FUEGO 1

Es el primer día de fuego y Harry pasa la tarde completamente solo.

Louis le había preparado el desayuno y la comida, y le había explicado entre besos que debía marcharse a por su único regalo para este elemento. Así que Harry se pasa el día viendo películas en Netflix mientras se aburría y esperaba la llegada del alfa con impaciencia.

Cada minuto se desesperaba más, ya que en su cabeza seguía aquello que no sabía como explicar, torturándolo y haciéndole sentir increíblemente mal.

Pero entonces, en mitad de la tarde, su teléfono suena mientras está viendo la segunda película de Crepúsculo.

El nombre "Niall" aparece en la pantalla, sacándole una pequeña sonrisa. Estaba amando el cortejo y pasar todo el tiempo con Louis, pero no podía evitar echar de menos a sus amigos.

—Hola -Saluda alegremente-

—¡Harry! ¿Como estas, amor? ¿Nervioso?

—¿Nervioso? -Pregunta confundido.-

—Fuego es el siguiente elemento ¿No? -Niall dice en tono divertido- ¿Te recuerdo lo que pasa en ese elemento o...?

—No hace falta -Le interrumpe, notando como el calor sube rápidamente hasta sus mejillas.- No estaba nervioso hasta ahora. Louis se fue hace un rato y aún no ha regresado ¿Debería preocuparme?

—Está con Zayn eligiendo tu regalo. En algún recoveco de la isla, hay un alfa que prepara todo tipo de regalos para los cortejos. El regalo de fuego es solo uno, y seguramente tardan tanto porque Louis es un perfeccionista que quiere su propio diseño. -Explica, y aunque Harry no puede verlo, sabe que se encuentra rodando los ojos-

—Entonces moriré d nerviosismo y aburrimiento.

Porque sí, Harry ahora se encontraba realmente nervios por lo que iba a suceder en esos dos días. Louis le había explicado que si lo anudaba, le dolería mucho más que a un omega, habían discutido las cosas más importantes, la forma de hacerlo más cómodo para ambos...

Y ahora que Harry recuerda todas aquellas conversaciones que había mantenido con el alfa, no puede evitar sentir un calor esparcirse por todo su cuerpo.

Así que sí, el rizado era un manojo de nervios ante lo nuevo y lo desconocido.

Hubo silencio al otro lado de la línea por varios segundos, donde Harry mordió la uña de su dedo índice con nerviosismo.

—Estaré allí en diez minutos, tengo una idea.

***

Así fue, Niall llega poco después en su coche blanco, donde ambos se suben antes de que el omega empezara a conducir hasta el pueblo. Y una vez llegaron, se dedicaron a comprar chocolate caliente y pasearon por tiendas aleatorias, parándose en alguna que otra a comprar varias cosas.

Y aquello ciertamente ayuda a Harry a no pensar en nada más que en disfrutar de la compañía de su mejor amigo, en admirar las tiendas y en perderse en el delicioso sabor del chocolate caliente, en reír con el omega y olvidar lo demás.

Y horas más tarde, Niall lo mira satisfecho de verlo mucho más relajo, mientras conducía de vuelta a casa después de haber comprado varias cosas. La nieve se encontraba a un lado de la carretera y el cielo nublado  indicaba que pronto llovería.

—¿Crees que Louis ya estará en casa? -Harry le pregunta, rompiendo el silencio, mirando al rubio mientras este se encuentra concentrado en la carretera.-

—No lo sé amor, pero tranquilo, todo va a salir bien.

Harry aprieta los labios en una sonrisa, aferrándose a aquellas palabras.

—Eso espero...

Niall sonríe tomando su mano mientras con la otra conducía. El sabía perfectamente cómo Harry se sentía en aquel momento.

Y es entonces, segundos después, que el teléfono del rubio suena, obligándolo a soltar la mano de Harry para contestar.

—¿Sí?

