A Jimin cualquier mínimo detalle podría volverlo feliz, tan simple como una paleta o un abrazo serán suficiente para que sonría. Pero hay una pequeña/grande cosa que debes saber para que este genuinamente feliz.

Le gusta la atención, y si puedes darle toda tu atención, solo a él, estará más que feliz.

Puedo recordar la primera vez que me atreví a a invitarle a salir. Él estaba dudoso y lo entendía, habíamos hablado poco tiempo antes de eso. Pero aún así, acepto.

Ese día estuve tan nervioso por no saber como hacer que disfrute de nuestra "cita", de cómo hacerlo feliz, pero todos, absolutamente todos mis intentos, estaban bien, o eso me dejaba ver. Su hermosa leve sonrisa no desapareció de su rostro. Pero necesitaba ver algo más, sentir algo más. Y lo conseguí.

En uno de los grandes miradores, en plena noche, me di cuenta de que, cuando jimin noto que en lugar de ver y apreciar el hermoso cielo estrellado(como él lo hacía) que nos cubría, yo le observaba a él, apreciaba cada una de sus facciones iluminadas levemente a la luz de la luna, cada uno de sus pequeños lunares, incluso queriendo grabarme el total de sus preciosas pestañas. Supe y sentí en ese momento, que él era genuinamente feliz.

Jiminie, eres más hermoso que una noche llena de estrellas.

No lo olvides, debes que darle toda tu atención, cada uno de tus segundos, porque él es así, un bebé.

—myg.

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