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Capítulo 23. Irina, niños inmortales

























































Ellian saluda con la mano hacia el vehículo en donde allí se encontraban su viejo amigo Billy junto con Samuel Uley alejándose de la casa Cullen.

Suspiró algo aliviado, sintiéndose con un peso menos sobre sus hombros al haberle dicho algunas verdades de su vida a su amigo y luego de haber arreglado las cosas con el alfa de la manada.

Se adentró a la casa y cerró la puerta principal para ir hacia la sala en donde podía escuchar los murmullos del clan y de sus familiares. Apenas llegó, sus piernas se movieron involutariamente hacia el sillón en donde antes se encontraba sentado, apoyando su trasero al lado del rubio que parecía hablar por teléfono.

Frunció el ceño ante el silencio y más al ver la mueca de preocupación por parte de su sobrina que la miró buscando una respuesta cuando el rubio terminó de hablar por el teléfono, cortando para mirar a cada uno.

—Tanya convenció a Irina a que viniera a reconciliarse.— habló el rubio al terminar de colgar, llamando la atención de Ellian que lo miró confundido.

—Tal vez cambió de opinión.— habló el cobrizo, apoyado en el piano que a su lado se encontraba la pulga y la Swan parada al costado.

—¿Quién es Tanya?— preguntó con curiosidad Ellian hacia el rubio, que Carlisle volvió su atención a su compañero que muy en su interior estaba contento de tenerlo una vez más a su lado y que le haya tenido la confianza suficiente para haberlo dejado estar con él para charlar con el mayor Black.

—Es una prima.— le explicó el rubio que al ver todavía la mirada confundida del castaño, le siguió explicando.— es un clan que vive en Alaska y se alimentan de la misma manera que nosotros.

》Por eso nos gusta familiarizarnos como primos.《

—Oh comprendo...

—Estuvieron en la boda.— volvió a hablar.— ¿No las habías vistos?

—Nop.— respondió con sinceridad.

—Por supuesto que no.— habló el grandulón con una sonrisa burlona en sus labios.— si estaba muy ocupado mirándote a ti Carlisle.

Ellian lo miró con su peor cara intentando controlar sus mejillas calientes y más al escuchar la risita divertida de su acompañante de sillón.

—Tal vez...— interrumpió Esme con un tono preocupado que era abrazada por Theo.— ver a Jacob habrá sido demasiado...

—¿Por qué?— preguntó una vez más Ellian, que no se le pasó desapercibido como todos se tensaban.— ¿Qué me están escondiendo?

—Amm... bueno, tío.— comenzó con dudas.— ¿Recuerdas que un día dije que iba a ir a ver a Jacob para distraerme mientras que tú, papá y Harry miraban un partido en casa?

—Si...— le respondió entrecerrando sus ojos, escuchando como Jacob que se encontraba con ellos, tragaba saliva nervioso.— lo recuerdo.

—Bueno...— sonrió inocentemente.— te mentí.

Ellian respiró profundamente para luego exhalar y mirar con un tick en su ojo izquierdo a su sobrina.

—¿A qué te refieres con que me mentiste?

—Bueno... no fui a ver a Jacob.— susurró jugando con sus dedos.— había ido a un lugar, en el bosque, donde vamos Edward y yo...

—Adelanta tu romanticismo con el idiota de tu esposo, me dan náuseas.

—Tio.— suspiró rendida rodando los ojos.— bueno, la cosa es que... fui allí, a ese lugar en el bosque y... apareció un vampiro.

Ellian se levantó del sillón y la miró con su peor cara.

—¿Qué demonios me estas diciendo?

—Ese vampiro era pareja de una del clan Denali, Irina, donde está Tanya... De hecho ella es la líder.— ignoró e intentó explicar lo más rápido posible.— pero tranquilo... no logró hacerme nada porque apareció la manada... 

—¡Ahora lo recuerdo!— gritó indignado.— ¡Bella Swan Cullen nos mentiste a mí y a tu padre de tu ubicación! ¡Y casi pones en peligro a la manada!

》¡¿Cómo se te ocurre gritarlo a los cuatro vientos en frente de tu padre?!《

—¡Oye!— le regañó indignada.— ¡Eran gigantes! ¡Daban miedo! ¡No sabía que eran Jacob ni Sam!

—¡Si un cazador de lo sobrenatural te hubiera escuchado ni Samuel ni Jacob estarían vivos!

—Oh vamos...— habló el Black.— podemos contra simple cazadores.

—No, claramente no pueden contra ellos.— respondió de mal humor Ellian, sentándose de vuelta en el sillón, más cerca del rubio.— pero ya... es pasado.

》¿Que pasó con ese vampiro?《

—Obviamente lo destrozamos.—respondió con fanfarronería el Black.

—¿Por eso creen que esa tal Irina al ver a Jacob le hizo mal?

—En la boda se puso mal y furiosa al ver a Seth.— respondió el cobrizo.

—Ahora si comprendo.— respondió el Swan masajeando sus sienes.

—  Me hubiera gustado hablar con ella.— habló la Swan más tranquila, cruzada de brazos.

— Es familia.— sonrió Carlisle.— ya volverá.

Y la conversación se dio por terminada, para dejarse escuchar en el ambiente los sonidos suaves y delicados del piano que comenzaba a tocar el cobrizo junto con su hija. La música que estaba tocando lograba que Ellian se relajara, ya que tenía un mal presentimiento, ese presentimiento de peligro que recorre cada parte de su cuerpo pero que gracias a la melodía que tocaba su sobrina nieta lograba olvidarse de esa sensación y que sonriera contento al ver a su sobrina nieta tocar con tal maestría el piano.

Estaba tan orgulloso que sacó su celular para grabar aquel momento precioso.

Hasta que ese momento hermoso se terminó.

El estruendo de un objeto romperse contra el suelo llama la atención de todos, logrando asustar al Swan que dejó de grabar para prestar atención a la duendecilla, al notar la mirada perdida y aterrada de la vampira que era la causante de haber soltado el jarrón que tenía hace menos de un segundo en sus manos.

El Swan vio como el vampiro rubio se levantó rápidamente de su lugar y se acercó a su novia.

—¿Que sucede?

Los ojos dorados de la vampira recorrió por todo el lugar para luego mirar a su pareja y con terror susurró.

—Los Vulturi... vienen por nosotros.— susurró la duendecilla, provocando que Ellian se levantara de su lugar tenso al igual que su sabueso.— Aro... Caius... Marcus...— volvió a hablar la duendecilla.— las esposas, la guardia e... Irina...

—¿Irina?— preguntó sorprendida la matriarca Cullen, levantándose del sillón.

—Hija, ven...

Ellian se colocó al lado de sus familiares, abrazando por los hombros a Isabella y llevando una de sus manos hacia el hombro de la menor para darle seguridad y calor.

—¿Por que?— preguntó confundido el patriarca Cullen, logrando que Ellian lo mirara.

—¿Que fue lo que vio Irina?— preguntó el cobrizo hacia su mujer y al Black, provocando que el castaño dejara de mirar al rubio para clavar su mirada en el Black y su sobrina.

—Estábamos caminando...— habló la Swan.

—Ness atrapaba copo de nieves.— siguió el Black.— para Ellian.

El silencio que abordó en el ambiente provocó escalofríos al Swan, provocando que ese sentimiento de mal augurio, de peligro incrementara y que su sabueso quisiera salir a defender a su familia. Intentó calmarse pero su sabueso se removía en su interior y sus brazos se erizaron al ver cómo el rostro del esposo de su sobrina se desfiguraba de amargura.

Oh no.

—Entiendo...— susurró el lector de mentes, con pesar, clavando sus orbes en su mujer.— Irina cree que Renesmee es una niña inmortal.

—No se porqué...— susurró Ellian con irritación.— pero tengo el presentimiento que eso significa problemas... ¿Verdad?



























































—Los niños inmortales eran muy hermosos.— comenzó a explicar el patriarca Cullen mientras Ellian miraba, detrás de su sobrina, como pasaba un libro con imágenes de lo que estaba explicando el rubio.— encantadores, cautivadores... estar con ellos era amarlos...

》Pero su desarrollo se congelaba a la edad en el que cambiaban... estos se volvían descontrolados, desobedientes... un solo berrinche destruía a toda una aldea...《

—Mi sabueso creía que era uno de ellos.— susurró compresivamente Ellian.— por eso debía exterminarla.

—Los humanos escucharon de la devastación.— siguió explicando el rubio.— corrieron los rumores...

》Y los Vulturi tuvieron que intervenir.《

Bueno... me ahorran el trabajo — pensó divertido el Swan.

—Como los niños no podían proteger nuestro secreto.— continuó.— debían ser destruidos...

》Sus creadores estaban muy apegados, pelearon para protegerlos, se rompieron acuerdos de hace mucho tiempo... muchos humanos fueron masacrados...《

—Tradiciones, amistades e incluso familias perdidas.

— ¿La madre de las Denali creó un niño inmortal?— preguntó la Swan.

—Si...— suspiró el patriarca.— y pagó el precio...

Ellian tragó saliva al oír aquello último, entendiendo el terror en cada uno de ellos. Sintiendo escalofríos con tan solo pensar que vendrían a ellos por creer aquella información falsa.

—Pero Renesmee no es como esos niños.— habló confundida y con un tono molesto la Swan.— no la mordieron, ella nació de mí.

》Crece cada día.《

—Pero ellos no lo saben.— habló con pesar el Swan masajeando sus sienes al saber que estaban en problemas una vez más.— vienen para exterminar la amenaza.

》Como yo iba a hacer contigo, como dije antes, mi sabueso creía que la pulga podría sere un niño inmortal o una variante como este, un peligro para ambos mundos.《

—Y....— habló con dudas el Black.— y... ¿No pueden explicárselo a los Vulturi?

—Por desgracia hay suficientes pruebas en los pensamientos de Irina.— habló el cobrizo.

—Hay que pelear.— volvió a hablar el Black.

—Sin dudas.— afirmó el Swan mirando al rubio que había hecho una mueca llena de preocupación.

—Sus armas son muy poderosas.— habló el rubio, Jasper, llamando la atención del Swan.— nadie puede contra Jane...

—Y Alec es peor..— susurró nerviosa la duendecilla.

—¿Y ellos son?— preguntó intrigado el Swan.

—Son las dos joyas Vulturi.— le explicó el rubio.— se los conoces como los niños  brujos.

》Son sádicos y le gusta torturar a los demás. Además que cuentan con grandes dones.《

—¿Y eso son?

—Jane, puede causar dolor con solo una mirada.— le explicó Carlisle pacientemente a Ellian.— y Alec a través de sus manos que sale una especie de humo... quitarte los sentidos.

Ellian asintió con la cabeza comprendiendo y respondió.

—Cool.— miró a todos que lo miraban confundidos.— ¿Qué? Vamos, son geniales.

》Yo quiero tener esos dones.《

—Tío.. no es hora de fangirlear por súper-poderes.— intervino la Swan, decidida, ignorando el puchero del mayor para mirar a su esposo y a su nuero.— hay que convencerlos.

》Demostrarle que mi hija no es una de ellos.《

—Vienen a matarnos, no a escuchar.— habló con pesar el grandulón.

—Tienes razón.— volvió a hablar el cobrizo, moviendo sus manos con gesto de nerviosismo.— no nos escucharán...

—Entonces hay que obligarlos a que nos escuchen.— habló con firmeza el castaño, con una mirada severa.— como dice mi sobrina, hay que convencerlos.

—Pero... ¿Cómo?

—Buscando testigos.— respondió sin dudar.— buscar sanguijuelas que nos crean o sino... los obligaremos a que nos crean con golpes.

—Tío... calma tus ansias de matar.

—Si, lo siento.— susurró acariciando el puente de su nariz, cansado.— los convenceremos hablando, la pulguita puede mostrar sus recuerdos.

—Es arriesgado...— susurró con pesar Carlisle.

—No, espera...— el cobrizo miró a su padre.— podría funcionar...

》Tu tienes bastantes amigos, por todo el mundo..《

El rubio dudó ante la idea de su compañero, cuando siente la mano de su ex-esposa y mejor amiga sobre él.

—Nuestros amigos harían eso...— le habló Esme al patriarca Cullen.

Carlisle sonrió y suspiró asintiendo con la cabeza.

—Esta bien.— respondió.— les diré las ubicaciones de cada uno...





































Había pasado 24 horas de aquella visión. Ellian se encontraba parado, apoyado sobre la pared observando a través del ventanal de la habitación del rubio a su sobrina y su sobrina nieta que estaban disfrutando del día antes de marcharse a Alaska a buscar los primeros testigos.

El clan Denali.

Estaba preocupado.

Y tenso.

Lleno de dudas.

—¿Estas bien?

El castaño miró sobre su hombro encontrándose al rubio empacando varias cosas suyas en su valija para el viaje.

¿Que haría el?

No quería quedarse de brazos cruzados, ni siquiera podía ir con su hermano para esperar a los demás y quedarse solo en esa casa no le gustaba.

—No, estoy preocupado.— le respondió luego de varios segundos en silencio, mirándose a los ojos.— y estoy furioso.

》Cada vez que pienso que puedo descansar, alejarme de los problemas... ellos vienen a mí.《

—Verás que todo saldrá bien.— respondió con una sonrisa amable en sus labios, causando que Ellian también le sonriera sabiendo que solamente lo decía para poder calmarse.— nos escucharán.

—Espero que tus amigos realmente sean amigos.

Carlisle alzó una ceja intrigado ante ese juego de palabras. Ellian comprendió que sus palabras parecía tener doble intención provocando que se sonrojara y lo mirara molesto al rubio ante la sonrisa burlona en los labios del ángel.

—Quise decir que realmente sean esos amigos que te escuchan y que te creen.— refufuñó, alejándose de allí, sintiendo sus nervios incrementarse ante el silencio y la mirada burlona sobre él.— voy con Bella.

Ellian salió de la habitación rápidamente de allí, sintiendo su corazón latir rápidamente sobre sus oídos.

Estúpido ángel.

Apenas llegó al primer piso observó que todo y todos ya estaban listos. La mayoría de los Cullen tenían sus valijas para irse y buscar testigos alrededor del mundo.

Hasta Jacob Black estaba listo.

—¿Le avisaste a tu padre que te ibas a ir?

—Eh... si, claro.— sonrió nervioso ante la mirada severa del Swan.— sí, le avisé.

—Llámalo.— le ordenó, entregando su celular al menor sabiendo que mentía.— ahora.

El lobo refufuñó y agarró de mala gana el teléfono del Swan para llamar a su padre y avisarle a donde iría.

—Estaré afuera con Bella y pulguita.— le susurró al Black al verlo esperar que del otro lado lo atendiera su progenitor.

Giró sobre sus talones y salió por la puerta trasera, para ir con su sobrina y sobrinieta que sonrió al verlas jugar con unas hojas.

—¿Como están mis hermosas guerreras?

—Tío.— sonrió Bella, mientras que pulguita corrió hacia él en donde la levantó en el aire, teniéndola a upa.— ¿Todo bien?

—Estoy bien.— respondió con una sonrisa en sus labios para luego mirar a la pulga que le sonreía radiante.— ¿Emocionada porque te irás de este aburrido pueblo por unos días?

—¡Si!— chilló emocionada.— ¡Voy a conocer a familiares de papá y del abuelo!

