Llegamos al castillo, mientras Liam no para de llevarme a rastras hasta lo que parece ser su escondite secreto, su despacho, que es también la biblioteca, me gusta este lugar, quiero sumergirme en las miles de historias que seguro me atraparan y me guíaran hasta mis sueños prohibidos, así también podré ver la relevancia que puede tener mi libro en este siglo.
Se sienta en la silla, que tiene en su escritorio, que parece de madera maciza junto a su mesa grande y con varios papeles encima.

—Siéntate, que tenemos que hablar—dice tajante.

Hago lo que me pide, después de todo estoy cansada, de los nervios acumulados y que él me llevara a rastras por todo el castillo, tampoco me ayuda.

—¿Como te atreves a salir tú sola, así del castillo, para inspeccionar los alrededores sin escolta ni nadie que te proteja,es que estás loca? ¡¡eres una descerebrada!!—grita Liam al borde de un infarto.

—No me grites, no soy ninguna niña pequeña a la que regañar, ves que ya estaba huyendo cuando me interceptaste y me llevaste a hombros hasta tu caballo, señal que puedo apañármelas yo solita, no crees, además he ido hace algunos años a cursos de defensa personal con Oli, ya que una vez le robaron el bolso, con todas sus pertenencias y casi le disloca un hombro además, de pequeñas jugábamos a atarnos las manos con una cuerda, para ver quién era capaz de soltarse antes—cuento como si me entendiera.

—¡¡Que habláis mujer!!, no entiendo que cursos dices ni lo que dices.¡¡Que no ha sido para tanto!! y si te dan un golpe en la cabeza, abusan de ti y luego te dejan abandonada a tu suerte en el bosque desangrándote, ¿creés que no sería para tanto?hay muchos bastardos por los alrededores que son como carroñeros en busca de una presa, que luego disfrutan con su motín entre todos, está vez has tenido mucha suerte pero no tiene porqué haber sido así, querrías que te pasará eso ¿Es lo que quieres?— responde furioso.

—Dios mío, eso sería horrible, no es eso lo que quiero, perdóname no creí que estuviera en peligro, ni que hubiera tanta gente mala por aquí, será que soy muy confiada, aunque seguramente llegada la hora sería capaz de defenderme delante de un hombre—digo asustada.

—Dejame que lo ponga en duda, mujer, casi nos matas de un disgusto, después de que Klauss me contara que salieras con el caballo de Kendra, me puse muy nervioso debido a que ya hacía mucho tiempo que marcharas  en la yegua y aún no regresaras me temía lo peor porque pensé que te rompieras el cuello cabalgando o que te violaran unos bandidos, me alegro de que estés bien por cierto ¿dónde está la yegua?—pregunta ya más calmado.

—Eso es lo que te iba a contar, antes de que te pusieras a gritar como un animal, al parecer los que me secuestraron, ya que eran dos los que estaban al mando, eran tu antigua prometida junto a su hermano o hermanastro, ya que no lo sé con exactitud no se parecen en nada, le pareció mal a Kendra que le cogiera su caballo, dice que mientras estuvo en el clan no se lo permitió a nadie coger ni montar y se quedó con él, ¿por qué no me dijiste que el caballo que monté le pertenecía? dijo que era regalo de su hermano, hasta yo le había puesto nombre,Tormenta por lo arisca que parecía al principio, pero supe calmarla y entenderla parecía que empezábamos a ser amigas—le explico decepcionada.

—Tranquila eso lo resolveremos más adelante, ya te enseñaré más caballos, para que los puedas montar, la verdad que me pareció extraño, ya que nadie se había atrevido nunca a montar a esa yegua ya que era bastante brava, por lo que veo, tienes bastantes dotes para montar, por eso el primer día que te descubrí montada en ella me sorprendí, tienes buena mano con los caballos, parece que se fían de tí, tienes una buena conexión, lo tendré en cuenta, yo no sabía que te escaparías con él, aunque fuera para dar un paseo por los alrededores, ni que le echarás el ojo a esa yegua, pero lo hiciste realmente bien para poder volver—dice orgulloso.

