*Se asoma al dojo, viendo al sensei calmado, ya que había terminado de meditar* Parece que es el momento. *Diciendo a su hermano en susurro*
Raph-Quedémonos cerca de la salida por si hay que salir corriendo... *Respondiendo retórico, suelta un suspiro tratando de calmar los nervios*
Leo-Vamos. *Manteniendo los nervios a ralla, entra al dojo junto a su hermano, ya dirigiéndose a su padre* Sensei, tenemos que hablar contigo.
Splinter-¿Hm? *Al escuchar a su hijo, le atiende* ¿Sobre qué tenéis que hablar, hijos míos?
Raph-Verás, sensei, queremos hablarte sobre las chicas, Lara y Sara. *Intentaba mantener los nervios a ralla, cosa que se hacía notar fácilmente de él*
Splinter-Bien, os escucho. *Accediendo a escuchar a sus hijos, aunque, en su mente, se veía venir de lo que se trataba el asunto*
Leo-Bueno, ya ha pasado más de un año desde que las conocemos. Y ya es momento de contarte algo importante, sensei. *Diciendo formalmente, aunque notándose cómo trataba de esconder sus nervios*
Raph-Tú las conoces casi igual que nosotros, has visto lo increíbles y fascinantes que son. Aunque, la diferencia es que nosotros dos, lo vimos en el primer momento que las conocimos... *Avergonzado se rasca la nuca, sintiendo cómo sus nervios se apoderaban de él*
Leo-El caso es que, este tiempo nos ha enseñado todo lo que son. Bueno, am... Cómo ya sabes, siempre hemos tenido la dificultad en cuanto a mostrarnos al exterior, por el mundo, que no entendería nuestra situación. A pesar de eso, Sara y Lara no solo lo entendieron, sino que, además, lo adoran. Y nosotros, no podemos estar más alegres por eso. *Dirigiéndose a su padre lo más sereno posible, aunque no siempre lo lograba*
Splinter-Comprendo. Es de entender, tratándose de una situación como la nuestra. *Respondiendo totalmente comprensivo. A él también le alegraba el hecho de que las chicas no temieran de él y sus hijos. Incluso le conmovió el recordar el tiempo que había pasado en su compañía, y no podía negar que era encantador* ¿Algo más que decirme?
Raph-Sí, sensei. Verás, a todo esto, esperemos que entiendas que... *Invadido por los nervios, mira a su hermano, recibiendo la misma mirada*
Leo-*Al notar que su hermano no podía decirlo, se tranquilizó como pudo, y confesarlo por fin* Los dos nos enamoramos... Y estamos emparejados...
Raph-Lara y yo hemos hecho hace poco un año de relación... *Confiesa totalmente nervioso, rascándose la nuca y mirando a otro lado*
Leo-Y Sara y yo hemos hecho poco más de seis meses... *Confiesa igual que su hermano, pero mirando a su padre temeroso por su reacción*
Splinter-*Se tomó unos segundos, analizando todo lo que sus hijos les acababa de confesar. Aunque, para él no era ninguna sorpresa, era fácil descubrir algo así en sus hijos. Pero no podía enfadarse con ellos, por supuesto que no. Los entendía por completo* Hijos míos, no puedo culparos en algo tan natural, como lo es el amor. Debo decir, que estoy contento y orgulloso, por el hecho de que sintáis lo que es enamorarse, y amar a quien amáis. Y por eso, os felicito. *Les dedica una sonrisa a sus hijos*
Leo, Raph-*Sin dar crédito a lo que acababan de escuchar, se miran entre ellos, compartiendo la misma expresión de asombro, y la misma confusión. Sin cambiar dicha expresión, dirigen la mirada a su padre*
Raph-Y, ¿ya está? ¿Eso es todo? *Preguntándole totalmente confundido. No daba crédito a su reacción*
Leo-No pareces sorprendido, sensei. *Diciéndole igual de confundido que su hermano*
Splinter-Vosotros mismos habéis dicho el tiempo en el que, a día de hoy, han pasado vuestras relaciones. En todo ese tiempo, sólo me ha bastado el primer día de cada uno para darme cuenta. ¿De verdad creíais que no iba a saberlo por mi cuenta? *Preguntándoles en un tono obvio, mirándoles con el ceño fruncido, y cruzándose de brazos*
Leo, Raph-*Entre ambos compartieron aquella incómoda sensación, al escuchar lo que su padre acababa de decir. Era obvio, no se podía disimular algo como esto, y mucho menos, conviviendo todos juntos. Los dos hermanos compartieron el mismo pensamiento. Al igual que notaron el pequeño enfado que su padre estaba mostrando, por el hecho de ocultar ambas relaciones durante tanto tiempo*
Leo-Lo sentimos mucho, sensei. *Respondiendo arrepentido, mientras se inclinaba mostrando su respeto y honestidad ante sus palabras*
Raph-Lo sentimos. *Actúa igual que su hermano. No quería tener que fastidiarlo en el último momento*
