Kim Taehyung

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El estridente sonido de la alarma de mi celular me arrancó brutalmente del mundo de mis sueños, donde todo era paz y tranquilidad.
Con una pereza que parecía tener peso, saqué una de mis manos de las cálidas sabanas y tanteé  hasta encontrar mi cómoda, donde finalmente logré apagar la alarma que me torturaba. El silencio que siguió fue un alivio, pero también un recordatorio de que era hora de levantarme.

Me estiré en mi cama, bostezando al mismo tiempo, mientras el sol comenzaba a filtrarse a través de las ventanas.
Hoy era el primer día de clases y tenía que ir temprano, así que me levanté con determinación. Agarré mi toalla y entré al baño para hacer mis necesidades y bañarme, disfrutando del agua caliente que me despertaba por completo. Después de largos minutos, salí del baño sintiéndome refrescado y listo para el día, me  acerqué a mi armario y saqué un pantalón blanco, un polo del mismo color, y una chompa de color celeste que agregaba un toque de frescura a mi outfit.
Me cambié con rapidez, me peiné con cuidado, me puse mis anillos infaltables que me daban confianza, me eché un poco de perfume que me hacía sentir seguro, y finalmente me puse unas converse blancas que completaban mi look. Me miré por última vez en el espejo, ajustando mi ropa y mi sonrisa, y con una gran sensación de seguridad, bajé a la cocina, donde mis papás ya estaban desayunando y me recibieron con una cálida sonrisa

--¡Buenos días mamá y papá! — reí bajito, pues por mi grito los había asustado.

--Bebe buenos días— papá me saludo con una sonrisa.

--Cariño buenos días— mamá me saludo— siéntate para que desayunes— Asentí y me senté— ¿cómo amaneciste TaeTae?- inquirio.

--Amanecí muy bien— dije mirándolos— hoy es el primer día de clases y como todos, o buenos algunos—solté una risita—estoy emocionado— chillé, mamá puso un plato de panqueques con miel y jugo de naranja en mi sitio— gracias, se ve muy delicioso— lamí mi labio inferior y empecé a desayunar— ¿Y Beomie? — pregunté con la boca llena.

--Aún no despierta—me dice regresando a su lugar inicial.

--Hoy también es su primer día de clases— añadió mi padre.

--¿Quien no despielta?— todos llevamos nuestra mirada al pequeño cuerpito que estaba en la entrada de la cocina, Beom tenía un puchero en los labios y se frotaba uno de sus ojitos.

--Pues, un pajarito...— Papá se acercó y lo cargo— un pajarito muy bonito.

--¿Tenemos uno? — frunció el ceño confundido— ¿Dónde está?

--Negó con su cabeza--No bebe... ¿pero quieres uno?.— pregunto y a él le brillaron los ojitos de emoción.

--¡Si! Que sea un lodo — dijo muy alegre siendo sentado en unas de las sillas.

—¿Lodo?— ahora papá frunció el ceño, luego se sentó para empezar a desayunar. Yo bebí del delicioso jugo.

--Si, un lodo— se acomodó en la silla y soltó un gran bostezo.

--Es loro, Jack— Hanni río al ver el rostro de confusión de mi padre— dice Beom que quiere un loro...—repitió lo que había dicho mi dongsaeng, pero de manera correcta.

--Bien dicen que solo las mamás saben el idioma de los bebés pequeños— respondió llevando un pedazo de panqueques a su boca.

--Yo también entendí lo que había dicho Beom— dije con orgullo— pero no hablé porque tenía mucho panqueque en la boca y tenía miedo de atorarme.

--No es Justo— hizo puchero recostando su mentón en la palma de su mano— yo también quiero entender.—lleve mi vista a mi dongsaeng y luego a mi papá, eran muy parecidos.

--Poco a poco cariño— Hanni le palmeó levemente la espalda.

--Si pa...— tome de mi jugo y antes de emitir alguna otra palabra el timbre de la casa sonó— Creo que es Kook— me levante y fui hacia la puerta, escuché un, "es el novio de tete, Jungkook Hyung" de mi pequeño hermano, reí y abrí la puerta.

-¡Princesa! —y  ahí estaba él, con esa sonrisa radiante que iluminaba todo a su alrededor y esos ojos profundos que parecían ver directamente a mi alma. Me sentí abrumado por su presencia, y traté de disimular mi sonrojo desviando la mirada, pero no pude evitar sentir que mi corazón latía con fuerza en mi pecho.

