Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

HERD. Capítulo XVIII

Aquella mañana se pasó bastante lenta para los chicos, no porque no quisieran trabajar, sino porque tenían otras cosas en la cabeza. NamJoon veía lo que quedaba de equipo y se sentía débil, no es que creyera que YoonGi y TaeHyung fueran su defensa ante todo, pero suponían un gran apoyo, de hecho, se sentía muy raro estar allí sin YoonGi y sus consejos, sin conversar con él. Mierda, de pronto no sabía cómo hacer esto sin él. Se llevó las manos al pelo y miró al cielo, implorando ayuda. 

Al parecer alguien escuchó sus súplicas, porque el doctor Bang llegó con una enorme sonrisa.

- Me "encontré" con el señor Jeon y me contó su idea de separaros de YoonGi y TaeHyung para que tuvierais más autonomía. 

- ¿Y le ha dicho que es una mala idea?- preguntó JungKook. 

- Oh, no, es una gran idea, en verdad. 

- ¿Por qué todo el mundo se empeña en separarnos?- preguntó JiMin, molesto. 

- No veas ésta separación como una separación de una relación amorosa- dijo el doctor Bang- no quieren eso, lo que quieren es prepararos para que, en un futuro... 

- Para que en un futuro, si se mueren, no nos pase nada a JiMin y a mi, ¿es eso? Conocemos los riesgos, gracias, y queremos aprovechar nuestro tiempo juntos- dijo JungKook. 

- Con ese pensamiento tenéis menos probabilidades de sobrevivir- dijo el doctor Bang- ¿habéis pensado en las probabilidades que hay de que os cacen?   

- Muchas- dijo JiMin. 

- Lo que pretenden evitar es esto- dijo el doctor Bang- ¿os imagináis ésta clase de comportamiento o sentimientos en medio de una misión y estando atrapados? ¿Podéis pensar en algo más que no sea estar con vuestras parejas o amigos?- todos negaron- tenéis que plantearos vuestra manada de otro modo, no sois una manada convencional.   

- ¿Qué pretende que hagamos?- preguntó NamJoon- yo ahora mismo no sé qué hacer. 

- ¿Lo sabías antes de conocer a YoonGi y TaeHyung? 

NamJoon se quedó en silencio y asintió. 

- ¿Qué harías con éste equipo? Tal como está. Imaginad que TaeHyung y YoonGi están capturados en las montañas por MinJae y tiene... no sé, nueve secuaces. ¿Cómo les salvarías? 

- Creo que seguimos siendo capaces, quiero decir- miró a Hoseok- él es muy veloz, él podría entretener a MinJae, ya sabes, marearle. JiMin y yo somos muy fuertes, JungKook es bastante escurridizo, sé que podríamos con sus secuaces. 

- ¿Y Jin? 

- Él mataría a MinJae. Eso lo tengo claro.   

- Sois capaces- dijo el doctor Bang- ahora imaginad que NamJoon está capturado con TaeHyung y YoonGi. ¿Qué haría, JungKook? 

El chico guardó silencio, concentrándose. Lo había hecho una vez, cuando salvó a TaeHyung, podía volver a hacerlo. Claro que en aquel momento no estaba tan unido tan él, pero podía hacerlo. 

- Estudiar el perímetro, el lugar y a mi enemigo- dijo, mirando el suelo e ignorando a su omega que gruñía en su interior por su alfa. Probablemente su padre tenía razón, estaban acostumbrados a estar las veinticuatro horas del días juntos- tras un pequeño estudio idearía un plan.   

- Supón que yo soy tu enemigo- dijo el señor Bang- estoy en el calabozo de palacio. NamJoon está en una celda, TaeHyung en otra y YoonGi en otra. 

JungKook asintió y pensó. 

- Eres inteligente, sé que puedes anular el alfa de TaeHyung, por tanto, también podrás anular el delta de YoonGi y el alfa de NamJoon. Lo más probable es que los tengas drogados... pero es algo que les tendrás que dar cada cierto tiempo porque, por el contrario, les matarías y muertos no te sirven. Esperaría a ese punto, ese punto donde ellos son menos débiles y tú debes suministrarles una dosis de droga. Bajaría a los calabozos y te mataría. 

