Harry había bebido más de lo que había planeado, pero no le importó demasiado cuando el alcohol en sus sangre comenzó a aliviar levemente el dolor de su corazón.

Había dejado de llorar hacía más de una hora, y ahora solo bailaba despreocupado de un lado a otro con Maya, Niall, Zayn y Liam a su alrededor. Reían, bebían, bailaban y pretendían que nada había pasando.

Que nada se había roto.

Pero era difícil ignorar a Louis bailando con el chico de ojos grises, era difícil no levantar la mirada y toparse con los ojos fríos del castaño que no dejaban de observarlo. Pero se limita a ignorarlo por completo y sigue bailando con sus rizos moviéndose de un lado a otro.

Porque eso era lo que debía hacer a partir de ahora, ignorarlo.

Y es entonces, tiempo después, que un chico se acerca a Harry con una sonrisa amable.

—Hola -Le saluda con voz profunda, haciendo que Harry sonría.-

—Hola -Susurra cuando se encuentra cerca de aquel desconocido chico de antifaz dorado que combinaban con sus ojos miel y cabello rubio despeinado-

Era lo suficientemente atractivo.
Lo suficientemente atractivo como para olvidarse durante aquella noche del chico que realmente tenía su corazón.

—¿Te gustaría bailar conmigo?

La pregunta sorprende un poco al rizado, pero asiente suavemente. ¿Por qué le negaría un baile a un bonito chico?

—Claro -Sonríe entre hoyuelos.-

Para aquel entonces Harry estaba demasiado borracho, demasiado borracho como para negarle un baile a aquel chico que parecía haber sido tallado por los dioses, demasiado borracho como para darse cuenta de la furia en los ojos de Louis cuando las manos del rubio se posaron en su cintura.

—¿Sabes quien soy? -Pregunta cerca de la oreja del rizado, dejando un pequeño beso en su cuello.-

Harry suelta una pequeña risa cuando su piel se eriza por el contacto, mientras se mueve lentamente al ritmo de la musica.

—¿Debería?

—Mi nombre es Wylan -Se presenta, pero aquel nombre no le suena en lo absoluto.-

—Harry -Se presenta también, mirándolo a los ojos-

—Lo sé.

Harry frunce el ceño ante aquellas palabras, pero no le da importancia. Tan solo quería una distracción, para olvidar por unas pocas horas aquellos ojos azules.

Pero Louis parece tener otros planes, porque aparece justo en aquel momento con rostro serio y aquella mirada en sus ojos que indicaban molestia.

—¿Louis? -Harry pregunta cuando el castaño se encuentra a su lado, mirándolo confundido.-

Sin embargo Louis no lo mira, sus ojos azules se clavan en el rubio.

—Si lo sigues tocando, te arranco los brazos.

Los ojos de Harry se abren con sorpresa ante aquellas palabras. Es capaz de ver la furia en sus ojos azules, los celos, la rabia.

Y aquello solo hace que el rizado se moleste todavía más.

—Louis, vete.

Pero el castaño sigue sin mirarlo, sus ojos azules se encuentran clavados en el chico rubio que sigue teniendo las manos en la cintura del rizado.

—Arráncame los brazos, si puedes. -Wylan le dice con una sonrisa divertida.-

Y es entonces, en apenas un pestañeo, Louis le pega un puñetazo.

—¡Louis! -Harry exclama con sorpresa, el alcohol desapareciendo de su sistema de golpe- ¿Cual es tu puto problema?

Algunas personas a su alrededor se detienen para mirar sorprendidos la escena, expectantes de si una pelea estaba por comenzar. Louis por su parte lo mira con sus ojos vacíos y su expresión completamente seria mientras apretaba la mandíbula con rabia. Finalmente cuando Wylan se recupera del golpe, aún con su mano sujetando la parte golpeaba, Louis se da la vuelta para marcharse.

Y Harry tiene la necesidad de seguirlo, tiene la necesidad de decirle todas las cosas que lleva callando durante toda la noche.