Splinter-*Suelta un pequeño suspiro de resignación. No podía negar que entendía a sus hijos, ya que le resultaba conmovedor en cierto modo. En realidad, estaba feliz de que a sus hijos les llegara la suerte de experimentar algo tan hermoso, como lo es amar y ser amado. Sí, no podía evitar recordar a su amada y difunta esposa, Tang Shen. Por lo que perdonó el error de sus hijos por haberlo ocultado hasta ahora. Y se dispuso a aceptar por completo la situación amorosa de sus hijos* Tenéis mi aprobación. *Concluye en un tono alegre, acompañado de una sonrisa*
Leo, Raph-*Reaccionaron alegres de escuchar a su padre. Aquellos nervios desaparecieron, y en su lugar, estaba la alegría extrema*
Leo-Muchas gracias, sensei. *Le devuelve la sonrisa, y de nuevo se inclina ante él*
Raph-Sí, gracias, maestro. *Le devuelve también la sonrisa*
Splinter-Cuando sea posible, quiero tener una pequeña charla con ellas, si no os importa.
Leo-Se lo haremos saber. *Respondiendo con una sonrisa*
Raph-No hay problema. *Respondiendo alegre*
Leo, Raph-*Ambos se dirigieron a la salida del dojo, hasta que la rata los detuvo*
Splinter-Y no penséis que os vais a librar de una conversación...íntima... *Resaltando la última palabra. Dándoles a entender que hablaría con sus hijos seriamente a cerca de las relaciones íntimas con la pareja*
Leo, Raph-*Se les paró el ritmo cardíaco al escuchar a su padre. Sabían perfectamente lo que quería decir con eso. Compartieron entre ambos una mirada llena de pánico, temiéndose lo peor*
Justo después, las chicas aparecieron por fin. Pero sin dar tiempo a los habituales saludos a sus parejas, se dirigieron a donde se encontraba su padre.
Sara-Papá, ¿tienes un momento?
Roth-Hola, hijas. Claro, para vosotras tengo todo el tiempo. *Respondiendo con una leve risita*
Lara-Genial. Tenemos que hablar contigo sobre algo importante... *Diciéndole un tanto nerviosa, mientras cruzaba los brazos*
Roth-Por supuesto. *Accede a atender a sus hijas, mostrándose un tanto preocupado* ¿Ocurre algo?
Sara-No, no es nada. Solo es algo que debes saber. *Diciendo con una leve sonrisa nerviosa*
Roth-Bueno, está bien. Adelante. *Dejando a sus hijas contarle lo tan importante que debía saber*
Sara-Bueno, verás... Sé que no es nada fácil el que hayamos estado doce años separados, pero en todo este tiempo, han pasado muchas cosas, como entenderás. *Diciéndole reflexiva*
Lara-Ya te contamos el tiempo que ha pasado desde que las dos conocimos a las tortugas. Incluso todavía nos faltan por contarte situaciones en las que nos han ayudado en las miles de ocasiones que lo hicieron, y lo siguen haciendo por supuesto. Pero esto no trata de eso. Sino de algo más...especial... *Desvía la mirada, sintiendo cómo sus nervios empezaban a notarse*
Sara-Sabemos que, después de tantos años, y que de repente nosotras estemos conviviendo con mutantes, te haya resultado un tanto complicado de asimilar. Pero, como ya he dicho, en este tiempo han sucedido muchas, muchas cosas. *Hablándole con claridad, aunque sus nervios no tardaron en aparecer*
Lara-Tal vez debimos habértelo dicho desde el principio, o incluso más adelante. Pero, con esto nos referimos a... *Sin poder decirlo, invadida por los nervios. Comparte con su hermana una mirada nerviosa*
Sara-*Suelta un suspiro, y controlando sus nervios, lo dice por fin* Las dos estamos saliendo con dos de las tortugas. Yo llevo seis meses saliendo con Leonardo... *Le confiesa bajando la mirada, avergonzada a la vez que temerosa de la reacción de su padre*
Lara-Y yo llevo un año saliendo con Raphael... *Confiesa igual que su hermana, y desvía la mirada, temiendo la reacción de su padre*
Roth-*Se tomó unos segundos tratando de asimilar las confesiones respecto a las relaciones amorosas de sus hijas con dichas tortugas. Estaba atónito, pero en realidad, se lo esperaba. Lo sabía, aquellas sospechas eran claras, fácilmente se dio cuenta* Dejarme que os diga dos cosas. Una: No me ha gustado que haya pasado más de un mes para que me lo contárais. Y dos: Ya lo sabía. *Concluye diciendo lo último en un tono serio*
Sara, Lara-*Reaccionan asombradas, y mirándose entre ambas comparten las miradas, y la misma sensación de incomodidad y sorpresa. Temerosas por la reacción de su padre, dirigen la mirada a él*
Roth-Aquellas miradas, cogeros de las manos debajo de la mesa, el comportamiento, todo. ¿De verdad pensábais que no me daría cuenta? ¿De que no lo llegaría a saber? *Preguntándoles en un tono obvio, a la vez que se mostraba serio, cruzándose de brazos*
Sara, Lara-*Miran al suelo, avergonzadas, y sin saber qué responder. Sabían que su padre tenía razón, pero no se esperaban el que ya lo hubiera descubierto*
Roth-*Suspira pesadamente, tratando de calmarse. No estaba realmente enfadado, pero sí molesto de que sus hijas creyeran que era tonto para no darse cuenta* La verdad es que, me di cuenta durante los primeros días. Pero cada día que pasaba, mis sospechas eran cada vez más acertadas.