El señor Bang sonrió. 

- Os dejaré practicar- dijo el doctor- pero, en verdad, no veo ningún problema. Sólo os hace falta algo de concentración. 

Aquel entrenamiento fue más silencioso de lo habitual, Hoseok intentaba, como siempre, animarlos pero se les hacía cuesta arriba. A la hora de la comida, GaJoon bajó al campo de entrenamiento para comer con ellos y, al no ver a YoonGi y TaeHyung, se preocupó. Cuando los chicos le contaron lo que ocurría, la beta se preocupó aun más. 

- Esa misión... parece peligrosa. 

- No lo pienses- dijo Jin- nosotros no lo hacemos. 

- ¿Tú tampoco?- preguntó GaJoon. 

- Si fuera yo sólo estaría preocupado, pero voy con ellos y nos están preparando incluso para lo peor. 

TaeHyung y YoonGi, por su parte, estaban malhumorados y trabajaban en las montañas. No habían comido, pero tampoco tenían ganas. Sus lobos les reclamaban la lejanía con sus parejas.  

- ¿Tú te crees que el líder Park haya ordenado que estemos aquí?- preguntó TaeHyung. 

- Si lo hubiera hecho sólo conmigo, te diría que sí, pero estando los dos... no lo sé. 

- ¡Esto pone en peligro la misión! ¡No estamos entrenando! 

- TaeHyung... ¿cómo te vas a casar, marcar a tu omega y luego vas a pasar treinta horas alejado de él? 

- No lo sé, pero para mi, JungKook está por encima de cualquier cosa y, si alguien no lo entiende, no es mi problema. La gente de ciudad no entiende sobre nuestras costumbres. No pienso poner en riesgo a JungKook.


Aquella tarde, el señor Jeon bajó a ver el entrenamiento y vio a los chicos bastante idos, pero no tanto como antes. No obstante, los ayudó y los chicos se sintieron agradecidos a pesar de que el señor Jeon se mostró duro.   

Aquella noche todos se fueron a casa bastante apesadumbrados. NamJoon le mandó un mensaje a GaJoon que, por todo lo ocurrido, no iban a salir, sin embargo, la chica decidió enviarle un mensaje a Jin diciéndole que sabía que no iban a salir y que, si él quería, podían dar un paseo los dos para que se despejara.   

- ¿Qué hago con mi existencia?- dijo Jin a Hoseok. 

- ¡Te duchas y sales con ella!- dijo el alfa- hoy todos estamos bastante tristes por la decisión de los señores Jeon y Park. Pero a esa beta le interesas. Dile que te vas a duchar y sal con ella. 

Jin hizo caso a su amigo, le mandó un mensaje a GaJoon, diciéndole que se iba a duchar y arreglar y que en una hora la veía. GaJoon fue a contestar un simple "ok" cuando reparó en que Jin tardaba una hora entera en arreglarse y ella, como chica, sólo quince minutos. 

- ¡HANEUL! ¡TE NECESITO! 

Una chica menuda, de larga melena rojiza vino corriendo. 

- ¿Qué tripa se te ha roto? 

- ¡Tarda una hora en arreglarse! 

- ¿Qué me he perdido? 

- ¡Jin! ¡El chico del que te hablé! ¡Tarda una hora en arreglarse! 

- Y eso es un problema... ¿por? 

- Porque yo tardo quince minutos... ¡seguro hago algo mal! ¡Me voy a duchar! ¡Escoge mi ropa y maquíllame! ¡Pero nada recargado, quiero parecer una señorita para él, no un putón! ¡Pero quiero ser sexy! 

- ¡Vete a duchar, yo me encargo! 

HaNeul entró en la habitación de GaJoon y abrió el armario de la chica. El drama del armario de GaJoon era bastante grande. La chica tenía un armario de tres puertas, una zona de dos puertas y luego otra independiente de una. Tenía la mayor parte de su ropa en la parte doble.   

La joven comenzó a rebuscar. GaJoon tenía unas piernas largas y no esqueléticas, por lo que unos pantalones ajustados le quedaban bien. Buscó unos de imitación de cuero. Se frotó las manos mientras miraba las camisas de su amiga. GaJoon le había dicho que quería parecer una señorita para él pero que, al mismo tiempo quería lucir sexy. Sacó una camisa blanca ancha y un cinturón que se ajustaba a la cintura. 

