Mientras iban a casa de JungKook y TaeHyung, les contaron a las chicas lo que había pasado. No obstante, antes de llegar a casa de JungKook y TaeHyung, vieron que cientos de vampiros estaban allí.

- Dejar de joder- dijo SooBin, que se sentía muy estresado ante el hecho de que su pareja y toda su manada estuviera en peligro.

El chico levantó sus manos y, tras hacer un gesto especialmente fuerte de empujar, los vampiros salieron despedidos varios metros hacia atrás. Algunos murieron y otros se estaban levantando. Poco a poco, el chico comenzó a hacer los círculos de contención y terminó en el momento en el que vio a MiYoung bajar. Cuando vio a Kai y YoonGi, levantó sus manos y los chicos fueron atraídos hacia él.

- No me fio de esa perra- dijo y dio unos pasos al frente.

MiYoung fue a caminar hacia él pero no pudo.

- Encerrada- dijo SooBin.

- ¡ATACAD!- bramó la bruja.

Los vampiros corrieron hacia los chicos y, al momento, los rodearon, por mucho que SooBin volviera a apartarlos, éstos volvían.

- Tenemos que salir- dijo JungKook, desesperado.

- Yo voy a salir- dijo TaeHyung.

- TaeHyung, no te hablo de enfrentarnos a ella, pero sí de ayudarles. Podemos con esos vampiros y lo sabes.

JungKook cogió su escudo, se lo puso en el brazo y protegió su vientre, cogió su espada nueva y miró a TaeHyung.

- ¡Nos necesitan!

TaeHyung cogió su espada y, aunque no necesitaba escudo, lo cogió.

- No te separes de mi espalda.

Cuando abrieron la puerta y salieron, los ojos de MiYoung se salieron de sus órbitas al ver a JungKook.

- ¡Matadle!- gritó y se dirigió a JungKook.

Pero JungKook no había perdido sus habilidades en la lucha, es más, tenía la sensación de que, ahora que estaba preñado, era incluso más fuerte, porque se sentía más unido a su alfa. Con solo un movimiento de su espada, el chico atravesó a tres vampiros y, procurando no mover su mano de su vientre, continuó luchando. A su espalda tenía a TaeHyung y eso le daba aún más confianza.

- Como en los viejos tiempos, mi amor- dijo TaeHyung.

- ¿Cuándo hemos matado vampiros?- preguntó JungKook.

Los chicos giraban, se agachaban, se protegían con los escudos y mataban vampiros. JiMin, Jin, NamJoon, YoonGi, GaJoon, HaNeul, Kai y SooBin los ayudaban.

Cuando el último vampiro cayó, todos miraron a MiYoung.

- ¿Te vas a atrever a cruzar la línea?- preguntó MiYoung.

- Existe un momento para luchar y otro para no hacerlo- dijo JungKook.

- Cobarde- le provocó.

- No... hace falta más valor para quedarse aquí que para cruzar esa línea- dijo JungKook- pero soy consciente de que, si cruzo esa línea tú tendrás lo que quieres.

- ¿Por qué no te atreves...?

- Porque es lo que tú querrías- razonó JungKook.

- No capturaste a HaNeul, ni a GaJoon- dijo JiMin- solo nos hiciste creerlo para que te diéramos a JungKook... para que él se entregara.

- Incluso dudo que te hayas creído el numerito de Kai de que te va a entregar a su primogénito- dijo NamJoon- sólo estabas haciendo tiempo, querías que JungKook saliera de su casa.

- No va a ir a ti- dijo TaeHyung- no vas a tener a este cachorro- añadió, siendo cuidadoso de no revelar que eran tres en lugar de uno.

MiYoung los miró con los ojos entornados y, lentamente, SooBin fue el primero en cruzar, seguido de JiMin y NamJoon. A su espalda, Kai lo hizo junto con YoonGi y Jin. GaJoon y HaNeul se quedaron fuera con JungKook y TaeHyung.

En aquel momento, ninguno peleó, solo esperó y valoró. MiYoung parecía saber que no tenía muchas posibilidades, estaba encerrada, rodeada y habían descubierto sus planes. Su única opción era matar a SooBin. Se dirigió a él y, en el momento en el que fue a tocar su cara, el chico, con un simple movimiento de su mano, la lanzó al suelo.

- ¿Qué se siente?- preguntó JiMin.

El chico alzó la espada y, cuando iba a clavársela, la mujer levantó sus manos y JiMin cayó al suelo, gritando.

- ¡JIMIN!

