En algún momento de la noche, la mirada de Jungkook se perdió en un punto de la habitación, un punto muy bonito. Sus ojos vagaron por la silueta del Omega a lo lejos, perfectamente vestido en un traje de un tono salmón mientras conversaba con un par de personas luego de la subasta.

Al parecer, Kim Taehyung era el foco de atención aquella noche y a Jungkook ciertamente, no le extrañaba en absoluto que lo fuera.

- ¿Jeon Jungkook? - Una voz suave preguntó a sus espaldas y cuando se giró, el rostro tenso de un hombre rubio se mostró ante él. Miró la mano que le era extendida y correspondió al saludo silencioso a pesar de que el lenguaje corporal de la persona frente a él gritaba molestia.- Park Jimin.- Se presentó ante él y Jungkook ató cabos.

Por lo que había entendido, Park Jimin era el prometido de Min Yoongi y director del hospital al que estaba dedicado todos los fondos de la gala de beneficiencia de esa noche.

Era un Alfa, unos centímetros más bajo que él y con un cabello estilizado que le daba una apariencia perfecta junto al traje hecho a medida. Había tensión sobre sus hombros y los ojos que estaban sobre él parecían analizarlo, escrutarlo más que todo.

- ¿Nos conocemos? - Jungkook cuestionó porque si bien sabía quién era la persona que tenía en frente, nadie los había presentado oficialmente.

- He oído hablar de usted, señor Jeon. Soy amigo cercano de Tae.- Le dijo, tardando en añadir.- Y su médico personal también.- Fueron segundos los que tardó en entender la muda hostilidad de Jimin con él. Al parecer, el Alfa estaba enterado de su investigación y por ende, también sabía que Taehyung quería someterse al tratamiento antes de que fuera algo totalmente seguro. Y no parecía muy contento por ello.

- Es un placer conocerlo, señor Park.- Saludó y Jimin apretó los labios, con los ojos oscuros sobre Jungkook. - ¿Hay algo que quiera decirme? - Preguntó y vio al Alfa cambiar el peso de una pierna a otra, acomodándose en el lugar.

- No estoy de acuerdo con que Taehyung se someta al tratamiento. - Aseguró, sin sorprender mucho a Jungkook con sus palabras. De hecho, esperaba mucho escuchar aquello. - Sin ánimos de ofender, su trabajo no es del todo estable y que Tae se someta así a tal cosa es...peligroso. - Jungkook alzó las cejas.

- Creo que Taehyung-ssi es consciente de eso. - Murmuró, ganándose un ceño fruncido por parte de Jimin. - Así como también sé que ninguno puede hacer algo si es su decisión, personalmente le expliqué todos los riesgos que había y aún así él accedió, no puedo hacer más nada que aceptarlo. - Jimin tensó su expresión.

- Puedes negarte.

- Lo hice y no cambió nada. - Afirmó. - Es testarudo.

- Solo está asustado.

- Lo que hace crecer más su obstinación. - Admitió. - Entiendo su preocupación, Jimin-ssi, pero no es su decisión a tomar. - Añadió.- No concozco a Taehyung-ssi desde hace tanto tiempo como lo hace usted, así que supongo que debe conocerlo mejor que yo. Entiendo que esté preocupado, en parte lo estoy también, pero hago más allá de lo posible para que todo salga bien y usted, como su amigo, debe apoyarlo porque sabe que él no dará un paso atrás.

- Lo sé. - Murmura con pesar. - Pero eso no lo hace más fácil, ¿sabe? Tae es como un hermano para mí y el hecho de que sea su médico de cabecera me hace más difícil aceptar algo como esto, conociendo el peligro al que se está exponiendo. - Suspiró, mirando en un punto a las espaldas de Jungkook. - Perdone mi actitud, en un primer momento solo quería presentarme pero perdí un poco los estribos cuando lo vi.

- Espero que te hayas comportado, Jiminie. - La voz baja y cautelosa de Taehyung se escuchó a sus espaldas. Ambos Alfas se giraron hacia él, uno de ellos leyendo la advertencia escrita en sus ojos. - Jimin es mi médico personal, si el tratamiento funciona él se encargará de monitorear mi embarazo.- Le contó y la mirada de Jungkook fue al aludido, quien los miraba a ambos con los hombros erguidos y tensos.

- Vas a seguir con todo esto, ¿no? - Jimin preguntó, su voz cargada de resignación al ya imaginarse la respuesta.

- El lunes inicio el tratamiento. - Dijo en su lugar, provocando una mueca de labios apretados en su mejor amigo. - Estaré bien.