Lara-Déjame decirte que-
Roth-No me interrumpas, Lara. *Le interrumpe, mostrándose todavía más serio*
Lara-Perdona... *Avergonzada mira al suelo*
Roth-No voy a actuar como un paranoico, ya que estoy acostumbrado a la presencia de mutantes. Pero sí quiero una explicación. Decirme los motivos, solo os pido eso. Y así podré entenderos. *Concluye dejándolas responder*
Lara-Verás, ellos han sido muy buenos con nosotras, y desde el principio. Siempre nos han ayudado en lo más difícil. Como sabrás, muestra vida ha sido una tragedia, y ellos nos siguen ayudando a arreglarla. *Diciendo reflexiva, mirándole un tanto nerviosa, pero dirigiéndose a él adecuadamente*
Sara-Por eso, y por todo lo que son y como son, nos enamoramos. Porque, de todo lo malo por lo que hemos pasado, ellos han sido nuestra luz, nuestra esperanza. Además, sino fuera por ellos, ninguno de nosotros tres estaría aquí. Todas las tortugas y Splinter nos han ayudado por completo en este tiempo. Pero, Leo y Raph son los que siempre han estado ahí, para salvarnos, y para levantarnos de nuestras caídas.
Si no nos hubieran encontrado, las dos estaríamos muertas. Y en este tiempo, pensábamos que nos robaron el corazón, pero en realidad, les pertenece. *Diciendo en tono seria, aunque expresándose con serenidad y reflexión*
Roth-*Asiente escuchando todo lo que le decían sus hijas*
Lara-Además, tú deberías saber mejor que nadie lo que es enamorarse. Cuando te enamoraste de mamá, no te importó sus defectos, o incluso su familia. Sólo querías estar con ella, pasara lo que pasara. *Hablándole igual que su hermana, pues respecto a su madre, querían que las entendieran*
Sara-Puede que fuéramos pequeñas cuando estábamos en Nueva Zelanda, pero no fue obstáculo para ver lo mucho que amabas a mamá. Ahora tú deberías hacer lo mismo, sin importar que sean tortugas, o mutantes, sin importar lo que son. Porque nosotras los amamos por completo. *Concluye seriamente, aunque mostrándose sentimental. No podía evitarlo, aunque su lado sentimental las ayudaría en este momento*
Roth-... *Se toma unos segundos, asimilando todo lo que sus hijas le habían dicho, bajando la mirada, y los brazos cruzados. Tenían razón, él mejor que nadie sabía lo que era enamorarse. Recordando con sentimientos a su difunta y amada esposa, cambió la manera de verlo. Lo entendió, logró comprender los sentimientos de sus hijas por dichas tortugas. Todavía le estaba costando asimilarlo, pero en este tiempo ha aprendido que, luchar contra sus hijas es una batalla perdida, de todas las maneras. Ahora lo veía con claridad, simplemente, es amor. El amor no requiere de entendimiento, sino de comprensión. Y recordando por todo lo que pasó con su amada esposa, lo comprendió. Levantó la mirada, y las miró con una expresión más calmada, dejando de cruzar los brazos* Felicidades, a las dos.