—¿Cual es tu jodido problema Louis? -Grita con frustración cuando se encuentran fuera de la mansión, entre la nieve, el frío, los árboles y la luz de la luna.-

—Te estoy haciendo un favor. -Murmura tomando el cigarrillo de detrás de su oreja para seguidamente colocarlo en su boca-

Aquella era la primera vez que le dirigía la palabra en toda la noche. Y Harry siente tanta frustración que cree que va a explotar.

—Hazme el favor de dejarme en paz. -Harry le pide con rabia, pero Louis parece demasiado concentrado en seguir fumando.-

—Seguro. -Susurra, soltando el humo.-

Harry ya no sabe que hacer, y cuando las lágrimas de la rabia y el dolor invaden sus ojos, no se esfuerza en retenerlas. De repente se siente cansado, cansado de fingir y pretender que todo está bien.

—¿No crees que ya has hecho bastante? -Pregunta con la voz débil.-

Louis se tensa al escuchar la voz rota del rizado, al ver como algunas lágrimas caen, sabiendo que era culpa suya. Su alfa gruñe, queriendo proteger y consolar a su chico, pero el miedo en él siempre lo frenaba.

Siempre era el miedo.

—Es peligroso, Harry.

—¡Y tu un idiota que juega con mis sentimientos! ¿Que jodida diferencia hay?

Si a Louis le duelen aquellas palabras, intenta no demostrarlo. Y cuando va a responder, la presencia del chico ojimiel lo detiene. Wylan llega junto a Harry con su ojo levemente morado, y ahora su antifaz había desaparecido por completo de su rostro.

Y Louis estaba listo para pelear.

—¿Todo bien, bonito? -Le pregunta a Harry, y Louis no puede evitar soltar una risa ronca por el apodo hacia el rizado- ¿Y a ti que te pasa?

Louis lo mira divertido y niega.

—Tu eres el que ha organizado todo esto ¿No es así?

El chico aprieta los labios en una mueca mientras asiente.

—Sí, he encontrado algo valioso y quería celebrarlo. -Su tono era serio, pero su expresión se veía levemente divertida-

—Tienes una forma bastante peculiar de demostrarlo.

Harry se encuentra bastante confundido, pero no interviene. Tan solo observa como ambos chicos discuten de manera pasiva agresiva.

—Algunos te dan flores, otros se acercan a entablar una conversación y yo preparo una fiesta en tu honor. -Wylan dice, escondiendo sus manos en los bolsillos de sus pantalones.-

—Y tú casi lo matas -Louis suelta con rabia, a lo que Harry frunce el ceño-

El rubio se encoge de hombros, sin parecer lo más mínimamente molesto por las palabras del castaño.

—No parecía que te importara mucho cuando le restregabas la polla al chico de ojos grises -Louis se tensa y Wylan se acerca a él con una sonrisa triunfante- No es tuyo.

Y el vacío de los ojos fríos de Louis cambia, tras aquellas últimas palabras el brillo de la ira los enciende, como si el hielo hubiera sido de repente prendido en llamas.

Mío. Nuestro.

—Estas muerto. -Es todo lo que dice antes de tirar el cigarrillo al suelo y lanzarse contra él.-

—¡Louis! -Harry grita asustado al ver como la fuerte pelea empieza-

Ambos chicos comienzan a golpearse de manera animal sobre la nieve, y cuando la sangre se hace presente Harry finalmente reacciona.

Entra de nuevo a la mansión con prisa, con la respiración agitada y el corazón latiendo con fuerza.

Termina encontrando a sus amigos hablando en el bar felizmente, pero sus sonrisas no tardan en borrarse por completo cuando ven a Harry aparecer con el la respiración agitada y el rostro pálido.

—¿Harry? ¿Que ocurre? -Zayn es el primero en preguntar, preocupado al verlo en aquel estado.-

—Louis, yo...sangre, fuera. -No sabe cómo explicarlo, estaba mareado y con miedo de que Louis saliera herido.-

Los cuatro comparten miradas de  preocupación antes de salir corriendo en busca del castaño, a lo que Harry los sigue aún temblando por toda la situación.