—¡Sii!— le respondió con el mismo entusiasmo.— ¡¿Viste que tu padre no resultó tan imbécil como creía?!

—Tío Elli.— susurró la pulga con un puchero en sus labios.— no me gusta que insultes a mi papá.

—Mierda.— insultó con pesar, queriendo llorar.— llegó el momento.

》Esta bien... haré mi mayor esfuerzo para no insultarlo... por lo menos no en frente tuyo. ¿Si?《

—¡Tío!— le regañó Bella con sus manos en su cadera.

—¡Si, está bien!— estuvo de acuerdo la menor causando que Ellian sonriera victorioso.— te quiero mucho tío Elli.

—No, yo te quiero mucho, mucho, mucho más.— le besó la mejilla a la menor causando que se riera.— recuerda que no importa lo que digan los demás.

》Eres especial, eres grandiosa, fabulosa y una guerrera... como todo Swan ¿Si?《

—Si.— asintió con la cabeza con una sonrisa en sus labios.— ¿Tú te quedarás aquí tío Elli?

—Amm... por ahí vaya con Billy.— respondió con una mueca, bajandola al suelo.— para saber de tu abuelo.

—¿Y por qué no vas con Carlisle?

Ellian miró con mala cara a su sobrina que sonreía divertida a su tío, siendo imitada por su sobrinieta que comenzó a saltar y gritar que acompañara a su otro abuelo.

Malditas traidoras.

—No.— respondió frunciendo el ceño.— ¿Por qué iría con el?

—Primero, para no quedarte aquí solo como perro abandonado.— enumeró la Swan, mientras que Ellian jadeó ofendido.— segundo, para que te puedas distraer de los problemas y tercero, para proteger a mi nuero y el abuelo de tu pulguita.

》Sabes que Ness quiere mucho a su abuelo y si le llega a pasar algo, todos y más tú pulguita se pondría triste.《

》No le veo fallas a su lógica.《

Tu cállate.— le regañó mentalmente.

—¿Quién eres y que hiciste con mi sobrina?— preguntó irritado el Swan al ver las sonrisas de sus dos sobrinas.

—Sigo siendo yo.— le sonrió inocentemente.— lo que sucede es que aprendí del mejor.

Ellian bufó incómodo ante la idea de acompañar al ángel por todo el mundo, como si fueran un matrimonio en su luna de miel.

Espera...

¡¿Por qué diablos lo comparaba con eso?!

—¿Y?

—No lo sé.— rascó su nuca, incómodo y nervioso.— solamente lo atrasaría... no creo que...

—Ellian.— lo llamó el Black, acercándose a los Swan/Cullen.— aquí tienes... ya le avisé.

》Y me dijo que mi padre no iba a estar en casa en estos días...《

—¿Por qué?— preguntó confundido.— ¿A donde va?

—Oh.. irá a ver a mi hermana.— respondió.— la mayor, Rachel lo llevará.

》Iba a ir pero... bueno... voy a Alaska.《

—Ya veo.— murmuró Ellian mirando sospechosamente al Black y la Swan ya que daba mucha casualidad que justo Billy no estaría en su casa en estos momentos que más lo necesitaba.— lo voy a llamar.

Jacob rodó los ojos ante la desconfianza del Swan cuando se sorprende al mirar detrás de él.

—Samuel... ¿Que haces aquí?— le preguntó el Black, alejandose del Swan que éste giró sobre sus talones sorprendido al ver al alfa acercarse hacia ellos, que Ellian terminó de encontrarse con él junto con su sobrina mientras que la pulga fue al interior al haber sido llamada por la Barbie.

—Alice me pidió que te entregara esto.— habló el alfa Uley, entregándole un papel.

Ellian se acercó al Black y miró confundido el papel para luego mirar al alfa.

—¿Que pasó?— preguntó Ellian.

—Ella y Jasper pasaron a nuestro territorio anoche.— le respondió el Uley.

— ¿Nada más?— volvió a preguntar el Swan, cruzándose de brazos.

