|O N E|
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LA PELIRROJA MIRÓ A TRAVÉS DE sus lentes la pequeña casa al frente, su mano apretó el agarre al frío metal de la maleta que se encontraba a su lado, inspeccionaba con sus ojos toda la casa, intentando ver hasta el más mínimo defecto que tuviera.
Miró hacia su derecha viendo una casa a los lejos, era igual de pequeña, al parecer en Forks no era habitual ver casas grandes, eso lo podías ver mientras explorabas el pequeño pueblo.
Una mano se posó en su hombro de manera delicada, aun llevando una chaqueta roja, el frío se sintió igual como si llevase el hombro desnudo.
——Bienvenida a tu nuevo hogar, Eve.
Escuchó la voz de su madre, volteó un poco su cabeza para ver el corto cabello pelirrojo de su madre, sonrió para mirar nuevamente la casa.
——Un nuevo inicio, ¿Eh? ——Evelyn se alentó a sí misma para comenzar a caminar hasta el puerto de la casa escuchando la madera sonar bajo sus botas negras de tacón.
——Está un poco vieja, pero es evidente al ser la antigua casa de tu abuelo ——recalcó Jessica haciendo que la pelirroja menor asintiera con la cabeza.
La mayor de las Brown, sacó las llaves del bolso haciéndolas sonar al chocar una con las otras creando un sonido relajante para Evelyn, la cual miró como su madre introdujo la llave en el cerrojo para luego abrir la puerta.
Como si una casa sacada de una película de terror se tratase, esta sonó haciendo un molesto sonido que hizo fruncir el ceño de ambas pelirrojas.
——Se nota la antigüedad ——el tono de voz sarcástico se hizo presente en la voz de Evelyn la cual removió sus lentes de su cara.
——Las cosas bonitas son las más antiguas ——comentó Jessica adentrándose más al lugar——, ¿Te sientes muy cansada para comenzar a limpiar? ——Evelyn hizo una mueca que no pasó de desapercibido por su madre.
——Solo dejaré mis cosas en mi habitación y te ayudo ——su madre asintió satisfecha por su respuesta.
Evelyn caminó escaleras arriba tratando de no tropezar y que cayera con sus maletas encima, en ese momento se había recriminado por haber llevado tanta ropa, pero si iban a comenzar una nueva vida, entonces que sea de buena forma.
Evelyn abrió la puerta de la que se suponía que era su habitación, no era tan grande pero tampoco tan pequeña, incluso pudo notar un pequeño guardarropa en una esquina.
Se sentó de golpe en la cama haciéndola toser de inmediato por el polvo que subió de esta, dejando la maleta encima de la cama con cuidado de que no subiera más polvo, sacó un conjunto de ropa donde le fuera más cómodo que el outfit que llevaba puesto, no creía que unas botas de tacón, una chaqueta de cuero y una falda fuera lo más cómodo para hacer limpieza.
Al cambiarse bajó hasta la sala notando la silueta de una pelirroja, la cual dedujo que era su madre, dándole la espalda.
——¿Mamá? ——la mujer se volteó con una sonrisa para acercarse a la joven chica.
——¿Ya estás lista? ——preguntó con ese tono de voz tan familiarizado que solía escuchar Evelyn.
——Manos a la obra, capitana ——sonrió burlonamente escuchando una leve risa de la mayor.
El resto de la mañana y tarde se la pasaron en limpieza, era notable la diferencia que había, ahora sí se podía notar que había gente viviendo en aquella casa y el polvo era casi escaso por lo cual no tendría que preocuparse de una posible alergia por estar apegada tanto al polvo.
——Ahora necesitamos un baño ——su madre asintió a sus palabras quitándole una pelusa del cabello a la menor la cual hizo un puchero, tendría que lavarse la cabeza para quitarse el polvo de su cabello.
——Si quieres ve tu primero, pero no tardes que iremos a llenar la nevera ——informó a lo que Evelyn asintió.
Evelyn iba a caminar hacia las escaleras cuando unos golpes se escucharon en la puerta haciendo que ambas pelirrojas mirarán aquel lugar.
Jessica dejando un trapo en la mesa de la sala, caminó hasta la puerta para abrirla dejando ver a un hombre con bigote vestido de policía y una chica casi escondida a sus espaldas.
——Buenas noches ——saludó Jessica mirando a ambas personas, Evelyn caminó hacia la puerta, colocándose detrás de su madre para ver mejor a aquellas personas.
——Si, buenas noches ——saludó torpemente el policía——, somos los vecinos, íbamos a venir a presentarnos antes, pero le estaba dando un pequeño recorrido a mi hija que acaba de mudarse.
La chica detrás de él sonrió incomoda al tener toda la atención en ella, agarrando las mangas de su abrigo alargándolas tratando de tapar sus manos con ellas.
——Oh, me alegra que no lo hicieran, está casa era un desastre, pero llegaron justo a tiempo ——el tono carismático se mezcló en la voz de Jessica, haciéndose a un lado junto a Evelyn——, pasen.
El policía sonrió para alejarse y darle el pase a su hija de que entrara primero, la chica sonrió tímidamente para entrar a la casa seguido de su padre.
——Soy Charlie Swan, sheriff de este pueblo ——se presentó alzando la mano hacia la mujer más mayor.
——Jessica Brown ——estrechó su mano con la del hombre para sonreír en grande——, parece que seremos compañeros.
——Claro, usted es la mujer de intercambio ——el tono de voz de sorpresa se mezcló en sus palabras a lo que Jessica asintió.
——Así es ——confirmó la mujer para luego mirar a su hija——, preséntate, Eve.
——Lo siento, no quería interrumpir su amena conversación ——soltó una leve risa para estrechar su mano con la del hombre que aceptó gustoso——, Evelyn Brown, un gusto.
——El gusto es mío ——Charlie agitó un poco sus manos para luego separarlas y mirar a su hija.
——Soy Bella ——su voz salió en susurro, casi inaudible a lo que Evelyn asintió bajando su mano al ver que no era estrechada.
——Un gusto, Bella ——sonrió levemente viendo como la mencionada asentía con la cabeza.
——Bueno, cualquier cosa nosotros somos los de al lado ——dijo Charlie caminando hasta la salida seguido de las demás.
——Lo mismo digo, compañero ——comentó Jessica viendo como Charlie salía de la casa con su hija pisándole los talones——, fue un gusto conocerte, Bella.
——Lo mismo digo ——susurró sonriendo para caminar junto a su padre.
Jessica cerró la puerta volteando para ver a su hija pensativa, se acercó a ella para colocar su mano al hombro de la menor.
——¿Todo bien? ——preguntó Jessica a lo que Evelyn asintió.
——Si, solo pensaba que tal vez estemos en la misma preparatoria ——sonrió tranquilizando a la madre.
——Esa es una posibilidad ——susurró——, ve y date una ducha.
Evelyn asintió a las palabras de la madre para caminar hacia las escaleras de la casa y dirigirse a su habitación.
¿Por qué sentía que estaría cerca de Bella durante mucho tiempo?
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