TaeHyung, GaJoon y HaNeul sujetaron a JungKook para que no entrara en el círculo. Kai, por su parte, movió su mano, un mero gesto como si estuviera abofeteando el aire y MiYoung se giró bruscamente. JiMin pudo levantarse y YoonGi le miró.

- ¡Mírame! ¿Estás bien? ¿Te ha hecho algo?

- Solo... era dolor.

- Sentías dolor, pero no te estaba haciendo nada- dijo SooBin- para que pueda haceros algo, debe tocaros, recordadlo.

Jin se escabulló y se subió a un árbol. Esta vez no fallaría. NamJoon, al ver lo que Jin había hecho, sacó su espada y la dirigió a MiYoung, en el momento en el que la bruja levantó la mano, la flecha de Jin la atravesó. La mujer gritó y vio su mano indefensa. Con un movimiento de su espada, NamJoon cortó la mano de la mujer.

- Qué asco- dijo Kai, cuando vio la mano de la mujer en el suelo.

SooBin volvió a girar su mano y la mujer giró drásticamente. En aquel momento quedó claro que aquella batalla era una guerra de poder entre MiYoung y SooBin y ganaría quien tuviera más poder.

Kai, que era muy observador, movió sus manos y empujó a la bruja hacia atrás.

- ¡AUNQUE ME EMPUJES TU AMIGO NO GANARÁ!- gritó.

Kai volvió a empujarla, deseando que el resto supieran sus intenciones.

- ¡MALDITO NIÑO! ¡MATARÉ A TU AMIGO!

La volvió a empujar, mientras SooBin mantenía los poderes de la bruja a raya.

- ¡LUEGO TE MATARÉ A TI!

La volvió a empujar, sintiendo que no podía más, pero faltaba poco.

- ¡Y LUEGO MATARÉ A JUNGKOOK Y...!

JungKook, que había entendido las intenciones de Kai desde un principio, sonrió, protegió su vientre con su escudo y preparó su espada.

- ¡AGH!- gritó Kai, en un último empujón.

JungKook clavó su espada en la espalda de la bruja, atravesando su corazón y cortando sus amenazas.

- Y yo te mataré a ti- dijo el chico, empujando su espada hasta que la empuñadura chocó con la espalda de la bruja.

La mujer abrió mucho los ojos y miró hacia abajo, la gran hoja de la espada de JungKook había atravesado su pecho y aquello fue lo último que vio antes de morir.

Cuando JungKook sacó su espada del cuerpo de la bruja, esta yacía muerta en el suelo.

- Primero de entrenamiento- dijo JiMin- vigila tu espacio.

Todos se miraron.

- ¡HOSEOK!

Salieron corriendo hacia las mazmorras, pero en medio se encontraron una encarnizada batalla entre vampiros y soldados.

- No te apartes de mi- le dijo TaeHyung a JungKook.

JungKook sonrió. Que su alfa le dejara pelear era un signo de dejarle libre, a pesar de su condición. Así pues, igual que hace unos momentos, se pusieron espalda contra espalda y comenzaron a pelear. No obstante, veían que aquello era diferente, los superaban en número y cada vez venían más.

- ¡Jin! ¡Hay que acabar con los que vienen!- dijo TaeHyung.

Jin se fue hacia las azoteas, donde estaban el resto de los arqueros y comenzó a valorar la situación. El problema estaba en que no paraban de llegar.

- ¡Apuntad a los que llegan!- dijo Jin- no apuntéis a las águilas, sino a los vampiros que van encima.

Los arqueros comenzaron a apuntar a los vampiros que llegaban y estos caían antes de llegar a la batalla, pero siempre había algunos que sobrevivían a las flechas y llegaban al campo de batalla.

NamJoon, por su parte, había escogido a un pelotón de hombres, entre los que estaban BeomGyu, y los llevó a luchar al flanco izquierdo, donde llegaban los vampiros. El señor Jeon le miró, agradecido y, entre los dos, levantaron barricadas para que los vampiros no pudieran llegar hasta ellos.

JiMin, por su parte, había cogido a otro pelotón y se había unido a MinJae y estaban protegiendo el flanco derecho. TaeHyung, JungKook, YoonGi, SooBin, YeonJun y Kai protegían el frente con un grupo de soldados mientras el señor Park, con ayuda de un buen pelotón, impedían que penetraran en palacio. Mientras tanto, todos eran ayudados con la verbena del señor Bang.

Gracias a ellos, pudieron contenerlos. Pero contener al enemigo no quiere decir que pueda ser aniquilado. Cada vez que mataban un vampiro, otro aparecía. Y, cada vez, llegaban más.

- Jin, ¿cómo vas ahí arriba?

- ¡No paran de llegar!

