Capítulo 74
Estiré mi brazo dramáticamente mientras estiraba mis palabras con un tono de profundidad en cada silaba.
—Ofrezco mi armadura de 300 metros, el todopoderoso artefacto perdido: Lucifer.
La sala quedó sumida en un silencio ante mis palabras, el silencio, la sorpresa y el shock se mezclaban en un vino sutil que solo exaltaba mi firme presencia. El sonar rítmico de los corazones de la elite tocaban una melodía que sus bullicios y gritos no podrían alcanzar ni en un millón de años.
Pero sin embargo la comida que se deja mucho al aire se pudre y antes de permitir que esta atmosfera tan perfecta donde dejé sin palabras a poderosos hombres se rompa, prefiero destruirla con mis propias manos, quemaré la flor antes que se marchite. Esta belleza es mía, y si no lo puede ser entonces su muerte debe ser a mis manos.
Clap, clap.
Mis aplausos cortaron la atmosfera, devolviendo a Cronos a su rueda y permitiendo al tiempo seguir fluyendo.
Frampton se abalanzó sobre su vaso de agua bebiendo un litro con la rapidez de alguien que comió picante, Redgrave dio un golpe en la mesa gritando cosas que mi cerebro reemplazo por balbuceos en argentino.
Jaja, Redgrave Argentino.
Sacudí mi cabeza volviendo a centrar mis ideas.
—Bien, bien, parece que no me explique correctamente, así que permítanme explicar mis palabras —levante mi dedo índice—, primero, lo que ofrezco no es la armadura en sí debido a los numerosos problemas de logística que eso ocasionaría, no, en su lugar lo que ofrezco es la llave de activación. —levanté mi segundo dedo, girando un llavero con una hermosa cruz de hierro con un borde de oro y centros de platino—, segundo, el dueño de la llave no será otro que su alteza el príncipe heredero Julian —levante mi tercer dedo mostrando mi mano a los presentes—, tercero, es que por mi -irreplicable- servicio de mantenimiento, se me libre del pago de impuestos. Si se cumplen mis tres condiciones, el artefacto será del príncipe.
Mis palabras claro que fueron ignoradas por los tontos cuando Frampton intento arrojarse para morder y desgarrar mi cuello.
—¿De que sandeces habla, Baron? La primera y la segunda condición ya de por si me parecen inadecuadas, ¿Pero exonerarlo completamente del pago de impuestos? ¡Inadmisible!
El Duque Redgrave se aclaró la garganta mientras hablaba.
—Como caballero de la reina cuenta con una deducción de impuestos del 10% del total de sus ingresos generados anualmente, ¿Eso no le parece suficiente? ¿Cuánto más necesita para llenar ese valor desmedido que aparentemente tiene por el dinero?
Me recliné hacia adelante en mi silla juntando mis dedos.
—Veo que quieren negociar respecto a la exoneración fiscal. Excelente... —dije—. Muy bien, caballeros, pongan sus ofertas sobre la mesa.
—20%
—30%
Frampton fue más radical mientras que Redgrave fue más permisivo, quizás era porque este trato los beneficiaba. Julian y Anjelica aun estaban comprometidos, por tanto, si Julian tuviera un hijo con Anjelica ese hijo, por tanto, heredaría a Lucifer llegando su momento.
—No hay lugar en el reino capaz de almacenar algo tan grande además de claro mis propios almacenes, esos almacenes estaban destinados a establecer una gran fabrica para dar mantenimiento a armaduras y aeronaves, perdón caballeros, pero al hacer este negocio estoy renunciando a una buena cantidad de mis ingresos, no puedo permitir algo inferior al 95%.
—Pero incluso si este negocio no es llevado a acabo el Barón deberá desperdiciar sus valiosísimos almacenes en guardar esta cosa, un lugar de tenerlo ahí y que no le rinda nada puede tenerlo ahí y que le produzca una exoneración del 40%.
¡Bingo!
Eso es a lo que había apuntado originalmente, 40% extra, que junto al 10% de mi titulo me daba un 50% menos de los impuestos que debo tributar ante la corona. Dios mío, los impuestos están pesados incluso para un personaje roto como yo.
Estaba a punto de aceptar el argumento del Duque cuando...
