Castillo de Eilan Donan,17 marzo 1593.

Liam

Estoy harto de estar entre estas cuatro paredes. Me voy a volver loco, digan lo que digan estás malditas mujeres, pienso salir de ésta habitación. Ésta noche, cenaré con mis hombres, así sabré como están, sobre todo quiero saber como van mis negocios, después del último altercado con esa mujerzuela. Tengo que entrenar duro, para que mi clan no vuelva a sufrir. Soy el laird. La voz de mando. Mis hombres se rigen por mi y trabajaremos duro para conseguir ser un clan invencible.

Por otro lado, tampoco me fío nada de mis hermanos. Ellos están curados ya que están bien, solo tenían unos pequeños rasguños. La peor parte me la llevé yo, ya que luche con ese enmascarado que vestía de negro. Estaba muy bien entrenado, aunque poco poco fui ganado terreno con mis artes, ya tenía la batalla ganada, pero un grito de una mujer que conocía muy bien me despistó y así pudo lograr su cometido de mal herirme en un brazo, donde tenía una herida bastante fea. Por eso, al verme algunos de mis hombres intentando protegerme, resultaron heridos. Pienso vengarme a la mínima oportunidad. Menos mal, que Kate me cuidó en todo momento, así pronto lograré reponerme casi del todo.

¿De dónde saldría ésta misteriosa mujer?. Es bastante atractiva, aunque no sé si me fijaría en ella, porque no es mi prototipo de mujer. Se la ve buena persona y tiene unos abundantes atributos. No sé si será la desconfianza de lo que me hizo Kendra, pero no sé si lograré ver dentro de una mujer, ni siquiera si la querré, ya que con el engaño que ésta me hizo, no creo que logre fiarme de una jamás. Ahora mismo solo me fio de mi hermana y mi ama de cría, ya que son de la familia y las conozco desde que nací, ellas jamás me harían una cosa así.

No se juzgar a las personas de primera mano. Me educaron para ser demasiado confiado con las personas, ya que aquí no se desconfío de nadie desde que robaron el libro. Así que tampoco voy a intentar conocer a nadie más, al menos de momento, ya que me tengo que centrar en mi clan. Ahora mismo, ya tengo bastantes problemas. Esa bruja me ha dejado casi sin ingresos, ya que también se llevó algunas reses. Lo que me sorprende, es que no llevará  también a su yegua, con lo que ella la aprecia. Aunque si me pongo a pensar, para lograr escapar, es mejor un caballo. Es mucho más veloz y si llevara a la yegua, se vería descubierta en seguida, ya que mi caballo es mucho más veloz. Estoy seguro de que volverá a por ella, tendré que estar muy pendiente, para poder darle su merecido, ya que ninguna mujer se ríe de mí. A partir de ahora, tendré que ser más desconfiado y no ser tan tonto, si quiero que los de mi clan me respeten.

Que estarán haciendo mis hermanos por el castillo, seguro que  haciendo de las suyas.¡ Son unos descerebrados!. Solo saben pensar en faldas y en decidir en cual se van a meter. ¡Son tal para cual!. En ese aspecto, somos bien diferentes. Será porque soy un poco mayor y el más maduro.

Tuve que hacerme cargo de ellos desde bien pequeños, porque mi padre murió en batalla, defendiendo al clan Mackenzie. Fue asesinado por un soldado de los MacDonald, de ahí la rivalidad con ellos durante años. Por culpa de eso, mi madre casi se vuelve loca, de hecho enfermo debido a lo débil que estaba, ya que no quería ni comer, con la tristeza que tenía. Así que al poco tiempo, murió de unas fiebres muy altas. La ama de cría, me ayudó a cuidarlos y desde aquel día, juré que defendería a mi familia por encima de todo, incluso con mi propia vida, si hiciese falta.

