—¿Qué ocurre? —preguntó el alfa con preocupación viendo a su hermoso omega embarazado de tres meses sentado frente a él jugando con su comida con tristeza—¿No te gusta? ¿Quieres que prepare otra cosa? ¿Mmh?

—Quiero chocolate...—dijo el omega en un susurro, el alfa suspiró aliviado, solo era eso. Chocolate.

—Luego de que comas eso podrás comer el chocolate, mi amor —le dijo con suavidad. En esos tres meses había aprendido como tratar con un JungKook embarazo.

1–No le subas la voz, puede llorar o gritarte hasta dejarte durmiendo en la sala.

2–No olvides los apodos lindos en cada frase, pensará que ya no lo quieres.

3–Si quiere mimos le das mimos, o puede llorar.

Si, JungKook era un omega llorón.

Pero así lo amaba.

—Cuando termines de comer eso te daré los chocolates, cielo —le dijo con suavidad acariciando su mano la mejilla del omega.

—¿Todo? –le preguntó.

—Aunquesea la mitad de eso, mi amor —le sonrió de medio lado. El omega asintió y empezó a comer de la ensalada primero, vio la mueca de disgusto que hizo y se preocupó de nuevo, más no dijo nada porque el omega extendió su mano y tomó uno de los envases en medio de la mesa. Tomó la sal y la esparció por encima de la ensalada para seguir comiendo.

—¿Compró los que me gustan, hyung? —le preguntó. YoonGi con comida en la boca asintió viendo la sonrisa de su omega.

YoonGi terminó la comida en unos minutos.

Y JungKook seguía comiendo.

—También te compré unos de fresa  —le dijo recordando el mercado de chocolates que había hecho, entre ellos los de fresa que nunca había visto.

—¿Fresa? ¿Es nuevo? —JungKook metió un bocado de comida a su boca y masticó viendo con atención al alfa.

—Supongo, cariño —JungKook dejó de masticar y tomó agua, señal de que había acabado.

—Ten —el omega le dejó su plato con comida en frente. Se había comido la carne y un poco de ensalada, solo quedaba el arroz y media ensalada.

—Un momento —el alfa se levantó y besó la frente de su esposo para luego ir al cuarto de lavado y sacar de uno de los cajones una barra de chocolate de tamaño mediano. Hace un mes el alfa tuvo que empezar a esconder los chocolates de su pequeño a raíz de aquel día en donde se comió una caja entera en pocas horas— Toma —YoonGi le extendió la barra y dejó un beso en sus labios.

—¡Si! ¡Gracias, hyung! —JungKook abrió el envoltorio y empezó a devorar la golosina mientras YoonGi terminaba de comer lo que había dejado su omega. Al terminar, se levantó y dejó los platos en el lavavajillas, luego los lavaría.

Volvió a la mesa y se sentó en su silla.

—Bebé —llamó al omega que iba por la mitad de su barra. YoonGi palmeó sus muslos y el otro entendió enseguida, con una sonrisa se levantó y se sentó en el regazo de su alfa, sonriendo cuando sintió una de las manos frías de su esposo adentrarse en su camisa, tocando su panza de tres meses.

—Mmm... Estaba pensando... —le dijo al alfa apoyando su cabeza en su hombro masticando la golosina.

—¿En qué, mi amor? —YoonGi sonrió repartiendo caricias en el vientre del omega, ahí estaba su cachorro, su hijo o hija.

Mierda. Pensó ensanchando su sonrisa, emocionado.

—De si... El cachorro nacerá con esa discapacidad... —dijo dejando el envoltorio ya vacío en la mesa.

—Le preguntaremos al doctor Im cuando vayamos a tu consulta mensual —le contestó besando sus mejillas.

—Espero que no... —dijo, conectó su mirada con la de su alfa— No quiero que sufra, como yo —puchereó, el alfa besó su nariz en un gesto cariñoso.

—No lo hará, bebé, nosotros estaremos para ella —le dijo.

—¿Ella? —JungKook arqueó su ceja sonriendo levemente— ¿Quiere una niña, hyung?

—Tal vez —YoonGi hizo una mueca graciosa y el omega rió abrazándole.

.
.
.
.
.

—Ah... —JungKook mordió sus labios levemente mirándose en el espejo— Y-yoonGi... —carraspeó— ¡YoonGi!

—¿Qué sucede, cariño? —el alfa apareció en menos de dos segundos mirando detalladamente a su omega de cuatro meses que, con los ojos cristalizados le habló.

—Me duele...—dijo caminando hacia el contrario, acababa de salir de un ducha y solo una toalla le envolvía por los hombros.

—¿Qué duele, bebé? —YoonGi le examinó con la mirada dejando sus manos en la cintura del omega.

—Si te digo, ¿no te ríes? —le preguntó como un niño, YoonGi asintió sonriendo con ternura— Umm... Bueno, me duele, no, me arde y pica aquí —sacó su mano de la toalla y señaló una parte de su pecho cubierto por la toalla.

—¿El pecho? —YoonGi fruncio el ceño sin entender aún.

—Si... —JungKook asintió y dejó caer la toalla, tenía su ropa interior así que no se preocupó mucho— Mira

YoonGi dejó sus ojos en el pecho del otro, los botones rosas que amaba en secreto estaban enrojecidos y tenían pequeños rasguños y costras causadas por el mismo omega al rascarse con continuidad.

—Oh, bebé, buscaremos una crema para eso, ¿si? —besó su frente— Vamos a vestirte, ya vamos tarde con el doctor Im —de imprevisto, el alfa cargó al omega de forma nupcial, este solo bufó pero luego rió levemente.

—¿Por qué haces esto, alfa? No soy un bebé —preguntó sintiendo al alfa dejarlo con delicadeza en la mullida cama— Se vestirme solito —cruzó sus brazos en su pecho, siseando cuando sus antebrazos rozaron sus irritados pezones. Dejó sus brazos a cada lado de su cabeza y se dejó hacer por el alfa.

—Si eres un bebé —YoonGi le besó el pequeño bulto en su vientre mientras subía sus pantalones— Y lo hago porque tú me dejas y, aveces me lo pides —se alejó buscando la parte superior del outfit que tenía en su cabeza, al tener el suéter esponjado se volteó de nuevo en dirección a su omega.

—No quiero ponerme nada arriba —le dijo haciendo fuerzas con el alfa— Molesta

—Bebé, no vas a salir desnudo —le dijo dejando de forcejear con su omega.

—No estoy desnudo —frunció el ceño— Tengo jeans

—Y el torso descubierto. Vamos, te puedes resfriar —le animó golpeando levemente su muslo.

—Es que...—observó como los ojitos de su omega se cristalizaban— ¡Es que no me entiendes! —empezó a llorar desconsoladamente, YoonGi dejó la prenda en su lugar y fue hacia su omega, se acostó junto a él.

—Kookie... Bebé... —lo abrazó por la cintura y acarició su espalda desnuda— Yo sí te entiendo...

—¡Mentiroso! —JungKook pegó sus manos a su cara y empezó a balbucear.

—Te puedes resfriar y eso no es bueno ni para ti, ni para el cachorro —le habló con suavidad, JungKook se escondió en su pecho y lloró como un bebé— Tenemos que ir con el doctor Im y...

—Pues... ¡Trae al doctor Im! —dijo apretando sus manos en la ropa del alfa.

—No puedo, mi amor. Si pudiera ya lo hubiese hecho —carraspeó pasando sus manos por el vientre contrario— Vamos a hacer algo... Te vas a poner un suéter de los míos y...

—¡No quiero! —se removió con el ceño aún fruncido. Aunque sea no está llorando más. Pensó el alfa respirando un par de veces— ¡Duele!

—No va a doler, te lo prometo, mi amor. Yo te cargaré y te llevo al auto, no cerraremos el suéter y no te hará daño... ¿Si, mi amor? —le subió la barbilla con una mano y le besó.

—¡Si! —y rió luego de separse.

—Ah... Mi Kookie —suspiró riendo levemente, se separó y llevó el "plan" a cabo, sacó un suéter negro y se lo colocó al omega con cuidado de que la tela no rozara con sus sensibles e irritados pezones, le colocó los zapatos, tomó todo lo necesario y volvió a la habitación.

JungKook se había dormido.

Rió rodando los ojos y cargó al omega hasta llevarlo al auto, lo acostó en la parte trasera, subió al piloto, encendió el motor y emprendió camino al consultorio del doctor Im, al llegar, JungKook ya había despertado y luego de tener que convencer al omega de dejarse el suéter bajaron y caminaron al pequeño consultorio.

—YoonGi...—JungKook fruncio el ceño y llevó una de sus manos al muslo del alfa, que le vio atento.

—¿Qué ocurre? —dio un respingo cuando JungKook le apretó con una fuerza que no conocía— Mi amor...

—Duele... Duele... —JungKook se dobló en su lugar, enterrando sus uñas en la tela del pantalón de su alfa.

—¿Qué duele? —YoonGi le miró preocupado, estaba a punto de levantarse y gritarle a todas las enfermeras que atendieran a su omega pero este, luego de un fuerte apretón le miró como si no hubiese pasado nada— ¿K-kookie?

—Solo... Me dio una punzada en la espalda, solo eso, hyung —y le besó la mejilla con cariño. YoonGi se desplomó en su asiento sobando su muslo afectado por la dichosa punzada.

—¿Min JungKook y Min YoonGi? —una secretaria salió del consultorio.

—Nosotros —YoonGi se levantó y caminó junto a su omega, entraron al consultorio y tomaron asiento.

—Buenas tardes, jóvenes Min —saludó con una sonrisa el doctor Im Changhyuk, mirando con felicidad a la pareja.

—Buenas tardes, doctor Im —el omega se removió ansioso en su lugar.