--Kookie hola— me rasque la parte trasera de mi cuello muy nervioso.

--¿Ya estás listo? — pregunto— Ay Jungkook pero que pregunta para más tonta, es obvio que TaeTae ya está listo— se respondió el mismo.

--Sonreí sin mostrar los dientes— Si, ya estoy listo, bueno iré por mi mochila— señale hacia las escaleras.

--Te espero princesa.

Asentí con una sonrisa nerviosa y huí rápidamente hacia mi habitación, donde tomé mi mochila y me aseguré de que tenía todo lo necesario para el primer día de clases. Me volví a mirar en el espejo, ajustando mi ropa y mi peinado, y me di un último vistazo para asegurarme de que me veía bien. Luego, bajé las escaleras, me acerqué a mis papás y hermanito, y los abracé fuerte, saboreando el calor y el amor de ese momento.
Finalmente,  bajé.

--Estás guapo.—comenta mirándome de arriba hacia abajo.

>>Carajo, no te sonrojes, no te sonrojes<<

--Gr-Gracias Kookie— desvíe mi mirada, odiaba balbucear— tú también estás muy guapo, siempre lo estás— le aseguro.

--Por respuesta me sonrió, luego abrió la puerta de su auto, exactamente la del copiloto— sube TaeTae— hice caso y luego el rodeó el auto para subirse— estuve revisando mi horario y tenemos dos clases juntos— comentó con su vista clavada hacia el frente.

Les cuento, mi mejor amigo está sumergido en el mundo del diseño gráfico, mientras que yo me apasiono por la fotografía, especialmente en la rama de la moda. Me encanta capturar la belleza y la elegancia a través de mi lente, y espero poder convertirme en un fotógrafo de moda reconocido algún día.

— Si, también lo revisé, tenemos desarrollo personal y diseño digital— asiento moviendo la cabeza y apretando mis labios.

--Tenemos a la tercera y cuarta hora— asentí nuevamente— ¿ahora qué curso tienes? — inquiere.

--Tengo proyecto visual II— respondí— ¿y tú? – lo mire curioso.

--Ilustración— volví a asentir, y después de ello, ninguno de los dos volvió a hablar. El silencio que siguió fue cómodo y familiar, como si ambos estuviéramos disfrutando de la compañía mutua sin necesidad de palabras. El tiempo pasó volando, y alrededor de quince minutos después, llegamos a la universidad. Jungkook se estacionó en un lugar estratégico y ambos bajamos del auto, estirando nuestras piernas y tomando una profunda bocanada de aire fresco.

--Gracias por traerme Kook— peinó mi cabello con mis largos dedos.

--No hay de princesa— me sonrió tan bonito como siempre lo hacía. Solté un suspiro sin darme cuenta.

Justo cuando iba a responderle, una voz familiar y querida me hizo callar. Me detuve y miré a mi alrededor, y mi corazón saltó de emoción cuando lo vi. Sonreí de oreja a oreja, sintiendo una alegría incontenible al ver su rostro sonriente y sus ojos brillantes.

--¡Tata! —exclamó, acercándose a nosotros a pasos muy rápidos, con una sonrisa radiante en su rostro— Jungkookie— nos saludó agitando su mano con entusiasmo.

--Minie—  nos abrazamos muy fuerte, como si no quisiéramos soltarnos nunca. --Te extrañé— dije, haciendo un puchero.

--También te extrañé, Tata— nos separamos del abrazo, pero nuestros ojos seguían brillando de felicidad— ¿Cómo están, chicos? —preguntó, mirándonos con interés y sonriendo, como si realmente estuviera ansioso por saber sobre nuestras vidas. Su mirada se desplazó entre Jungkook y yo, como si estuviera absorbiendo cada detalle, cada sonrisa, cada gesto.

--Yo estoy muy bien— respondió Jungkook con una sonrisa.

--Yo igual— le seguí— ¿y tú? — inquirí acariciando sus regordetas y bonitas mejillas.

--Igual, estoy bien—me miró con una sonrisa pícara— Espero estar con el amor de mi vida este año—me guiñó el ojo, y yo sonreí cómplice, sabiendo perfectamente de quién hablaba.

