Hawks despertó de nuevo con dolor de cabeza y vio cómo los chicos, quienes volvían a tener su cara cubierta, hablaban y reían tranquilamente entre ellos.

-Estáis vivos…- Susurró Hawks con los ojos abiertos como platos.

-Sorpresa.- Dijo la chica del cuervo.- Aunque ahora tenemos otros nombres; Alexandra es Sungan Idong, Vanesa Kyōkan, Diego 9, Lia Akira y yo, Sia, Demon. Y juntos formamos el Ying Yang.

-Un grupo de antihéroes. -Dijo Hawks, y después de una pausa añadió.- ¿Por qué os fuisteis sin decir nada? ¿Por qué me dejasteis solo?

-Eso lo hablaremos después de ir a ver a tus amigos.- Contestó Lia levantándose.

-¿Quiénes?- preguntó el invitado.

-¿No es obvio?- Vanesa preguntó de forma retórica .- Habla de la Liga de Villanos.

-Exacto.- Dijo Sia.- Alex, te toca.

-Sí.- Y dicho esto Alex los abrazó a todos y desaparecieron de aquel lugar. De pronto estaban a punto de aterrizar sobre el techo de la guarida de la liga, cuando la pierna de Diego creció de tamaño y atravesó el techo, provocando así que todos cayeran por el agujero. Mientras, Lia y Hawks entraban por la puerta, tocando antes.

-Bueno,- Dijo Sia una vez volvieron a estar decentes.- cuánto tiempo sin veros.

Y dicho esto el Ying Yang y Hawks vieron como la liga los miraba sorprendidos.