- Eso no lo sabes, nadie lo hace. - El rubio dijo, regañándolo con la mirada. - Coordina tu tratamiento en el hospital, quiero que lo recibas allí por si hay complicaciones. -Sus ojos fueron al Alfa pelinegro.- Espero que eso no suponga un problema para usted, Jungkook-ssi.

- En absoluto, de hecho sería lo mejor. - Admitió y Jimin asintió, acercándose a darle un corto abrazo a Taehyung.

- Los espero entonces el lunes. - Se despidió con un asentimiento, alejándose de ambos. Jungkook dejó caer los hombros una vez que Jimin estuvo lejos, su figura siendo una silueta borrosa para sus ojos.

- Perdón por eso. - La voz del Omega disculpándose llamó su atención. Se giró hacia él, enfrentando sus cejas fruncidas. - No pensé que Jimin haría eso, él no es así. No te lo tomes personal, ¿bien? - Jungkook asintió.

- Sólo está asustado por ti, le preocupas. -Admitió, su mirada sobre los ojos mieles de Taehyung. - No quiere que te lastimes y por eso actúa de esa forma.

- Tengo fe en que todo saldrá bien. -Admitió y una risita nerviosa salió de entre los labios de Jungkook.

- Tales expectativas son demasiado pesadas sobre mis hombros. - El Alfa le dijo, luciendo un tono de piel más pálido que de costumbre. - No quiero decepcionar. - Taehyung alzó las cejas sonriendo poquito.

- No me vas a decepcionar.- Musitó y Jungkook esperaba que así fuera.

Sin embargo, dos días después siente su garganta apretada al ver a Taehyung recostado sobre la mullida superficie de la cama. El Omega tiene los ojos cerrados y un ligero tinte pálido cubre su rostro, sus labios lucen casi igual de claros mientras el suero en el que Jungkook lleva años trabajando llega directo a su circulación por vía endovenosa.

El Alfa aprieta sus labios, desviando su mirada hasta las constantes vitales del Omega y supira tranquilo al ver que están en el límite de lo normal. Faltan unos minutos para que la única dosis del tratamiento termine y entonces, todo será cuestión de tiempo para comprobar si dio resultado. Un embarazo en Kim Taehyung es dicha comprobación y la idea que una vez imaginó lejana, martiriza sus sentidos en sus actuales momentos.

Es consciente de que el Omega espera tener un bebé, pero un hijo es un cincuenta-cincuenta. Taehyung es una mitad pero, ¿y la otra?

- Jungkook. - La voz suave del Omega murmura y su mirada pronto está sobre él. Se acerca con pasos rápidos, atento a las reacciones del mayor.

- ¿Cómo te sientes? - Pregunta y lo ve tragar en seco, una sonrisa cansada mostrándose en sus labios.

- Tengo mucho sueño. - Admite. -Y creo que me va a dar fiebre, no sé, mis dedos están un poco acalambrados también. - Cuenta y pronto las manos del Alfa toman cuidado una de las suyas y sonríe poquito al sentir las ligeras caricias disfrazadas de masaje sobre sus dedos.

Jungkook los estira suavemente, uno por uno, ayudándolo a abrir y cerrar su mano para luego comenzar a masajear la palma de la misma. Tiene las cejas fruncidas en concentración y su aroma fuerte está disparado en ansiedad, quizás con un poco de temor y Taehyung se apresura a dejar un flojo apretón con la mano que el Alfa sostiene hasta llamar su atención.

- Estoy bien. - Le dice cuando Jungkook lo mira. - Y aunque no lo esté, no será tu culpa. No me obligaste a nada, fue mi decisión así que yo asumo las consecuencias. ¿De acuerdo?- Jungkook asiente despacio.

- Lo sé. - Murmura, sus ojos en la mano del Omega sobre la que deja masajes con el fin de aliviar los calambres. - Solo estaba pensando en que si el tratamiento funciona...- Jungkook aprieta los labios, no sabiendo bien como formular su próxima pregunta. - ¿Ya ha pensado quién será el padre de su bebé? - Los ojos de Taehyung se abren amplios al escucharlo y su rostro ahora luce unos tonos más pálido que hace unos segundos. Sabe que es una pregunta demasiado personal, pero tiene sus motivos para hacerla.

- ¿Te suena inseminación artificial con donante anónimo? - Taehyung le dice, buscando un tono divertido para formular la pregunta más solo logra que su voz salga temblorosa. Suspira, mirando hacia otro punto de la habitación en la que no esté la expresión preocupada de Jungkook. - Mi abuelo me dijo que debía tener un heredero, nunca me exigió con quien. - El Alfa frunció las cejas, luciendo molesto.

- Un hijo no es algo que pueda tomarse a la ligera. - Refuta, dejando libre la mano que sostenía del Omega. - Es una gran responsabilidad, una que debe tomarse en serio y que será para toda una vida. Deja de hacer que parezca que sólo te estás arriesgando para complacer a tu abuelo para que no te quite la empresa. - Taehyung alzó las cejas.

- Eso es justamente lo que hago. - Concedió, mirando al Alfa en advertencia. - Sé que te he dado confianza para que no nos tratemos de usted pero tampoco te excedas. Como te dije, yo decidiré que es lo mejor para mí y cómo quiero hacer las cosas. Lo que pienses que esté bien o no, no cambiará mis ideas.- Jungkook negó varias veces, mirándolo en advertencia.

- No puede ser con un donante anónimo. - Aclaró y Taehyung lo miró con cejas alzadas, su expresión luciendo molesta.

- ¿Y por qué no? - Cuestionó con molestia.

- Pues porque aunque el tratamiento funcione, su embarazo podría ser de riesgo y el hecho de que lo pierdas es mucho más alto si no está la persona que te embarazó. Es instinto, tu lobo pedirá por el Alfa que concebió a tu cachorro incluso aunque no tengan una relación romántica o nunca se hayan visto. - El Omega rodó los ojos.

- Sé como funciona un embarazo.

- No lo parece, porque no estás diciendo nada con claridad. - Reclamó. - Un Omega en cinta necesita cuidados y protección, tu instinto pedirá por el padre de tu cachorro para que cuide de ti, incluso si tú no lo necesitas, tu lobo lo hará y , ¿qué harás entonces?

- Ya lo resolveré. - Murmuró, desviando la mirada.

- Las cosas no funcionan así.

- Lo harán. - Aseguró.

- Taehyung, no seas testarudo con esto. No tienes la razón y lo sabes, no llegarás a término con tu embarazo si piensas así. Entiende que tu condición es mucho más dedicada que la que podría vivir cualquier Omega por el simple hecho de que estás recibiendo un tratamiento para una infertilidad que hace que todo sea mucho más difícil.

- No crees que es un poco tarde para decirme eso. - Apunta con su cabeza al suero que casi termina, mirando con seriedad a Jungkook. - Mira, es ridículo que siquiera estemos hablando de esto. Ya tomé mi decisión, el tratamiento que creaste ya está en mi sangre y no hay vuelta atrás. Sé que te negaste desde un principio pero ahora comienzas a escucharte como Jimin y realmente aprecio tu preocupación, pero no es necesaria. Ya hiciste tu parte, yo me encargaré del resto. - Afirmó, sintiendo su pecho pesado por las recientes palabras del Alfa.

- Siempre te dije que debía haber otra solución. - Jungkook añadió, no queriendo dar el brazo a torcer. - Eres una persona inteligente, sabes que siempre hay otro camino y no sé cómo funciona tu mente, pero si hay algo de lo que estoy seguro es de que tu abuelo no es la única razón por la que haces esto, ¿verdad? - Las finas cejas del Omega se arrugaron en disgusto al ver que el Alfa no dejaba ir el tema.

¿Cuál era su problema? ¿Se estaba echando para atrás luego de haber accedido? Ya era un poco tarde, no es como si pudiera sacarse el suero de su circulación y dar marcha atrás. Estaba en un punto de no retorno y no iba a regresar atrás, la simple idea lo alteraba.

- Siempre hay otra opción.

- ¡¿Y qué supones que haga?! - Masculló, su tono de voz saliendo quizás más alto y agudo de lo que esperaba. Jungkook lo miró con sorpresa, sus grandes ojos abiertos en impresión y Taehyung vio como su expresión estupefacta se transformaba en una de resignación. - Dime, ¿tienes alguna otra mejor opción? - El Alfa apartó la vista de él, luciendo algo turbado y el Omega suspiró, buscando liberar la tensión de sus hombros.

- Deja que sea yo. - Jungkook le dijo, llamando su atención. - El padre de tu cachorro, deja que sea yo. Déjame ser tu donante de esperma. - Pidió y los ojos color miel de Taehyung se abrieron amplios, un ligero rubor coloreando sus mejillas. Miró al Alfa a los ojos, no logrando leer de que se trataba ese brillo oculto en sus iris.

Un brillo que a Taehyung no le gustaba en absoluto.

- No. -Murmuró, con el corazón acelerado. - No puedo aceptar eso, Jungkook.