—¡50%! —El Margrave Frampton repentinamente saltó al ataque.
¿Eh?
—¡55%! —El Duque volvió a subir las cifras.
—¡60%!
—¡62%!
—¡69%!
—¡75%!
¿EHHHH? ¿Qué acaba de pasar aquí?
—¡90%!
¿¡EHHHHHHHH!?
◇
—Veo que quieren negociar respecto a la exoneración fiscal. Excelente... —dije—. Muy bien, caballeros, pongan sus ofertas sobre la mesa.
—20%
—30%
El Margrave no pudo evitar morderse el labio al escuchar la propuesta de Redgrave.
—Ese maldito bastardo, ¿Ahora piensa traicionarme?
Antes de esta reunión, Redgrave y Frampton se habían puesto de acuerdo para realizar un reparto 40%-40%-20%, sin embargo ahora subía a 30% sin cuestionárselo. Frampton tomó de su barbilla reflexionando, ciertamente, tenían que aprovechar que Adeuz había puesto esa arma sobre la mesa para quitársela de las manos, no podían permitir a un joven sin experiencia ni conocimiento portar tal poder.
—Santa mía, ¿Siquiera en que lugar había conseguido tal arma? —pensó con desagrado.
—No hay lugar en el reino capaz de almacenar algo tan grande además de claro mis propios almacenes, esos almacenes estaban destinados a establecer una gran fabrica para dar mantenimiento a armaduras y aeronaves, perdón caballeros, pero al hacer este negocio estoy renunciando a una buena cantidad de mis ingresos, no puedo permitir algo inferior al 95%.
La propuesta de Adeuz casi hizo que ambos hombres se atragantaran con su propia saliva, Redgrave, ¡¿Una exoneración de 95%?! ¡Ni siquiera ellos tenían tal lujo!
Frampton sintió como si la sangre se saliera de su cuerpo al recordar todo el dinero que perdía año tras año solo en impuestos a la corona.
—Pero incluso si este negocio no es llevado a acabo el Barón deberá desperdiciar sus valiosísimos almacenes en guardar esta cosa, un lugar de tenerlo ahí y que no le rinda nada puede tenerlo ahí y que le produzca una exoneración del 40%.
Frampton observó como Adeuz y Redgrave sonreían, ambas partes estaban satisfechas ante esa oferta, espera, ¿Y si este era el plan de esos dos? Dejarlo a él con solo el 20% de las ganancias. Adeuz ya había salvado una vez a la hija de Redgrave así que era factible que ambos estuvieran negociando bajo la mesa. Frampton no pudo evitar pensar en Adeuz tomando la silla del Duque, ¿Era acaso alguna clase de señal? ¿Un código secreto?
Tal vez no tenia mucho sentido, pero, Adeuz nunca había sido alguien con sentido, siempre que él se involucraba las situaciones se torcían. Golpeo a un príncipe heredero, inicio y termino una guerra él solo, mostro una arma con el poder de destruir el reino solo para después regalarla como si nada.
La mayoría de la nobleza usa joyas, armaduras, aeronaves, todo para mostrar su poder, pero Adeuz no, él era un hombre que usaba su actitud bufona para mostrar su poder al salirse con la suya en cada ocasión, fueron esas actitudes y el sentimiento de estar perdiendo ante Redgrave cuando las facciones estaba tan equilibradas lo que hizo a Frampton precipitarse en una conclusión apresurada, sintiendo como si una influencia misteriosa se adentrara en su cabeza, sintió un olor suave como a lavanda que empañaba la claridad de sus pensamientos, entonces una revelación pareció llegar a él.
—¡Ese viejo perro Redgrave me está traicionando! —La cabeza de Frampton enrojeció, su cerebro llenándose de sangre mientras saltaba al ataque.
—¡50%! —Sus labios se movieron más rápido de lo que su cerebro pudo procesar lo que estaba a punto de hacer.
Si Adeuz mostraba su poder al torcer la etiqueta noble entonces solo tuércelo tanto que se quiebre.
Pero al ver esa actitud Redgrave solo pudo pensar una cosa.
—¡Ese cuervo bastardo me está traicionando!
La mirada de Redgrave paso hacia Adeuz, el muchacho estuvo sorprendido al principio pero pronto su mueca se movió convirtiéndose en una ligera sonrisa. Estaba complacido ante alguien que le ofrecía un mejor trato.
A menudo la autoridad de Redgrave le permitiría detener a estos dos incluso si se juntaran en su contra, pero ahora, en esta situación donde la situación del príncipe en el palacio se tambaleaba y donde Julian solo se mantenía en su posición gracias a Adeuz, no era buena idea perder el favor del patrocinador de Anjelica y Julian. El Duque sintió algo de dolor, como una punzada n el cráneo mientras sentía como si un largo gusano se retorciera por la herida, revolviendo sus ideas, sin poder pensar claramente Redgrave intentó lanzar una oferta mayor, hablando con una voz moderada y conteniendo su grito, pero manteniendo la fuerza en su voz.
—¡55%!
Pero para Frampton eso solo fue una confirmación de las intenciones traicioneras de Redgrave.
—¡60%!
Al escuchar las palabras de su compañero noble, Redgrave sintió un flechazo en su cerebro, sintiendo sus neuronas morir, ¿Qué estaba pensando este idiota?
—¡62%!
Volvió a elevar un poco la oferta.
—¡69%!
Y Frampton la elevó más.
—¡75%!
Redgrave ya estaba enfurecido, volvió a subir la oferta, esto ya estaba siendo más por orgullo que por algún plan beneficioso.
—¡90%!
—¡Kugh!
—¡Vendido al Marques Frampton! —gritó Adeuz mientras golpeaba la mesa con un mazo de madera con gomas en las esquinas, ¿De donde había sacado eso?—. Entonces recibiré un 90% de deducción anual de impuestos por concepto de mantenimiento y custodia de Lucifer. —Adeuz sonrió—. ¿Está de acuerdo con está oferta, general?
—Am, em, yo, ¿Si?
El general se había perdido en algún momento. El plan original era llevar la reunión a una subasta donde Adeuz compraría la tierra a cambio de la armadura Lucifer, toda esta conversación no estaba planeada, ni la deducción de impuestos ni nada más.
El general Rothali recibió un contrato de Adeuz.
CONTRATO DE COMPRA
Por medio de la presente se declara al portador de este documento "Adeuz Fou Rasford", de ahora referido como Rasford, como el legitimo propietario de todo el botín de guerra conseguido durante la guerra contra el caído en deshonra, de ahora referido como "Olfery" siempre y cuando se cumplan las siguientes condiciones:
A. A cambio del botín, Adeuz Fou Rasford entregará la llave de activación del objeto perdido, la armadura de 300 metros, ahora referido como "Lucifer" a "Julián Rafua Holfault", ahora referido como "Julian" en el documento.
B. Rasford se compromete a almacenar y dar mantenimiento al "Lucifer" a cambio de una deducción de impuestos totales referente al 90% sin contar otras deducciones fiscales que posea Rasford.
C. Las demás partes interesadas en la guerra, a partir de ahora referidos como "Otros" renuncian a cualquier reclamación legal de las propiedades de las tierras de "Olfery" una vez se hayan marchado de ella.
Firma de enterado y acuerdo.
—Umm... Barón, ¿Cómo usted sabia que terminarían optando por un 90% en la deducción final?
—En realidad solo hice 100 documentos diferentes. —Adeuz metió la mano bajo su capa sacando de ahí varios fajos de papeles, el general se asustó de donde los guardaba pero mejor no preguntó nada.
—Los hombres de negocios en serio que son aterradores.
El general firmó el documento, después de lo cual se lo paso a Redgrave y Frampton para que lo firmaran. A regañadientes ambos hombres lo hicieron más por un sentimiento de orgullo que por que realmente estuvieran de acuerdo con la oferta. Ninguno de ellos tenía más de un 40% total de deducciones fiscales, y ahí estaba el Barón, obteniendo un 90%. Sintieron como si sus narices estuvieran a punto de sangrar de la envidia.
◇
Así que si firmaron eh...
Cuando terminó la reunión Adeuz se había alejado de todos un momento para irse a una lujosa habitación en el tercer piso de la mansión. Se recostó en un sillón de varias decenas de miles de dia de preció mientras subía sus piernas descuidadamente sobre él sin importarle mancharlo o no.
Cuando ganas el poder de imprimir dinero lo material pierde un poco el sentido.
¿Qué el oro pierde el valor? Solo busca lo siguiente más valioso, ¿Qué todos los metales pierden valor? Solo busca el sector más exitoso del momento e invierte ahí, ¿Qué incluso eso falla? Pues solo imprime dinero. Luxon podía duplicar billetes y monedas a su entero gusto.
Adeuz se sacudió esos pensamientos, recostado en el sillón observando el contrato firmado por aquellos que asistieron a la reunión. Había sido fácil... Demasiado fácil...
Aduez sentía sospechas, él esperaba un debate más alrgo, una lucha de varios días, ya habia arreglado cinco atuendos diferentes para cada día y chistes relacionados con cada día de la semana, además, ¿Qué haría ahora con toda esta información que había reunido contra los nobles del reino?
Adeuz dio una fuerte bocanada de aire, el mundo entero se aclaró mientras el espeso olor de libro nuevo desaparecía de su cabeza.
Solo entonces se dio cuenta de una cosa.
En la esquina de la habitación, en un escritorio había un gigantesco letrero neón con las palabras "Evidencia super clasificada SSS aquí", Adeuz lo había puesto como una broma entre él y Luxon, después de todo cada rincón y camino a esta habitación estaba lleno de cámaras y robots centinelas, nadie jamás podría tener acceso a toda esta información super secre-...
El escritorio estaba vacia.
-ta...
Adeuz se queda en silencio unos segundos.
—Ah, se ha ido...
...
Espera...
¡¿SE HA IDO?!
Adeuz encontró una pequeña nota adhesiva en la mesa.
"Yo me la llevo c:"
Adeuz se quedo varios largos minutos viendo esa carita feliz.
—¡LUXOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOON!
◇
En algún otro lugar una bella mujer de largo y brillante cabello blanco daba pequeños saltitos por el pasillo en la mansión del antiguo Conde Olfery mientras lleva a su pecho una gran pila de papeles que había tomado de la habitación, se asegura con cuidado que ni una sola hoja se caiga.
En algún momento mientras se iba...
—¡LUXOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOON!
La mujer da un pequeño salto como un gato asustado, mientras su pálida piel parece ponerse más blanca, se asegura de mantener equilibrada la pila de papeles y después se sigue alejando con una pequeña risa suave.
◇
En su habitación, Adeuz observaba decenas de pantallas que mostraban las cámaras de seguridad.
—Ahí está. —dijo Adeuz.
[22:10:48, los documentos están en su lugar, 22:10:49, los documentos desaparecen.]
—Prueba ponerlo en cámara x10 veces más lenta.
[22:10:48:1, los documentos están en su lugar, 22:10:48:2, los documentos desaparecen.]
—Prueba ponerlo en cámara x100 veces más lenta.
[22:10:48:001, los documentos están en su lugar, 22:10:48:002, los documentos desaparecen.]
—No hay ni un solo hechizo o borrón, sencillamente los papeles desparecen de un frame a otro, esto no tiene puto sentido, ¡No hay un solo punto ciego en este lugar! —gruñí—. ¿Acaso mis documentos super clasificados solo hacen noclip de un segundo a otro y se van a los backrooms?
[Maestro mire aquí.]
—¿Qué pasa Luxon?
[Cámara 3, horan 22:15:03 hay algo en su cama.]
Observé lo que me dijo Luxon, y efectivamente, durante unos instantes algo se manifestó en mi cama.
—Luxon, acércate
Luxon agrandó la imagen lentamente, subiendo la calidad y nitidez lo mejor que pudo, ahí en mi cama apareció una nota adhesiva.
[Parece tener algo escrito]
—Acércate un poco más...
Luxon se acerco un poco más y entonces pude leer: "No me gusta esperar >:c"
Cielos, ¿En que problema me metí ahora?...
[¿En que problema se metio ahora maestro?]
{¿En que problema te metiste ahora compañero?}
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Intentaré actualizar cada domingo que suele ser cuando tengo tiempo.
¿Qué les pareció el capitulo? Jsjsj
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