Después de los abrazos de rigor a toda la familia (incluida Motita por supuesto) mamá y la tropa Kim pasan a saludar a la abuela y a las tías SunHee y Haneul.

Joonie y Tae me ayudan con todo el cargamento y mientras descargamos el equipaje puedo escuchar las voces de las niñas saludando a su bisabuela con el nombre que solo a ellas se les pudo ocurrir: "agi halmeoni" (bebé abuela)

-Hyung ¿Me parece o cada año traen más cosas?

-Como siempre tan observador hermanito a este paso creo que cambiaré la camioneta por un tráiler.

-De solo ver este caos me da estrés ¿Cómo lo puedes manejar?

-El amor Joonie hyung, el amor.

-El aire del campo te ha vuelto un hombre sabio Taehyungie.

-No es para tanto Jin hyung solo basta verte por dos segundos para notar que eres un hombre muy feliz.

-Tu lo has dicho hermano.

-¿NamJoonie cómo encontraste a halmeoni?

-Bien dentro de lo que cabe para sus noventa y seis años y su cuadro de demencia senil.

-¿Te recordó?

-No hyung pero era algo previsible, me gustaría venir más seguido a verla pero la unidad de emergencias del Hospital General es una locura 24/7.

-Lo sé NamJoon soy testigo del gran trabajo que realizan ¿Como van las cosas en la granja TaeHyung?

-Hemos tenido mejores épocas, los viveros son de mucha ayuda pero aún así el frío nos ha pegado fuerte.

Conozco a mi hermano y sé que eso no es lo único que le preocupa.

-Tu cara me dice que hay algo más.

-Fue lo mismo que le comente pero según él no pasa nada.

-Desembucha niño sabes que no puedes contra los dos.

Tae da un gran suspiro y pone cara de resignación.

-Estoy hasta los cojones con las llamadas de los agentes de la constructora que insisten en comprar el terreno de la granja para construir un condominio campestre para los ricachones de la ciudad. Los tíos Seung Jin y Dak Ho también los han mandado por un tubo pero no hay día en que no jodan.

-Debe haber alguna forma de evitar ese acoso.

-No se preocupen JiMin ya se está haciendo cargo, saben que al abogado Park nadie le ha ganado un caso.

-Tae se que Jiminie es tu mejor amigo pero tampoco exageres, apenas y ha empezado a litigar.

-Es verdad pero Mochi es muy astuto y además tiene el apoyo del estudio de abogados de su papá así que sé que contamos con los mejores.

-¿Seguimos hablando adentro? Creo que ya se me congelaron los dedos de los pies y no quiero que la cosa siga avanzando.

-¿Hasta la parte de tu cuerpo que más aprecias?

-Siempre has sido un degenerado Jin hyung no sé que te ha visto de bueno Esmi noona.

-Aquí el único pervertido eres tú NamJoon Kim; me refería a tu cerebro y a tu duda creo que es evidente ¿No te parece?

-Tantos años de inhalar humo en los incendios ya te están pasando factura.

-Uso máscara sabelotodo.

Mamá llega a poner paz entre los Tres Chiflados.

-¡Kim los estamos esperando dejen su discusión para más tarde!

Al ingresar a casa de abuelita siento como si de pronto me hubiera transportado en el tiempo y pudiera vivir los mejores años de mi infancia cuando nos reuniamos a celebrar el año nuevo lunar en compañía de mis abuelos, las tías que son las hermanas menores de mamá y sus esposos que por cierto acaban de llegar vestidos como corresponde con sus hanboks aunque el de tío Dak Ho está pidiendo a gritos un reemplazo porque la prominente barriga de mi querido pariente hace que sea difícil que la prenda se acomode como debe.

Los recuerdos de aquella época traen consigo la añoranza por la ausencia del abuelo y papá que partieron al más allá hace muchos años atrás, también de JiYu que no tuvo la dicha de gozar de la presencia de MiSuk a la que esperó con mucha ilusión y de mis primos y primas que aunque siguen en este mundo, solo pueden estar con nosotros gracias a la tecnología porque ahora celebran el Seollal en Corea.

La alegría del presente vuelve a mí cuando noto que Esmeralda y las niñas juegan con halmeoni y la hacen reír como si fuera una nenita.

Mis hijas y mi esposa son el shot de energía que abuela necesita para despertar de su letargo: Esmi le lee cuentos, la ayuda a resolver crucigramas sencillos o retos intelectuales de preescolar y las pequeñas comparten sus juegos con abuelita, la peinan, perfuman, toman el té y mil cosas más que salen de la imaginación y energía inagotables de la infancia.

En medio de la conversación que tengo con mis familiares llegó a cruzar miradas con Esmi que me sonríe dulcemente y alcanzó a decirle "gracias" por dedicarse con cariño a atender a mi abuela, por amar incondicionalmente a nuestras hijas y más que nada por haber aceptado ser mi compañera a pesar de los temores e inseguridades que sintió al pensar en compartir su vida con un bombero.

Nam pilla mi mirada y mi "romántico" hermano me toma del cuello con sus brazotes de gladiador y susurra:

-Cierra la boca hyung porque de tanto babear por noona harás que la casa termine inundada.

Tae llega al rescate, él es otro devoto admirador de mi mujer.

-Si yo fuera él estaría igual mujeres como Esmi noona no crecen en los árboles, nuestra hermana es una en un millón ¡Y pensar que en algún momento de su historia pensabas que era insoportable!

-No me lo recuerdes por favor.

-¡Nah! Bien sabemos que te encanta recordar cómo fue que la conociste. Esa historia me encanta ¿Nos la cuentas?

-¡Ay Tae no le des cuerda por favor!

-Te puedes ir si quieres.

-¡Aich hyung no seas melodramático! Ok, ok soy todo oídos...

Uno de los placeres culposos que conservo de la niñez es sacar de quicio al estirado de mi hermano el intelectual doctor Kim, mujeriego empedernido desde la adolescencia que siempre que puede nos recuerda su lema de que no cree en el amor pero sé que tarde o temprano caerá redondito bajo las flechas de Cupido.

TaeHyung es el menor entre nosotros y la otra cara de la moneda. Mi hermanito es un alma vieja amante de la música de los 50 y 60s, devorador del cine clásico americano y de las historias de amor. Sé que mucha gente lo mira como bicho raro porque hasta cuando se viste con su ropa de faena en la granja lo hace con un estilo vintage que parece sacado de alguna revista de moda de hace setenta años atrás pero eso lo tiene sin cuidado, él es feliz como es y los que lo amamos sabemos que es un chico fuera de serie.

Los Kim adoramos a nuestra abuela pero Tae siempre ha sido el más apegado a ella tal vez porque comparten el mismo gusto musical y cinéfilo que son los ganchos que mantienen a mi hermano conectado con halmeoni.

Su devoción por ella es tal que muchas veces ha hecho de chofer de la tropa de chicas Kim con tal de que vengan a alegrar a abuelita, cosa que agradezco por partida doble ya que generalmente lo hace los fines de semana que sabe que tendré guardia en la estación de bomberos.

Estoy a punto de empezar con la historia cuando el llamado a la cena y ceremonia familiar hacen que deje mi relato para otro momento.

La sonrisa burlona de NamJoon no se hace esperar.

-Me salvé por un pelo ¡Gracias tía SunHee te debo una!

-¿Yo qué hice?

-Salvarme de tener que escuchar por enésima vez la historia de amor de Jin hyung y Esmi noona.

-¿La ibas a contar sin mí y mamá? ¡Sabes que ella la ama! Espera a que terminemos y TODOS seremos tus fieles oyentes.

-¿TODOS?

-Sí doctor Kim a ver si tu hermano te pasa algo de romanticismo que te hace buena falta.

Mi hermano se aleja bufando mientras que Tae y yo chocamos los puños.