Mis padres hace muchos años me llevaban a clases de equitación, gracias a eso aprendí a montar y a entenderlos, pero eso fue una corta etapa de mi vida, ya que poco después, murieron en un accidente—le cuento triste resbalándome una lágrima por la mejilla.

El se acerca hacia mí, me saca la lágrima que me estaba resbalando por la cara.

—¡Cuanto lo siento! No sabía nada, pero veo que tenemos algo más en común somos huérfanos—me dice con voz más ronca de lo normal.

Me acaricia con su mano por mi mejilla y sin más preámbulos, se acerca a mi boca y me da un beso casto y dulce en lo labios, yo me quedo paralizada al principio, pero después siento revolotear mariposas en mi estómago y me sumo al beso que al principio parecía inocente, mis pulmones me empiezan a abrasar , miles de sensaciones me atraviesan nunca me he sentido así tan viva pero tengo que parar el beso ya que no puedo  mucho más con mi autocontrol, me duele que siga sintiendo algo por Kendra e hacerme ilusiones no podría soportarlo ya que creo que me estoy enamorando de él, después de separarnos estoy muy nerviosa ya que me ha puesto como una moto, como besa este hombre, lo tendré siempre en mis pensamientos, pero de momento lo tengo que dejar estar,no quiero que piense que soy una cualquiera, aunque ya no sea virgen tengo mis principios.

—¿Estás segura que era su hermano?—pregunta con voz ronca unos minutos después del beso.

—Si estoy segura, ella me lo dijo, el hombre tenía las manos y el cuerpo parcialmente quemado, la verdad tenía una mirada siniestra, ella te echó la culpa de ello, ya que dijo que intentaste quemarlo en un incendio. ¿Eso es verdad?¿Que significa eso Liam?—pregunto sonrojada y avergonzada por el beso que nos acabamos de dar.

—Maldición, no puede ser, no pensé que Kendrick conseguiría seguir con vida después de aquel infierno, que eran las llamas en su propio castillo, todo ocurrió hace dos años, actué así por venganza, porque quería acabar con él por lo que nos hizo,  pensé que así se acabarían mis demonios pero no fue así, aún imaginándome que estaba muerto no estaba en paz, ahora resulta que no lo maté de verdad, por una parte me alegro, aunque por otro quiero que sufra, así que Kendra es su hermana, ahora entiendo la ayuda que tubo desde fuera, aunque algo me dice que hay alguna persona más involucrada, ya que sabia que yo estaría fuera y justo llegaba ese mismo día,  no puede ser casualidad, tiene que ser alguien de dentro, pero no sé quién, aunque pronto lo averiguaré, no entiendo porque justo ahora se aliaron para hacerlo ese mismo día para cogernos desprevenidos, para poder matarme, ahora querrán vengarse de mí a través de tí y no lo voy a consentir, mataré a Kendrick con mis propias manos si hace falta, para protegeros a tí y al resto de mi clan, en cuánto tenga la mínima oportunidad, por otra parte me aseguraré esta vez, de que por fin esté muerto el pobre debió sufrir bastante durante estos años por culpa de esas marcas que le provocó el incendio, pero no quiero ninguna muerte más en este clan, mientras yo esté aquí al mando—dice ofuscado.

—¿Por qué le tienes tanto odio al tal Kendrick?¿que te ha hecho?—no pareces una persona que le guste tener enemigos, ni que tenga pensamientos de venganza, al contrario me pareces buena persona y que nunca te metes con nadie—le pregunto sin entender nada mirándole a los ojos.

—Es muy doloroso para mí recordarlo, sólo te diré, que manchó el honor de mi hermana Elizabeth y a consecuencia de eso, mi querida hermana pequeña se quitó la vida y ahora está muerta, está enterrada en la zona alta del acantilado ya que le gustaba andar por esa zona decía que se sentía libre—dice consternado y lleno de dolor recordando la reciente muerte.

Lo abrazo repentinamente mientras le acaricio su mejilla ya que no me gusta verlo así mientras una descarga me invade por todo el cuerpo, nunca había sentido ésto que siento por nadie, ni siquiera esta conexión,que parece que surge entre los dos,es algo inexplicable, este hombre me tiene muy alterada y confusa.

—Vaya no sabía que habías tenido otra hermana a parte de Meredith, cuánto lo siento Liam, estaré más atenta la próxima vez y no saldré sin protección,he logrado comprender que esa gente puede llegar a ser muy peligrosa—le digo, mientras profundizo en el abrazo, nos miramos a los ojos, en ese momento me tiene hechizada, todo nuestro alrededor de me olvida y tengo la tentación de volverlo a besar otra vez, pero tengo que parar, andarme con cuidado, estamos creando una bonita conexión, no la quiero estropear, quiero que confíe en mí y como siga así, voy a acabar enamorada de él hasta la médula y no quiero volver a sufrir por desamor ya he sufrido bastante en el pasado.

—Eso es lo que tendrás que hacer, de ahora en adelante y como laird me veo en la obligación de mantener la seguridad de nuestro clan incluida la de tus amigos y por supuesto la tuya, porque Kendra ya ha intentando librarse de mi una vez, si mis sospechas son ciertas corremos peligro todos, porque lo volverá a hacer, además te han cogido de rehén, para hacerme daño, pero por suerte no ha conseguido nada, no quiero que haya otra ocasión y vuelva a pasar, no si al menos estar bien protegidos y preparados porque seguramente estarán trazando el próximo plan para acabar conmigo, por eso te propongo algo.Celebraremos un handfasting para unir nuestras almas, durante un año y un día, es para poder protegernos entre todos, el clan es muy importante para mí, se vio muy afectado por los últimos acontecimientos y necesitan algo de paz para ver que las cosas se están encauzando, así tendrán una señora a quien proteger, ellos no sabrán si vienes de algún clan muy poderoso y con esta unión pensarán que estaré cogiendo aliados, pero nosotros fingiremos estar enamorados, porque el traidor pensará que nuestra unión será para fortalecer el clan, así tambien tendremos la oportunidad de ver si Kendra sale de su escondite, con esto proporcionaremos más seguridad ante todos y se podrá establecer como un clan poderoso ante los posibles enemigos, pediré más guerreros para nuestro clan, para que nos sea más próspero de dichas junto a los nuestros. No tienes que contestarme ahora, podrás hacerlo a la hora de la cena, tendrás tiempo de consultarlo con tus amigos, para luego tomar una decisión de contestarme a la propuesta, que me veo obligado a hacer después de lo que me acabas de contar.

Se que no nos conocemos mucho aún, ni que no tenemos sentimientos hacia el otro, solo tú y yo sabremos la verdad, aunque de puertas de nuestra habitación hacia fuera fingiremos lo contrario que estamos enamorados, solo así podré protegeros a todos, se que es un decisión difícil, para mí también lo es, porque quería casarme por amor y ser correspondido, pero mi clan es lo primero, tengo la suficiente confianza para proponertelo a ti, ya que me has demostrado ser buena persona y preocuparse por las cuentas del clan, para que subsanen cuanto antes y es digno de agradecer—dice esperanzado.

Me quedo helada, como me propone semejante acuerdo, durante un año y un día, si nos acabamos de conocer, aunque por otra parte, siempre soñé con vivir en estas tierras junto a un hombre que me quisiera y me valorará por como soy, ya que nunca tuve tanta suerte con el sexo opuesto, casi siempre me dejaban ellos eso me provoco una crisis sobre mí persona, ya que pensaba que todo lo hacía mal y no me valoraba a mí misma, además todo lo que quiero lo tengo a aquí junto a mis amigos en el otro siglo no me espera nadie, mi familia está muerta, solo mi jefe, al que seguro me iba a despedir en unos días por falta de trabajo, pero eso se acabó, me levanto rápidamente y abro la puerta para ir hacia al salón, necesito desahogarme con mis amigas y tomar una difícil decisión ya que estoy hecha un lío.

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