—Digame, joven Min —se dirigió al omega— ¿Cómo va su embarazo? ¿Ha tenido vomitos, nauseas, antojos? ¿Cambios de humor? —YoonGi asintió freneticamente a la última pregunta.

—Umm, no he vomitado casi y solo me mareo cuando me levanto —contó el omega— hay muchos antojos y cambios de humor

—¿Está comiendo sano? Espero que sí —el omega mordió sus labios— Debe tener una dieta balanceada para que no haya ningun inconveniente que le afecte a usted o al cachorro —le dijo, con expresión profesional.

—Ummm... Quería, quería preguntarle algo —dijo jugando con sus dedos.

—Adelante —le sonrió.

—Um... Mi cachorro, ¿nacerá con mi discapacidad? —el alfa sintiendo la ansiedad por medio de la marca le sujetó la mano y acarició su dorso con cariño.

—No sé decirle muy bien en este momento, tendremos que esperar hasta que tenga un estado más avanzado, ocho o siete meses —JungKook asintió— ¿Algo más que quiera preguntar?

—Mis... Mi... Um... YoonGi —miró al alfa con un sonrojo en sus mejillas.

—Su pecho, está...

–¿Inflamado? —preguntó el doctor.

—No no, están irritados, solamente le duelen al tacto —explicó mientras el omega se hundía en su asiento.

—P-pica...—dijo bajo el omega.

—Oh, comprendo —el doctor se arrimó hacia atrás en su silla y sacó un bote de crema, se lo entregó al alfa— Aplique un poco de esto antes de dormir y luego de ducharse, ayudará con la picazón y la irritación. Sus exámenes no me indicaron que usted poseía glándulas mamarias —dijo sacando la carpeta que era dedicada al embarazo del omega, anotó eso en un post-it— Muy pocos omegas las poseen...—habló mientras pegaba la notita en la carpeta.

—Mi papá... Él tiene de eso —dijo el omega acomodándose levemente en su lugar.

—Hay diferentes "reacciones" —hizo comillas con sus dedos el doctor— Puede que a los cinco meses se hinchen o no, depende de su cuerpo —le dijo al omega— la irritación y comezón solo me indica que tiene la piel sensible.. Así que le pido que por favor, tenga total cuidado con eso, no deje que el área se reseque en estos dos meses, mantenga el área húmeda

—Está bien —asintió.

—Ahora... ¡Buenas noticias! —el doctor palmeó en el aire— Ya pueden saber el sexo de su cachorro

—¡Si! ¡Vamos, doctor! —JungKook, con total confianza tomó la mano del doctor y lo arrastró a la camilla de los ecos.

YoonGi le vio con una sonrisa, no se preocupaba por el doctor Im, estaba casado y tenía dos hijos, además era omega igualmente.

Se acercó a la camilla a un lado de su omega, le besó la frente y prestó atención a la pantalla.

—Veamos...—Changhyuk regó el líquido frío en el vientre del omega y posó el aparato que le transmitía la imagen hacia la pantalla. La movió hacia la izquierda, y a la derecha, se detuvo— ¿Ah? —fruncio el ceño y achicó sus ojos a la pantalla— No puede ser... —movió la máquina a varios lados— Um...

—¿Qué ocurre? —los dos miraron al doctor.

—Hay tres... —dijo ajustando la máquina mejor y restregando sus ojos— Hay tres cachorros —y se escuchó un golpe en seco.

—¡YoonGi! —JungKook fruncio el ceño viendo el techo con un puchero.

YoonGi se había desmayado.

.
.
.
.
.

Ahora con siete meses, JungKook lloraba desconsoladamente:

—¿Bebé? ¿JungKook? ¿Por qué lloras? Ya ya... Ya pasó —YoonGi abrazó a su omega y lo meció logrando que su llanto se apaciguara un poco— ¿Por qué lloras, mi amor? —los acostó a ambos en la cama dejando su codo derecho apoyado en el colchón mietras que en su palma descansaba su mejilla, con su mano libre acarició el pequeño bulto que era la pancita de ahora seis meses de JungKook.

—T-tu... No me... H-hoy cuando te fuiste... —el pelinegro sorbió su nariz y secó sus lágrimas— no me dijiste... Te amo... ¿Ya no me amas?... —empezó a llorar de nuevo.

—Oh no no no, mi cielo. No pienses eso, yo te amo... De aquí... —dijo besando su nariz sonrojada— Me fui temprano y todavía estabas dormido, no quise despertarte

—Me... Me tenías que despertar y ya...—puchereó mirándole a los ojos.

—La próxima vez lo hago, ¿si, mi bebé? —se removió y besó el vientre abultado de su omega— ¿Cómo está mi cachorra? —le habló al bebé dentro, al final la máquina había guardado el vídeo del ultrasonido de la paciente anterior y por eso, había visto tres bebés, pero no, era uno solo.

—No puedo creer que te desmayaras de nuevo —le dijo el omega sobando sus cabellos.

—Fue imposible —le dijo, besando su vientre.