—¿Estas con Harry? -La voz de Zayn retumbando en los altavoces del coche le hace sonreír de inmediato-

—Hola amor, yo también te extraño, gracias.

Harry sonríe divertido, escuchando en silencio la conversación de la pareja.

—Hola, omega -Dice con cariño.- ¿Harry está contigo?

—Sí -Asiente, a pesar de que él alfa no podía mirarlo.- ¿Por qué?

—Por nada, llévalo a la casa de Louis ¿Vale? -Dice, y por el tono tenso en su voz, Niall sabe que algo anda mal.- Tenemos que hablar.

Aquellas palabras le hacen fruncir el ceño, y Harry lo mira atentamente.

—¿Esta todo bien? -El omega le pregunta un tanto preocupado.-

—Si omega, tan solo debo contarte algo.

—Bien, nos vemos en casa.

—Conduce con cuidado, te quiero.

Aquello saca una sonrisa sincera de parte del omega, y Harry realmente los encuentra adorables.

—Te quiero más, alfa

El omega finaliza la llamada con una sonrisa y Harry también lo mira sonriente. Jugando con las mangas de su suéter decide preguntar;

—¿Todo bien?

—Eso creo.

Harry asiente y apoya su cabeza contra el sillón del copiloto, mirando a Niall con adoración y cariño. Niall se había convertido en una persona tan importante para él en tan poco tiempo, que Harry solo puede sentirse afortunado de tener a gente tan especial como él a su alrededor.

—¿Sabes? Se me hace extraño pensar que en un principio os odiabais, Zayn y tu. -Finalmente dice, sus palabras sacando una ancha sonrisa de los labios del ojizaul-

—Lo hacíamos, aunque para ser justos, yo odiaba que él fuera un alfa

—¿Si? -Pregunta un tanto sorprendido.- ¿Por qué?

Niall se encoge de hombros.

—Malas experiencias con ellos. Me sujete a la idea de que todos eran iguales, pero Zayn era muy diferente a todo lo que había conocido.

Harry sonríe un tanto divertido, intentado imaginarse a un Zayn y aún Niall odiándose. Y le es casi imposible.

—Me intriga vuestra historia. -Murmura, haciendo que Niall lo mire rápidamente mientras sonríe.-

—Algún día te la contaré.

***

Harry se encuentra sentado sobre el regazo de Louis, ambos en el nido mientras las llamas de las velas y la chimenea iluminan toda la sala. Clifford se encuentra durmiendo tranquilamente su lado, y en el televisor se reproduce 'Solo en casa' ya que era la película navideña favorita del alfa, aunque realmente estaban demasiado ocupados besándose como para presentarle atención.

—Te he echado mucho hoy -Louis susurra cerca de sus labios, sacando una sonrisa de parte del rizado-

—Has tardado demasiado, lobito.

—Lo sé, pero quería que tu regalo fuera perfecto.

Harry siente aquella agradable sensación en su pecho, una sonrisa un tanto nerviosa dibujándose en sus labios.

—Tan bueno para mi ¿Puedo verlo?

Louis asiente, dejando un último beso en sus labios antes de estirar la mano sobre las mantas, con cuidado de no molestar a Clifford. Allí, debajo de una de las almohadas blandas, se encontraba una caja larga de terciopelo negro.

La toma con delicadeza antes de entregársela al rizado con una pequeña sonrisa.

—Espero que te guste. -Dice entregándosela, un tanto nervioso por la reacción del rizado.-

Harry toma la caja entre sus manos, retirando la tapa con cuidado. Y allí, un cuchillo fino y brillante con un corazón entre la hoja y el mango se encontraba. Era afilado y brillante, tanto que incluso podía ver su propio reflejo en el, era elegante y a la vez peligroso. Y no puede retener la enorme sonrisa que aparece en su rostro.

—Es precioso. -Dice con ilusión, levantando su mirada para toparse de nuevo con aquellos ojos azules-

Louis lo mira con adoración, como si su mundo entero se encontrara frente a él.