Todo se sentía como demasiado en aquel momento.

Pero nada se compara a lo que sintió al estar finalmente fuera.

Dos lobos enormes se peleaban ferozmente sobre la nieve, mientras la música de la fiesta sonaba a lo lejos y la luz de la luna los alumbraba.

Y Harry reconoce a ambos, reconoce al lobo de ojos azules y aquel otro lobo que lo había atacado semanas atrás.

—Mierda -Niall susurra antes de girarse y acercarse a Harry con preocupación- Tranquilo amor, todo está bien.

Pero Harry estaba paralizado en el sitio, con la respiración retenida en sus pulmones y su corazón latiendo con fuerza.

Lo siguiente que ve es a Zayn y Liam trasformarse también, uniéndose a la pelea. De golpe, cuatro lobos luchaban y gruñían como si sus vidas dependieran de ello, y eso es lo último que Harry ve antes de desmayarse.

***

Los ojos del rizado se abren lentamente, la luz de la luna entrando por una ventana grande y antigua le hacen darse cuenta de que no estaba en su casa. Le dolía la cabeza mientras la música y las voces de la gente aún podía escucharse en el piso de abajo.

—¿Harry? -Niall pregunta, mientras el rizado se sienta a la cama con cuidado.-

Maya y Niall se encontraban sentados sobre esta, mientras lo miraban con una mueca de preocupación. El miedo al rechazo en ellos.

—¿Como te encuentras? -Pregunta Maya, pasándole una pequeña botella de agua fría-

—No ha sido un sueño ¿Verdad? -Dice en voz baja antes de darle un sorbo a la botella, en un intento de deshacer el nudo en su garganta-

—Me temo que no -Niall susurra, y Harry siente que le va a explotar la cabeza-

Los mira, y todavía no puede terminar de creer lo que había presenciado. La imagen de aquellos lobos peleando sobre la nieve reproduciéndose una y otra vez en su cabeza.

—Mierda. -Susurra, pasando ambas de sus manos por su rostro.-

—No queríamos que te enteraras así. -Niall susurra con la voz temblorosa.-

—Nosotros...

Maya va a empezar una explicación, pero antes de que pudiera decir nada más, el sonido de la puerta de la habitación siendo abierta le interrumpe. Liam, Zayn y Louis entran a la habitación con los trajes un tanto sucios, camisas abiertas, cabello despeinado y manchas de sangre seca salpicadas por todas partes.

Y Harry no tendría que sentir como su respiración se queda atrapada en sus pulmones al verlo, no tendría que sentir aquel alivio que le hace sonreír levemente. Pero lo hace.

—Que siga la fiesta -Louis dice con una fingida sonrisa antes de apoyarse en el marco de la puerta.-

Niall y Maya se levantan rápidamente para abrazar a sus parejas con fuerza.

—¿Estáis bien? -Niall pregunta colocando sus manos en las mejillas de su novio, antes de dejar un corto beso en sus labios-

—Perfectamente omega, solo tenemos algunos rasguños.

¿Omega? Harry frunce el ceño ante la pregunta, de golpe teniendo demasiadas preguntas.

—¿Que ha ocurrido con él? -Harry se atreve a preguntar, levantándose de la cama para acercarse a los demás.-

—No volverá, se ha ido -Louis aclara, con un tono frío mientras lo mira.-

Harry aprieta los labios mientras asiente suavemente.

—¿Y tú? -Pregunta en voz baja.- ¿Estas bien?

Sus ojos verdes fijos en los suyos, en aquellos ojos azules en los que se ahogaría sin ningún problema. Ve algo en ellos, un brillo. Quizás, es el peso del secreto que llevaba sobre él, finalmente liberado. Quizás, es la esperanza de que Harry no salga corriendo, porque ya no había nada que ocultar. Quizás, son las paredes de hielo derritiéndose.

—Sí.

Louis parecía un fantasma. Estaba más pálido de lo habitual y las pequeñas manchas de sangre en su rostro hacían juego con sus labios rojizos y levemente partidos.

