Jimin odiaba Havana con toda su alma. La escuchaba hasta en el baño y ya no soportaba poder estar en el mismo lugar en donde sonaba la canción, un día se enteró que su crush y hyung, Min YoonGi era un fanático de la canción. Así que quizás se dejaría ver bailando aquella fastidiosa música para poder llamar la atención que tanto deseaba del mayor.

...

Jimin maldijo en silencio cuando casi tuvo que salir corriendo del salón de baile. Una de sus tantas compañeras había entrado proponiendo una canción para una nueva coreografía y él había estado dispuesto.

Hasta que escuchó la canción.

Un suspiro pesado escapó de sus labios cuando se dejó caer en medio del pasto bajo la sombra de un árbol, todo el mundo parecía fascinado con la canción y él los entiende, al principio también le gustó. Pero encontrársela hasta en la hora de su comida, lo había empezado a fastidiar hasta tal punto que ya no quería ni ver la foto de la artista que la interpretaba.

— Mochi bonito, mochi precioso. — La voz de Taehyung se escuchó y un resoplido de dolor escapó de sus labios cuando este cayó prácticamente encima de su espalda. — ¿Qué te tiene de tan mal humor?

— ¿Cómo sabes que estoy de mal humor? — Se quejó en medio de un gruñido mientras se movía para que el otro pudiera acomodarse a su lado. Taehyung rodó los ojos antes de tomar asiento junto a él.

— Saliste del salón de baile y estuve llamándote pero no te diste cuenta. — Mencionó Taehyung. — Además parecía que salía humo de tu cabeza.

— Es esa canción fastidiosa. — Se quejó Jimin mientras recordaba el motivo de su escape. — Siento que me voy a volver loco de tantas veces que la escucho. — Gruñó llevándose sus manos a la cara para cubrir su frustración. Taehyung rió divertido.

— Entonces creo que te tengo una muy mala noticia. — Rió el menor de ambos. Jimin frunció el ceño mientras veía a su mejor amigo.

— ¿Qué pasa? — Cuestionó preocupado. — ¿Min YoonGi se dio cuenta que babeo por él? ¿Debo esconderme o algo? — Preguntó tomando sus cosas casi de inmediato. Taehyung lo detuvo lanzándose encima de sus manos mientras negaba.

— No es eso tonto, lo que pasa es que tu querido amor platónico, es re fan de esa canción que tanto odias. — Jimin parpadeó incrédulo mientras su mejor amigo asentía con una gran sonrisa divertida pintada en su rostro. — De hecho, hasta hace poquito la estaba escuchando con su grupo de amigos.

— Yo sabía que no existía nadie perfecto. — Susurró Jimin mientras veía al cielo. — No estás de mi parte. ¿Cierto? — Preguntó pensando en Dios quien seguramente se estaba riendo de su mala suerte.

— Tengo un plan para que llames su atención y sí... — Mencionó viendo fijamente al castaño. — Implica escuchar Havana.

— ¿Será eficiente tu plan? — Cuestionó dudoso mientras meditaba el hecho de que si Min YoonGi valía tanto la pena como para escuchar esa canción por él.

— Irá directo a ti. — Susurró Tae.

— Hecho. ¿Qué tengo que hacer? — Preguntó interesado. Taehyung lo invitó a acercarse mientras explicaba paso a paso su estrategia brillante.

...

Min YoonGi suspiró cansado cuando salió del área de producción. Su mirada cansada escaneó todo el lugar encontrándose con varios compañeros y alguno que otro desconocido esparcidos por todo el pasillo. Su bolso negro reposaba en su espalda mientras en una de sus manos llevaba su teléfono.

Iba tan concentrado en el móvil hasta que escuchó cierta canción sonar en el ambiente, de inmediato una sonrisa pintoresca se dibujó en su pálido rostro mientras seguía el camino de la melodía.

Con paso un tanto apresurado terminó escabulléndose dentro del campus de danza, no le bastaron muchos pasos hasta llegar al salón de dónde provenía la música. De forma que se acomodó en la puerta mientras veía el espectáculo frente a él.