—Es un cuchillo de jaspe, simboliza la protección. -Dice con una sonrisa tranquila.- A partir de ahora, voy a protegerte con mi vida si es necesario.

Los ojos verdes del rizado brillan al mirarlo, podía explotar de felicidad, podía salir a la nieve y gritar a los cuatro vientos lo mucho que quería a Louis Tomlinson y lo mucho que le había cambiado la vida.

Sin quererlo, Louis se había convertido en el pincel que coloreaba su vida cuando esta estaba en blanco y negro.

—Gracias, Louis.

Louis acaricia su rostro antes de inclinarse para besarlo. Lo besa con deseo y cariño, tomándose el tiempo de disfrutar cada parte de la boca de Harry. Y por unos segundos, al rizado le cuesta procesar que todo aquello fuera real, que Louis realmente estaba allí, besándolo mientras prometía quererlo y protegerlo.

Hace meses se hubiera reído de tan solo imaginarlo.

—Nuestra relación no será perfecta, Harry, porque nada lo es. El fuego tiene sus cosas buenas tanto como sus cosas malas, no se pueden ignorar ninguna de las dos. Con nuestra relación pasará lo mismo, así que debemos aprender a escucharnos, a aceptarnos y aprender de los errores.

Harry esta cayendo tan fuerte por el castaño, que está seguro de que Louis puede ver los corazones formándose en sus ojos mientras lo mira hablar, atento de cada palabra.

—Prometo hacerlo lo mejor posible para que todo funcione. -Susurra.-

Louis sonríe, y el rizado siente como su respiración se queda atascada en sus pulmones. Porque ver al alfa sonríe era tan abrumador, tan agradable. Hacerle sonreír se había convertido en su cosa favorita.

—Estoy seguro de que todo saldrá bien, ratón.

Eso esperaba, porque ambos merecían su esperado final feliz. Y una vez más, después de dejar el cuchillo de nuevo en la caja para dejarlo a un lado, comenzaron una nueva sesión de besos y de caricias.

—¿Que has comprado hoy con Niall? -Le pregunta minutos después el castaño, en un pequeño susurro mientras se perdía en el verde de sus ojos-

—Me alegra mucho que lo preguntes. -Responde divertido antes de levantarse para tomar una de las bolsas que había dejado sobre el sofá cuando había llegado-

Rápidamente vuelve a sentarse sobre Louis, mirándolo a los ojos con emoción. Seguidamente vacía la bolsa y los productos comprados aquella tarde caen sobre las mantas y cojines.

—¿Mascarillas para el rostro? -El rizado asiente emocionado- ¿Enserio Harry?

—Sí, completamente.

El alfa rueda los ojos mientras Harry felizmente toma uno de los turbantes que había comprado para seguidamente volver a subirse encima del regazo del alfa.

—¿Esto es necesario? -Louis pregunta un tanto indignado, fulminando al rizado con la mirada mientras este intenta colocar el turbante-

—Lo es.

Harry suelta una pequeña risa cuando finalmente ha terminado, viendo al castaño con aquel gran turbante amarillo con un lazo grande en el medio, su pelo queda completamente hacia atrás y su rostro serio solo hace que se vea más tierno.

—No te rías -Le dice, pero Harry no puede evitarlo.-

—Te ves malditamente lindo.

—Estoy seguro de que lo hago. -Responde, pero hay ironía en su voz.-

Pero Harry le ignora para seguidamente tomar el bote de mascarilla de arcilla entre sus manos para seguidamente abrirlo.

—¿Vas a hacerlo con las manos? -Pregunta con el ceño fruncido al no ver ninguna brocha-

—Sí -Frunce levemente el ceño.- ¿Algún problema?

—En lo absoluto, tu eres el experto aquí -Dice encogiéndose de hombros, colocando sus manos en las caderas del rizado.-

Harry sonríe, y finalmente comienza a poner la mascarilla en el rostro del chico, esparciendo con con cuidado y delicadeza el producto sobre la bonita cara del alfa.

—Eres tan precioso, podría mirarte eternamente. -Louis susurra de repente.-

Y aquello lo pilla completamente por sorpresa, le hace sentir una oleada de emociones que calientan su pecho de forma agradable.

Como si en mitad del invierno más frío Louis fuera la primera.

—Louis... -Harry advierte, deteniendo su trabajo para mirarlo con una pequeña sonrisa, notando como el calor subía hasta sus mejillas.-

—Me encanta la forma en la que te sonrojas, es tan fácil ponerte nervioso. -Es todo lo que dice con una sonrisa divertida, acariciando la cintura de Harry por encima de su suéter azulado.- Es increíblemente encantador, me encanta poder ser quien causa eso en ti.

Harry tiene que cerrar los ojos por unos cortos segundos para intentar calmar los acelerados latidos de su corazón. Pero es tan difícil cuando Louis lo está sujetando de aquella manera, cuando se encuentra mirándolo de aquella manera, cuando las palabras que salían de sus labios sonaban tan malditamente sinceras.

Harry estaba completamente perdido por Louis, y ya no había vuelta atrás.

Intenta ocultar el efecto que las palabras del alfa han tenido en él, pero falla porque Louis se encuentra sonriendo divertido.

—Te recuerdo que tú bonito rostro depende de mi ahora mismo, así que mej...

No puede terminar la frase, ya que los labios de Louis le interrumpen, besándolo lentamente mientras apretaba levemente el agarre en sus caderas para pegarlo más a él.

—Ya no te interrumpo más, continua. -Louis susurra cuando se apartan, y Harry rueda los ojos a pesar de la pequeña sonrisa que aparece en sus labios mientras vuelve a poner la mascarilla por su rostro-

Un minuto después, Louis ya tenía todo el rostro lleno de una fina capa de una mascarilla verde, que levemente comenzaba a secarse.

—Listo. -Dice orgulloso por el resultado-

—Esta mierda pica. -El castaño se queja.-

—¿Puedes dejar de quejarte?

—Solo si es mi turno de torturare ahora -El rizado pone los ojos en blanco pero asiente, entregándole el bote y tomando otro de los turbantes para ponérselo. Este era rojo, y tenía una pequeña fresa en el medio-

—Te ves ridículo -Louis sonríe divertido. La imagen frente a él era demasiado tierna, Harry con sus mejillas rojizas y su cabello todo despeinado hacia atrás hacían que en su pecho se instalase un agradable calor-

—Créeme, tu te ves peor. -Le asegura, a pesar de que ambos saben que aquello no es cierto.-

—Eso es imposible, ratón, yo siempre me veo bien.

Y Harry no puede decir nada al respecto, porque tenía razón, Louis era perfecto sin importar el que.

Sin perder más tiempo, Louis comienza a colocar la mascarilla por las mejillas del rizado, mordiendo su labio con fuerza en un fallido intento de ocultar su sonrisa.

Estaba tan enamorado, tan enamorado como para estar haciendo mascarillas faciales en mitad de la noche.

***

FUEGO 2

Empieza con un beso, un simple y pequeño beso que solo es el comienzo de muchos más. Tan solo son ellos dos en la sala de Louis, en su nido, besándose y acariciándose como si fuera la primera vez que lo hacen.

Harry había pasado la mañana en la cocina, preparando galletas en un intento de distraerse, en un intento de dejar todos los nervios de lado. Pero ahora que se encontraba sobre el regazo del alfa, siendo besado y tocado con tanto cariño, se siente mucho más relajado.

Como si los nervios hubieran desaparecido para convertirse en entusiasmo.

Y es que Harry nunca antes había sido besado de aquella manera, nunca lo habían besado y tocado can tanta delicadeza, con tanto cariño. Como si cada pequeño segundo importara, como si besarlo fuera lo más importante y especial en el mundo. Y Harry quiere recodar cada parte de aquello, quiere conocer el cuerpo del alfa hasta con los ojos cerrados, quiere hacerle sentir querido, hacerle sentir bien.

Están calientes, ambos son conscientes de ello pero se siguen besando como si todo hubiera dejado de importar, como si el tiempo hubiera dejado de importar.

—Louis -Harry suspira entre besos.-

—¿Si?

La voz ronca del alfa le hace morderse el labio suavemente.

—Te necesito.

Louis apoya su frente contra la del rizado para mirarlo a los ojos, aquellos bonitos ojos verdes que reflejan anhelo y deseo.

—Déjame aprender a tocarte, ratón. -Susurra, metiendo una de sus manos dentro del suéter de a Harry para poder acariciar su piel, la cual se eriza ante el toque.- Quiero aprender que partes puedo besar para que te hagan suspirar y gemir mi nombre, déjame aprender a ser bueno para ti.

Harry está seguro de que Louis será su muerte, que con aquellas simples palabras podía deshacerlo por completo. Su corazón retumba en sus oídos y se encuentra a sí mismo suspirando, deleitado con las palabras del alfa.

—Dios, Lou, siempre lo eres.

Una sonrisa se dibuja en los labios del alfa, mientras deja un camino de besos por el cuello del rizado.

—Dios... -Harry suspira cuando el alfa deja un pequeño mordisco en la zona baja de su cuello.-

—Mío. -Suelta entre besos por su cuello y mandíbula- A partir de ahora eres completamente mío, de nadie más.

—Solo tuyo. -Gime bajito, completamente perdido en lo bien que se sentía, en el calor que recorría su cuerpo.-

—Eres el chico más bonito que he visto nunca, Harry. -Susurra- Deseo tanto ser todo lo que te mereces.

La manera en la que lo dice es tan sincera, que Harry siente como se derrite lentamente.

—Lo eres, eres... eres maravilloso, Louis. -Suelta entre respiraciones agitadas, con su voz más débil de lo que le gustaría.-

Aquello hace que el castaño sonría ampliamente entre besos. Se toma el tiempo en besarlo, en repartir besos y mordidas a lo largo de su mandíbula y su cuello mientras el rizado suelta pequeñas súplicas que le hacen querer tomarlo allí mismo. Pero la manera en la que Harry se deshace frente a él ante cada beso, cada caricia, cada mordida, es mucho más tentadora.

—Louis, por favor. -Harry súplica cuando siente que no puede soportarlo más.-

Y es todo lo que realmente necesita para que Louis levante su suéter con cuidado para quitárselo, seguidamente dejándolo a un lado del nido.

Una vez sin su suéter, Louis puede apreciar la marca del arañazo a un costado de su estómago, la cual ya se encontraba cicatrizando. No puede evitar hacer una pequeña mueca al verla, y seguidamente coloca con cuidado ambas manos en la cintura del chico para dejar pequeñas caricias sobre su piel.

—Te quiero, te necesito -Harry suelta entre respiraciones agitadas, deslizando sus manos por el pecho del alfa.-

—Joder, Hazz.

—Lou...

—No quiero que hagamos esto porque sientes que debemos hacerlo, si quieres esperar o...

Y el rizado realmente no puede creer que Louis realmente este diciendo aquello, como si no estuviera siendo un completo desastre encima de él.

—No, quiero hacerlo. -Asegura, tomando el rostro del alfa entre sus manos.-

Louis sonríe ampliamente mientras asiente, soltando una respiración un tanto agitada. Su pecho se llena de orgullo, porque Harry lo quería, porque Harry se encontraba deseándolo de la misma forma en la que él lo deseaba.

Y podría simplemente tumbarlo sobre las mantas en aquel mismo momento, tomarlo rápido y con fuerza.

Pero no podía, no quería. Porque aquella primera vez junto a su chico debía ser especial, debía demostrarle con cada pequeño gesto lo mucho que significaba para él. Porque quería tomarse su tiempo en apreciar cada pequeña parte de Harry.

—Voy a hacerte sentir tan bien que jamás dudarás de mi amor por ti, jamás dudarás de lo que significas para mi, ratón.

Harry deposita un rápido beso en sus labios, antes de apoyar su frente junto a la del castaño.

—Enséñamelo.

Aquello saca una sonrisa divertida por parte del alfa.

—¿Quieres que te enseñe lo completamente loco que estoy por ti? ¿Lo mucho que me gustas?

—Sí. -Asiente, notando el calor esparcirse por su pecho.-

—Mhm... -Las manos de Louis aprietan suavemente sus caderas.-Creo que podría hacer eso bastante bien.

Y es así como varios minutos después, ambos se encuentran completamente desnudos, entre las cómodas almohadas, las suaves mantas y el olor a galletas que rondaba por toda la casa.

—Quiero que me montes, quiero sujetarte mientras te hago sentir bien ¿Te gustaría eso?

Las palabras sacan un pequeño suspiro por parte del rizado, quien se encuentra asintiendo frenéticamente.

—Sí, por favor, Lou.

El alfa da pequeños golpes en su regazo para que Harry se coloque sobre él, y así lo hace, rápidamente siendo envuelto en los brazos del castaño.

—Y voy a necesitar que me digas que me detenga si es demasiado ¿Vale? Puede que duela bastante así que podemos parar si...

—Quiero, Louis, por favor. -Le interrumpe- Podré soportarlo.

Su polla dolía bastante para aquel entonces, encontrándose completamente dura y chocando contra su propio estómago. Y es que Harry no podía ser paciente en aquel estado, en lo absoluto.

Pero había algo en la calma en Louis, algo a pesar de que el alfa parecía casi o tan desesperado como él, pero aún así quería ir con cuidado. Quería tomarse su tiempo para admirarlo, para tocarlo, para besarlo. Había algo en la dulzura del alfa a pesar del anhelo salvaje en sus ojos azules.

Y a Harry le encanta, le encanta cada parte de Louis, cada palabra que sale de sus labios, cada caricia, cada beso, cada sonrisa...

Y de golpe es abrumador, lo muchísimo que Louis le gustaba, lo muchísimo que le hacía sentir con el más mínimo detalle, lo muchísimo que estaba disfrutando aquello.

—Tan amable, voy a darte todo lo que quieras -Le susurra con la voz ronca, apartando con cariño los rizos que caían por la frente de Harry.-

Louis acerca dos de sus dedos a la boca del rizado, indicándole que la abriera y chupara. Y este lo hace con gusto, chupa los dedos del alfa sin romper el contacto visual. Era su primera vez con Harry, y aunque estaba en su naturaleza querer arruinarlo y tomarlo en aquel mismo instante, sabía que debía tener cuidado con su chico.

Porque lo último que quería era lastimarlo.

Cuando siente que es suficiente, retira los dedos de la boca de Harry, dirigiéndolos a su agujero. Juega allí por unos segundos, mientras Harry se queja y exige que los meta de una vez. ¿Y quien era él para negárselo?

Harry gime gustoso cuando el primer dedo de Louis se introduce en él, y el castaño sonríe satisfecho.

—Por favor Louis, te necesito ya, por favor. -Pide entre pequeños gemidos minutos después, moviendo sus caderas contra los dedos del alfa.-

Louis deja un beso en su frente, manteniendo sus suaves movimientos.

—Si quieres ser anudado, debo prepararte mucho amor, no quiero hacerte daño.

El cariño en su voz y lo bueno que Louis estaba siendo con él le hacían querer llorar en aquel mismo instante. Nunca antes le habían tratado con tanto cuidado, con tanta delicadeza, con tanto amor.

Y eso solo lo hace quererlo más, querer sentirlo más cerca si es que acaso eso era posible.

—Lo necesito ya, por favor. -Llora con un poco de desesperación.-

Louis lo ignora para seguidamente y para sorpresa de Harry, introducir dos dedos más de golpe, haciéndole gritar.

—¡Louis! -Exclama, dejando caer su cabeza para atrás.-

Con su otra mano, el castaño sujeta el cuerpo de Harry, dejando suaves caricias en la parte baja de su espalda.

—Tranquilo, me lo agradecerás después. -Susurra, su voz sonando más ronca de lo habitual.-

Pero Harry se pierde en el placer, se pierde en los besos de Louis que son depositados en cualquier lugar que el alfa encontraba, se pierde en la agradable sensación que recorre todo su cuerpo, que lo prende en llamas. Y todo lo que puede hacer es mover sus caderas con gracia en un intento de sentir más y más.

Iba a terminar pronto, porque el cuerpo tatuado de Louis se encontraba debajo de él, porque tenía tres de sus dedos follandolo con fuerza y porque Louis mantenía aquellos besos sobre su cuello y sus hombros. Así que, dirige una de sus manos sobre su propio miembro, tocándose a su antojo para llegar al orgasmo de forma más rápida.

Pero justo entonces Louis saca rápidamente los dedos de su interior, haciéndolo lloriquear en forma de queja.

—Si vuelvo a ver una de tus manos tocando lo que es mío, te ataré para que no puedas desobedecerme ¿Entendido?

Traga con fuerza por el tono de voz del mayor. Si de por si vivía enamorado de la voz de Louis, en aquel momento podía morir entre palabras sucias y su voz ronca.

—Entendido -Responde, mordiéndose el labio con fuerza y reprimiendo las ganas de tocarse a sí mismo.-

—Eres tan bueno, joder ¿Como he podido ser tan afortunado? -Louis dice antes de besarlo, un beso lento y dulce que no dura demasiado.- ¿Listo, ángel?

Harry asiente felizmente, tomando la polla del alfa y colocándola justo debajo de su agujero, sentándose lentamente en esta mientras ambos soltaban pequeños gemidos de placer.

—Mierda -Suspira casi sin aire cuando se encuentra sentado con la polla de Louis completamente en su interior-

—¿Estas bien, amor? -Le pregunta casi sin voz, afectado por lo bien que se sentía.-

—Sí, tan solo se siente demasiado bien. -Susurra.-

Están así por un pequeño tiempo, con sus frentes juntas y sus aceleradas respiraciones mezclándose entre ellas. Entonces, Harry empieza a moverse, cada vez sintiéndose más cómodo mientras el dolor se convierte en placer.

Hunde sus dedos en la piel de los hombros de Louis mientras comienza a dar pequeños saltitos. Las manos del alfa recorriendo cada parte posible del cuerpo del rizado.

—Dios -Gime en un lloriqueo- Quiero sentir esto eternamente, por favor Louis.

Se encontraba completamente ido, hipnotizado y perdido en el placer que sentía. Las luces de las velas, el calor de la chimenea y Louis debajo de él era más que un sueño, era perfecto y casi irreal.

Quería aquello para el resto de su vida.

—Lo harás cariño, eternamente. -Louis le asegura en un pequeño gemido, comenzando a dejar besos sobre su cuello.-

—¡Louis! -Grita cuando aquella parte que le hace volverse loco es golpeada.-

Louis no puede evitar sonreír satisfecho.

—Eres tan ruidoso, ratón. Tan jodidamente ruidoso y sensible ¿Quieres que toda la isla se entere de lo bien que te estoy follando, amor?

El rizado asiente con fuerza sin poder retener los sonidos, jadeos, y gritos que salen de lo más profundo de su ser. El sexo nunca antes se había sentido así, nunca se había sentido de aquella manera tan maravillosa.