¿Como podía verse tan bonito a pensar de todo?

—¿Podemos hablar? -El rizado le pregunta-

Louis lo mira confundido.

—Estaremos abajo. - Zayn dice con una pequeña sonrisa antes de tomar la mano de su novio y salir fuera de aquella habitación, con Maya y Liam siguiéndolos por detrás.-

Una vez solos, Harry está dispuesto a hablar las cosas. Por una vez por todas, tenían que comunicarse.

—¿Me dejas curarte? -Susurra, rompiendo el silencio de la oscura habitación.-

Louis lo mira entre confundido y sorprendido. No entendía como Harry quería hablar con él después de haber sido un completo imbecil, después de todo lo que había pasado.

Quería alejarlo porque así tal vez le dolería menos cuando se marchara, porque no podría seguir enamorándose de él y luego tener que ver cómo salía corriendo, como huía de él. Y ahora, lejos de eso, Harry no parecía asustado por la situación, y eso era lo que más sorprendía el castaño.

¿Por qué Harry seguía ahí?

—Supongo. -Responde, perdido en sus pensamientos-

El rizado toma con delicadeza la mano del castaño y lo guía hasta el cuarto de baño que se encontraba dentro de la misma habitación en la que estaban.

Una vez dentro toma un trozo de papel y seguidamente se sienta sobre el lavamanos. Apretando sus labios, agarra la chaqueta del traje de Louis y lo atrae hasta él.

—Entonces... -Empieza, mientras abre el grifo para mojar el papel y seguidamente mirar a Louis, quedando realmente cerca de su rostro- Eres un...

—Un alfa. -Susurra, inseguro de sus palabras. Y de repente, casi parece tímido.-

Harry no entendía aquello, en lo absoluto. Pero estaba dispuesto a escuchar aunque todo fuera una completa locura para él.

—Un alfa, bien. -Asiente- ¿Podrías explicarme eso?

No iba a mentir, estaba nervioso. Sus manos temblaban lentamente y aún se sentía mareado ante toda la situación. Pero necesitaba hacer aquello, necesitaba hablar las cosas con Louis para poder entender lo que estaba pasando, para poder entenderlo a él.

—¿Tu quieres saberlo? -Louis pregunta con el ceño fruncido, como si realmente no pudiera creerlo.-

—Por supuesto .

Louis no sabía si aquello realmente estaba sucediendo o si era un sueño del que no quería despertar.

—Sigues aquí... y quieres saber sobre lo que soy. -Repite en voz baja, como si más bien se estuviera convenciendo a sí mismo-

Harry acaricia el rostro del castaño con cuidado y delicadeza.

—¿Era esto de lo que tenías tanto miedo?

Louis aprieta los labios mientras asiente suavemente.

—¿Puedes culparme? Soy un monstruo, y no quería que lo supieras porque...

El rizado niega, interrumpiéndolo.

—Voy a enfadarme más de lo que ya lo estoy si vuelves a decir eso, no lo eres ¿Quien te ha convencido de eso?
-Los ojos azules de Louis se llenan de lágrimas, y el corazón de Harry se termina de romper.- Él lo hizo ¿Cierto?

Nunca había visto a Louis tan mal, nunca lo había visto de aquella manera tan vulnerable y rota.

Con tanto miedo.

—Íbamos a casarnos -Susurra, con la voz rota-

Harry detiene su tarea de limpiar la sangre cuando aquellas palabras salen de los labios del castaño, paralizándolo por completo.

Y por muy molesto que estuviera con el castaño por lo que había hecho, se siente mal por él.

—Dios mío Lou, lo siento mucho.

—Supe entonces que él no era el indicando. Pero aún así dolió, se marchó sin mirar atrás. -Harry acarició el rostro del castaño con cariño y delicadeza mientras seguía limpiando la sangre con cuidado- No quería pasar por lo mismo de nuevo.