—Te desmayaste cuando el doctor Im dijo que eran tres... —empezó a contar con sus dedos— Luego, unos meses después cuando confirmó que era niña... Luego, cuando dijo que era un embarazo de riesgo... Luego cuando dijo que no lo era... Y luego cuando dijo que no iba a nacer con discapacidad... Y ayer... ¿Por qué te desmayaste ayer?

—Porque me dijeron que debía pasar a la cesárea —contestó simple— Mi cuerpo respondió así a todas esas cosas, bebé —subió sus hombros.

—Si vas a pasar, ¿verdad? —puchereó— No quiero estar solo...

—Claro que voy a pasar —le miró desde abajo— aunque no prometo no desmayarme de la emoción o del susto —los dos rieron.

—¡Ay! —JungKook se quejó— ¡YoonGi, toca aquí! —con emoción tomó la mano del alfa y la colocó en una zona de su vientre.

—¿Qué? —YoonGi arqueó una ceja y tanteó.

—Habla, habla —le animó con su mano libre.

—¿Qué quieres que diga? ¡ah! —YoonGi se separó viendo con ojos brillantes el vientre de su omega— ¡Se movió! —sonrió mostrando sus encías y volvió a posar su mano— Hola~ —canturreó. Así pasaron la tarde, JungKook riendo y mirando con cariño a YoonGi y YoonGi, pues... Jugando con su hija y riendo por cualquier movimiento.

.
.
.
.
.

No fue hasta los ocho meses, que el omega empezó a sentirse incómodo. Su vientre no estaba exageradamente abultado como había visto en otros omegas, es más, desde los cuatro meses solamente había crecido un poco nada más, parecía que no estaba "en la recta final".

—Tengo calor~ —lloriqueó estirando sus brazos en la mullida cama, tenía sus pies algo hinchados y su espalda dolía en cualquier posición. Cerró sus ojos para retomar el sueño, estaba ya cayendo en el mundo, hasta que una punzada llegó a su espalda— A-ah...—lloriqueó sentándose con la espalda pegada a la cabecera, se hallaba solamente con bóxers, no aguantaba tener ropa encima, primero, por sus pezones irritados y rojizos, segundo, los pantalones no pasaban de sus muslos, los cuales habían crecido considerablemente, su alfa le había dicho millones de veces en ir a comprar prendas que se adaptasen a su cuerpo pero JungKook había negado esas millones de veces.

Alfa... Llamó por la marca. Sube, por favor...

En menos de un minuto YoonGi estaba allí, mirándole con una media sonrisa.

—¿Qué ocurre, bebé? —se acercó y se sentó a su lado masajeando con una de sus manos su muslo derecho, YoonGi amaba sus muslos antes y ahora el amor se intensificaba por el grosor de estos.

—M-me siento mal... No puedo dormir —habló moviendo sus manos en el aire— Mi espalda duele y-y... —y empezó a llorar por no poder dormir bien.

—Ay, mi amor —YoonGi besó su mejilla y le abrazó levemente.

—E-estás castigada —habló mirando su vientre— YoonGi... Se mueve mucho, y quiero dormir... —YoonGi le acomodó en su regazo y JungKook escondió su nariz en el cuello del otro, inhaló su olor y se calmó considerablemente, YoonGi le acarició los muslos, estaba relajándose... Estaba cayendo en el mundo de los sueños.

La bebé pateó.

—¡Mm! —dio un respingo en su lugar y miró al alfa con los ojos cristalizados— No funciona... Alfa...—empezó a llorar— Quiero dormir....—YoonGi estiró su mano y tomó el teléfono del omega— ¿Qué haces? —secó sus lágrimas y se abrazó aún más al alfa, ocultando su nariz en su cuello.

—Llamo a tu papá, bebé —con su mano libre siguió con su tarea de acariciar los muslos de su omega.

—¿Bebé? —la voz del señor Jeon se escuchó.

—Hola... Es YoonGi —sonrió sin mostrar los dientes.

—Oh, ¡hola! ¿Cómo estás? ¿Cómo está mi bebé?

—Yo muy bien..—escuchó la respiración calmada de JungKook, se había dormido supuso. YoonGi dio un respingo cuando JungKook saltó en su lugar y empezó a lloriquear de nuevo masajeando su espalda baja— JungKookie... No tanto

—¿Qué ocurrió? —escuchó la voz preocupada de su suegro.

—Ten...—YoonGi le dio el aparato al omega que aún lloriqueando y sintiendo los mimos del alfa en su cabello y espalda, habló— P-papá...

—Dime que te ocurre, bebé

—N-no puedo dormir... Y-y la bebé se mueve mucho y mi espalda duele —se sonrojó sintiendo el masaje de su alfa en sus muslos— Papá, quiero dormir...

—Ay, mi bebé. —el señor Jeon rió levemente— Yo también estuve así, bebe de tu propia medicina, cachorro

—¡Papá! —se quejó— ¿Puedes venir? P-por favor —sorbió su nariz.

—Voy en camino, bebé —y colgó.

—Viene para acá —dijo JungKook restregándose los ojos y bostezando.

—¿No te vas a vestir? —YoonGi dejó de masajear y le besó lentamente. Se separaron en un chasquido.

—No, es incómodo —frunció el ceño y se acomodó en la cama, se colocó de medio lado, boca arriba y del otro lado, en toda posición le dolía la espalda— ¡YoonGi! —se abrazó al alfa y lloriqueó, otra cosa que torturaba a JungKook desde los dos meses era que él normalmente dormía boca abajo y por su embarazo no podía hacerlo.

—Ven, vamos a bajar, estoy cocinando el almuerzo —YoonGi se levantó.

—Yo me quedo aquí —tomó una almohada y la aplastó con sus manos— Cuando mis papás lleguen bajo

—Está bien, Kookie —le volvió a besar con delicadeza y bajó a revisar la comida que estaba haciendo.

Con suerte no se quemó. Pensó apagando todo.

El timbre sonó. Con una media sonrisa fue y abrió la puerta a sus suegros.

—Hola —les saludó sonriendo.

—¡YoonGi, meses que no te veía! —la alfa le abrazó con cariño y revolvió sus cabellos— ¿Cómo estás?

—Muy bien, ¿y ustedes? —le dio un abrazo al omega.

—Ah, mejor que nunca. Ya sabes, casa sola —el omega le hizo "cejitas" y YoonGi, imaginándose involuntariamente la situación se sonrojó haciendo al señor Jeon reír a carcajadas— Ah, sigues siendo el mismo chiquillo de antes

—¿Dónde está mi bebé? —preguntó la alfa soltándolo, YoonGi les indicó que tomaran asiento y subió las escaleras en busca de su omega, entró a la habitación y se detuvo a los pies de la cama.

JungKook estaba dormido.

No quería despertarle, por eso retrocedió algunos pasos en silencio y tomó la puerta para cerrarla a sus espaldas.

—¡Ah! —se devolvió con ese quejido, JungKook estaba ahora sentado en el centro de la cama restregándose la cara con las manos.

—Bebé, tus papás llegaron —le avisó acercándose.

—Umm —JungKook estiró sus brazos y YoonGi, gustoso como siempre, lo tomó el brazos.

Bajó las escaleras con delicadeza.

—Tu espalda es de oro, YoonGi —rió la alfa mirando la escena, no era raro ver a JungKook siendo cargado por el alfa.

—¿¡Por qué mi bebé no tiene ropa!? —el señor Jeon colocó sus manos en jarra y frunció el ceño.

—Papá, mamá.... —JungKook le dio varios golpesitos a YoonGi en el hombro y este le bajó, caminó hacia sus progenitores y los abrazó.

—¿Por qué no tienes ropa, bebé? —la alfa le acarició el cabello.

—Ummm... Es incómodo vestirme... Engordé y la ropa no me queda...—explicó bostezando.

—¿Sabes que hay ropas para omegas embarazados? —el señor Jeon tomó asiento en el sillón.

—No la quiso comprar —habló YoonGi por él subiendo sus hombros— ¿Quieren algo de beber?

—No, gracias —los dos le sonrieron y YoonGi solo tomó asiento en el sillón individual,  al igual que la alfa, dejando a los dos omegas en el de tres personas.

—Ven —el señor Jeon palmeó sus muslos y JungKook se sentó, estirando sus piernas y escondiendo su nariz en la marca de su padre inhalando aquel aroma que tanto le relajaba— Shh...—su progenitor se empezó a mecer de lado a lado y tararear una canción. JungKook se quedó dormido en unos minutos.

—¿Tu olor no lo calma? —la alfa le susurró viendo la escena.

—Los primeros siete meses si funcionaba, calmaba a la bebé y a él —respondió con el mismo tono de voz— Pero este mes mi olor no funciona, por tantas feromonas que liberase no se calmaba. El doctor Im me dijo que podría ser que su lobo necesita el olor materno... Al no tenerlo cerca se alteraba y alteraba a la bebé —explicó— por eso les llamé, tiene dos días sin dormir bien...—hizo una mueca.

—Les dije que siempre sería mi bebé —el señor Jeon les miró con una mueca graciosa. Los otros dos rieron.

—Oye, YoonGi —la alfa señaló el pecho del omega menor— ¿Qué tiene ahí?

—Oh, eso es una crema que le ayuda con la irritación y comezón —explicó.

—Heredó la piel sensible —habló el omega acariciando el cabello de su hijo— ¿Dónde está su habitación? —preguntó levantándose— Lo dejaré más cómodo

—Pero... Si se separa ¿no despertará? —el hombre negó siguiendo la dirección que le dio YoonGi— ¡Vine preparado! —dijo desde arriba.

—¿Quieren almorzar? —le preguntó a la alfa que asintió siguiéndole a la cocina.

Pasaron las horas, YoonGi almorzó con sus suegros y habló con ellos el resto del día. El sol ya estaba ocultándose y los dos mayores estaban organizando todo para irse, resulta que el señor Jeon se había colocado dos camisas, una de ellas, la más marcada con su olor se la dejó al omega.

—Nos vemos, YoonGi —el omega le abrazó y besó su mejilla con cariño— Llamanos cualquier inconveniente

—Si, lo haré — le sonrió y se dejó abrazar por la alfa.

—Cuida de mi bebé, YoonGi —le revolvió el cabello— También...

—¡¡YoonGi!! ¡¡Ah!! —los tres corrieron hacia la habitación de la pareja, abrieron la puerta y encontraron a JungKook de pie gritando y llorando mientras sostenía su vientre con sus manos.

—En el armario está al bolso —le indicó a sus suegros mientras caminaba a su omega, tomó una bata de baño cercana y lo envolvió en ella para luego cargarlo de forma nupcial, el brazo que sostenía sus rodillas se empapó de un líquido.

—Y-yoonGi...—bajó las escaleras con cuidado y caminó hacía la puerta, maniobró para tomar las llaves del auto y abrir el mismo para poder dejar a su omega en el asiento del copiloto— Todavía no es la fecha....—dijo el omega colocando su antebrazo en sus ojos, había empezado a sudar.

—Para la bebé si lo es —miró por el retrovisor el auto de sus suegros ya encendido, sacó su mano he hizo una seña, arrancó y manejó hacia el hospital.

—¡Mmm! —JungKook estiró su mano y apretó el muslo de su alfa— ¡¡Ah!! —gritó sintiendo una punzada en su espalda, apretó el muslo en sus manos con todas sus fuerzas.

YoonGi siseó sintiendo la fuerza con la que su omega apretaba su muslo, estaba en pantalones deportivos y la tela era fina, las uñas del omega se enterraban con más claridad en su piel.

—L-llegamos...—tartamudeó sintiendo nervios y el ardor en su muslo. Despegó la mano del omega de su muslo y se bajó, dio la vuelta y abrió el copiloto— Cariño...—YoonGi nuevamente lo tomó en brazos y lo llevó hacia la entrada del hospital.

—¡¡YoonGi!! —gritó apretando la camisa del alfa con una mano y rasguñando con fuerza su nuca, YoonGi volvió a sisear. Sin tener que llamar a nadie gracias al grito del omega varias enfermeras se acercaron.

—El doctor Im atiende su embarazo, Min JungKook —le dijo a una a las enfermeras mientras dejaba al omega en la camilla.

—Venga con nosotros —siguió a las enfermeras— ¡Doctor Im! —gritó una de ellas al doctor que yacía apoyado en la recepción bebiendo un café— Omega en labor —avisó, el doctor se acercó y reconoció a los esposos Min.

—Preparenlo a él para entrar a la cesárea —señaló a YoonGi— Joven Jeon, su hija se adelantó un mes —empezó a hablarle mirando como el omega estaba al borde de desmayarse— Digame, ¿qué nombre le pondran? —entró a la sala especialmente para eso y se vistió con el traje— Digame el nombre —insistió mirando al omega que fue pasado de la camilla normal a una especial.

—¡¡YoonGi!! —gritó retorciéndose.

—¿Ese no es el nombre de su esposo? —las enfermeras con sus trajes especiales y los instrumentos desinfectados colocaron la cortina que le impediría al omega ver la cesárea.

—S-sumni... Se llamará... Sumni..—dijo respirando aceleradamente, volteó su cabeza a un lado y miró a su esposo.

—Coloquen la anestesia —indicó el doctor Im. Uno de los enfermeros colocó la anestesia.

—Ah... Ahora... ¿Eres enfermero? —le miró cada vez más calmado por la anestesia.

—Mi amor —YoonGi se agachó y acarició la frente sudada de su omega con sus manos enguantadas en látex.

—No te desmayes... —puchereó subiendo su mano para acariciar la mejilla de su alfa.

—No lo haré, bebé —deslizó su mano y la entrelazó con la de su pareja. Los dos se miraron, se perdieron en las orbes del contrario, sus ojos brillaron con feliciad.

—Alfa... ¿Me amas? —preguntó JungKook bostezando, el cansancio que todavía tenía por no haber descansado bien, los dolores que tuvo de camino al hospital más la anestesia no le estaban ayudando.

—Por supuesto, mi hermoso omega —le dijo, sus ojos achicándose mientras su sonrisa era tapada por el barbijo azul— De aquí... —JungKook sonrió.

En ese instante, el llanto de un bebé llegó a sus oídos.

—YoonGi... —el omega miró con emoción a la enfermera acercarse a su lugar con un pequeño bulto envuelto en una manta color durazno. Se escuchó un golpe en seco a su lado— ¡YoonGi! —JungKook fruncio el ceño viendo a su esposo ser atendido por las enfermeras.

—Tenga —la enfermera le entregó a la bebé, dejándola en su pecho, JungKook la tomó con un brazo mientras su dedo índice se paseaba por su mejilla abultada.

—Ya... Mi cachorrita...—arrulló a la bebé que lloraba con sus ojitos cerrados— papá se desmayó... —rió mirando de reojo a YoonGi despertando de a poco, besó la frente de su pequeña— Te amo... Mi amor... Mi pequeña Sumni...  —sonrió a la pequeña que calmó su llanto y ahora estaba removiéndose. Una mano pálida y envuelta en un guante de látex azul acarició la cabeza de la pequeña— Prometiste que no te desmayarías —habló mirando aún a su pequeña con amor.

—Lo siento, mi amor... —YoonGi sonrió sintiendo sus ojos cristalizarse— Ah... Voy a llorar... —el omega le entregó a la bebé, YoonGi la tomó en brazos.

—No te desmayes, con ella no —dijo el omega volviendo a bostezar.

—Mi princesa...—le susurró a la bebé aparentemente dormida— Te voy a cuidar mucho, mi amor... —sonrió bajo el tapabocas sintiendo su pecho revolotear de alegría y amor.

—Señor Min, iremos a hacerle los exámenes y a limpiarla mejor —le habló una enfermera, pidiendo con la mirada que me entregase a la niña. El alfa lo hizo con delicadeza— Por favor, indiqueme su nombre

—Sumni, Min Sumni —dijo orgulloso.

Volteó y miró a su omega dormido, un enfermero le indicó que debía salir, le dio una última mirada a su omega dormido y salió de ahí.

.
.
.
.
.

—Me preocupa, hyung —JungKook puchereó sosteniendo a su bebé en brazos, hace dos días le habían dado de alta en el hospital, ya estaban en casa, JungKook sentado en la cama rodeado de las ropas que hacían un nido.

El omega no podía hacer ningún tipo de actividad, no podía cargar peso y debía tener cuidado con los movimientos bruscos debido a la cesárea aún no cicatrizada.

—El doctor dijo que es completamente normal, cariño —YoonGi besó su hombro desnudo mirando con amor a la bebé en los brazos de su omega, no sabía si estaba dormida o no, la bebé no había abierto lo ojos desde que nació siendo esa la preocupación del omega.

—Pero...—calló cuando la bebé se removió haciendo pucheros para llorar, el castaño sonrió de medio lado y la acomodó para que estuviera aún más pegada a su pecho, la bebé buscó con sus labios el pezón del omega y empezó a comer— No me mires —dijo con un sonrojo al alfa que veía la escena con atención.

—Es muy tierno —dijo volviendo a besar su hombro desnudo.

—Ah... —JungKook apretó sus ojos y meneó sus piernas— S-sumni... —lloriqueó— No tan...No tan fuerte —le dijo como si la bebé le entendiera que no debía succionar tan fuerte. JungKook la cambió de lugar.

—Bebé...—YoonGi miró con detenimiento y expresión preocupada como un pequeño hilo de sangre salía del pezón de su omega.

—Trae la crema...—le pidió apretando sus dientes. YoonGi abrió el buró y sacó la crema, dejó un poco en su dedo y la esparció en la zona afectada.

El timbre sonó.

—Deben ser mi mamá y mi hermano—YoonGi bajó las escaleras limpiando el resto de crema en su camisa holgada, abrió la puerta y efectivamente, su madre y hermano estaban ahí, junto a los señores Jeon.

—¡Felicidades! —gritaron las cuatro personas al alfa extendiéndole bolsas de colores.

—Ah... Mamá, Hobi...—rió levemente recibiendo las bolsas y los globos de sus suegros— Pasen, pasen —recibió un beso en la mejilla de su madre, Hobi le dio una palmada en la espalda y los señores Jeon le despeinaron el cabello. Dejó los regalos en la mesa del comedor— Vengan, Kook estará feliz de verlos —los guió a la habitación compartida, asomó primero su cabeza— Tus papás están aquí, mi hermano y mi madre también —le avisó, el omega con la mención de su suegra y cuñado acomodó su camisa de botones, cubriendo su pecho. Le asintió al alfa que abrió por completo dejando pasar a todos.

—Hola...—JungKook les sonrió a todos, recibió besos en sus mejillas por sus padres y suegra, HoSeok le revolvió el cabello.

—Ow, está dormida —los tres abuelos se acercaron levemente mirando a la bebé.

—En realidad está despierta —dijo JungKook acomodando el gorrito en su cabeza— Acaba de comer

—Oh, ¿cómo vas con eso, cariño? —le preguntó SunHee.

—Mm... No tan bien —hizo una mueca— Tengo piel sensible y poca producción de leche para las veces que debe comer —dijo cruzando sus piernas, dejó una almohada en ellas— Muy mala combinación —todos rieron por su cara de sufrimiento— mi piel está irritada y rota, sangra aveces y... —su padre empezó a reír— ¡Papá!

—Bebe de tu propia medicina, hijo —rió malvado, los demás le siguieron.