- ¡Ya estoy! ¿Qué me pongo? 

- Pantalones de cuero y camisa ancha ajustada a la cintura con éste cinturón. 

GaJoon se vistió y HaNeul empezó a rebuscar entre su maquillaje, algo suave, tonos rosa palo y algo de brillo ya que era una cita de noche. Le puso algo de eyeliner y un rosa fuerte en los labios.   

- ¡Veamos tus zapatos!- dijo HaNeul. 

La chica fue al armario independiente de GaJoon y lo abrió. Cuando lo hizo, una ráfaga de un perfume entró en sus fosas nasales, haciendo que se tambaleara. Un olor a chocolate amargo inundó su ser y se tambaleó. Jamás había olido algo así, algo que clama "alfa" en todo su ser. Miró aquella ropa que desprendía aquel olor, era de hombre, a juzgar por el tamaño de los pantalones y de las camisas, debía de ser un hombre alto y de hombros anchos. Tragó. 

- Háblame de Jin- pidió HaNeul- me has hablado de su personalidad, pero no de su físico- añadió, mirando una camisa. 

- Oh... pues es tan guapo- dijo GaJoon, embelesada- es tan alto como yo en tacones, es delgado pero tiene unos grandes hombros anchos que me llaman mucho la atención. Parece musculoso, pero no extremadamente. 

HaNeul mordió su labio inferior, sin duda aquella ropa y aquel olor pertenecía a Jin. Cerró la puerta del armario pero todo en ella refunfuñó. Su omega le exigía reclamar a aquel alfa.
Alfa... ¿SeokJin era un alfa? ¿De aquí a cuando GaJoon se fijaba en los alfas? 

Fue a preguntar pero la chica se adelantó, volvió a abrir el armario, sacó unos botines con tacón de aguja y se los puso. 

- ¿Voy bien? 

- Vas perfecta. 

- ¿Estás bien? Te noto extraña. 

- Creo que estoy cansada... ya sabes, tengo ganas de vacaciones, las clases... 

- ¿Cómo se comportan tus alumnos? 

- Unos salvajes. 

- ¿Quieres que me quede o que salgamos las dos? Puede pedirle a Jin que... 

- No, ve tú y diviértete. 

- ¿Seguro? Puedo llamar a... 

- No voy a ser candelabro. 

- Estoy segura de que NamJoon... 

- ¿Ya estamos otra vez?- preguntó HaNeul con una sonrisa. 

La muchacha cogió el set de maquillaje de GaJoon y comenzó a maquillarla, cuando terminó la chica había quedado muy natural. 

- ¿Qué tal estoy?- preguntó GaJoon. 

- Perfecta- dijo, tratando de simular emoción. 

GaJoon la abrazó. Miró su reloj y cogió su bolso y su abrigo. 

- ¿Qué haría yo sin ti? ¿Segura que no quieres que llame a NamJoon? Podemos estar los cuatro... 

- No te preocupes. Todo bien. 

GaJoon la volvió a abrazar y salió de allí. HaNeul fue a su habitación y se echó a llorar. Sentía como su olor se amargaba por momento. ¿Cómo era posible que su alfa fuera el mismo que el de su mejor amiga? Eso iba en contra las leyes. 

Mientras tanto, GaJoon, ajena a todo lo que le ocurría a su mejor amiga, salió a encontrarse con Jin. Encontró al chico cerca de la entrada de palacio. Iba con un pantalón ajustado vaquero negro y una camisa negra. Lucía realmente bien. 

- He pensado que podíamos ir al restaurante en lugar de al bar- dijo Jin- allí podríamos hablar con tranquilidad. 

Fueron a un restaurante bastante más tranquilo e íntimo que el bar al que solían ir. Allí se sentaron en una mesa lejos de las miradas indiscretas, aunque muchos compañeros de guardia de Jin y NamJoon no pudieron dejar de ver que la hermana de NamJoon, encargada de sastrería, estaba en una cita con SeokJin. 

Pidieron sus comidas y comenzaron a hablar de sus vidas. 