Nunca habían tenido un momento tan intimo como aquel, tan sincero. Y aunque el corazón de Harry había sido roto horas atrás, ahora lentamente comenzaba a reconstruirse de nuevo.

Porque ya no habían barreras, las capas de hielo al rededor del corazón de Louis se habían fundido por completo, ya no había nada por lo que temer. Solo estaban ellos dos después de una tormenta de emociones.

Nada había cambiado la forma en la que seguía queriendo estar con él, la forma en la que quería a sus amigos y la forma en la que los veía. Aquel lugar seguía siendo su salvación, y nada podría cambiarlo.

Ni siquiera un ejército de lobos aterradores.

—Pero has sido un imbecil conmigo. -Finalmente dice cuando termina de limpiar todo el rostro del castaño- Lo que él te hizo es horrible, y entiendo que estes dolido y asustado. Pero eso no significa que puedas hacerme daño a mi también.

—Lo sé -Louis con frustración y lo mira directo a los ojos, aquellos ojos verdes que se sentían como perderse en el bosque más profundo- Lo siento.

—¿Por eso lo has hecho? ¿Por miedo a que que fuera igual que él? -Louis asiente levemente-

—¿Como hubiera podido soportarlo, ratón? No habría podido evitar acercarme a ti y decirte lo precioso que estás y que te ves jodidamente bien en ese traje, no hubiera podido evitar beber demasiado, besarte y... Mi corazón se rompería de nuevo si al enterarte de lo que soy hubieras salido huyendo, no podría recuperarme de eso, no está vez.

Las lágrimas caen por aquellos ojos azules, y a Harry le duele demasiado verlo de aquella manera. Por primera vez, Louis estaba siendo completamente sincero con él.

—Lou... -Deja el papel en el lavamanos para acaricia sus mejillas con ambas manos, apartando las lágrimas-

—Lo siento ratón, lo siento por todo. No merezco tenerte aquí, no te merezco.

Harry le obliga a mirarlo a los ojos, levantando su cabeza levemente.

—Deja de decir tonterías ¿Vale? Me gustas Louis, mucho más de lo que creía que podía gustarme alguien -El ojiazul se muerde el labio-Simplemente no vuelvas a apartarme, no vuelvas a lastimarme.

Louis niega suavemente.

—No lo haré, no vas a irte ¿Verdad? -Ver sus ojos llenos de lágrimas, llenos de dolor, hacen Harry quiera guardarlo en una caja y protegerlo del resto del mundo.-

—No lo haré, tan solo quiero que me expliques cómo funciona todo esto para que lo pueda entender ¿Vale? -Susurra dulcemente-

—Bien ¿Podemos hacer eso mañana, ratón? -Harry asiente y Louis mueve su rostro para juntar sus narices mientras sus respiraciones se juntan-

—No me beses si estás con alguien más, no es justo.

Louis lo mira, y el brillo en sus ojos hace que el corazón del rizado se vuelva completamente loco.

—Le dejé en claro que no sentía nada por él, creo que lo he visto bailando con otro chico antes de subir. ¿Puedo besarte ahora?

Harry aprieta sus labios y sonríe.

—No lo sé lobito ¿Crees que te lo mereces?

Y mierda, aquello no tendría que gustarle tanto.

—No lo merezco en lo absoluto -Susurra, mirando sus labios con anhelo-

—Estoy de acuerdo ¿Y que podrías hacer para compensarme? -Sonríe divertido-

—¿Pedir perdón? Siento haber sido  un completo imbecil, y siento haberte hecho llorar, dos veces. -Harry suelta una pequeña risa y seguidamente niega-

—Esperaba que admitieras lo mucho que te gusto y lo mucho que te importo, pero eso también está bien.

Louis suelta una pequeña risa antes de colocar su frente con la del rizado.

—No volveré a hacerte daño, ratón. Te lo prometo.

—Más te vale, lobito.

Y finalmente Harry lo besa con una sonrisa de felicidad en su rostro. Los labios de Louis sobre los suyos era todo lo que necesitaba, era todo lo que quería. Todo lo que hacía falta para arreglar su roto corazón.