—Nada más.

El castaño aplanó los labios inconforme. Los ojos chocolates del Swan miraron detrás suyo como se acercaba el patriarca Cullen junto con el resto del clan. Jacob miró al rubio y le dio el papel hacia él.

Carlisle lo desdobló y leyó en silencio, pero el castaño sin necesidad de leer la nota vio con sus propios ojos como el rostro del vampiro se desfiguraba en preocupación y confusión.

—Carlisle..— lo llamó Esme.

—¿Que dice?— preguntó Theo.

—Nos dejaron.— respondió al esposo de su mejor amiga, doblando la hoja para mirar a su familia.

— ¿Por qué?— volvió a preguntar Theo.

—No dice.— respondió con pesar.

—Quiero leerlo.— habló el Swan, acercándose al rubio que éste le entregó la nota.— reúnan cuanto testigos puedan... antes de que la nieve endurezca...

》Es cuando vendrán.《

—Hay algo escrito atrás.— la voz de Bella, llamó su atención que giró el papel leyendo el título junto con unos párrafos más que decía...

》El mercader de Venecia - William Shakespeare.《

—No hay nada escrito.— respondió cortante el Swan doblando la hoja para tapar aquella zona.

—Sí había algo escrito.— respondió de mal humor la Swan exigiendo el papel.

— Solo eran círculos, garabatos sobre el título.— respondió guardando el papel en su bolsillo trasero.— no es nada importante.

—Tío...

—Bien... hay que irnos ahora.— interrumpió el patriarca Cullen, en donde la mayoría del clan, excepto  Isabella que miró enojada a su tío, desaparecieron en un parpadeo, yendo hacia el garaje.

—Vamos Bella.— susurró Edward, abrazando a su esposa por los hombros, sabiendo, de hecho todos sabían que el castaño estaba mintiendo pero sea lo que sea, no quería decirlo.

Ni siquiera él podía leer su mente.

Bella siguió a su esposo, dejando a Ellian solo con Carlisle que no se había movido de su lado.

—¿Es para preocuparse?— preguntó preocupado el rubio al ver la mirada oscura y el cuerpo tenso del castaño.

—¿Aún más? No.— respondió evitando la mirada del rubio sobre él.— no es nada de que preocuparse.

—Esta bien.— respondió sonriéndole.— confío en ti.

Ellian aplanó los labios ante aquellas palabras y vio como el rubio desaparecía en menos de un segundo, dejándolo solo. Sacó el papel y lo desdobló para leer una vez más las palabras de la duendecilla para luego girar la hoja y leer el mensaje clave que era para él.

Lo sabía.

Conocía esos círculos uno dentro del otro, junto con otros círculos en espirales alrededor del título, que para otro no sería nada más que garabatos pero para él, no lo era.

Sacó su celular de su bolsillo que lo había guardado, para abrir en notas y escribir aquel mensaje clave que consistía en varios círculos que rodeaban las letras de cada palabra del título y lo ponía en su celular formando el mensaje.

》Llama a la manada.《

Suspiró amargamente.

No quería.

No podía.

Pero su sobrina nieta estaba en peligro.

Volvió a suspirar en conflicto consigo mismo.

Miró su celular para salir del blog de notas para entrar a los contactos y buscar el contacto del único que podía confiar para esta tarea. Apretó el botón para llamarlo y llevó su celular a su oído escuchando el típico pi, pi, pi... hasta que atendió.

—Peter.









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¡LES TRAIGO ESTE CAPÍTULO PORQUE ESTOY EMOCIONADA Y ESPERO QUE USTEDES TAMBIÉN!

La mayoría estaba esperando este momentooooo.

¡¿Que les pareció?!

¡¿Les gustó?!

¡¿Emocionadas?!

¿Ahora se entiende un poco más el porqué Ellian debía matar a Ness?

¡Voten y comenten!

Las amo con todo mi corazón.

Cuídense.

Besitos.



~M.




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