chapter five
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── V ──
«Cabala»
La cabala, un extraño método de la buena suerte. Es considerado una de las cosas más sagradas para obtener victoria en lo que uno desea, algunos lo hacen, otros no. Usualmente consistía de una cosa que se hacía de manera paulatina y constante, hecho en el momento justo y necesario. Algunos creen que da excelentes resultados, otros ni siquiera creen en aquello o ignoran su existencia.
Clara no creía en la cabala, pero si en las tradiciones.
Luego de cenar unas riquísimas milanesas con puré, ella junto a su hija fueron hacia su habitación en donde prendieron la tele y prepararon la película que verían. El teléfono de la muchacha vibró en la mesa de luz junto a su cama, por lo que lo tomó y leyó los mensajes que le habían enviado.
Georgi 🇦🇷✨
¡Clarita! Mepa que no se va a poder ver la peli hoy, Luchi se quedó re dormida y Joaco todavía sigue con fiebre.
¡Sorry!😭
¡Ay que feo Georgi! ¿Sabías que la victoria contra Chile dependía de nosotras no? 😡
Mentira, descansá lo que puedas y mandale besitos a Joaco, decile que la tía Clara le va a llevar un alfajorcito en cuanto se mejore 🤭
Georgi 🇦🇷✨
Ahora le digo
Igual nena, no le canceles a Emiliano o despertás rapada mañana, lo acabo de ver en el pasillo llevando unos caramelos.
¡Tratámelo bien al nene!
Ella, por alguna extraña razón, la mención de Emi hizo que sintiera sus nervios a flor de piel. Y cómo frutilla a la torta, se escuchó unos leves golpes en la puerta. Clara dio un hondo suspiro antes de acercarse a la puerta.
── ¿Emi? – llamó ella.
── Sí soy – respondió él. La muchacha se miró en el espejo que estaba junto a la puerta, se acomodó un poco su cabello y, soltando un largo suspiro, abrió la puerta – ¿Te copa unas gomitas?
Él estaba vestido con un buzo gris holgado, con un jogging negro y ojotas en sus pies. En su mano llevaba una bolsa grande llena de gomitas de osito y dos latas de Coca-Cola.
── Te recomiendo guardar esa bolsa o la nena no duerme en toda la noche – murmuró ella con una sonrisa cómplice antes de dejarlo entrar. Él asintió guardando en el bolsillo de su buzo las gomitas para luego hacer una seña de que guardaría silencio.
Luz estaba cansada, pero esa no la detuvo de saltar a los brazos de Emi y abrazarlo con todas sus fuerzas, ella le había agarrado un gran cariño al arquero, parecía una garrapata aferrada a Emi cada vez que lo veía. Los tres se sentaron en la cama de Clara y terminaron los últimos preparativos antes de acomodarse y empezar la película.
── ¿Alguna vez viste Narnia? – preguntó la muchacha con su teléfono en mano, con el cual controlaba la aplicación para la película que iban a ver.
── Solo la vi una vez, y fue en el cine – dijo él a lo que ella le miró con incredulidad.
── ¿Nunca volviste a ver Narnia? – inquirió aún sorprendida ella a lo que él se encogió de hombros – Hombre pecador, vas a conocer lo que es cine.
La luz se apagó en la habitación, solamente la televisión iluminaba el ambiente. La película Las Crónicas de Narnia: el León, la Bruja y el Armario cobró vida en aquella pantalla. Clara era fanática de aquella franquicia, en su habitación tenía los libros, los DVDs que había comprado años atrás y posters que había comprado en su adolescencia. Amaba las películas con toda su alma, y aún más la historia que ocurría.
Pasó el tiempo, a los treinta minutos de la película Luz ya había caído en un sueño muy profundo, ambos adultos estaban concentrados en la película. Las vistas de Narnia se veían espectaculares.
── ¿Quien es ese león que está con Katherine? – preguntó en un susurro él.
── Vos seguí mirando y vas a entender – murmuró ella a lo que el asintió.
La película pasó, los hermanos y su amiga habían descubierto Narnia, por lo que los minutos que le siguieron fueron escenas en donde se mostraba la naturaleza y los paisajes de Narnia. También vieron la crueldad de la Bruja Blanca y, cuando llegó la coronación de los cinco niños, Clara estaba echa un mar de lágrimas.
La película terminó siendo seguido por un silencio que solo era acompañado por la música de los créditos finales. La muchacha miró a Emi, quien tenía algunas lágrimas secas en su mejilla.
── Decime por dios que Kath se queda con Edmund – susurró él mirándola.
── ¿Te gusta la pareja que hacen? – dijo ella en voz baja.
── Obvio.
── Bienvenido al club wachin – murmuró acomodándose en la cama, tomó un puñado de las gomitas y se las llevó a la boca.
── ¿Hay una segunda peli? – preguntó él a lo que ella asintió.
── Ganá contra Chile y para el siguiente partido vemos la segunda ¿Te va? – propuso ella.
── De una, a mí siempre contame para todo lo que pinte – respondió.
Ella tomó a su hija en sus brazos y la llevó con cuidado a su cama. La niña no se había ni percatado que le cambiaban de lugar, apenas se acostó en su propia cama se giró para seguir durmiendo. Clara prendió la veladora de su mesa de luz y apagó la tele.