Los halcones habían desaparecido y todos temían que hubieran muerto o se hubieran retirado.

- ¡JiHyun! ¡Da la orden! ¡Es imposible!- dijo el señor Jeon.

El señor Park le miró y asintió.

- CONVERTÍOS- gritó- SACAD A VUESTROS LOBOS Y PELEAD.

- ¡JUNGKOOK, SAL DE AHÍ!- gritó el señor Jeon- TÚ NO PUEDES CONVERTIRTE AHORA.

SooBin se puso al lado de JungKook.

- Te escoltaré a palacio- le dijo.

- Pero...

Un ruido ensordecedor le interrumpió. Todos, lobos y vampiros, se llevaron las manos a los oídos.

Miles y miles de halcones y águilas sobrevolaban los cielos y atacaban a los vampiros. Y el sonido de un cuerno y unos rugidos amenazadores les pusieron los pelos de punta.

- ¡Los tigres han venido!- dijo el señor Park.

Un millar de tigres blancos, con jinetes ataviados con túnicas a sus lomos, se acercaron.

- ¡Es mi familia!- dijo Kai, emocionado, señalándolos.

- ¡Es de mala educación señalar!- le dijo BeomGyu.

Los jinetes pisaron el suelo y, cuando un vampiro se les acercó, con un movimiento de mano, cayó al suelo y murió.

- ¡Brujos!- dijo un soldado, con miedo.

A pesar del miedo que los soldados tenían, los brujos continuaron ayudando.

- ¡LUCHAD!- gritó MinJae- ¡AÚN HAY VAMPIROS! ¡DEFENDED EL REINO!

A medida que los brujos entraban, JungKook iba adentrándose en medio del caos hasta que su espalda dio con la espalda de alguien. Asustado, se giró, pero era MinJae. El chico miró por encima de su escudo y vio la barriga de JungKook.

- ¡Estás a punto de parir! ¡Deberías estar en cama!

- ¡Tengo menos de un mes de embarazo!- dijo- eso solo... son tres.

El chico dirigió su espada a un vampiro que iba a atacar a MinJae y lo mató.

- Enhorabuena- dijo MinJae, con sequedad.

No quería saber nada de JungKook, ni de su vida de casado, tampoco de TaeHyung. Le había visto en la batalla y estaba más hermoso que nunca pero, como siempre, él solo tenía ojos para JungKook. A pesar de la distancia, su aroma le afectaba.

- JungKook ¡me asusté!- dijo TaeHyung- ¡No te vuelvas a separar de mí!

MinJae tuvo la esperanza de que TaeHyung le dijera algo, pero ni siquiera le vio, solo tenía ojos para JungKook. Mordiéndose el labio inferior, les dio la espalda y siguió peleando. Sentía a TaeHyung a su espalda y la indiferencia del alfa le dolía. Vio a un vampiro particularmente grande: esa pelea sí la ganaría.

Los tigres pasaban entre ellos, y destrozaban las piernas y los cuellos de sus oponentes, los brujos los mataban solo con un movimiento de sus manos y, en los aires, las aves acababan con los vampiros.

- ¡MinJae! ¡Cuidado!- dijo NamJoon.

JungKook se giró, MinJae peleaba duramente contra un vampiro de gran tamaño y, en circunstancias normales, ganaría, pero aquel vampiro no luchaba solo, sino que contaba con ayuda. MinJae estaba en el suelo, sangraba por la boca y parecía que le costaba respirar y moverse.

YeonJun, que era el que estaba más cerca de MinJae, no dudó en entrar en aquella batalla. En el momento en el que el vampiro olió los restos del aroma a celo del alfa, se dirigió a él. De un solo golpe, lo lanzó al suelo y YeonJun se levantó, sangrando y sintiéndose desmadejado. No pensaba dejar de luchar.

- ¡YEONJUN!- gritó JungKook- ¡JIMIN, AYÚDALE!

Tanto JungKook como TaeHyung se acercaron a él, pero la batalla era dura y los vampiros no dejaban avanzar. YeonJun recibió otro golpe y SooBin veía aquello sintiéndose impotente, trataba de llegar hasta él, no podía usar sus poderes a la distancia, arriesgándose a matar o herir a alguien.

El vampiro cogió a YeonJun del cuello y lo levantó.

- ¡NOOOOO!- gritó SooBin, histérico.

MinJae, que seguía en el suelo, logró coger su espada y sintiendo como algo se clavaba en sus pulmones, se levantó y clavó su espada en el pecho del vampiro. El vampiro cayó al suelo muerto, pero YeonJun y MinJae también cayeron al suelo, incapaces de continuar.