Sara, Lara-*Reaccionaron con sorpresa, no daban crédito a lo que acababan de oír*
Roth-Tenéis razón, en todo. No he estado todo este tiempo atrás aquí, para verlo todo. Pero, del tiempo que llevo aquí, he podido ver todo lo que decís. La verdad es que, estoy contento y aliviado de que hayáis estado sanas y salvas en todo este tiempo, gracias a ellos. Y, también estoy alegre de que Leonardo y Raphael os cuidaran por completo. Yo me enamoré de vuestra madre por todo lo que ella era, y lo especial que fue para mí. No puedo rechazaros lo mejor que me pasó en la vida, así que, lo acepto. *Concluyendo con una sonrisa*
Sara, Lara-*Sus expresiones cambian a felicidad, compartiendo entre ellas una sonrisa. Y entre ambas, celebran su mutua victoria* ¡Si!
Roth-Todavía me cuesta un poco de asimilar. Solo llevo aquí poco más de un mes, y descubro que mis dos hijas están emparejadas... *Colocándose las manos en la cintura*
Lara-Sabemos que es un poco jodido, pero lo has aceptado. Así que te aguantas. *Diciendo lo último retórica, con una sonrisita*
Sara-Ya no te puedes echar atrás. *Diciendo burlona con una sonrisita*
Roth-*Suspira resignado* Vale, vale, acepto las dos relaciones.
Sara, Lara-*Se miran con una sonrisa victoriosa, y ambas hacen un choque de puños celebrándolo*
Roth-Pero sí os pido que nos os toméis mucha libertad. Es decir, acabo de aceptarlo, no os paséis con las muestras de cariño... *Mirándolas con el ceño fruncido*
Lara-Pues así se te iría el espanto... *Respondiendo retórica*
Sara-No hay problema. *Concluyendo con una leve risita nerviosa*
Roth-Por cierto, no me gustará nada esto, pero... Vamos a tener que dar una charla sobre ciertas relaciones... *Resaltando las dos últimas palabras, con un tono un tanto serio, y mirándolas frunciendo el ceño*
Sara, Lara-*Ambas reaccionaron con sorpresa e incomodidad. Sabían que se refería a las relaciones sexuales. Una charla que, desde luego, no les gustaría pasar* ¡Papá! *Exclamando a la vez, en el mismo tono de incomodidad*
Roth-Vale, vale. Pero, pero tened cuidado, ¿de acuerdo? *Mostrándose seriamente con las dos, respecto al que tengan cuidado con lo que hacen con sus parejas en la intimidad*
Sara, Lara-*Le asentaron llenas de incomodidad. Sin tardar, se dirigieron a otra parte, escapando de la escena, aunque satisfechas de que ya no tenían que preocuparse por confesar sus relaciones amorosas con sus tortugas*
Al recuperar la normalidad, las dos hermanas fueron a hablar con Splinter, en cuanto sus parejas les comunicaron que quería hablar con ellas.
Después de un rato, las chicas terminaron de hablar con la rata.
Salieron del dojo con una sonrisa, pues la conversación había salido afortunadamente bien.
Ambos hermanos se percataron de la alegría con la que salieron del dojo sus parejas. Entre ambos compartieron una pequeña confusión, y decidieron entrar al dojo, y hablar con su padre.
Raph-Sensei, ¿cómo ha ido? *Preguntándole un tanto confuso y curioso*
Splinter-Muy bien, me ha resultado estupendo hablar con ambas respecto a vuestras relaciones amorosas. *Respondiendo con una sonrisa*
Leo-Entonces, ¿qué te parece Sara como mi novia, Sensei? *Preguntándole con una sonrisa tímida*
Raph-¿Y Lara como mi novia? *Preguntándole igual que su hermano*
Splinter-Como hemos hablado antes, en todo este tiempo, hemos tenido la oportunidad de conocerlas bien. Y, he de admitir que las dos son chicas impresionantes y maravillosas. Sara es una chica con sabiduría, llena de serenidad y bondad, además de ser muy positiva. En cambio, Lara resulta ser una chica fuerte y resistente, además de imparable cuando se lo propone. Debo decir, que tanto una como otra es totalmente adecuada para vosotros, las dos os corresponden adecuadamente. Por no hablar de que se han convertido en vuestros pilares emocionales, y eso os fortalece, emocional y psíquicamente.
Para terminar este asunto, quiero aconsejaros que no desaprovechéis esta oportunidad que os ha dado la vida. *Concluye con una sonrisa*
Leo, Raph-Hai, sensei. *Se inclinan y les sonríen tímidamente*
Un rato más tarde, el padre de las chicas salía del dojo junto a Splinter.
Ambos han estado hablando detenidamente sobre las relaciones amorosas de sus dos hijos e hijas, y de asuntos futuros.
