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-¡Jin hyung! ¿Puedes por favor dejar de reirte?
-¡Lo...lo siento de ... de verdad lo intento pe...pero no puedo!
NamJoon maldice entre dientes pero no puede evitar que mi escandalosa risa contagie a los otros hombres presentes: Tae, Tommy Farrell, Kike Rodriguez, Matt Hiroshi y Oliver Johnson.
Respiro profundamente y por fin puedo controlarme y hablar con normalidad.
-Joonie no puedes negar que se vio muy chistoso cuando la abuelita te pegó un batazo en la barriga.
Tae toma la posta para burlarse de nuestro hermano.
-Hyung agradece que no apuntó más abajo porque sino estaríamos buscando los restos de lo que fue tu hombría.
-¿Agradecer? ¡Halmeoni por poco me rompe las costillas! Eso me pasa por secundar las ideas de Esmi noona. Lo peor fue cuando la horda de liliputienses no tuvo la más mínima compasión y se abalanzaron a recoger las golosinas sin importarles que estaba doblado en cuatro del dolor.
La sola mención de esa escena hace que todos volvamos a reír hasta las lágrimas.
-Eso amerita otra ronda de cervezas.
-Tom no deberías tomar tanto si vas a manejar.
-Por suerte nuestro amigo designado es el responsable oficial Rodriguez que apenas y ha tomado un poco de cola.
El aludido brinda con un vaso colmado de refresco de soda con hielo.
Kike es el orgullo de su familia ya que es el primero que culminó una carrera como oficial de policía en Chicago y luego decidió regresar a Minari a servir a la comunidad que lo vió crecer.
Las cervezas llegan y un cómodo silencio se instala entre nosotros.
Al otro lado del jardín de halmeoni conversan muy animados los patriarcas de las familias de Minari y pilló sin querer las miradas de mis hermanos que observan con respeto y admiración a los caballeros; Sé que ellos están pensando lo mismo que yo:
Como me gustaría que papá estuviera aquí. ..
Otro grupo está formado por las esposas de los hombres mayores, sus risas cantarinas traen a mi memoria las tardes cuando las mamás de mis amigos o sus abuelas venían a visitar a mi madre o abuelita mientras los niños poníamos de cabeza el enorme patio de la granja.
La voz de Matt Hiroshi me devuelve al ahora:
-Jin tus tíos son muy convincentes afortunadamente hicieron que papá reconsidere su decisión de vender la granja a la corporación Schneider.
-Me alegro Mattie tu familia tiene una propiedad hermosa que han cuidado con esmero sería una lástima que cedieran sólo por hartazgo para librarse del acoso de esos desgraciados.
-Debo admitir que no solo tus tíos obraron el milagro sino también la vehemencia y determinación del abogado Park.
-Se los dije JiMin es una fiera y que se iba a encargar de poner en su sitio a esos abusivos que solo sirven para atolondrar a personas de la tercera edad.
NamJoon no pierde la oportunidad para molestar a Tae.
-Calma, calma JiMin lover ya sabemos que eres el presidente de su club de fans. Por cierto ¿Por qué no vino a hacer los honores a halmeoni? ¡El chico adora a abuelita!
-Tuvo que viajar con urgencia a Chicago.
Joonie mueve la cabeza satisfecho con la respuesta.
-SeokJin ¿Cuánto le falta a Esmi para dar a luz?
El curioso es Oliver Johnson.
- Poco más de tres semanas.
-¿Y a quién crees que se parecerán las gemelas?
Mmmm... Esa pregunta me suena sospechosa.
-No tengo idea pero con suerte las niñas tienen algo de ambos.
Oli toca su barbilla y afirma.
-Una respuesta muy diplomática pero nada conveniente para ciertos fines ya que un empate desarma a cualquiera de las dos opciones establecidas.
-Oli ¿Qué carajos fue lo que dijiste?
Las palabras de Johnson se pierden en el ambiente porque un furioso sonido las ahoga con su fuerza.
-¡Mierda! ¿Qué fue eso?
-Una explosión y el sonido vino de allá.
El brillo del fuego confirma mi afirmación y la cara de pánico de Tom Farrell me dice que está pensando en algo más.
-Debo ir a ver a mi familia.
...
Manejo lo más rápido y prudente que puedo y desde la radio que siempre llevo en la camioneta reporto la situación al 911: Explosión seguida de fuego, estamos en una zona agrícola y las condiciones climatológicas exacerban la velocidad con que se expande el incendio.
Los temores de Tom Farrell son ciertos, el fuego avanza a gran velocidad en dirección a su propiedad pero la fuente del mismo viene del extremo de ese bloque de tierras.
Sunshine, la propiedad de los Sullivan.
-Tom debemos evitar que el fuego llegue a los límites de Aurora ¿Tienes habilitado el sistema contra incendios que diseñó papá?
- ¡Por supuesto!
-Entonces manos a la obra.
Instruyo a mi amigos, Tae y Joon sobre cómo debemos proceder para evitar que las llamas lleguen a la granja Farrell y cómo protegernos de la inhalación del humo mientras Tom reúne a su familia y ve como ponerlos a salvo.
Una nueva explosión remece el suelo y el señor Farrell se acerca para hablarme aunque su voz es apenas audible por el crepitar del fuego.
-Esas explosiones deben venir del depósito de fertilizantes de los Sullivan debemos hacer algo para detenerlas.
-No tenemos los equipos para combatir ese tipo de fuego lo único que podemos hacer es tratar de evitar que se expanda mientras llegan los bomberos del distrito.
Tom senior palmea mi hombro y corre a apoyar a su hijo.
Las sirenas de los camiones de bomberos no tardan en hacerse escuchar y la sensación de alivio llega a todos.
Mis colegas se hacen cargo de la situación y nosotros pasamos por las manos de los paramédicos de la unidad del distrito.
Mientras comprueban nuestra condición se acerca el capitán de la compañía.
-¿Ustedes son los hijos del capitán MinSeok Kim?
Mis hermanos y yo movemos la cabeza en señal de afirmación a lo que el oficial responde estrechando con cortesía nuestras manos.
-Soy el capitán Schultz de la compañía de bomberos del distrito, es un honor conocer a los hijos de un gran bombero que resaltaba por su gran espíritu de servicio. Gracias al sistema que diseñó e implementó en las granjas de Minari hoy se pudo prevenir una tragedia de grandes proporciones.
Joonie, Tae y yo agradecemos las palabras de Schultz.
-Otra de nuestras unidades está atendiendo el foco de la explosión en la granja Sullivan, aparentemente era el depósito de fertilizantes de la propiedad.
-¿Cómo se encuentran los otros ambientes de la granja?
-La casa ardió totalmente, aparentemente no había ningún animal en las caballerizas y el fuego quemó el 90% de los campos de cultivo.
La radio del capitán suena y él se disculpa alejándose para coordinar con sus hombres.
Tae está inmerso en sus pensamientos hasta que los expresa en voz alta.
-¿Creen que Sullivan haya hecho esto a propósito?
-Si lo hizo merece pudrirse en la cárcel.
-Si esa fue su intención espero que el fuego se lo haya tragado.
Es momento de despedirnos y los Farrell nos abrazan con extrema gratitud.
-Matt te llevo a casa.
-Ve con tu esposa SeokJin yo llevaré a los muchachos.
Le doy una palmada de agradecimiento a Rodriguez y parto con mis hermanos en dirección a nuestro hogar.
...
Estaciono la camioneta en la entrada de la casa de mamá y es allí cuando me doy cuenta de las fachas que traemos los chicos y yo: Estamos cubiertos de cenizas, con las caras manchadas, sudorosos y con expresiones agotadas.
-Es mejor que entremos lo más discretamente posible, no es conveniente que mamá y Esmi nos vean así.
-Muy tarde hyung las señoras con oídos de superheroínas ya se dieron cuenta de nuestra presencia.
En efecto, mamá y Esmeralda ya están paradas en el umbral de la entrada y aunque tratan de mostrarse serenas sus ojos se llenan de tristeza cuando ven las huellas de nuestro enfrentamiento con el incendio.
Mis hermanos y yo nos acercamos; mi madre nos abraza, acaricia nuestros rostros y con voz quebrada dice:
-Mis muchachos, han heredado con orgullo el espíritu valiente y solidario de su padre.
TaeHyung abraza a mamá, NamJoon toma una de sus manos e ingresan silenciosamente a casa.
Esmi no puede controlar más sus emociones así que se aferra a mi cintura y echa a llorar desconsolada contra mi pecho.
Dejo que se desahogue y luego levanto su cabeza para poder mirarla a los ojos que están repletos de lágrimas.
-¡Hey nena tranquila! Todo está bien ya estamos en casa.
Esmi hace algo que no me imagine: se seca las lágrimas con furia y hace un gran esfuerzo por mantener su voz como un susurro aunque es evidente que tiene ganas de soltar a los perros del infierno.
-Ya lo noté Kim ¿Sabes la angustia que sentí al pensar que estabas sufriendo un arrebato de superhéroe y que cometerías el error de enfrentarte al fuego como si fueras Johnny Storm? ¡No tenías equipo de protección ni los implementos adecuados, ni el apoyo de las personas idóneas para luchar contra ese monstruo! Lo peor del caso es que pensé que tus hermanos te llamarían a la cordura ¡Pero no! ¡Resultó que ellos tambien sufren el sindrome del estúpido y guapo héroe al rescate!
¡Waoo! Hacía mucho que no veía a Esmi en su faceta de psicópata justiciera pero tiene razón para estar así de molesta y preocupada.
-Me disculpo por haberte preocupado pero debía ayudar a los Farrell ¿Te imaginas lo que hubiera ocurrido si el fuego llegaba hasta su granja y lastimaba a Lizzie y los niños? ¡Jamás me hubiera perdonado el haber sido indiferente a ese peligro!
Esmi baja la cabeza y la mueve comprendiendo lo que digo pero luego cubre su rostro y rompe a llorar como Magdalena, así que solo se me ocurre abrazarla para tranquilizarla.
Entre el llanto y los mocos escucho su vocecita que dice:
-Soy una bruja mala, egoísta y tonta.
Tomo de la mano a mi esposa y nos sentamos en la banca del porche.
-No, no lo eres, eres una sexy brujita de corazón enorme, muy inteligente y perspicaz.
-¿Entonces por qué hoy desconfíe de tí aunque sé que eres prudente y nunca cometerás una idiotez como la que hizo Diego?
Suspiro para tratar de controlarme ¿Por qué me jode tanto que me compare con su ex aunque se supone que no lo hizo?
-Esmi yo no soy Diego, conozco mis límites y ten por seguro que jamás me expondré a un peligro innecesario porque antes que nada mi objetivo es llegar a salvo a casa.
Esmi se sujeta de mi brazo y se recuesta en él.
-Perdoname es que me asuste mucho.
-Lo sé, pero era lo que tenía que hacer los Farrell me necesitaban.
Un beso sella nuestra reconciliación.
-Vamos a darnos una ducha y a dormir.
Esmi y yo avanzamos abrazados y mientras entramos a casa doy una última mirada en dirección a la granja Farrell.
Afortunadamente, la noche solo es iluminada por el brillo de las estrellas, señal de que el fuego ya fue extinguido.
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