Esmeralda toma mi mano y el silencio se instala en la sala.

Esmi y yo pasamos por mucho pero ahora somos muy felices y tenemos la dicha de compartir un nuevo capítulo de nuestras vidas que espero sea para siempre.

-Papi ya vamos a llegar a la parte en que te molestaste con mami.

-Es cierto Sukie.

-¡Qué vergüenza! Chicas está es una lección de vida ¡Nunca se dejen llevar por sus arrebatos!

El teniente Kim estaba por hacer una sucursal de la estación de bomberos en la escuela o en su defecto instalar una unidad de cardiología porque cada vez que asistía al kinder alguna maestra estaba al borde de un ataque cardíaco sin mencionar a las madres de familia que por poco olvidaban recoger a sus vástagos por mirar boquiabiertas al guapo papá de MiSuk Kim.

-¿Otra invitación para una fiesta? Sukie se ha convertido en una chica muy popular.

-Su popularidad aumentó sospechosamente desde que su padre viene a recogerla a la salida.

-SeokJin está muy agradecido con la escuela pero más que nada con usted Esmi gracias a su intervención MiSuk ha sacado a flote todo su potencial.

-No es nada señora Kim. Es un placer ver como MiSuk y sus compañeros se superan a sí mismos cada día.

-¿Sabe que mi niña la quiere mucho?

-Y yo a ella. Debo confesar que amo a todos mis estudiantes pero el nivel de empatía que tengo con Sukie es mayor, tal vez porque de cierta forma me veo reflejada en ella.

-¡Oh! ¿Usted también perdió a su madre?

-Mamá está bien gracias a Dios pero sí, perdí a alguien a quien quería mucho y tengo una niña un año menor que Sukie, ella me la recuerda porque tienen una esencia muy parecida.

-Sería lindo que se conocieran apuesto a que se harían grandes amigas.

-Apuesto a que sí.

Era una noche de tantas que la maestra había concluido el ritual nocturno de acostar a su pequeña hija, terminar con las tareas domésticas y preparar la clase para el día siguiente.

La paz de la monotonía se vio alterada al recibir la llamada telefónica de uno de sus contactos frecuentes haciendo que se pusiera en alerta ya que no era un horario regular para recibir llamadas referidas a la escuela.

-Buenas noches señora Kim.

-¡Es... Esmi!

-¿MiSuk? Cariño ¿Qué tienes hijita ha pasado algo malo?

-¡Síi! Abuelita está enferma y tío Joonie la trajo al hospital ¡No quiero que se muera y se vaya al cielo con mi mami!

-MiSukie tranquila verás que pronto se pone bien ¿Dónde estás?

-Es...estoy en la cafetería del hospital con una amiga de mi tío.

-¿Qué? ¿Y tu papá?

-Dijo que vendría apenas pueda porque tuvo que ayudar en una emergencia. ¡Tengo miedo Esmi y no me gusta este lugar! ¡Quiero a mi papi!

-MiSukie bebé ¿Sabes usar la videollamada?

-Sí

-¿Te gustaría que nos veamos mientras conversamos?

-Sí Esmi.

El cansancio del día se evaporó y el único pensamiento que llenó la mente de Esmeralda fue tratar de contener emocionalmente a MiSuk.

Su labor terminó cuando la batería del celular de la señora Kim se descargó por completo y la comunicación se vio interrumpida.

La angustia de saber de la niña hizo que estuviera a nada de llamar al Teniente Kim pero recordó que Sukie mencionó que estaba en una emergencia así que era probable que no respondiera.

Sus cavilaciones terminaron cuando recibió un escueto mensaje del susodicho.

-Gracias por ayudar a mi hija.

El mensaje tuvo el efecto contrario que ella supuso que se daría al tener noticias de MiSuk. La tranquilidad le fue esquiva y por el contrario, una sensación inexplicable de ira fue creciendo dentro de ella.

-¡Estúpidos héroes, todos son iguales! ¡Me va a escuchar idiota y pretencioso SeokJin Kim!

-Mami se convirtió en Theodora.

Al día siguiente el espíritu malvado poseyó a la por lo general serena Esmeralda Lazaro que presa de una total inconsciencia se convirtió en un volcán en erupción.

-Buenos días teniente Kim.

-¿Esmi?

-Sé que es temprano pero estoy muy preocupada por la salud de su madre y el estado emocional de MiSuk.

-Gracias por su interés. Ambas están bien, mi madre presentó un cuadro de apendicitis pero ya se encuentra estable y Sukie está dormida, anoche se acostó muy tarde.

-Me alegra saber que la señora Kim se está recuperando y que MiSuk haya podido conciliar el sueño después de la terrible noche que pasó.

El tono beligerante en la voz de Esmeralda no se condecía con la amabilidad de sus palabras.

El prolongado silencio de Kim le hizo saber que el bombero había detectado su ánimo belicoso.

-¿Teniente Kim sigue allí?

-Sí señora Lázaro. Disculpe que deba cortar la llamada pero debo descansar un par de horas antes de regresar al cuartel.

-¿Qué pasará con Sukie? ¿La dejará nuevamente a cargo de extraños en un lugar que la asuste?

-¿Perdón?

-¿No fue eso lo que sucedió anoche? ¡Debió verla, estaba aterrada! Por suerte es una niña muy inteligente por eso se comunicó conmigo y ya no la pasó tan mal.

-Esmi el hecho de que sea la maestra de mi hija y la haya ayudado lo cual agradezco, no implica que tenga que darle explicaciones sobre la forma cómo organizo mi vida familiar.

- No las estoy pidiendo teniente solo espero que Misuk no tenga que pasar nuevamente por esa experiencia tan traumática.

-Pues quédese tranquila mi hermano se quedará en casa cuidándola hasta que mi madre se restablezca.

-¿El mismo hermano que la dejó en compañía de una perfecta extraña?

-¡Suficiente Esmeralda! Como le dije no tengo porque darle explicaciones sobre la forma como soluciono mis problemas.

-Tenien...

Lo siguiente que escuchó Esmi fue el sonido del tono con el que supo que Kim había cortado la llamada y dejado con la palabra en la boca.

-¡Aish! No te librarás de mí tan fácilmente señor bombero.

-¿Mami adónde vamos?

-Vamos a visitar a una de mis niñas de la escuela.

-¿No la viste en tu aula?

-Lari amor ¿Hoy fuimos a la guardería?

-¡Oh! Con razón no la viste ¡jeje! ¿Y por qué no esperas a que vayamos a la escuela?

-Porque estoy preocupada por ella, su abuelita enfermó y se quedó a cargo de un tío.

-¿No tiene papi y mami?

-Papá pero trabaja todo el día ¿Recuerdas la vez que todos los niños del kinder salieron porque llegaron los bomberos?

-¡Sii, eso fue waoo!

-Uno de ellos es el papá de Sukie.

-¡Ah! ¡Entonces es un héroe como mi papi!

-Si Larissa es un héroe como lo era tu papi.