--Seguro que así será, Minie—dije con una sonrisa confiada, mientras nos encaminábamos hacia la cafetería de la universidad, rodeados del bullicio y la energía de los estudiantes— Por cierto, Kook... ¿y Namjoon Hyung?—pregunte cambiando de tema con curiosidad,

--El salió más temprano que yo—explicó Jungkook, mientras nos sentábamos en una mesa comoda de la cafetería, rodeados del aroma a café— Dijo que iba a ver a su novio—agregó con una sonrisa, y Taehyung  asintió con la cabeza,

--Ah, a Jin Hyung.

--Asintió--Ujum...— sacó unas gomitas de su mochila.

--Es muy temprano para comer dulces Kookie— lo regañe, entrecerré mis ojos— así que guárdalas y las comes más tarde. — señale su mochila.

--Pero yo q...—

--Lo interrumpí-- Pero nada—me cruce de brazos.

-Princesa...— hizo un puchero mirándome con ojitos de cachorro, pero no iba a ceder. Ahora no.

—Ustedes parecen novios—dijo Jimin de repente, y de inmediato sentí que mis mejillas se calentaban como si estuvieran en llamas. Me quería meter debajo de la mesa, o mejor aún, huir del lugar y esconderme en los baños hasta que el bochorno pasara.

--Somos mejores amigos—dijo Jungkook, abrazándome fuerte y sonriendo con cariño— Muy mejores amigos—repitió, y dejó un beso suave en mi mejilla, enviando un escalofrío de felicidad por mi cuerpo. Me miró con ojos brillantes y añadió— ¿Verdad, princesa?—su voz era dulce , y pude sentir mi corazón saltar de emoción al escuchar ese apodo especial que solo él me daba.

—Suspiré profundamente, tratando de ocultar el torbellino de emociones que se agitaban en mi interior— Sí, solo eso, mejores amigos—dije, forzando una gran sonrisa en mi rostro, como si todo estuviera bien, como si mi corazón no estuviera latiendo con una emoción que no podía admitir.
Mi sonrisa se sentía como una máscara, una barrera entre mi verdad y el mundo exterior, pero esperaba que fuera lo suficientemente convincente para engañar a los demás... y tal vez incluso a mí mismo.

--Taehyung y yo también somos mejores amigos, pero no nos trámanos así— respondió arqueando sus cejas y robándole gomitas a Jungkook— ¡Auch! — se quejó al recibir un manotazo en su mano.

--Mis gomitas— hizo énfasis en "mis"

--Jimin rodó los ojos e hizo una mueca— Bueno como decía, TaeTae y yo somos mejores amigos y a mí no me trata como a ti— soltó y luego me miro mal— tienes preferencias Kim Taehyung—se cruzó de brazos indignado, sus labios abultándose.

--Los quiero por igual—dije, rasqueteándome el codo con incomodidad— ¿Qué te toca ahorita?—le pregunté apresuradamente, cambiando de conversación con la esperanza de desviar la atención de mis sentimientos. Y gracias al cielo, funcionó.

--Tengo proyecto visual II— respondió Jimin recostando sus codos en la mesa mirándome intensamente.

--Tenemos esa clase juntos— dije muy emocionado.

--Creo que también tenemos, lenguajes artísticos— sacó una hoja de su mochila y leyó lo que había en esta-- estadística para comunicadores— culmino y luego volvió a guardar la hoja-

--Asentí, Jimin estudiaba Marketing— ¿solo dos clases? — hice puchero, yo quería estar más tiempo con él.

--Si— también hizo un puchero, triste.

El timbre sonó, cortando nuestra conversación y anunciando el inicio de las clases. Los tres nos levantamos de la mesa, estirando nuestros brazos y echando un último vistazo al lugar.

--Los veo más tarde— dijo Jungkook colgando su mochila en su hombro— cuídate princesa y cuídate Jiminssi.

--Nos vemos Kookie. — agite mi mano en forma de despedida.

--Adiós Juan koko— Jimin se metió otra de las gomitas que le había robado de escondidito a Jungkook a la boca.

--Muchas novelas ves— soltó una suave carcajada que fue música para mis oídos — bueno ahora sí, me voy.

Se despidió con un gesto informal, alzando la mano en un adiós rápido, y luego vi su figura desaparecer entre la multitud de alumnos que llenaban el pasillo. Jimin y yo nos dirigimos a nuestro salón, E15, sumergiéndonos en el mar de caras conocidas y desconocidas.
Llegamos y nos sentamos juntos, ocupando nuestros asientos habituales, mientras esperábamos a que la profesora entrara. Para matar el tiempo, hablábamos de cosas triviales, de nada en particular, pero disfrutando  del momento.

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Jeon Jungkook

Me despedí de mis mejores amigos y luego me dirigí a mi salón con pasos rápidos, Llegué al aula y di un suspiro de alivio al ver que la profesora aún no había llegado, lo que me daba un momento de respiro para recobrar mi compostura.

--¡Oh Jungkook! — levantó la mano indicándome que me acercara y así lo hice.

--Jack...— me senté a su lado— ¿Qué hay de nuevas? — puse mi mochila sobre la mesa.

--Pues de buenas nada— sonrió mirándome — ¿tú, que te cuentas?

Me encogí de hombros, la verdad era que hasta ese momento nada fuera de lo común había sucedido. La rutina diaria parecía haberse apoderado del día. Pero entonces, alrededor de diez minutos después, la profesora llegó y comenzó a dictar su clase con entusiasmo. Saqué mi cuaderno y comencé a apuntar todo lo que creía necesario, tratando de concentrarme en las palabras que salían de su boca.

Finalmente, después de dos largas horas que parecieron eternas, la clase se dio por terminada y pude exhalar un suspiro de alivio.

--Tenemos desarrollo personal— dijo Jackson guardando sus cosas en su mochila, yo asentí a lo dicho— ¿sabes dónde queda el salón?

--La verdad no— colgué la mochila en mi hombro— deja y pregunto-- el pelinegro asintió, saqué mi celular y entré al chat de mi mejor amigo.

Jk

princesa, ¿sabes en qué salón tenemos la siguiente clase?✨

Mi princesa 🐻

Kookie, nos toca en la aula E19 ¿Quieres que valla a verte?...

Jk

No te preocupes princesa, Jackson y yo ya nos

estamos dirigiendo hacia alli.

Mi princesa 🐻

Los espero❤️❤️

Guardé mi celular y guie a Jackson hasta el aula donde me había dicho Taehyung, llegamos y me senté al lado derecho de mi mejor amigo y Jackson se sentó a mi costado. Quedando yo en medio.

--Tae ¿Cuándo fue la pelea?—inquirio, había un tono divertido en su voz.

--Frunció el ceño— ¿pelea? — pregunto confundido.

--Si, ni un hola— se hizo el dolido tocándose el pecho dramáticamente.

--Taehyung soltó una risilla— lo siento es que estuve entretenido apuntando unas cosas.—señala su cuaderno

--Jackson también rio— era broma.

—Que broma para más fea—fastidie rodando los ojos—tienes el humor roto—Jackson me tiro un codazo haciéndome reír.

—Oye, Jackson—llamó Taehyung  y yo , dejé de hacer lo que estaba haciendo para mirarlos  Con curiosidad. El pelirrojo miraba al primer nombrado con una sonrisa.
Sin darme cuenta de mis acciones, sentí un impulso repentino y atraí a Taehyung hacia mí, envolviéndolo en un abrazo cálido. Él se puso muy rojito, su cara ardiendo de vergüenza, y sonrió tímido, escondiéndose en mi pecho como si buscara refugio.

—¿Tae? —Jackson lo llamo confundido, pero al, escuchar que no le respondía, me miro—Jeon deja respirar al muchacho.-- me señalo.

—¿Si puedes respirar Tae? —inquirí y el bonito pelirrojo asintió—si puede respirar, ves—hice una mueca mirándolo mal.

—Ya ya, yo solo decía—alzo las palmas mostrando inocencia. Rodee los ojos.

—Buenos días—la voz del profesor Choi se hizo presente en todo el salón—Joven Jeon, por favor deje de abrazar al joven Kim.

—Oh, si, si—solté a Taehyung, él se alejó de mi muy tímido y muy sonrojado—que lindo te ves así—dije sin pensarlo.

—Oh...-- desvió la mirada—g...gracias—balbuceo y yo no respondí.

—Hoy hablaremos sobre...—empezó el profesor, su voz resonando en el aula con un tono que parecía anunciar el comienzo de una larga y tediosa jornada. Me sentí un suspiro escapar de mi pecho, como si mi cuerpo ya supiera que hoy sería un día interminable, lleno de palabras y conceptos que se mezclarían en una nebulosa de aburrimiento

. Sí, hoy sería un largo día...

¿Les está gustando la historia?😕

Siento que va muy lento, pero más adelante vendrá lo bueno...