── ¿Cómo te sentís para el partido del lunes? – dijo ella sentándose frente a Emi.
── Un toque nervioso, pero yo no juego, así que me nervoseo al pedo – respondió haciendo que ella soltara una risita por lo bajo.
── Que no juegues no significa que esté mal que te pongas nervioso – murmuró ella – Yo siempre estoy nerviosa, hay veces que la noche anterior al partido no puedo dormir. Entonces para distraer mí mente de eso me distraigo con cualquier estupidez. A veces juego al Minecraft en mí compu.
── Mí psicologo me dice también eso, aunque me cuesta no pensar en eso, a veces juego a la play para distraerme – concordó él. Luego de aquello hubo un largo silencio, ambos estaban tranquilos, sentados uno frente al otro, tapados con la sábana abrigada y en total comodidad – Che, quiero hacerte una pregunta.
── Mandále.
Notó que Emi dudó un segundo antes de suspirar.
── Uhm... ¿Cómo hiciste para bancarte a Luz sola? – susurró. Aquella pregunta la dejó consternada, la verdad era que sabía que tarde o temprano alguna pregunta en referencia a su hija llegaría, pero igualmente la tomó de sorpresa – Igual, si es un tema que te incómoda no hace falta que me respondas... Si, era una pregunta muy boluda...
── No, no, tranqui. No es que me incomode, no me lo esperaba – calmó ella antes de dar un largo y hondo respiro – Fue en el 2019, me empecé a ver con un chico que era re buena onda. Estuvimos en ese limbo de que somos amigos, pareja, amigovios, amigos con derecho; y justo a finales de Septiembre empecé a tener los síntomas de embarazo, y claramente el test salió positivo.
«Lamentablemente el chico no quiso saber nada y se borró de mi vida. Yo no sabía que hacer, pero mis papás me calmaron diciendo que me iban a ayudar. Yo en ese tiempo estaba terminando mí último año de la facu y todo el proceso de embarazo evitó que pudiera terminar mí carrera. La termine el año pasado. Mis viejos me ayudaron un montón, el padre de mí hija no quiere saber nada de ella, me bloqueó por todos lados. Pero ya está, pasado pisado, ahora me enfoco en ella y en mí carrera.
Emi estaba en silencio total, miró un segundo a la niña durmiendo en la cama y volvió su mirada a la mujer frente a él.
── ¿Y te bancaste el embarazo vos sola? – preguntó confundido.
── No sola del todo, estuvieron mis viejos conmigo en todo tiempo – dijo ella.
── Pará, estoy confundido. Vos me hablaste sobre un partido amistoso pre-torneo que sucedió en el 2019, lo que significa que nació Luz y al toque te fuiste a la cancha ¿Verdad? – volvió a preguntar aún más confundido que antes.
── Nadie se enteró sobre el embarazo, nada más lo sabía mis papás y los que eran muy íntimos a mi. Los medios ni supieron, se sorprendieron que yo haya tenido una nena en cuanto me vieron – mencionó – Además, Luz nació en Mayo y el partido fue en diciembre, por lo que tuve tiempo para recuperarme. Tampoco soy tan suicida.
Aquello último hizo que ambos se rieran. Emi al parecer se dio cuenta que el tema de Luz quedó zanjado por lo que cambiaron de tema rápidamente, algo que ella agradeció profundamente. Él le contó que antes de la pandemia había tenido una novia con el cual estaba listo para casarse, pero por artes del destino -o de su suerte- se enteró que su pareja le había engañado por lo que cortó toda relación con ella. Desde ese entonces estaba soltero.
Clara no podía creer los que sus oídos escuchaba ¿Esa chica engañó a Emi? ¿El muchacho más atento, dulce y carismático? Había que ser un estupido para intentar lastimarle, y claramente esa chica lo era.
Ambos se quedaron hasta altas horas de la noche hablando. Él le contó su vida en el fútbol, siendo convocado para jugar en Independiente y luego ser comprado por el Arsenal, un equipo de fútbol Inglés, en el cual seguía jugando. La vida de Emi tuvo tanto subidas como bajadas, pero eso no impidió que abandonara sus sueños.
Poco a poco a ambos el sueño los venció, y apesar de que querían seguir hablando del uno hacia el otro para conocerse más, el sueño empezó a arrastrarse lentamente hasta atontar sus mentes y ambos terminaron acostados en la cama, durmiendo y soñando en aquel mundo de maravillas.
¡Holasas bebés! ¿Qué onda el finde? YA TENEMOS CAPÍTULO NUEVO DE HEARTSTOPPER, aunque un poco corto, pero bueh ¿Qué les pareció? ¡Los leo!
Me gustaría hacer dos aclaraciones. Uno, la exnovia de Emi no es su señora, es una random así que no tiren hate plox. Segundo, Francia. Tercero, Narnia no tiene una protagonista llamada Katherine, pero la Narnia que están viendo Clara y Emi está basado en mi Fanfic de Narnia llamada WARRIOR; está disponible en mi perfil por si lo quieren leer <3
Ya sin nada más que decir ¡Nos vimo' en Disney!
RiderStilinski ── 30/01/2023
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