Un brujo se quedó junto a ellos, cuidando sus cuerpos de vampiros carroñeros.

Pronto ya solo quedaban los vampiros que estaban en la explanada y, con secos golpes de espada, murieron. Durante un momento, solo pudieron ver a los soldados rematar a los vampiros.

- ¡YeonJun!- dijo SooBin, corriendo hacia él. El chico estaba tirado en el suelo, detrás del brujo- te vas a poner bien...

- ¡Peinar los bosques!- dijo el señor Park- ¡no quiero vampiros en este reino! ¡Llevad a los heridos a la enfermería!

Todos corrieron hacia los bosques e, incluso, los tigres, halcones, águilas y brujos los ayudaron. Un soldado llevó a YeonJun a la enfermería y SooBin quiso ir con él, pero tenía que ayudar a Kai a revocar el hechizo para que YoonGi volviera a su forma original.

- ¡Hoseok!- dijo el chico.

Los chicos, incluidos los cadetes de JungKook, corrieron hacia la celda. Solo NamJoon, Jin, YoonGi y JiMin podían ver la celda.

- Tengo que estar dentro para deshacer el hechizo.

- ¡Sacaré a Hobi!- dijo Jin, emocionado- subiremos juntos.

YoonGi bajó con él y, cuando llegaron abajo, vieron al chico tumbado en el suelo.

- No...

Corrieron y abrieron la celda, le tomaron el pulso y vieron al chico sin vida.

- Jin...

Jin comenzó a tomarle el pulso. Nada.

- No puede ser, no...- y lo sintió. Muy leve, pero estaba allí, Hoseok tenía pulso- ¡está vivo!- dijo, llorando.

Le tomó en brazos y le subió.

- ¡Llamar al señor Bang!- dijo YoonGi, abriendo camino.

Jin subió con él en brazos.

- ¡Apenas tiene pulso!

Subieron a la enfermería pero estaba colapsada por los heridos de guerra. Las enfermeras iban de un lado a otro atendiendo a los enfermos. SooBin corrió hacia donde estaban YeonJun y el resto de su manada, fue con él.

- ¿Dónde está el señor Bang?- preguntó JiMin, enfadado.

JiMin, JungKook y NamJoon salieron en busca del señor Bang.

- ¡Aquí estoy!- dijo el hombre, bajando las escaleras.

- ¡Hoseok se muere!- dijo JiMin- ¡sálvelo! ¡Por favor!

El señor Bang entró en la enfermería y miró a Hoseok, le conectó a una máquina que medía su pulso.

- Se va...- dijo- necesito que os vayáis- dijo, poniéndose unos guantes.

Los chicos se fueron y esperaron. Tres cuartos de hora después, el señor Bang salió y los miró muy serio.

- ¿Está bien?- preguntó YoonGi- ¿podemos verle?

- Está... enchufado a una máquina... eso hace que su corazón lata... y pueda recibir oxígeno.

Los chicos le miraron horrorizado.

- Ha sido la única forma de estabilizarle- dijo.

- Podemos verle.

- Puede ser duro- dijo y miró especialmente a JungKook.

- Quiero verle- dijo JungKook.

Cuando entraron, Hoseok llevaba una bata de hospital, habían limpiado su cuerpo y estaba dentro de una salita de aislación.

- Si está afuera puede contagiarse o contaminarse. Al estar entubado...

La tráquea del chico estaba abierta y un tubo, conectado a una máquina lo atravesaba, otro tubo, que entraba por su boca, también estaba conectado a otra máquina.

- Hobi- dijo HaNeul.

Ella no había luchado contra los vampiros por petición de todos debido a que no sabía pelear, se había quedado en casa de JungKook y TaeHyung y, cuando GaJoon la fue a buscar, fueron juntas a la enfermería.

- ¿Fracasamos?- preguntó NamJoon, al ver a su compañero así.

El señor Jeon, que tenía heridas de lucha y estaba preocupado por los chicos y por Hoseok, había ido a la enfermería.

- Sólo si dejáis de luchar- les dijo.

Nota de autora: ahora sí, esto está llegando a su fin... no les voy a decir cuándo acabará, pero sí que lo hará pronto... y no puedo creer que esté pasando. 

Para mi era un reto personal hacer una trilogía de esta dimensión ¡Y lo he conseguido!

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Y lo prometido es deuda, les dejo un adelanto de la nueva historia que estoy escribiendo:

- Nombre: SCAR.

- Pareja: JUNGKOOK y... ¿TAEHYUNG? Ya lo entenderán, porque no es TaeHyung del todo... ahí la complejidad de la historia.

- Género: DRAMA. No va a haber nada fantástico como en esta historia.

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