Salta con fuerza sobre Louis, quien tiene sus dedos apretados con fuerza en sus caderas, seguramente dejando marcas.

—¡Louis, Louis, Louis!

Louis es todo lo que puede ver, saborear y sentir. El placer nublando su mente por completo mientras se mueve desesperadamente. El castaño lo besa, un beso tan descuidado y sucio que apenas contaba como tal. Ambos están completamente perdidos en el placer, llenos de sudor y anhelo por llegar al orgasmo.

—Estas llorando, ratón ¿Es porque te estoy haciendo sentir bien? Dime, amor ¿Como te sientes? -Louis le pregunta, dirigiendo su mano libre al rostro del rizado para poner uno de sus dedos en la barbilla del chico, obligándolo a mirarlo.-

—Bien, me siento demasiado bien, Lou. Quiero más, más y más, todo contigo. -Dice entre respiraciones agitadas-

Louis sonríe, rozando los labios con los de Harry.

—¿Todo? -Le pregunta en un susurro.-

—Todo. Estas hecho para mi, Louis.

El alfa gime por aquellas palabras mientras su alfa aúlla en deleite, moviéndose con más fuerza y rapidez en el interior de Harry.

—Eres mío -Es todo lo que puede decir, porque lo era-

—Joder, Lou, estoy muy cerca. -Lloriquea, las lágrimas mojando sus mejillas completamente rojizas-

—¿Si?

—Por favor, quiero que te corras en mi, por favor, Lou.

—Por la luna, Harry -Gime con fuerza, de golpe todo volviéndose demasiado- Estoy muy cerca, amor

Las manos de Harry toman el rostro de Louis para comenzar a dejar suaves caricias sobre sus mejillas.

—Hazlo, anúdame. -Le pide en un jadeo.-

Y entonces, Louis gruñe con fuerza, dando una última estocada con demasiada fuerza, haciendo que Harry gritara y que ambos terminaran a prácticamente a la misma vez.

—Jodida mierda. -Jadea el chico, dejando que su cabeza caiga sobre el hombro de su alfa-

—¿Estas bien? -Louis le pregunta cuando consigue calmar su respiración agitada, mientras acaricia su espalda con cariño ya que el cuerpo de Harry se encontraba temblando sobre él-

—Sí. -Dice en un murmuro apenas audible, pero enseguida una mueca de dolor aparece en su rostro cuando el nudo dentro de él finalmente le hace soltar un quejido- Joder, duele.

—Lo sé mi vida, estoy aquí.

Harry se muerde el labio, porque no imaginaba que fuera a sentirse de aquella manera, que fuera a doler tanto. Louis por su parte intenta calmar el dolor con besos a lo largo de sus hombros, con delicadas caricias y palabras dulces.

Y tiempo después, cuando el nudo ha desaparecido y ya pueden separarse, Louis deja a Harry con cuidado sobre las mantas, arropándolo para seguidamente tumbarse a su lado.

Las piernas de Harry aún tiemblan levemente mientras Louis se acerca para dejar besos en su rostro. Le dolía todo el cuerpo, pero había merecido la pena, cada segundo había merecido la pena.

Porque nunca se había sentido tan bien.

—¿Lou? -Susurra, sintiendo como los brazos del alfa rodeaban su cintura.-

—¿Si, ratón?

—¿Esto significa que ya eres mi novio?

La pregunta causa una risa sincera por parte del castaño, quien apoya su frente contra la de Harry, rozando su nariz con cariño.

—Lo soy, soy completamente tuyo.

—Eso suena muy bien -Harry dice con una sonrisa, sus ojos verdes brillantes mientras lo mira.- ¿Eternamente?

Louis sonríe, apartándose levemente del rizado para poder mirarlo a los ojos.

—Hasta que la muerte nos separe.

***

N/a: No hablemos del smut, ya sé que no es mi punto fuerte😩
Pero espero que os haya gustado igual y no haya sido muy desastroso<3