Splinter ya no tenía nada que decir, pero sí el padre de las chicas.
Roth-Tortugas, hay algo que me gustaría deciros: El maestro Splinter y yo hemos estado hablando detenidamente. No solo aceptamos las relaciones amorosas de Leonardo y Raphael con mis hijas, sino que también, aceptamos el futuro que les espera, juntos.
Sara, Lara, Leo, Raph-*Reaccionan alegres, comparten entre ellos su alegría*
Leo-¿Es en serio eso? *Preguntando con emoción*
Splinter-*Asienta con una sonrisa
Donnie-¡Vaya! Felicidades, chicos. *Contento felicita a sus hermanos*
Mikey-¡¿Eso quiere decir qué vamos a ser familia?! *Preguntando con exclamación, lleno de emoción al caer en la cuenta*
Lara-Espera, ¿qué? *Reacciona a lo que el pecoso acababa de decir, invadiendo de rojo sus mejillas mientras miraba a su novio*
Sara-Oh... *Reacciona igual que su hermana, dirigiendo avergonzada su mirada a su novio*
Leo, Raph-*Igual de avergonzados que sus novias, se rascan la nuca, desviando la mirada*
Mikey-¡Siii! ¡Darme un abrazo! *Lleno de alegría abraza a las chicas*
Sara-Gracias, Mikey. *Suelta una leve risita tímida, y abraza a la tortuga*
Lara-Vale, vale, cálmate. *Lo abraza con una sonrisa tímida*
Raph-Esto me parece demasiado bueno para ser verdad. *Diciendo retórico, aunque alegre por la noticia*
Leo-Cierto. Señor Cheryl, entonces, ¿nos acepta? *Preguntándole tímidamente*
Roth-Bueno, me habría gustado más tiempo para conoceros bien. Pero, dada la situación, y las recientes confesiones, no quiero tener que rechazaros. Porque mis hijas así lo han decidido, y... Estoy seguro de que nadie más que vosotros las merecen. *Respondiendo con una sonrisa*
Leo, Raph-*Reaccionan emocionados por las palabras del padre de sus novias*
Roth-Por cierto, esto va por todos: Podéis dejar de dirigiros a mí como "señor Cheryl". Creo que ya tenemos la confianza suficiente para dejar a un lado las formas. *Concluye con una leve risita*
Mikey-Eres una de las personas más increíbles que he conocido nunca. *Sonríe y abraza al padre de las chicas. No podía evitar compartir su alegría y aprecio con sus abrazos*
Roth-Gracias, Michelangelo. *Sonríe y lo abraza dándole leves palmaditas en la espalda*
Raph-Bueno, ¿y ahora qué? *Preguntando encogiéndose de hombros*
Mikey-¡Yo lo sé! ¡Tenemos que montar una fiesta! *Exclama emocionado*
Sara-Suena bien. *Ríe levemente*
Leo-Bueno, la verdad es que, esto es digno de celebración. *Le sonríe y la abraza por la cintura*
Sara-Cierto. *Suelta una leve risita por la acción de su novio, y le devuelve una cálida sonrisa*
Lara-Y lo celebraremos, pero aún no, no en estos momentos. *Diciendo seriamente*
Sara-¿Qué quieres decir, Lara? *Preguntándole curiosa, por la respuesta de su hermana*
Lara-Me refiero a que, deberíamos celebrarlo en tiempos de paz. Todavía hay asuntos que atender, y me refiero a nuestros enemigos. Ángel y su mafia. *Respondiendo con seriedad*
Roth-No te preocupes por eso, hija. Acabaremos con ellos, pero será en-
Lara-No. Quiero acabar con ellos, lo antes posible. *Interrumpiendo a su padre, dirigiéndose a él con seriedad. Dirige su vista al maestro rata, y se acerca a él* Sensei, sé que todavía no soy una Kunoichi, y tal vez tampoco sea digna para serlo. Pero... Estoy dispuesta a realizar el reto espiritual. *Mostrándose totalmente decidida*
Leo, Raph, Donnie, Mikey-¡¿Qué?! *Reaccionan sorprendidos por la inesperada decisión de la pelirroja*
Sara-¿Lo dices en serio, Lara? *Preguntándole igual de sorprendida que los chicos*
Lara-Sí, hablo en serio. Quiero cumplir con el entrenamiento ninja. Y si tengo que pasar por el reto espiritual, estoy dispuesta a ello. *Concluye seriamente, con total decisión*
❇
Se viene un capítulo lleno de acción.
Así que el lunes que viene, preparad palomitas. 👌
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro