Se alejaron de la casa de los Lee y fueron directos a un parque que se encontraba cerca.

Era extraño, nunca habían estado solos y Johnny se sentía nervioso, sobre todo después de lo que habían hablado por mensajes, pero Mark estaba callado, podría decir que demasiado para lo atrevido que estaba el día anterior.

¿Se arrepentiría?

ㅡ¿Quieres un helado? Hay una heladería cerca ㅡPreguntó el mayor.

El más bajo solo asintió sutilmente y siguió caminando por el camino de ese parque mirando hacia el suelo.
Suh lo miraba, estaba raro, ¿tímido? No lo sabía, pero lo veía demasiado adorable hasta cuando estaba callado.

Se dirigieron esta vez hacia la heladería.

ㅡ¿Lo quieres de chocolate? ㅡPreguntó Johnny, pero Mark negóㅡ ¿De... Fresa? ㅡNegóㅡ ¿De vainilla? ㅡAsintió finalmente.

Johnny pidió los dos helados y fueron hacia una zona de césped frente a un pequeño río del parque donde se sentaron.

ㅡ¿Mark pasa algo? ㅡLevantó el rostro ajeno desde el mentón.

El menor alzó la mirada hacia Johnny, para mirarle directamente en silencio por unos largos segundos, además de tener una expresión seria.

ㅡ¿Y mi beso?

Los ojos del mayor se abrieron como platos y por poco se atraganta con el helado, que directo había sido.

ㅡPensaba que hoy harías algo, después de lo que hablamos ㅡVolvió a intervenir Mark.

Johnny mordió su labio inferior.

ㅡPensaba que querías conocerme antes de eso.

ㅡNos hemos ido conociendo... Además, que puedo conocer el resto mientras salimos, ¿No crees?

Cierto, no había fallas en esa lógica. El mayor dejó su helado a un lado y después agarró el del contrario para dejarlo también. Se acercó aún más hasta quedar sentado a su lado, ahora era cuando su corazón iba todavía más deprisa.

ㅡMark...

ㅡNo sé si estoy enamorado, pero me gustaría que me besaras.

El mayor tragó con dificultad, esa tentación en sus labios.
¿Iba a besarle? ¿Al hermano de su amigo? Pues sí, le gustaba después de esas semanas hablando por mensajes, hacía tiempo que no se sentía así con alguien y no desaprovecharía la oportunidad con él.

Rodeó los hombros de Lee con el brazo y con la otra mano volteó su rostro hacia él. Sus labios estaban relativamente cerca. Ninguno de los dos daba el último paso, solo esperaba para poder apreciar su belleza de cerca, su olor, cada detalle. No tenía ninguna prisa, aunque se muriera por probar sus labios rosados.

Su mirada iba de los ojos a los labios entreabiertos del menor repetidas veces. Se sentía muy cómodo con esa cercanía, pero no esperó más hasta dar el paso definitivo de acariciar sus labios con los suyos propios.

Eran suaves, blanditos y mullidos, además de deliciosos y con un ligero sabor a vainilla por el helado, combinándose con su dulzura.

Era el primer beso de Mark, pero éste se dejaba llevar por la experiencia del contrario, haciéndole ver que tenía muy claro que quería besarle.

Sus labios se movían a un compás lento para empezar, mezclando saliva, hasta que Johnny acabó recostando al menor sobre la hierba que rodeaba el parque, en ese momento comenzó a ir más rápido, pero sin emocionarse. Una vez probó esos labios quería más de ellos.

Las mejillas del menor estaban hermosamente coloradas y pudo apreciarlo cuando se separó un momento a verlo, al cabo de unos muy largos segundos de beso.

ㅡ¿Entonces salimos? ㅡPreguntó Johnny.

ㅡTengo un pequeño problema... ㅡMark dirigió su mirada hacia bajoㅡ Me he excitado...

Inconscientemente la mirada del mayor bajó a comprobarlo, esa zona abultada y no pudo evitar sonrojarse al ver al inocente de Mark así.

ㅡEstás muy rojo, pequeño, me encantaría aliviar lo que yo he provocado ㅡMiró a su alrededor, evidentemente por las horas que eran no estaban solos, pero tampoco había tanta gente por esa zona.

ㅡ¡Mírate a ti! Tus orejas están rojas ㅡRechistó Mark adorablemente.

Si, la temperatura de Johnny también había aumentado con ese beso, no era la primera vez, de hecho, que había tenido varias relaciones, pero había sentido algo demasiado dulce en él y su inocencia... Era diferente.

Relamió sus labios y su mirada volvió al joven de su lado. Se tumbó de lado, de forma que podía cubrirlo para las personas que pasaran por ahí y puso su mano sobre su vientre bajo.

ㅡ¿Q-Qué vas a hacer? ㅡPreguntó Lee con nerviosismo.

ㅡSolo enseñarte como soy siendo un novio, querías comprobarlo, ¿no?

ㅡPero aún no he aceptado serlo... John-...

ㅡEntonces... ¿Quieres ser mi novio?

ㅡ¿Cómo novio eres un pervertido? ㅡPreguntó Mark alzando una ceja viendo la mano del contrario sobre su vientre.

ㅡComo novio satisfacer a la otra persona es mi prioridad, venga, responde ㅡDijo con una sonrisa de lado que, aunque intentara ser pícara, seguía pareciendo tierna.

ㅡJohnny... Si que quiero ㅡApartó la mirada.

La mano del mayor comenzó a moverse por debajo de la camiseta del menor, sentía como se erizaba su piel.

ㅡHay gente... ㅡSusurró Mark.

ㅡNo te preocupes, no estoy haciendo nada.

ㅡLos helados se están derritiendo.

ㅡNo me importa, tú también te estás derritiendo por mi ㅡJohnny agrandó su sonrisa pícara sin dejar de acariciarle con su mano, bajando hacia la casi inapreciable "V" de su cuerpo, mientras sus labios rozaban el cuello del menor con suaves besosㅡ. Hoy el tímido lo pareces tú...

ㅡDeja de provocarme.

ㅡEs que eres muy adorable ㅡSonrióㅡ. No haré nada que no quieras, tampoco dejaré que nadie más te vea de esta forma, no haré nada aquí.

Quitó su mano de encima de Mark y se tumbó boca arriba. El sol comenzaba a esconderse y la luz cada vez era más tenue.

Con su mano, buscó la ajena para entrelazar sus dedos y sus miradas se cruzaron sin decir nada, solo una leve sonrisa.

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ㅡ¿Te llevo a casa? ㅡPreguntó Johnny al caer el día.

ㅡ¿Tenemos que irnos ya? ㅡHizo un pequeño puchero.

ㅡYa es de noche.

ㅡEs que no hay nadie en mi casa... Ten se ha ido con Tae Yong esta noche y mis padres llegarán tarde...

ㅡ¿Me estás invitando? ㅡPreguntó el más alto.

ㅡNo me refería a eso... ㅡRespondió Mark en un susurro.

ㅡVenga te acompaño.

Johnny se puso detrás de Mark para abrazarle, había tanta diferencia de altura que tenía la necesidad de protegerle con sus brazos. Igual que veía su cuello en la posición perfecta para besarlo, pero se resistió.

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Caminaron hacia la casa de Mark, a veces sus manos se rozaban y otras el menor las guardaba en sus bolsillos.

ㅡYa hemos llegado... ㅡDijo Lee algo nervioso.

ㅡ¿Puedo darte un beso de despedida?

ㅡ¿De despedida? No quiero que ningún vecino nos vea... No estoy preparado para que mis padres se enteren de que soy gay.

ㅡClaro, lo entiendo ㅡDijo Johnny con una sonrisa y luego se acercó a él para abrazarle.

ㅡ¿Quieres entrar? Solo un rato ㅡSusurró.

El mayor asintió y solo esperó a que abriera la puerta para entrar. Una vez dentro y sentados en el sofá, sintió como la mirada de Mark estaba fija en él.

ㅡ¡No me mires así!

ㅡ¿Así cómo?

ㅡComo si me fueras a comer ㅡDijo Johnny nervioso y con su mano volteó el rostro de Mark para que dejara de mirarle.

ㅡSolo estoy mirando a mi novio porque me gusta ㅡRespondió el más bajo con tranquilidadㅡ. Si te he invitado es porque quiero que me beses más.

Realmente era demasiado adorable, ¿Cómo podría resistirse más ante sus encantos? Ya llegaba a su límite, quería ir despacio pero no lo aguantaba.

ㅡSi eres así conmigo no puedo resistirme ㅡDijo Johnny.

ㅡNo te resistas, ¿Es por qué aún tengo 17 años? ¿Piensas que soy un bebé?

ㅡVen ㅡSuh agarró la muñeca del contrario con delicadeza para jalar de él y que se sentara sobre sus piernas en su direcciónㅡ. Si eres un bebé.

Los labios de Mark hicieron un puchero de indignación, ya no quería que lo trataran de esa forma y que por eso no pudiera hacer cosas de "adultos".

ㅡPero no eres un bebé en ese sentido, eres mi bebé, mi novio, con el que quiero hacer muchas cosas ㅡVolvió a hablar el mayor.

ㅡ¿Qué cosas? ㅡPreguntó seriamente Mark.

Johnny rodeó la cintura ajena y comenzó a besarle el cuello mientras cada vez lo apretaba más contra él. Pero Mark no solo se dejaría hacer. El menor introdujo sus manos por debajo de la camisa del contrario para acariciar su piel y después fue al botón del pantalón para desabrocharlo, con algo de timidez, pero determinación.

ㅡCreo que tú también te derrites por mí, lo puedo notar.

ㅡClaro que me derrito por ti ㅡExplicó Johnny.

Acto seguido el mayor hizo lo mismo, desabrochó los pantalones de su menor y después comenzó a acariciar la creciente erección a través de la tela de la ropa interior recibiendo un hermoso y leve jadeo como intercambio que le erizó toda la piel.

Pero el teléfono de Mark sonó.

ㅡ¿En serio? ㅡDijo para después sacarlo del bolsillo trasero y ver quien era, Ten.

Sin tardar mucho más respondió la llamada.

ㅡ¿Qué?

ㅡ¿Cómo que qué? No me has dicho si ya has vuelto a casa o no y es tarde ㅡSe escuchaba hablar a Ten.

Johnny seguía con su propósito sin dejar de acariciar su zona más sensible pero esta vez metió su mano por dentro sintiendo toda su calidez y Mark tuvo que ahogar un gemido mordiendo su labio inferior.

ㅡ¿Q-Qué has dicho? ㅡEstaba totalmente desconcentrado y no había sido capaz de escuchar lo que había dicho.

ㅡ¿Pasa algo? ¿Te has hecho daño? ¿Dónde estás?

ㅡAgh Ten que no soy un niño, sé cuidarme.

Johnny rio intentando hacerlo en voz baja, pero estaba pegado a su cuello por lo que era inevitable y se escuchó.

ㅡ¿Con quién estás? ㅡVolvió a preguntar Ten.

Tardó unos segundos en pensar bien que responder.

ㅡCon Johnny, él me ha traído a casa.

ㅡAh entonces no me preocupo, me fio de él. Papá y mamá no tardarán mucho en volver, yo dormiré en casa de Tae Yong, adiós.

ㅡAdiós ㅡColgó la llamada y lanzó el teléfono al rincón del sofáㅡ. Se fía de ti y mira lo que me estás haciendo.

ㅡNo hagas que me siente mal ㅡDijo Johnny.

ㅡPara nada, me estás cuidando demasiado bien, pero ahora no pares.

Volvieron a unir sus labios en un beso cada vez más rápido y jugando con sus lenguas, empezaba a pillarle el truco. A falta de experiencia, Mark tenía ganas de sobra e imitó lo que su compañero estaba haciendo hacia un momento. Jaló del bóxer de Johnny para liberar su apretada erección y rodearla con la mano, estaba demasiado caliente, aunque al escuchar lo graves jadeos del mayor, su temperatura también aumentó.

Johnny movía su mano cada vez un poco más rápido y Mark se estremecía hasta llegar a temblar.

ㅡJ-Johnny ¿Cómo puedo llegar tan rápido?

Sus miradas se cruzaron y el cuerpo del menor se pegó al máximo a él obligándoles a quitar sus manos. Se movía contra él dando pequeñas embestidas, rozando sus miembros y apoyando sus manos sobre los anchos hombros de Suh.

ㅡOh dios... Estás tan mojado, se siente demasiado bien ㅡJadeó Johnny cerrando sus ojos y llevando sus manos a la cintura de Mark.

ㅡNo puedo, no puedo seguir o me corro ㅡDijo de forma alterada el menor, que luchaba contra su voluntad para detenerse.

No era plan de terminar de esa forma, estaban vestidos en el salón, sería un gran desastre.

ㅡNo pienso dejarte así ㅡSusurró Johnny.

Lo empujó para tumbarlo en el sofá y bajó por su cuerpo hasta quedar frente a su miembro.

ㅡBebé, puedes hacerlo, quiero satisfacerte ㅡDijo el más alto.

Los ojos de Mark se abrieron todavía más sin dejar de mirarle, estaba indeciso y avergonzado, pero excitado en exceso, aunque antes de poder formular palabra, Johnny ya había introducido su miembro en la boca.

Un fuerte y sonoro gemido salió de sus labios. Era una sensación indescriptible sentirse dentro de la boca de Johnny, pero de las mejores que había experimentado, al igual que sus enormes manos, sabia utilizarlas muy bien.

No hizo falta mucho más que un minuto de las caricias de la lengua de Johnny para llegar al éxtasis y la voz de Mark lo expresaba muy bien. Finalmente se liberó en la boca de su mayor que lo recibió muy satisfecho.

Johnny se levantó con su esencia y solo relamió sus labios con una sincera sonrisa.

ㅡPerdón por eso ㅡDijo Mark.

ㅡ¿Cómo que perdón? ㅡDijo Johnny sentándose a su lado.

ㅡGracias, John.

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Mark se sentía exhausto después de eso, tanto que se quedó dormido en el sofá en lo que Johnny volvía del baño.

Al verlo así no podía irse, se sentó a su lado y dejó que se apoyara sobre su hombro y al poco rato se quedó dormido junto a él.

Los Lee regresaron a casa pasadas las 10 y los vieron ahí dormidos.