Aún así con mis problemas para recordar momentos o cosas, no olvido nuestro primer encuentro y el cómo este surgió de la nada, como la sorpresa de un milagro que surge de la nada. Tú, con una sonrisa que iluminaba el mundo como un sol en su eterno resplandor, llegaste como una estrella fugaz a mi vida, con tu presencia que atraía como un imán hacia ti sin que pudiese evitarlo. En ese momento despertó en mi interior un torbellino de emociones indescriptibles. Era como la magia. Algunos les decimos amor a primera vista, pero eso era demasiado para creerlo, aún así ya con todos los años que han pasado desde aquel encuentro, si se trataba de ti podía afirmar que eso fue lo que pasó con ambos. Se sintió como un hilo tejido por el destino que estaba atado firmemente a mi alma.

Cuando te conocí , nuestro alrededor restó importancia y se desvanecía en un susurro, dejando solo el espacio que compartíamos, vibrante y etéreo. Ese día cuando choqué contra ti por accidente el silencio se convirtió en un lienzo donde solo resonaban nuestras respiraciones, sincronizadas y profundas. En ese instante, con la certeza que surge solo una vez en la vida, supe que eras tú. Eras la persona con quien mis días se llenarían de luz, la persona a quien dedicaría cada latido de mi corazón.

Y a quien estaría dispuesto a darlo todo. A quien le dedico cada sonidos de mi corazón

—Perdóname. Estaba apurado y no te vi. —hablaste tan rápido que apenas y pude entenderte.

Eso fue lo que dijiste mientras intentabas recoger tus cosas pero antes de tomar algo buscabas algo con desesperación, yo me agaché para intentar ayudarte y ahí me di cuenta de lo que estabas buscando. Buscabas tus lentes.

No te dije que los había encontrado, simplemente los tome y los puse sobre tu rostro. Ese acto te asustó un poco pero al poder verme te relajaste y yo por mis propios nervios que me traicionaron solo sonreí e intenté ocultar mi rostro bochornoso por el simple hecho de darme cuenta de tu bello rostro y las hermosas pecas que adornaban tus mejillas.

—Gracias, mmm.

—Me llamo Jungkook. —le dije cuando noté la curiosidad en tu rostro al no saber mi nombre—. ¿Tú cómo te llamas?

—Mi nombre es Park Jimin. ¡Oh por dios, ese es el libro de Mario Benedetti! ¿Te gusta a ti también?

Me reí porque al parecer se hizo muy notable mi gustos por los libros, pero no me juzgaste o tampoco me llamaste aburrido. Al parecer a ti también te gustaban muchos los libros sobre misterio, amor y poesía.

Ese mismo día nos hicimos amigos, intercambiamos anécdotas mientras caminábamos a la biblioteca y nos sentamos no muy lejos de la recepción del lugar.

—Sabes, es la primera vez que te veo acá. ¿Eres nuevo?

Ante mi pregunta el solo río y mostró su hermosa sonrisa que me dejó embelesado por unos microsegundos, suficiente tiempo para darme cuenta que tenía uno de sus dientes frontales ligeramente torcido, pero eso lo hacía más tierno ante mis ojos.

¿Acaso no notaste que te miraba demasiado, Jimin?

—Me transfirieron hace muy poco. Tú eres la primera persona con la que hablo, eres muy amable al no patearme el trasero cuando choque contigo.

Reí por su ocurrencia.

—Por supuesto que no te golpearía, Jimin. —le sonreí.

—Ahora lo sé, eres muy lindo como para ser mala persona. —quizás en ese momento no notaste que tus palabras hicieron un efecto en mí como si un volcán de mariposas fuese a estallar dentro de mi estómago.

No dejamos de hablar en toda la tarde de nuestros gustos, que al parecer teníamos tanto en común, como dos personas echas para estar juntas y hablar sin cansarse porque a pesar de conocerse demasiado nunca se hablaba lo suficiente con alguien que hace estremecer tu corazón de alegría.

Casi sufrí de una taquicardia cuando nos despedimos al irnos a nuestras diferentes clases. Simplemente besaste mi mejilla y te fuiste como si nada.

Ese día supimos que nunca podríamos estar sin la compañía del otro. Intercambiamos número de teléfono y hablamos día y noche sin aburrirnos. Cuando estábamos juntos en el colegio varios de tus amigos quisieron conocerme y gracias a eso no me sentí solo en esa universidad nunca más.

—Oye, Jungkookie.

—¿Si, Jiminie? —te miré con una sonrisa, como siempre cada vez que escuchaba ese dulce apodo que solo tú con tu dulce voz tenían ese efecto en mí.

—Espero te acostumbres mucho a mi presencia porque no pienso dejarte nunca.

A pesar de habernos conocido por accidente en un corredor aislado cerca de la biblioteca de la universidad y hablar todos los días desde que tuvimos ese encuentro; supe que mi relación contigo no sería ordinaria. Al escuchar ese comentario de tu parte hizo que mi corazón se acelerara a cinco palpitaciones por segundo -o eso pensé-, me atemoricé al pensar que podría tener un paro cardiaco. Ese sonido ensordecedor de mi corazón cada vez que se descontrolaba al verte me dejaba sordo y me quitaba el aliento. Esa reacción de mi corazón que solo podía tener contigo.

En ese momento supe que ya no te veía como un simple mejor amigo. Me encantaba todo de ti que empecé a soñar contigo todos los días imaginando que estábamos en una situación diferente.

Amaba desde tu dulce risa escandalosa, tus gestos divertidos, la forma torpe en la que te tropezabas siempre y tu deslumbrante personalidad. Puse una mano sobre mi pecho y pude sentir mi acelerado corazón, nada raro porque solo me pasaba cuando estaba contigo, tanto que ya me había acostumbrado, pero esta vez era diferente.

—Nunca me aburriría de mi dulce Jimin. —te aseguré.

Tu solo me sonreíste con las mejillas sonrojadas y en ese preciso momento fue cuando me di cuenta que, lo que sentía por ti no era un amor común, como amar a tu familia o querer mucho a tu mejor amigo. Era algo más que eso.

Me di cuenta que estaba enamorado de ti, mi hermoso chico.

Desde que me di cuenta de ello no deje de intentar ocultarte mi amor por miedo a perderte, pero como todo lo que tiene que ver contigo ponía mi mundo de cabeza, tú tenías otros planes para nosotros. Como siempre, caí en tu trampa de hermosa sonrisa y bella personalidad.

Caí en la trampa del amor.

-♥️-

Nuevo fanfic, amores míos.
Pido una disculpa si la envíe a borradores, estoy corrigiendo algunos errores que me parecen indispensables de corregir.

Los capítulos serán cortos (no más de 1100 palabras).
Espero les guste! 🤍

Los errores los corregiré al terminar la historia.
Gracias por leerme!🤍

Att: Gigi.📝