—¿Todavía no ha abierto los ojos? —HoSeok se acercó levemente con la manos en los bolsillos, YoonGi negó con una mueca.

—YoonGi no abrió los ojos hasta cumplir la semana —dijo SunHee viendo con amor a la bebé.

—Kookie los abrió a las horas de nacer, cuando yo dormía, todo un fastidioso —los padres del mencionado rieron.

—¿Puedo? —HoSeok pidió permiso al omega de cargar a la bebé, JungKook asintió entregándosela con delicadeza— Ow, eres muy bonita, bebé —el beta le habló con voz chillona, la bebé se removió con el ceño fruncido.

—Vas a hacer que llore con esa voz —YoonGi rió molestando a su hermano.

—No va a llorar —rodó los ojos, volvió la vista a su sobrina— ¿Verdad que no, princesa? ¿Verdad que quieres mucho al tío Hobi? Si que si~ —la sostuvo en un brazo y movió su dedo índice a la mejilla de la niña que se quejó removiéndose aún más, HoSeok rió. Todos miraron con ternura como la bebé tomaba su dedo en su puño, y luego miraron con sorpresa como la bebé abría los ojos, viendo al beta— Hola, bebé~ Si, si quieres mucho a tu tío Hobi~ Ojitos bonitos~ —le sonrió.

—¡No puede ser! —YoonGi se acercó y le quitó a la bebé a su hermano— Eres mala —achicó sus ojos a la niña que se removió de nuevo y bostezó, cerró sus ojos nuevamente.

—¡Esto me ofende muchísimo! —JungKook estiró sus brazos y pidió a su hija, la recibió con un mohín en sus labios. Los padres de los dos estaban riendo a carcajadas por la reciente escena.

—El tío Hobi es el mejor, ¿qué les puedo decir? —rió esquivando los golpes de su hermano.

—Ash, te odio HoSeok hyung —JungKook fruncio el ceño.

—No importa que ustedes me odien —carcajeó— ¡su hija me ama! Fui la primera persona que vio en su vida —sonrió orgulloso.

—El primer susto de mi hija, hyung estúpido —le golpeó en la nuca.

La tarde pasó con risas y con las muecas ofendidas de los padres primerizos.

Cuando los invitados se fueron, la pareja se sonrió, uno de sus sueños se había hecho realidad, junto a la persona que amaban.

La pareja de casados ahora se encontraba sola en la habitación, la bebé dormía plácidamente en su cuna, en la habitación contigua, los dos estaban sentados en la cama.

—Hyung...—JungKook bostezó abrazando al alfa, este acarició su cintura.

—Cambiate para dormir, bebé —el omega asintió y sw levantó quitando su ropa, abrió el armario y sacó una de las camisas de su alfa, se la colocó y rebuscó en los cajones algun short, al encontrarlo pasó sus pies por los huecos y los empezó a subir, bufó cuando la prenda no pasó de sus muslos.

—Sin nada —se quejó arrojando el short al cajón y quitando sus bóxers, volvió a la cama junto a su alfa— Tendré que hacer ejercicio —puchereó abrazando al pelinegro por los hombros.

—¿Por qué? Te vez hermoso así —rozó sus narices y besó sus labios castamente.

—No puedo andar sin pantalones toda la vida —rió colocándose a horcajadas sobre el pelinegro.

—Si puedes —rió juntando sus labios en un beso lento, sin apuros, YoonGi sin segundas intenciones bajó sus manos a los muslos del omega y empezó a acariciar— Mm.. —JungKook aumentó el ritmo del beso y adentró su lengua juntándola con la del mayor que, agitado y despeinado se separó mirando fijamente al omega.

—YoonGi...—JungKook se apegó más a él y escondió su cara en su cuello, el alfa gruñó sintiendo los pequeños besitos en su cuello.

—Kookie... Mi vida —les dio la vuelta y quedó encima del omega, este le sonrió, YoonGi le devolvió la sonrisa y se acomodó a su lado— Vamos a dormir, ¿si? —le dijo con suavidad tomando el cobertor, el omega empezó a lloriquear sintiendo el cobertor cubrirle y al alfa abrazando su cintura— Ya puedes dormir como antes, bebé —habló ignorando los lloriqueos de su omega, el doctor Im le había dicho muy específicamente que su omega entraría en una especie de "calor" cada que la bebé no esté con ellos o esté dormida, y muy específicamente le dijo que debía ignorarlo recalcando que era peligroso para el mismo omega mantener relaciones luego de haber dado a luz.

—YoonGi~ —JungKook se subió a horcajadas sobre el alfa, este le atrajo a su pecho y lo abrazó.

—Duerme, bebé —le susurró liberando feromonas que lograron que el omega cayera en un sueño profundo de donde solo le sacó la pequeña Sumni, pidiendo su desayuno.

Falta un extra y los agradecimientos :3

Este extra si fue largo, ¿les gustó?

SPAM:

Acabo de publicar un One-Shot TaeKook  les invito a leerla y darle amor! ♥

The_Dark_Diamond