korea/Japón;

Nadie. ¡NADIE! toma los mangas de terror que estos dos les dan.

El terror psicológico es lo de Corea, el gore es de Japón y ellos lo manejan de la manera más sutil y bella posible... Que ya todos saben que si ellos decidieran tomar venganza, son para temer.

Aveces entrevistan a otros paises para conocer sus leyendas y transformarlas en algo de lo más espeluznante.

En uno de esos casos fueron con estados unidos -pensando que era el más sádico de todos en cuestiones del genero terros y variables - pero grata sorpresa al descubrir ciertas cosas;

•Canadá es bueno en el genero gore, es lo suficientemente sádico como para detallar escenas sangrientas de manera que pasa desapercibido.

•Rusia es bueno para las historias de asesinatos, junto a Inglaterra. Y aveces lo manejan como espías o su descripción para personajes de este calibre es tan... Normal... Que no pensarías que pueden matarte mientras te bañas.

Pero quien les sorprendio un poco más, fueron otros dos;

•Itália; su historia tiene a grandes asesinos. Hombres y mujeres. Descubrieron que en cualquier caso si Itália les declarará la guerra de forma indirecta el veneno sería su más grande amigo. Los venenos son parte de su historia.

Y;

•México; su cultura esta tan ligada a la muerte que tiene alta variedad de leyendas. Leyendas que se entrelazan con demonios, la muerte y el diablo mismo. La favorita del par de asiaticos es la del Charro Negro. Y así como led gusta les aterra.

En una ocación trataron de asustar a México disfrazándose de él, pero México solo se les quedo viendo... Los asustados fueron ellos al verlo sonreir y ver como sus ojos se volvian negros mientras se ponía un sombrero de charro, con las palabras -oh mocosos... Realmente ¿quieren ver al charro? -

Ambos salieron corriendo mientras México solo se reía... Hasta que sintio un viento frío y volteo su cabeza... Viendo a un señor a lo lejos, sobre un corcel como la noche.

No tuvo miedo. Sólo tomó su sombrero en muestra de respeto junto a un asentimiento de cabeza, el cual fue respondido por el hombre que prosiguió a alejarse en su corcel, mezclándose con la fría niebla, bajo el manto de la hermosa luna llena.

Por que en México la muerte se respeta.