- Nunca tuve nada que ver con el reino, propiamente dicho- comentó GaJoon- mi familia es muy pobre y supongo que NamJoon tuvo suerte al juntarse con las personas adecuadas. También debo decir que, si no fueran personas, NamJoon nunca se hubiera juntado con ellos. En un principio, cuando NamJoon comenzó a hacer pequeños trabajos en el reino, yo trabajaba vendiendo dulces en la calle y el líder Park se enteró. Así que me dio un pequeño trabajo en el reino: recoger el área de costura todas las noches.   

- ¿Ese fue tu primer contacto con la costura? 

- Sí. La costurera de en aquel momento me enseño a coser y pronto empecé a hacer mi propia ropa. Cuando debía de entrar en la Universidad, estaba tan interesada en la costura, que simplemente me vine aquí y empecé a trabajar. Antes hacía vestidos estupendos para las señoras Jeon y Park, cuando tenían que ir a alguna fiesta con sus maridos, yo diseñaba sus vestidos, elegía y compraba las telas, las cortaba y les hacía los vestidos- sacó su teléfono y abrió la galería- éstos son algunos de los diseños que hice para ellas. 

Jin vio algunos diseños en terciopelo con bordados en oro, otros con algunas transparencias, otros con pantalón, en lugar de falda. Todos eran impresionantes. 

- Para mi es todo un honor poder hacer los trajes de matrimonio de JungKook y su marido. Conozco a JungKook desde hace tiempo, le tengo estima. 

- Celebro oír eso. Es un chico estupendo. Estoy feliz de que sea el omega de Tae. 

GaJoon sonrió. 

- ¿Y qué hay de ti, hombre de las montañas?- preguntó, mientras bebía un sorbo de vino. 

- Bueno, llegué a éste grupo o manada porque soy primo de Min YoonGi. 

- Curiosa persona tu primo...- dijo GaJoon. 

El chico rio de forma tan estruendosa que todos los que estaban a su alrededor los miraron e incluso la propia GaJoon le miró y rio. Podía pasar la vida escuchando aquella risa. 

- La hermana de TaeHyung estaba comprometida con el hermano de YoonGi, cuando falleció toda la familia de YoonGi, yo me fui a vivir con YoonGi porque él quedó solo y, al poco, se vino Hoseok. Hobi era amigo nuestro de la infancia, había estudiado con nosotros y, cuando supo lo de la desgracia de los Min, vino a ayudarnos. La idea inicial era que TaeHyung también viviera con nosotros, pero no pudo ser. 

- Tiene que ser muy duro para él- dijo GaJoon, empática- si fuera NamJoon... yo no sé lo que haría. Quiero decir, matar a un hermano...   

- Es una asesina. 

- Pero él pensará en los recuerdos buenos que tiene con ella y que esa hermana de esos recuerdos ya no está. Y debe de ser duro. 

- No lo había visto así- reconoció Jin- sólo pensaba en lo que ella hizo. 

GaJoon sonrió y le tomó la mano.   

- ¿Qué hacías en las montañas? 

- Trabajaba en las minas. Buscaba oro. 

- ¿En serio? 

- Sí, trabajaba en una mina bastante prolífica. De no ser porque vine aquí, no hubiera tenido problemas en seguir trabajando allí. 

Terminaron de comer y, tras el postre, salieron a la calle a dar un paseo. Se estaba haciendo tarde, pero no les apetecía separarse. Pronto no solo hablaron de su pasado, sino también de sus planes de presente, de futuro. 

- Entonces... ¿no te interesan para nada los alfas? 

- Bueno, es bastante extraño ver a un beta con un alfa. 

- ¿Y un omega? 

- Estoy interesada en un beta, en verdad- dijo la chica. 

- Oh... será muy afortunado- dijo Jin, con tristeza. 

- No sé... ¿lo eres? 

Jin la miró y la chica sonrió. No le importaba tomar las riendas si así conseguía al beta, pero si sólo conseguía su rechazo no sabía como iba a manejarlo.  

- ¿Te fijaste en mi?- preguntó Jin. 

GaJoon puso los ojos en blanco, soltó un suspiro y le besó. Jin correspondió al beso, feliz y la abrazó.   

