OO1 | Powerful and yet a little scared
Ser el diablo no lo excentaba de preocuparse o temer, eso lo tenía bastante claro.
Cuando era pequeño pensaba que por ser quien era no tendría esas horribles preocupaciones que se adueñan de tu pecho, esas por las que los humanos no viven como desean sus cortas vidas. Veía a su padre siempre animado, nunca perturbado por lo que sea que sucediera a su alrededor y creyó que su vida sería así de fácil.
Pero no lo fue, sobretodo desde que conoció a Jimin.
Desde que su ángel aterrizó en su vida y sus brazos, Yoongi sintió en carne propia lo que es el miedo. Pánico, miedo, terror y preocupación ante cualquier cosa: que este no lo ame, que no desee reinar a su lado... Que le pasara algo por su culpa.
Si bien Jimin se había dedicado a mitigar esos miedos uno por uno, la llegada de Jisoo en circunstancias por demás de preocupantes habían desbloqueado un nuevo problema.
¿Qué pasaría si Jimin y él tuvieran un hijo en camino? ¿Estaría él sometido - aún - a las leyes de un reino que lo expulsó como a una horrible persona?
¿Podría él - aún siendo Min Yoongi, el rey del averno - darle a su primogénito la seguridad que merece?
Increíblemente Jimin voltea a mirar a Yoongi con los ojos entrecerrados. Él había desarrollado un curioso sexto sentido, dado que de alguna manera siempre percibía cuándo debía acompañar a su prometido.
- Cariño, ¿qué tienes? - Jimin se acerca a él y se sienta sobre las piernas ajenas. A pesar de que tenía su propio trono, ambos preferían permanecer de esa íntima forma.
Enrolla los brazos alrededor del cuello de Yoongi mientras este posa sus manos en su cintura.
Min le enseña una sonrisa ladeada. Mira sus ojos y reflexiona sobre una vieja historia que su madre le había contado.
Min Hyerim les relataba a Yoongi y Soyeon la misma historia en cada ocasión disponible. La disfrazaba como un cuento inventado que en la adultez descubrió como una hermosa leyenda titulada "El lazo de fuego".
Cuenta dicha leyenda que cuando el heredero al trono infernal encontrase su verdadero amor, podrán comunicarse y escucharse sin necesitar de que este le proporcione dichos poderes telepáticos.
Quizá este justamente sea el caso, y Jimin comenzaba a percibir lo que por su mente o emociones pasaba sin que se dieran cuenta.
- Nada, mi amor... Sólo no puedo evitar pensar en nuestro futuro.
Jimin se separa levemente y lo mira asustado.
- ¿Hablas de la boda? ¿Hay algo malo con eso...?
- No, claro que no... - besa fugazmente la nariz ajena y con una de sus manos quita el cabello que entorpecía la visual de su pareja - Estoy pensando si este es un mundo adecuado para nuestros hijos.
- ¿Porqué no lo sería, Yoonie?
- Minnie, Jisoo llegó aquí en un estado que prefiero no recordar... Ella y Jennie fueron perseguidas por cualquier cosa o quien sea que las haya amenazado. Tú... - hace una pausa y traga saliva - Si no te hubiese alcanzado ese día en qué caiste no sé qué...
El diablo corre la mirada, observando el fuego que coronaba esa habitación.
- Yoongi, para.
- Quiero que este sea un lugar seguro para ellos... Y para tí.
Jimin suspira. - Min Yoongi, para mi no existe un lugar en el que me sienta más protegido que aquí, ¿sabes? Sé que no es el lugar en el que crecí, pero así se siente... Aquí he hecho amigos y he permanecido junto a la persona que amo, y duermo tranquilo todos los días sabiendo que pase lo que pase nos vamos a proteger - el rey del infierno sonríe débilmente - Y tienes que aceptar ya que eso que pasó con Namjoon no fue tu culpa. No soy idiota... Sé que piensas eso, pero yo hace mucho elegí que estaría contigo con o sin consecuencias de por medio.
- Te amo, angelito.
- Y yo a tí, gatito...
Yoongi frunce el ceño.
- Te he dicho que no me digas así, Minnie... - hace un puchero.
- Y yo te dije que lo seguiré haciendo... ¿Estamos? Ahora pensemos en la boda, porque realmente necesito tu ayuda. Taehyung está volviendome loco aunque irónicamente quien se casa soy yo.
- Sabes que está así porque su bebé está a punto de nacer... - ríe Yoongi - Está más hiperactivo que nunca.
Park rueda los ojos. - Un día de estos te lo cambio por Jungkook.
- Oh, no... Eso si jamás. - niega - Te amo Minnie, pero Jungkook me ayuda a mi y sólo a mi.
- Pero Yoonie~
- Nada, "Yoonie" nada. Jungkook es el único que hace todo lo que digo y cómo lo digo...
Y eso era lo increíble de Jimin y Yoongi. No importaba qué pasara, ellos encontrarían paz en brazos del otro.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro