心臓: t w o
No es consciente realmente del tiempo transcurrido aunque se esmera en continuar su vida como si nada hubiera sucedido meses atrás.
Y a pesar de su nula ubicación temporal, Taehyung se encuentra un poquito mejor, sólo un poquito. En parte por la terapia psicológica que accedió a recibir después de una crisis existencial y en parte también por sus amigos que se encargan de siempre distraerle.
Pero algo que no ha cambiado en lo absoluto es el hecho de que sigue sintiendo un horrible nudo en el estómago al ver las pertenencias de su omega en el departamento. Jura que al entrar al lugar su lobo moribundo desgarra su interior en dolor al percibir apenas el aroma de la omega aún impregnado en el lugar, incluso su agonía impasible en algún punto fue tanta que ya ni siquiera duerme en la que alguna vez fue su habitación.
Ahora concilia el sueño la mayor parte del tiempo en el sofá de la sala o en el cuarto de su hijo, bueno, no es como que lograra conseguir dormir mucho realmente. Y aunque sabe que terminará con dolor de cuello por las incómodas posiciones que se fuerza a aguantar en el sofá, prefiere un dolor en el cuello que en el corazón.
Siendo sinceros, Taehyung está considerando fuertemente el mudarse de aquel apartamento, porque no se cree poder seguir viviendo así. Con un pesar en el pecho todo el tiempo.
Y lo vuelve a pensar mientras hace las compras de la semana en una tienda departamental, acomoda su cabello esponjoso en su frente antes de depositar las bolsas con la despensa en el interior del auto. Acomoda a Hyejeong en el canguro que mantiene su cuerpo estable contra su pecho y muerde su labio curioso al ver un establecimiento de bienes y raíces, mira a los alrededores y después posa sus orbes en su cachorro que agita sus manitos algo emocionado.
Iría a ver, sólo para matar a sus pensamientos compulsivos.
Entra al local de la agencia de bienes y raíces y reverencia poquito, justo lo que le permite el canguro que carga con su cachorro al frente de su pecho "Buenas tardes" le contesta una mujer de aspecto mayor detrás del recibidor con una sonrisa en los labios delgados.
Taehyung camina a paso lento por el establecimiento y la mujer inquiere con voz relajada cuando el alfa se sitúa frente al mostrador "¿En qué le puedo ayudar?"
"Uh... bueno, estoy buscando un apartamento disponible en este mismo barrio" dice después de pensar en una mísera mentira. La mujer asiente y le invita a pasar a lo que parece un cubículo en donde aparentemente le atenderán. Un hombre le recibe alegre sentado detrás de un escritorio y Taehyung deja caer sus hombros anchos cuando su cuerpo se posa sobre una silla.
El proceso de búsqueda usualmente era un tanto incómodo, lo sabe muy bien, después de todo no es su primera vez en una situación parecida, sin embargo ese día el ambiente dentro del local le resulta bastante ameno y cálido. La señora que le había recibido se encarga de ofrecerle una bebida que él acepta con gusto; incluso se permite hablar un poquito con el hombre que se encarga de voltear la pantalla de la computadora para mostrarle los diferentes apartamentos disponibles dentro del sistema.
"Oh, mire, éste se ve bastante bien" Taehyung ve al hombre desplegar una pantalla nueva en la computadora y surca levemente sus labios al mirar el departamento.
Observa detalladamente los acabados del departamento conforme el hombre pasa las imágenes disponibles en el sistema y asiente complacido "Si te gusta podemos agendar una cita con el dueño para que puedas verle"
No estaba en sus planes, pero acepta la propuesta.
Tres días después Taehyung termina firmando un contrato nuevo de alquiler.
Y aunque es una decisión algo alocada y poco pensada se siente aliviado de haberla tomado en ese momento.
Sus padres habían ido a visitarle unos días atrás después de enterarse de su cambio de apartamento para hacerle compañía y para ayudarle con la mudanza. En serio agradece con todo su corazón aquello, porque sabe que Hyejeong puede estar en buenas manos mientras él trabaja, de cierta manera evitando también el molestar a Jimin en sus días libres para que cuide a su cachorro llorón.
La semana es bastante pesada en sí, entre el cierre de trimestre dentro de la empresa en la que ejerce, la mudanza y su hijo, su energía termina por los suelos, pero no puede quejarse mucho al respecto porque el último día que pasa en el apartamento que le hizo compañía durante seis años es complacido con una rica cena en compañía de sus padres.
Y aunque es bastante sencillo el asunto, no puede evitar sentirse feliz al estar con esa pareja algo mayor.
"¿Cuándo regresarán a Daegu?" pregunta Taehyung mientras prepara su siguiente bocado entre sus palillos.
"Pasado mañana. Queremos ayudarte un poco con la mudanza"
Taehyung sonríe "Gracias por todo" su madre le toma la mano y niega levemente.
"No debes de agradecernos por nada Tae" el alfa suspira y forma un puchero en sus delgados labios.
"¿Por qué esa cara hijo?" inquiere su padre con un tono de voz algo preocupado y el alfa menor menea la cabeza levemente antes de posar sus orbes grandes en Hyejeong que reposa dormido en su asiento de color verde.
"No sé con quién dejaré a Hye... no quiero seguir molestando a Jimin y a mi suegra con eso..." la omega levanta sus cejas delgadas y piensa un poco.
"¿Cuántos meses tiene Hyejeong?" Taehyung relame sus labios y después le contesta a su madre
"Cuatro meses"
"Podrías llevarlo a una guardería. Conozco una que acepta cachorros desde los 3 meses, creo que no queda muy lejos de tu trabajo"
A Taehyung no le agrada mucho la idea de dejar a su cachorro a cargo de desconocidos, pero siendo sinceros no tiene muchas opciones. Es eso o tener que molestar a sus conocidos por los próximos 2 años.
"¿Podrías decirme cómo se llama la guardería?" le dice con voz baja después de pensarlo unos instantes.
Realmente no se espera que termine indagando por internet sobre distintas guarderías que prometen un buen cuidado. Y quizás es demasiado maníaco, porque lee con sumo detalle cada cosa sobre la información de los establecimientos y siempre termina viendo cosas que no le terminan de parecer.
Perdonenlo, es exigente.
Se siente algo incómodo buscando diferentes guarderías en los próximos días después de que miserablemente se instala en su nuevo departamento, y no es hasta que Jimin le acompaña saliendo de su turno en el hospital que puede despabilarse un tanto en su búsqueda implacable.
"Uhm, según el buscador en dos cuadras está la guardería que tu madre dijo" susurra el omega mientras hace un ligero zoom en la pantalla de su móvil.
Taehyung maneja por entre la calle algo lento y sube sus cejas al notar una fachada algo colorida "Creo que es ahí" Jimin asiente de acuerdo y se asoma ligeramente por la ventana cerrada para poder ver más allá de la rejilla de colores.
El alfa aparca relativamente cerca de la guardería y ambos bajan del auto. Taehyung se encarga de cargar a Hyejeong cuando empiezan a caminar por entre la avenida y no puede evitar mirar con suma atención todo de aquel lugar demasiado colorido para su gusto.
Es bastante grande y por la hora ya no hay niños en las instalaciones. Jimin toca el timbre de la puerta principal que permanece cerrada y después acaricia la curva apenas visible de su vientre cubierto por un suéter grueso de lana.
Ambos esperan unos segundos antes de que la puerta de metal se abra y salga una omega joven a recibirles. Taehyung no sabe muy bien qué decir, pero se ve salvado por su amigo que al notar su expresión turbada habla por él "Buenas tardes, venimos por informes" el omega dice directo y la mujer les sonríe y les deja pasar al patio repleto de juegos.
Taehyung comienza a notar que últimamente sus habilidades sociales vienen decayendo bastante. Y es más presente de aquello cuando la que parece dirigir el lugar les da un recorrido por las instalaciones y se encarga de explicarles todo con sumo detalle. Mentiría si no dijera que es algo incómodo.
Ahora ahí estaba, en una oficina en donde una mujer les tendía folletos con distintos programas que existían en la guardería para los niños.
"Su hijo podría entrar en el área de maternidad y neonatales" Taehyung ve con una sonrisa graciosa a Jimin que se tensa ante las palabras de la mujer.
"No somos pareja" musita tajante Jimin buscando quizás aclarar las cosas de una manera un tanto extraña con los brazos cruzados por sobre su abdomen. Y lo único que consigue es que la omega se sonroje furiosamente y se disculpe repetidas ocasiones. Taehyung muerde su labio algo fuerte en una forma torpe de contener una risa sosa.
Quizás es por la pena que ha pasado la mujer lo que la orilla a ser en exceso amable y Jimin no es idiota, ve la oportunidad para poder sacar algo más que sólo amabilidad. Taehyung se sorprende un poquito ante las habilidades manipuladoras del castaño que le termina sacando a la omega un ligero descuento en la inscripción.
"Okay, ¿desde cuándo podemos empezar a traer al cachorro?" inquiere Jimin con los labios alzados en victoria.
"Cuando se deposite el pago de inscripción y se traigan los papeles necesarios podrá asistir"
Y Taehyung tal vez paga el depósito en el mismo momento porque hay algo que le transmite confianza en el lugar para dejar a su hijo ahí (no es el descuento que recibe, ejem). Jimin se muestra demasiado emocionado mientras ve al alfa consumar el contrato con la guardería y Taehyung no sabe por qué.
"Creo que ha sido la mejor guardería de todas las que hemos visto. Tu madre tenía razón" habla en voz baja Jimin cuando salen de las instalaciones y Taehyung asiente poquito mientras vuelve a cobijar a Hyejeong que se remueve incómodo entre las mantas que le cubren.
"Necesitamos comprarle las cosas que traerá a la guardería y traer los papeles" divaga el omega graciosamente a la par de que da una vuelta y ríe juguetón imaginando quién sabe qué.
"Será después, me quedé sin dinero por lo del depósito. No creo poder costear todo ahora" Jimin niega con su cabello algo largo y arruga su nariz chata "No te preocupes TaeTae, yo le compraré sus cosas. Hoy estoy de buenas y tengo ganas de gastar dinero. Vamos"
Taehyung realmente se encuentra un poquito sorprendido y aunque trata de objetarle a Jimin que no es necesario hacer eso, termina en el asiento del copiloto mientras el mayor maneja sonriente demasiado alegre hacia el centro comercial más cercano.
El alfa no sabe si Jimin hace aquello sólo porque sí o porque quizá busca distraerle de su horrible realidad y aunque no quiera admitirlo le entretiene, le gusta pasar tiempo con él.
Es bastante encantador el hecho de verle escoger ropa algo afelpada y varias cobijas a Hyejeong, pero lo que es más lindo es ver a Jimin con una mirada esperanzada analizar ropa de cachorros recién nacidos mientras se toca inconscientemente el vientre.
"¿Por qué me ves así?" le dice Jimin con los orbes entrecerrados y con su típica sonrisa socarrona.
"¿Qué crees que sea?" Jimin arruga el ceño en algo de confusión y boquea al ver cómo Taehyung apunta con su cabeza su vientre hinchado.
"Oh..." Taehyung le sonríe vagamente con Hyejeong en brazos. "A veces tengo el presentimiento de que es una niña"
"¿Por qué?" Taehyung relame sus labios y toma entre su mano libre un pequeño mameluco con un osito bordado en la parte del pecho. Dios la ropa de bebés es demasiado linda.
"No sé, simplemente lo presiento" Taehyung asiente ante sus palabras tratando de comprender su sentir, vuelve a dejar la prenda pequeña en el gancho y sigue a Jimin cuando comienza a caminar al siguiente pasillo.
Finalmente pasan a la caja a pagar todo después de seguir mirando algunas cosas más. Y después de algunos segundos vuelven con las manos repletas de bolsas al auto que les espera aparcado en el estacionamiento subterráneo del centro comercial.
Taehyung se encarga de guardar todo en la parte trasera del auto y Jimin le espera sentado en el asiento del copiloto mientras le hace muecas a Hyejeong por el espejo retrovisor. Taehyung alcanza a ver al omega y niega con una sonrisa en los labios.
A veces Jimin peca de ser lindo.
"¿Quieres que te lleve a tu casa?" pregunta Taehyung después de abrocharse el cinturón de seguridad y Jimin niega algo distraído en la pantalla del teléfono.
"Nop, le dije a Nammie hyung que pasaré la tarde contigo, él irá a recogerme a tu departamento más tarde"
"Ah, pensé que me libraría por fin de tu odiosa presencia" Jimin forma un puchero y golpea suavemente su hombro en una forma de reproche. Taehyung se ríe y de la nada le agradece al omega cataño que se queda escéptico ante la voz suave del alfa.
"Gracias por estar a mi lado Jimin-ah" Y quizá el alfa espera que el castaño le responda juguetón como siempre, mas no que Jimin le abrace incómodamente por la separación de los asientos y le acaricie su suave cabello esponjoso.
"No me agradezcas bobo, yo siempre estaré para ti. Eso hacen los mejores amigos ¿no?"
La tarde se pasa relativamente rápido, tal vez es el hecho de tener que terminar de desempacar y armar algunas cosas del nuevo departamento de Taehyung lo que provoca que el tiempo se vaya sorprendentemente rápido.
Taehyung termina de empujar el sofá que acaba de desempacar y el omega le ve tirado desde la alfombra que acaban de poner con Hyejeong sonriendo babosamente en brazos "Yo prepararé la cena" la voz alegre de Jimin se escucha por encima de la suave música que se reproduce por el parlante pequeño que permanece en el suelo. Taehyung no se niega porque sabe que Jimin cocina mejor que él y que es un poquito demasiado más ordenado.
Ve al omega ponerse de pie y recibe al bebé que extrañamente aquel día no había lloriqueado tanto; el alfa quiere creer que Hyejeong se comienza a acostumbrar a la falta de presencia de EunJi.
"Ven con papá" el bebé cubierto con un gorrito tejido le sonríe y Taehyung por un instante se siente feliz de tener a su pequeño hijo que pronto le jala parte de su cabello desordenado.
Taehyung se siente desolado y triste.
Y es que no puede encontrar palabras o aliento suficientes en el ambiente en el que está plantado; las manos le duelen un poco por la fuerza con la que aprieta el ramo de flores que trae consigo, su piel se lastima levemente por las espinas que no terminaron de ser cortadas apropiadamente y suspira con el corazón en la garganta ante el fresco aire que anuncia la próxima llegada del otoño. Muerde su labio en un reflejo masoquista para quitar la piel seca que yace ahí y mira levemente el cielo un poco nublado por el tiempo de lluvias.
"Perdón por no haber venido antes..." susurra bajito aunque esté solo por entre aquel lugar; su abrigo parece no ser suficiente para cubrir el frío que le recorre el espíritu cuando se arrodilla frente a la lápida y deja el ramo de flores que consiguió pagar con lo último que le quedaba de su salario. "Si te soy sincero, no me creía capaz de poder venir. Soy muy cobarde, perdón" vuelve a disculparse y se sienta sobre el suelo húmedo y el pasto algo crecido con el corazón galopando fuerte y con las lágrimas amenazando aparecer.
Rebusca por entre la pequeña bolsa que trae puesta y saca dos pequeñas cajitas algo delgadas "Sé lo mucho que te gustaba el incienso con olor a gardenias, te traje una varita..." Taehyung no sabe realmente qué decir o pensar estando ahí, y quizás se arrepiente un poco de haber venido solo, porque en ese momento lo que más desea es un consuelo que le apoye.
Taehyung prende un cerillo, lo acerca a la varita que no tarda en prenderse y en comenzar a exhalar ese particular aroma algo fresco en forma de humo, deja el incienso encima de la lápida y con los hombros tensos relame la sangre seca de su labio inferior. Traga algo nervioso y su mirada vacila un tanto por el panteón desolado "Hyejeong te extraña mucho... yo también, pero a veces creo que nuestro cachorro te extrañará toda la vida aunque no te haya conocido por mucho tiempo" dice después de conseguir aliento para poder hablar y proseguir con lo que sea que trata de hacer.
Y no quiere llorar, pero simplemente no puede evitar derramar algunas lágrimas cuando el dolor en su esternón se torna algo insoportable de manejar. Jadea fuerte y los pulmones le arden en reproche por lo frío del aire, mas eso parece no importarle porque al siguiente instante suspira buscando ventilarse a la par de que espesas lágrimas descienden impasibles por sus mejillas de pan.
Brinca en su sitio cuando una mujer de aspecto algo mayor le toca el hombro y le pregunta con una voz algo gastada por su estado "¿Estás bien muchacho?" Taehyung asiente levemente con una mueca extraña en sus labios y la mujer le tiende una bolsa pequeña con pañuelos para que se limpie la nariz.
"Sí... gracias" La anciana parece repasar con sus ojos cansados el escrito en la lápida y después vuelve a mirar al azabache que limpia sus mejillas mojadas.
"Llorar y lamentarte después de que se van no sirve de mucho. Lo único que puedes hacer es seguir con tu vida y guardar tus recuerdos con esa persona en tu memoria" Taehyung levanta sus orbes grandes a la mujer que le ve con empatía. "Es difícil, créeme que lo es... pero al final de cuentas tienes que dejarles ir o de lo contrario tú te irás con ellos" la anciana le sonríe levemente y vuelve a tocar su hombro. "Debes de ser fuerte chico"
No sabe si son las palabras que le ha dicho la mujer o si es su instinto lo que le impulsa a ir desesperadamente por Hyejeong a la casa de Jimin a pesar de que le dijo al omega unas horas antes que llegaría por el bebé en la noche. Sin embargo ahí está, esperando a que el omega castaño le abra la puerta con el instinto sintiéndose demasiado alborotado.
"¿Tae? ¿Qué haces aquí? Pensé que tardarías más en llegar" Jimin le ve algo asombrado mientras carga al cachorro que contrae el rostro hostigado ante el aroma del alfa que se percibe algo amargo.
"Dame a Hyejeong" El omega parpadea y boquea un poco inseguro.
"¿Ya te lo llevas?" Taehyung asiente rápido y le quita de los brazos al niño que se queja.
"Sí, ya hice lo que tenía que hacer, ahora nos vamos. ¿Podrías traerme sus cosas por favor Jiminnie?" Taehyung se ve un tanto grosero al demandar y como si el universo le odiara atina a quejarse un poco al notar que Hyejeong pareciera que se niega a partir con él, frunce su ceño mientras grita fuerte y se remueve lejos del tacto cuidadoso de Taehyung.
Jimin le ve algo consternado y realmente no queriendo recolecta las cosas del niño y se las entrega al alfa que batalla con calmar a su hijo.
Jimin nota a Taehyung extraño.
"¿Estás bien Tae?" apenas logra musitar el omega por entre el llanto inquietable del menor y Taehyung le responde con el rostro fruncido, con un tono de voz que suena tosco y activa recuerdos en Jimin "Claro que estoy bien, estoy excelente. Ya me voy, nos vemos luego Jimin"
El mayor mira con orbes grandes al alfa con sus manos suspendidas en el centro de su pecho y tiembla poquito por la imagen que se le viene a la memoria, mas no le dice nada a Taehyung que pronto sube a su auto y sin siquiera mirarle, parte.
Taehyung en el auto encuentra cierta perdición en el intenso llanto de Hyejeong.
No se cree capaz de poder manejar la situación apropiadamente, pero su instinto le gana y lo obliga a hablarle bonito a niño mientras libera feromonas en un intento vago por mermar el enojo de su cachorro berrinchudo.
"Hye, pequeño, cálmate por favor" Y sorprendentemente Hyejeong grita más fuerte reacio al aroma y a la presencia del alfa que aprieta el volante bajo su tacto en una forma de drenar su malestar. Taehyung no puede evitar sentirse el peor padre del mundo al mirar por el espejo retrovisor al bebé en su asiento berreando con el rostro sonrosado por su culpa.
Porque sabe que el bebé se encuentra un poco más cómodo con Jimin que con él. Y aunque no lo quiera admitir siente celos, muchos a decir verdad, jura que si lo dice en voz alta hasta suena estupido para él; lo ve como un instinto bajo de su lobo que gruñe algo disconforme por el simple hecho de ver que cómo su cachorro recibe mejor a su mejor amigo, le hiere en cierta parte el orgullo.
Maneja un tanto rápido por las avenidas poco transitadas por la hora y quizás lo hace para arribar rápido a su departamento para intentar calmar a Hyejeong en un ritual que ya se sabe de memoria. Suspira un poco cansado cuando al fin aparca su auto en el espacio que le corresponde y con cuidado de no perturbar más al cachorro le saca de su asiento pequeño y le carga, mas el infante hipa y se aferra al suéter de Taehyung.
El alfa le propicia unas pequeñas palmadas en la espalda y Hyejeong entierra su rostro fruncido en el hombro de su padre cuando el ruido del exterior le molesta aún más. Con las manos ocupadas y con algo de esfuerzo Taehyung logra entrar a su departamento, y en realidad se arrepiente poquito de haberse mudado hace poco porque desde que pone un pie en el recibidor nota el desastre que no ha sido completamente recogido en toda la extensión de la sala; vuelve a suspirar por enésima vez en el día y deja las cosas que trae colgando en la extensión del sofá y acomoda a Hyejeong en sus brazos miseramente mientras el niño grita con todo el aire que tiene.
Probablemente los echen por ruidosos.
Taehyung quiere creer que es su instinto lo que lo obliga a apoyar la cabeza del infante en su pecho, ahí en donde su corazón se encuentra, tal vez buscando que el cachorro al oír el palpitar de su órgano vital se calme un poco, mas el infante frunce el ceño y golpetea con su mano hecha un puño el pecho del alfa que muerde su labio destruido.
Y es que Hyejeong siempre se calmaba al escuchar el corazón de su madre.
El alfa no quiere, no quiere hacer lo único que sabe que calmará al niño que se muestra nuevamente reacio a su tacto,quizá porque sabe que él resultará lastimado, pero su desesperación por tranquilizarle es mucho más que su mente nublada. Con una mano temblante por la ansiedad desbloquea su celular y abre aquella aplicación que guarda recuerdos en su interior y no queriendo abre ese video que sabe calmará a Hyejeong; y no se equivoca porque el niño abre sus ojos grande ante la voz grabada de la omega que se deja oír por la bocina del móvil y mueve sus diminutas manos algo emocionado por la voz del video, mientras Hyejeong sonrie bonito Taehyung forma una mueca algo insipida en sus labios carentes de color.
Ese video... aún recordaba vívidamente el día en que lo había grabado; Hyejeong acababa de nacer y Eunji siempre se empeñaba en cantarle suavemente cada que podía y Taehyung cada que le atrapaba no dudaba en grabarle con su celular. Y a veces cuando podía él también acompañaba a la omega en su canto meloso y aunque no era el mejor vocalista lo intentaba, todo con el afán de hacer feliz a su pequeña familia.
Eran pequeños momentos de intimidad que el alfa disfrutaba en demasía...
Y que ahora por cuestiones del destino se han roto, porque siendo sinceros Taehyung aún no termina de asimilar lo que ha sucedido esa noche y en serio se esfuerza para tratar de dejar la perdida de su omega atrás, pero le es sumamente difícil. Es como una especie de tumor que vuelve a crecer en su interior.
Lo que más le destruye es el hecho de tener que ver a su cachorro crecer sin una figura materna. Taehyung sabe muy bien que él no podrá suplir ese lugar por más que quisiera.
Su corazón se aprieta ante la imagen de su bebé sonriéndole a la imagen de su madre en el celular con el rostro mojado. El alfa simplemente no sabe cuánto más podrá manejar esa agonía.
sorry x la demora jeje
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