Al día siguiente, Jin despertó en una nube, lo primero que olió que fue un aroma frutal propio de la beta que descansaba entre sus brazos. La noche la habían pasado en casa de Jin, habían hablado y se habían entregado el uno al otro. 

- ¡Buenos días!- dijo Jin, despertándola. 

La chica se estiró, sonrió y le besó. 

- Sí que son buenos, ¿qué hora es? 

- Las siete y media. No quiero ser aguafiestas, pero deberíamos levantarnos... ya sabes, trabajo. Temo que hoy también sea duro sin TaeHyung y YoonGi, además, estoy preocupado por JungKook y JiMin, no sé como habrán pasado la noche en ausencia de sus parejas. 

GaJoon le besó. 

- Eres un buen amigo. 

La chica se vistió y se dispuso a salir por la puerta. 

- ¿Te veo en media hora en casa de JiMin?- preguntó Jin. 

- Claro. ¿Puede venir HaNeul? 

- Sin problemas. 

- Es que la he dejado sola toda la noche y creo que ayer no estaba muy bien... 

- No me des explicaciones, es tu amiga, además quiero conocerla. 

GaJoon sonrió y volvió a besarle. 

- ¿Se lo decimos a los demás? 

- Yo me muero por contarlo, pero si tú quieres esperar... 

- No, no quiero. 

Ambos sonrieron, volvieron a besarse y la chica salió de allí a su casa. Iba de lo más tranquila, pensando en su relación con Jin que no pensaba demasiado en HaNeul. 

- ¡Ya llegué!- dijo, cuando llegó a casa- HaNeul, ¿sigues dormida? 

GaJoon fue hasta la puerta de HaNeul, tocó la puerta y, tras no recibir respuesta, abrió. La chica no estaba pero sí percibió un fuerte y avinagrado olor. Sin duda, HaNeul estaba muy triste por algo. Alarmada, cogió su teléfono y la llamó. 

- ¿Diga? 

El alma de GaJoon se fue a sus pies, su amiga sonaba muy triste. 

- HaNeul, he llegado ahora y... 

- Eso es que te ha ido bien con Jin... 

Por cualquier motivo no parecía feliz. 

- Eso no importa ahora, ¿dónde estás? 

- Madrugué... estoy desayunando en mi despacho en el colegio. 

- Odias desayunar allí. 

- Necesitaba caminar. 

- Porque no vuelves y desayunas conmigo y los chicos... 

- No... no es necesario... 

- Entré en tu habitación porque pensé que te habías dormido... olía agrio, como si estuvieras triste, ¿qué te tiene tan mal? 

- Supongo que... son las fechas... me pongo un poco sentimental a los días de entrar en mi celo. No es la primera vez que me pasa. 

- Pero nunca hasta este punto. Me preocupas. ¿Quieres que vaya? 

- No, no te preocupes. 

- ¿Comemos juntas? 

- No voy a poder, tengo mil exámenes que corregir. 

- Le diré a Jin que ésta noche no salgo y podríamos estar juntas... 

- Estáis juntos... si quieres mudarte con él, no es problema. Que pases un buen día. 

Sin más, la chica le colgó y GaJoon se quedó visiblemente molesta. Se duchó, se vistió con su uniforme y fue a casa de JiMin, llamó con más fuerza de la debida. 

- Pensé que eras NamJoon- dijo JiMin, que lucía unas ojeras horribles. 

- Lo siento, estoy... despistada... 

- ¿Estás bien?- preguntó JungKook, que estaba poniendo la mesa. 

- No lo sé... 

Al momento, llegaron NamJoon, Hoseok y Jin. El chico, al ver la cara de su novia, pensó que estaba así porque no quería revelar que tenían algo, así pues se abstuvo de abrazarla o besarla, no obstante, fue la propia GaJoon la que se dirigió a su hermano. 

- Jin y yo tenemos que contarte algo- le dijo- bueno, a todos. 

- ¿Qué es?- dijo NamJoon, feliz. 

- Ayer quedamos para cenar y hemos decidido empezar una relación- dijo Jin. 

NamJoon abrazó a su hermana y luego a Jin, todos los felicitaron. No obstante, aquella noticia se estaba volviendo un tanto apagada por la expresión de GaJoon. 