Mi hermana Meredith, así como supo lo acontecido en este castillo, salió de inmediato desde el que era su hogar desde hace poco, el castillo Dunnotar. Allí vive con su marido desde hace dos meses. Está pertrechado sobre una formación rocosa y al borde de un acantilado. Mi hermana está muy contenta allí, desde que se mudó a raíz de casarse con Fergus. Fue un amor trabajado por parte de él, porque ella era un espíritu libre. Tubo algún que otro susto, a raíz de las inconsciencias de ella,  porque no era propio de una dama, casarse de otro color que no fuese el blanco, pero eso fue lo que lo enamoró, según lo que dice, porque no era como las demás. Se casaron el pasado 16 de enero, en nuestro castillo, Eilan Donan. Vinieron algunos clanes vecinos y su única amiga de por aquí , con la que se crió, Rose, que no paraba de perseguirme cuando éramos pequeños, diciéndome que cuando fueramos más mayores, se casaría conmigo. Ahora sigue con el mismo cuento, no ha cambiado nada.¡ Ni hablar!. Antes me tiro del acantilado, de casarme con esa pesada. No me atrae para nada. No es mi tipo, ni la mujer que quiero que mande en este castillo. Está demasiado mimada, además de momento no quiero casarme, al menos por ahora, por la.fesilusion que lleve por culpa de Kendra. La mujer que se presentó aquí, de un día para otro, pidiendo nuestra protección de unos forajidos, para que la protegieramos. Se fue haciendo un hueco en nuestras vidas y en mi corazón. Día a día, me fue engatusando con sus atributos. Es una mujer despampanante, rubia vikinga, buenas curvas y cara de ángel. Me fui enamorando cada vez más de ella. Parecía la mujer que todo hombre desea, además era mi tipo de mujer ideal, hasta que la noche pasada, el día que anunciábamos nuestro compromiso, nos traicionó a todos, tomando la fortaleza por sorpresa junto con un clan desconocido, con un estandarte negro. Se llevó joyas, parte del dinero y saqueo el castillo llevándose también consigo, el valioso libro de nuestro clan, el que fue haciendo a lo largo de los años un druida amigo de la familia, después de ya hubieran robado el otro. Ese era como una continuación del primero, se buscó durante muchos años, pero nunca se supo nada de él y se dió por perdido. A raíz de esto, tengo a varios de mis hombres rastreando varias zonas, a ver si consiguen cazar a la "bruja nórdica". Apodo que le puse, desde que me rompió el corazón.

Por eso ahora, tengo que estar atento a todas las mujeres. No me voy a dejar engañar, ni influenciar por ninguna, por lo menos mientras vivan bajo el mismo techo. Tendrán que acatar mis órdenes. Aunque la primera impresión que me llevé de Kate fue buena. Parece buena persona es: dulce, tentadora, con su pelo castaño y sus ojos color miel. Tiene la cara surcada de pecas adorables y que me encantaría besar una a una, solo de pensarlo, ya se me pone dura, pero las apariencias engañan. Tengo que andar con pies de plomo. Además, siento que me oculta algo y eso me provoca bastante desconfianza, tendré que hablar con ella y aclarar este asunto. Necesito saber más cosas sobre ella y el sitio donde proviene. No puede volver a pasar lo mismo. A Kendra, nunca le pregunté nada en referente a su vida, ni siquiera se de dónde provenía y por culpa de eso, metí en líos al clan y no se puede volver a repetir.

Me acerco a la puerta y llamo a Bethia, la doncella que tenemos desde que éramos pequeños, que ya forma parte de la familia. Es como una madre para nosotros. Me ayudó mucho, sobre todo a sacar a mis hermanos adelante y a ser el hombre que soy ahora. Me fue guiando para llevar mejor el clan, ya que ella era íntima amiga de mi madre y sabe cómo llevar un castillo. Ella le ayudó a madre en muchas ocasiones.

Le pido que me suban una tina con agua para bañarme, ya que después quiero vestirme rápido para tener una reunión, con Fergus, mi cuñado en mi despacho. Tenemos que pensar en el siguiente plan, para conseguir dar con el paradero de esa bruja, además necesito un buen trago de whisky.

Al rato golpean a la puerta y veo como dos doncellas que no me suenan de nada, me traen una tina, mientras otra, echa el agua caliente en ella. Está humeante. Cuando se van, cierran la puerta tras de sí. No me demoro y me quito el kilt, de los colores que forma parte de mi familia desde hace muchos años y me meto en la tina. Después de estar relajandome un poco, pensando en mis cosas, salgo, me visto y antes de salir de la alcoba, me detengo mirando por la ventana.¿Pero que hace esa loca, montando la yegua que tenía antes Kendra?, es bastante salvaje. ¿Como lo habrá conseguido?. Solo Kendra podía calmarla, es un yegua desbocada y le tenía mucho cariño, no dejaba que nadie se acercase a ella.

Está preciosa, con esos mechones tocándole la cara. Tiene una sonrisa preciosa.¡ Pues sí que tiene magia!. Siento una sacudida debajo de mi kilt y salgo de la habitación, como alma que lleva el diablo, antes de que me ponga peor y vaya directamente a las cuadras para tomarla a la fuerza .

Entro en el despacho y Fergus ya me está esperando, mientras está trazando un plan sobre la mesa. No sé cuál será el desenlace, pero por como Liam MacRae me llamo, que van a responder delante del primcipe Carlos y serán castigados como se merecen, después de habernos realizado la emboscada y de traicionarme.

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Espero que os esté gustando tanto como yo inventandolo y escribiéndolo espero sus likes y comentarios,gracias😘😘😘😉