Yoongi  rió cuando Jungkook salió del baño con un traje de conejita playboy sacando más sus grandes paletas.

Estaban algo ebrias, Yoongi tenía unas orejas de gato y la ropa mal acomodada. El maquillaje había quedado solo como un recuerdo y una mancha en la ropa, y el olor a tequila inundaba la habitación. 

-¿Por que tienes el cuerpo tan malditamente perfecto?- Preguntó viendo el escote en el disfraz. -¿Puedo tocar?-

-Claro- Respondió alzando los hombros. -Tu tienes mejor culo-

-Pero tu cintura esta más marcada- Respondió llevando sus manos a los senos ajenos, comenzando a jugar con ellos ante la atenta mirada de Jungkook.

-Yoongi- Llamó haciéndola alzar la vista. -¿Has besado a alguna chica?-

Yoongi intentó recordar pese al alcohol en su sistema que le dificultaba la tarea, pero acabó asintiendo en silencio, aún con ambas manos sobre el pecho ajeno.

-Para la grabación de un video- Aclaró apretando suavemente.

-¿Y por morbo?- Preguntó seria obteniendo una negación con la cabeza. -¿Puedo besarte?-

Yoongi alzó la mirada curiosa, encontrándose con el rostro serio de la castaña, haciendola estremecer en su sitio, pero asintió en silencio sin saber bien que responder. Una parte de ella necesitaba saciar la curiosidad.

Jungkook se inclinó y la tomó por la cadera para poder unir sus labios en un lento pero profundo beso que Min no tardó en corresponder.

Sus lenguas fueron entrando en juego lentamente, hasta que comenzaron a batallar dentro y fuera de sus bocas, acabando por caer al suelo.

Jungkook se acomodó sobre ella, sintiendo las manos pasar a su nuca para no cortar el beso y la pierna ajena alzarse entre las suyas.

Soltó un jadeo y se pegó más a la azabache que gimió al sentir el muslo contra su intimidad y se sonrojó cuando ella misma se movió en busca de más contacto.

Jungkook se separó para verla desde arriba, sonrojada y agitada, con el vestido negro mal acomodado al igual que su cabello despeinado.

-Más- Susurró Yoongi llevando una mano a su propio pecho para sentir su corazón.

-Tengo una mejor idea- Susurró antes de bajar besos por su pecho y vientre hasta llegar a sus piernas separadas.

Lamió su intimidad sobre las bragas empapadas y la oyó gemir con fuerza, incentivandola a quitarle la prenda para poder lamer sin interrupciones.

Yoongi arqueó la espalda y apretó en un puño la alfombra bajo ella al sentir su clitoris ser empapado y succionando por la boca ajena, haciendo que suelte un gemido de placer y abra más las piernas para sentir mejor aquella exquisita sensación.

Llevó una de sus manos al cabello castaño ajeno, arrojando a un lado las orejas de conejo y presionando a la menor contra su intimidad mientras ella cerraba los ojos para concentrarse en el placer que le brindaba aquella lengua a todo su cuerpo.

-¡Oh Dios!-

Para cuando despertó, Jungkook estaba en bragas a su lado, durmiendo plácidamente mientras ella llevaba su ropa interior de encaje negra como siempre.

El dolor de cabeza se hizo presente y se sentó para intentar aliviarlo, despertando por el movimiento a Jeon que la miró curiosa mientras se tapaba el pecho desnudo con la sábana.

-¿Que pasó anoche?- Preguntó tomando su frente intentando aliviar el dolor.

-¿Que es lo último que recuerdas?- Preguntó alzando una ceja.

-Que tu me... Ya sabes- Susurró avergonzada sin mirarla.

-Te la chupé, Yoon, te hice un oral- Rió al verla sonrojada. -Eres totalmente distinta a como te muestras-

-Callate y responde- Protestó volteandose para verla.

-Luego dijiste que querías intentarlo, me arrojaste a la cama y me quitaste la ropa- Explicó ignorando el rostro de vergüenza ajeno. -Hiciste algo así como un oral y luego te dió un ataque de risa que me conagiaste- Sonrió sentandose a su lado. -Luego nos besamos y creo que nos dormimos, ya no recuerdo más-

-Dios, que vergüenza- Dijo Yoongi cubriendo su rostro sonrojado con sus manos. -Por favor, no le digas a nadie-

-Claro que no- Negó rápidamente. -Pero no deberías avergonzarte-

-Nunca había hecho algo así- Mordió su labio inferior con la mirada en sus propias piernas.

-Siempre hay una primera vez- Susurró acariciando su mano.

Yoongi alzó la vista, encontrandose con los hermosos ojos llenos de estrellas que la miraban con comprensión y cariño, haciéndola sentir extrañamente cálida.

-¿Quieres comer algo?- Preguntó Jungkook sonriendo.