- ¿Qué te ocurre?- preguntó Jin- pensé que tenías algún problema sobre lo nuestro...
GaJoon les contó, mientras desayunaban, todo sobre HaNeul y lo sucedido. 

- ... os juro que ayer todo estaba genial, hablábamos, reíamos y, de pronto, se puso rara- insistió- le dije de llamarte- añadió, mirando a NamJoon- así saldríamos los cuatro, pero no quiso, terminó de ayudar a arreglarme y luego se encerró en su cuarto, decía que estaba cansada. Ésta mañana cuando llegué, ya no estaba, y su habitación tenía un olor agrio, como si estuviera triste, la llamé y achacaba todo a que pronto tendrá su celo y por eso está así. 

- No es propio de un omega estar triste antes de su celo- dijo JungKook- cada uno lo asume como puede dentro de su soltería- explicó- cuando yo estaba solo, me quedaba en casa y ya está. No me sentía mal antes del celo, sino durante. Aunque cada omega es un mundo... quizás ella esté triste por algo relacionado con su celo... quizás sepa quien es su alfa y no es correspondida... 

- Me lo hubiera contado- dijo GaJoon- si hubiera encontrado a su alfa, yo lo sabría, nos lo contamos todo. ¡Y me ha echado! 

- ¿Qué? 

NamJoon y Jin parecían desconcertados. 

- Me dijo que si quería irme a vivir ya mismo con Jin, no había ningún problema. ¡No entiendo qué he hecho mal! 

- Trata de hablarlo con ella ésta noche y, si no resulta o estás incómoda, ven a mi casa- dijo Jin- ¿te importa que venga?- preguntó a Hoseok. 

- Oh, por favor, Jin, vivimos en casas independientes, puede venir cuando quiera, además me cae bien, desde mi punto de vista, ya forma parte de la manada. 

- Y desde el mío- sentenció JiMin- y tampoco creo que haya problema por parte de YoonGi. 

- Bienvenida a la manada- dijo JungKook- tampoco creo que haya problema por parte de TaeHyung. 

- Yo no tengo que darte la bienvenida, eres mi hermana- dijo NamJoon. 

GaJoon rio. 

Aquel día, el trabajo fue más productivo para los chicos, así pues, se les hizo más rápido y menos cargado. Por parte de GaJoon se pinchó varias veces con las agujas por lo que tuvo que echarse varias veces alcohol en las manos. Finalmente, en la noche, llegó en la casa y olió el aroma avinagrado de HaNeul, la chica estaba en casa. 

- Pensé que te quedarías a partir de ahora en casa de Jin, supongo que ahora formarás parte de la manada de ellos.   

- Sí, hoy me aceptaron... 

No sabía porque, pero sólo el hecho de ser aceptada en la manada donde Jin estaba la hacía sentir culpable. 

- ¿Cómo estás? 

- Bien. 

- Sé que no. ¿Por qué no me cuentas qué te pasa o qué te ha pasado?- preguntó GaJoon- sé que ayer estábamos bien y, de pronto, fue como si te dieras cuenta de algo y ¡bam! Cambiaste. ¿Qué te pasó? 

- No es nada. Me voy a la ducha. 

La chica se fue a la ducha, odiándose a si misma. No quería tratar mal a GaJoon, pero ¿qué podía hacer ella? Le salía solo ser así de desagradable, ella compartía vida con la persona que ella amaba. ¿Cómo podía ser amable?   

Suspiró, se terminó de duchar y, sin cenar, se acostó a dormir. A la mañana siguiente no tenía hambre, se vistió y vio a HaNeul en el salón. 

- ¿Te vas sin desayunar? Ayer no cenaste... 

- No tengo hambre. 

- Pero... 

- Te veré ésta noche. 

Y, sin más, HaNeul salió de la casa rumbo a su trabajo.

NOTA DE AUTORA:

Con el tema del BangBangCon, se me olvidó actualizar, luego me puse a escribir (sí, estoy trabajando en algo nuevo) y, cuando me quise dar cuenta...

Bueno, mejor tarde que nunca!! Aquí dejo el nuevo capítulo!! Espero que les esté gustando!!

Cuidense mucho!!

NO SALGAN!!

💜💜💜💜💜💜💜


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro