-¡Por el crimen de incitar a una revuelta, se te condena a 300 horas de servicio comunitario y a pagar una multa de 400 de oro!

El juez golpeó con su mazo para así cerrar mi juicio.

Originalmente me iban a expulsar de la escuela, sin embargo gracias a la intervención secreta de Mylene-sama la cosa se calmó un poco. No sé pudo demostrar que fui el que inició la rebelión pero tampoco se puede negar y lamentablemente en la época medieval eres culpable hasta que se demuestre lo contrario. Solo me tienen un poco de tolerancia ya que soy un noble.

Los testimonios de Raymond y Daniel ayudaron mucho para evitar algo más grave.

Mientras que León...

-¡Les digo que soy inocente! ¡Él comenzó todo! ¿¡Qué clase de injusticia es ésta?!

Fue condenado a servicio comunitario junto a mi.

-Eres una escoria de amigo. -Le susurré.

◇◇◇

Terminé pagando la multa de ambos puesto que León, un barón de campo pobre, no tenía el dinero para hacerlo.

Lamentablemente el dinero preparado por Luxon no puede sacarme de este castigo.

¿Qué es nuestro servicio comunitario? ¿Limpiar un área pública? ¿Llevar comida a ancianos? ¿Apoyar en el frente?

No, no, y no.

Ya quisiera eso.

-¡Más vino! -exigió una voz mientras una copa era alzada.

En silencio León se adelantó y sirvió el vino a la persona en cuestión. Ella dió un sorbo y después tiró el resto en la cara de mi amigo.

-¡Dije vino, ésto es maldito jugo! ¿¡Acaso eres tan inútil que ni siquiera eso puedes hacer?!

La chica se fue dejando la copa caer.

-¡Mierda! -salté y atrapé la copa.

Mientras más rompamos más horas nos dan. Esa perra debió hacerlo a propósito.

La miré voltear a verme y reírse antes de continuar su camino.

-Estoy empezando a odiar a todas las mujeres nobles.

También yo. Bueno, Mylene-sama es obviamente la excepción de las excepciones.

Espera, ¿"Todas las mujeres nobles"?

-Emm... León, de casualidad, ¿Conoces a la estudiante de honor?

Me preocupé de que León haya interferido con la protagonista. No se si mis interacciones con los otros "personajes de fondo" o "Mobs" como León puede alterar la historia original.

¡Mierda! ¡¿En serio el aleteo de una mariposa puede provocar un huracán?! ¡Estúpida ciencia, siempre tienes la razón!

-Luxon. A partir de ahora asegúrate de avisarme si algún hombre aparte de los objetivos de conquista interactúa con ella. -susurré.

[Entendido. He de decir que la persona ante usted ya ha interactuado con ella.]

¿¡Eh?!

-Si, bueno -habló León antes que pudiera preguntar cualquier cosa a Luxon-... La terminé encontrando después de mi fallida fiesta de té. Ella fue atacada por otras chicas y le ofrecí algo de te y dulces. Después se fue. No quiero interactuar demasiado con ella.

Suspiré aliviado.

Actualmente debe estar ocurriendo el evento de Anjelica y sus subordinados molestando a la protagonista. Eso significa que debió haber levantado alguna bandera con el príncipe y/o los otros tipos.

Solo ofrecerle algo de té y dulces no debería ser problema.

-Hablando de ello, ¿Porqué estás tan preocupado?

-¿E-, eh?

-Pareces muy interesado en la estudiante de honor.

León entrecerró sus ojos hacia mi.

"Porque ella es la protagonista ¡¡Si te metes con ella el reino puede terminar hundido!!"

Naturalmente no le respondí eso. Aún si le digo a León, Raymond o Daniel que soy un reencarnado de otro mundo y que éste mundo es un juego otome solo me tomaran como un loco.

No vale la pena gastar saliva en eso.

-Soy un fuerte clasista. -declaré.

Ni siquiera pensé en mi respuesta, solo dije lo primero que me vino a la mente.

-¿Un clasista?

-¡A-, así es! ¡Desprecio por completo la idea de que una plebeya venga a una escuela con nobles como nosotros!

Realmente es una mentira. Personalmente pienso que lo único que importa es el talento. Si tiene talento puede venir a ésta escuela, si no, pues no. Y siendo la protagonista si es muy talentosa. Solo espero que no sea una hija de perra como el resto de mujeres de la academia.

No creo en la igualdad pues los humanos no nacemos iguales. Pero si creo en la justicia, es decir, que cada quien reciba lo que merece.

-Ya veo.

León pareció complacido con mi respuesta.

-¡Ey ustedes! ¡Dejen de hacer el vago malditos inútiles! ¡O voy a aumentar sus horas y sacarlos a patadas!

Gritó molesto un hombre de traje que se acercó a nosotros.

-¡S-, si señor!

Respondimos yo y León al unísono.

-¡Primero vayan y limpien sus caras y ropas, cerdos de campo! -gritó.

Cuando miré a León noté que su cara y playera estaba manchada de rojo, mientras que mi ropa estaba llena de polvo y suciedad.

Ambos salimos del gran salón y en el área de personal nos pusimos una de las tantas ropas de repuesto.

El ataque a los camareros no es nada raro por eso hay tantos atuendos e incluso una pequeña área médica.

Éste lugar, éste inferno, es un inmenso salón de baile dentro de la academia donde solo los nobles de alto rango hacen sus bailes y ceremonias.

Éste lugar es donde estamos haciendo nuestro servicio comunitario.

Solo en ésta semana llevamos casi 50 horas aguantando a esos estúpidos nobles ricos.

Actualmente la fiesta es la de su alteza el príncipe Julian.

Odio a ese tipo guapo.

Nos cambiamos y volvimos al salón.

Julián estaba en el centro rodeado de perritos que movían sus colas intentando llamar la atención y ganar el favor del próximo rey.

Nos quedamos al margen sosteniendo bandejas con una botella de vino y dos copas.

Es una maldita tortura.

-Luxon, formas de escape.

[Lo lamento pero el maestro debe responsabilizarse de sus actos, así que no puedo sacarlo de aquí.]

-¡T-, tú! ¿¡Olvidaste quien es tu maestro?!

[No lo he hecho. Mi maestro es Adeuz Fou Rasford, un reencarnado, un barón advenedizo y un completo simp de su majestad la reina.]

-Ahg, ¿Porqué tuve que enseñarte esa palabra?

[Agradezco la generosidad del maestro por ayudarme a aumentar mi vocabulario.]

-¡Sácame de aquí!

[No.]

-¡I.A traicionera! ¡Por eso no se debe confiar en ustedes!

[Lamento estar en contra de su afirmación, pero he seguido impecablemente las órdenes del maestro y lo he ayudado, ¿Cree usted que podría conocer a su majestad la reina si no fuera por mi? ¿Cree usted que se hubiera escapado de su muerte sin mi? ¿Cree poder conseguir tanto dinero?]

Me mordí la uña bastante enojado por no poder refutar las palabras de Luxon.

[Debí suponerlo.]

-¡Cállate! -grité enojado.

Todos voltearon a verme y en ese momento fue cuando me di cuenta de lo que hice.

Cagué.

[Cagó, maestro.]

León dió un paso lejos de mi. Maldito traidor, estoy rodeado de puros traidores.

Después de alejarse todos los nobles se abalanzaron sobre mi. Incluso la música se detuvo por lo que sus pasos aumentaron con el eco del silencio lugar.

Era una estampida que venía hacia mi.

-¿Un simple camarero como tú se atreve a alzar la voz frente a su alteza?

-¡Y nos pide que nos callemos!

-¡Que creído!

-¡Que lo encierren!

-¡Ejecutenlo!

-¡Torturenlo!

Fui rodeado.

Los gritos se alzaron uno tras otro.

Sentí todos los insultos atravesarme como una interminable lluvia de flechas. Solo se terminó cuando alguien comenzó a separar a la multitud como si se trata de Moisés separando las aguas; Era el príncipe heredero.

Él camino lenta y elegantemente hacia mi, de hecho, fue muy lento.

Espere pacienteme a qué estuviera a dos metros de mi, entonces finalmente se detuvo y habló.

-¿Cómo te llamas? -preguntó levantando una ceja.

-Y-, yo...

Una gota de sudor bajo por mi frente mientras miraba alrededor buscando que hacer o decir.

Mis manos se pusieron sudorosas.

¿¡Qué demonios debo decirle a este tipo?!

-¿Y bien?

-Mi nombre es Adeuz Fou Rasford, su alteza.

-Adeuz ¿Eh -Julian colocó su mano sobre su mentón mientras parecía reflexionar-? Me suena familiar. Bueno, olvídalo. -centró su fuerte mirada en mi.

Aunque puedo destrozarlo con fuerza bruta él me está aplastando con una presión silenciosa.

Esa presión no es fuerza, es una presión de autoridad pura. Ya sea la autoridad de un príncipe heredero hacía un simple barón de campo o la autoridad de un protagonista hacía un mob.

-...

No supe que decir, no supe ni siquiera si debía o podía decir algo.

Fue en ese momento cuando...

-¡Pirataaas! -exclamó un noble con miedo.

¡Boom!

Antes de que pudiéramos hacer o decir algo una inmensa explosión ocurrió y todos dirigieron su atención a la entrada.

Un montón de piratas de los cielos entraron al lugar arremetiendo contra los guardias.

-¡Wuaaaa!

-¡Corran! ¡Corran!

-¡Atacan piratas!

-¿¡Cómo demonios los piratas llegaron aquí?!

Todos los nobles corrieron lejos de la entrada.

-¡Protejan a su alteza Julian!

Aprovechando la confusión provocada también salí corriendo de la escena mientras algunos guardias se colocaban junto a Julian.

Un disparo perdido de la batalla terminó volando muy cerca de mi cabeza, pues mi oreja comenzó a sangrar con un pequeño corte.

Rápidamente me puse a cubierto detrás de un pilar y analicé la situación.

Miré el emblema de los piratas, sus armaduras y su estilo de luchar.

Sin duda alguna ellos son el grupo "Krakens", un grupo que es un enemigo en el segundo año. En el final de ese evento el personaje con mayor afecto tomará la bandera de Co-Protagonista y ayudará en una desigual lucha contra su líder, ¡Por dios, son 5! ¡Luchen todos a la vez joder!

¿Porque están atacando aquí?

Comencé a hacer trabajar mi cerebro a máximo rendimiento, entonces recordé un diálogo que dijo Julian en el juego.

"Hace tiempo fui atacado por esos piratas, afortunadamente mis guardias los detuvieron el tiempo suficiente para que llegará el ejército. Ese día perdí muchos sirvientes valiosos. Juró en su nombre que traeré justicia a los piratas."

Estaba ampañado de una ilustración del guapo príncipe heredero que después fue convertida en poster y vendida a las fanáticas del juego.

Los desarrolladores no perdían la oportunidad de exprimir al jugador.

¿Entonces éste es el evento mencionado por Julian?

Tragué saliva ante la idea de ser una de esas víctimas hoy.

Viendo a lo lejos León estaba a cubierto detrás de una mesa escondido mientras buscaba una salida con su mirada.

[Maestro, su armadura puede llegar en 4 minutos y 22 segundos si lo desea.]

-Llamala, pero manténlo fuera de esta batalla.

[Tener el poder de ganar fácilmente pero no usarlo es el comportamiento de un idiota, maestro, no es que mi calificación sobre su inteligencia sea muy alta pero hasta usted debería entender algo tan simple, ¿Entonces porqué quiere dejar a Arroganz fuera de ésto?]

-Escucha Luxon, éste es un evento importante del juego. Si lo resuelvo yo entonces le negaré al príncipe Julian la oportunidad de crecer. Si eso pasa sin duda no podrán contra ese monstruo trampa que tiene el principado.

[Siendo ese el caso maestro, ¿No sería mejor que usted los entrenará y les entregará armas de mejor calidad creadas por mi?]

-No quiero arriesgarme a un inmenso efecto mariposa. Prefiero que la historia siga su curso. Solo intervendré cuando sea algo necesario.

[Estoy leyendo el ritmo cardíaco del maestro y es notoriamente evidente que no le gusta nada la situación, maestro, ¿Porqué intenta mentirme?]

-...

[Ya veo, intenta mentirse a usted mismo.]

-Callate. Solo busca una maldita salida.

[Calculando posibles rutas de salida... Ruta lista. Maestro, por favor sigame.]

Y después de decir eso Luxon se fue volando. Decidí seguirlo. Muchas balas y armas volaron a mi alrededor pero afortunadamente llegué hasta una puerta sin rasguño alguno.

-¡No creas que escaparás!

Entré y apoye mi peso para cerrar la puerta. En ese momento la mitad del filo de una espada atravesó la puerta a pocos centímetros de mi cabeza.

¡Estúpido pirata mob con buena puntería!

Inmediatamente miré a mi alrededor; Estaba dentro de la cocina.

Rápidamente me apresuré y tome una mesa con la cual bloqueé la puerta. Pude ver la espada siendo retirada y como alguien intentaba forzar la entrada.

-Mierda, mierda, mierda...

Luché por mantener la puerta cerrada. No tengo ningún arma conmigo, no me dejaron traerlas y por culpa de eso mi vida está.

Comenzó una lucha contra el pirata para ver si la puerta se abría o se cerraba. Mi fuerza me permitió soportar un minuto entero de empujones, pero sin previo aviso la fuerza de mi enemigo se hizo más grande, ¿Alguien vino a ayudarlo?

-¡Que insistentes, joder!

La suela de mis zapatos comenzó a deslizarse hacia atrás mientras yo intentaba aguantar.

¡Por eso no tolero los zapatos! ¡Prefiero las botas!

Pude ver cómo una mano comenzó lentamente a asomarse por el pequeño marco de la puerta. Era una mano grande y peluda como la de un bárbaro.

Parece que debo mostrar mi arma secreta.

-Luxon, esteroides.

[¿Está seguro maestro? Podría tener un efecto secundario.]

-Lo preparaste tu, ¿Verdad?

[En efecto.]

-Entonces no me preocuparé.

Si, Luxon es una I.A, él no puede cometer errores. Esa droga de fortalecimiento físico que preparo es algo que usaban en el juego, si a los protagonista nunca les pasó nada debe ser segura ¿Verdad?

[Mi maestro es muy noble por dejarme usarlo como sujeto de pruebas.

-¿Sujeto de prue...?

Antes de poder seguir hablando pude sentir como una jeringa entraba en mi brazo y un líquido era derramado en mi torrente sanguíneo. Todo mi cuerpo se retorció y se quedó completamente quieto.

-¡Atttttchchchchchhhhh!

Espuma salió de mi boca mientras mi cuerpo fue empujado hacia atrás por la mesa la cual cuando deje poner fuerza fue empujada.

La puerta se abrió de golpe y tres piratas musculosos entraron mientras yo iba Lentamente perdiendo la conciencia.

Mierda... Luxon... Nunca más vuelvo a confiar en ti.

Todo se puso oscuro.