Su boca casi cae al suelo cuando observó a Park Jimin en medio del salón practicando la coreografía de la canción.

Park Jimin era arte, siempre lo supo. Desde la primera vez que lo había visto presentarse en el escenario de la universidad había algo que siempre lo hacía tener un ojo puesto sobre él y sus acciones. Ahora que lo veía desde tan cerca, podía sentirse de una forma diferente.

Incluso se sentía más cercano al chico pelinegro que parecía tener la música en la sangre. Cada movimiento, cada gesto y posición lo ejecutaba casi de una manera perfecta. Por ello, se permitió quedarse ahí en donde estaba para tener la oportunidad de grabarse cada instante de aquel momento tan perfecto. Y no, aquello nada tenía que ver con que Havana sea su canción favorita y que él tuviera una especie de amor platónico con su dongsaeng.

Por ello cuando la canción terminó, no pudo evitar aplaudir la pequeña presentación de la cual él había sido el único espectador. Jimin volteó en su dirección y le sonrió amablemente mientras se acercaba hacia una botella de agua y tomaba un gran trago de esta.

— No sabía que tenía un espectador. — Mintió descaradamente el pelinegro mientras intentaba contener sus nervios de la mejor forma posible. El pálido asintió abochornado.

— Lo siento, la canción llamó mi atención y quise venir a ver. — Mencionó encogiéndose de hombros. Jimin sonrió mientras recordaba la seguridad que Taehyung le había dado sobre su plan.

Después le compraría comida en agradecimiento.

— ¿Quieres intentar bailarla? — Preguntó Jimin con curiosidad. YoonGi parpadeó perplejo.

— ¿Y-Yo? — Cuestionó dudoso. — Realmente soy muy malo bailando. — Admitió sinceramente mientras se rascaba la nuca. Jimin negó mientras en un acto imprudente avanzaba hacia el mayor y tomaba su mano arrastrándolo hasta el centro del salón. YoonGi tiró el bolso en una esquina mientras veía como el menor colocaba de nueva cuenta la canción.

— Solo tienes que mirarme a mí en todo momento y seguir mis pasos hyung. — Comentó el pelinegro viéndolo con intensidad. YoonGi asintió un tanto nervioso y siguió con agilidad –o eso pensaba él– cada movimiento que ejercía Jimin frente a él.

Entre risas, errores y repeticiones, ambos pasaron la tarde. Cuando la hora de irse llegó, YoonGi se encontró deseando que aquello no acabara.

Se había sentido demasiado bien junto a Jimin.

— No lo hiciste mal para decir que eres malo en esto hyung. — Halagó Jimin de forma sincera. YoonGi asintió con las mejillas rojas mientras tomaba el bolso del piso y sacaba nerviosamente su teléfono celular del bolsillo de su pantalón.

— ¿Me puedes dar tu número? Algún día quisiera repetir esta clase de baile. — El pálido se felicitó internamente ante la firmeza en cada una de sus palabras. Jimin asintió un poco cohibido ante el mayor, sin embargo interiormente estaba que saltaba de la felicidad.

— Estaré esperando tu mensaje hyung. — Sonrió el menor guiñándole el ojo mientras salía de la habitación. La sonrisa en el rostro del pálido duró hasta que llegó a su apartamento y recibió los cuchicheos burlones por parte de sus amigos.

...

Havana oh na-na.

Hola amigos, aquí entre nos yo soy como YoonGi, re fan de Havana, pero en algunos momentos también la odié como lo hace Jimin, es que se escuchó bastante la canción por aquí. Su versión original, la que no tiene el ft. ¡Incluso el remix con Daddy Yankee!

Este two-shot, posible three-shot fue inspirado principalmente por Havana y por el video en donde salen bailando la canción.

¿Qué creen que pasará más adelante?

Esto es una forma de agradecimiento por los 1.7k en seguidores. Gracias por ser parte de mi pequeña pero amorosa familia aquí en wattpad.

¡Hasta la próxima!