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JiMin sonrió divertido ante el desconcierto en la mirada de YoonGi, incluso la mirada del par de omegas recayó sobre él, pero a JiMin poco le importó mientras veía desde adentro del carro, esperando a que YoonGi terminara de entender que lo estaba esperando a él.

—¿Me vas hacer esperar más tiempo? —Cuestionó, intentando sonar un poco divertido, aunque el gesto en su rostro denotara otra expresión. YoonGi terminó de salir de su confusión, hablando por lo bajo con Jisoo, la omega asintió encogiéndose de hombros ante lo dicho por el alfa, mientras YoonGi se despedía de ambas en lo que subía al carro del omega mayor. —Quita esa expresión de tu rostro, ¿No te acostumbras aún?

—Tenía tiempo que usted no hacía esto. —JiMin sonrió, alternando su mirada entre YoonGi y la ventana aún abierta.

—¿No lo extrañaste? —Preguntó, su aroma suavizándose ante la mirada confundida del menor sobre él. YoonGi guardó la respuesta para sí mismo mientras se mantenía en un silencio cómodo. JiMin se encogió de hombros en su lugar, manteniendo su mente serena e intentando calmar a su lobo.

Podía sentir el olor de la rutina de YoonGi, incluso más rápido que lo que el alfa pudiera notarlo, era algo que su lobo omega había detectado al dejarlo ir en la tarde con TaeHyung y JeongYeon. Por eso, quizás, había dejado su aroma impregnado fuertemente en el alfa, para que nadie más pudiera notarlo, para que solo él tuviera el placer de degustar ese divino olor que estaba embriagándolo con fuerza.

—¿A dónde vamos? —Cuestionó YoonGi interesado por el camino que estaban empezando a recorrer. —Tu chófer se equivocó, por aquí no es el camino para llegar a mi apartamento.

—¿Sigues viviendo en ese lugar?  —Cuestionó ignorando la pregunta inicial. YoonGi suspiró sonoramente, recordando la última vez que el omega había estado en su apartamento, la expresión en el rostro del mayor era difícil de olvidar.

—No es una prioridad para mí cambiarme de lugar, me queda cerca de la universidad.

—Pero te queda lejos de mi empresa, ¿No? ¿No has pensado en mudarte realmente o es que no tienes las posibilidades aún? Yo puedo ayudarte, puedo comprarte un apartamento bonito, de todos los alfas que han estado conmigo, pareces ser el más ¿Humilde de todos? No puedo decir que el más bueno, porque igual aceptaste involucrarte conmigo por dinero.

—El dinero nunca lo es todo, omega Park. —Negó YoonGi, deteniendo su mirada sobre JiMin. El omega le observó curioso, quizás esperando que sustentara más su comentario. —Hay personas que lo tienen todo en la vida, he igualmente son infelices. —Concluyó, sin responder más allá de lo estrictamente necesario.

No ganaría nada diciendo que aceptó ese acuerdo, solo porque estaba intentando conquistarlo. No iba a exponerse más de lo que seguramente, su lobo lo ha hecho más de una vez.

—Me fijé en ti porque eras diferente. —YoonGi frunció el ceño ante lo dicho. —Eres diferente. Has tenido mis tarjetas a tu disposición y lo único que has hecho es tenerlas de adorno en tu billetera, no has gastado más nada.

—¿Es eso extraño para usted?

JiMin rió.

—Es muy extraño para mí, si. Estoy acostumbrado a otras cosas, a alfas que intentan pisotearme cuando creen que tienen el suficiente poder sobre mí, tú eres tan inusual, que quizás por eso mi lobo siempre... —El auto deteniéndose frente a un lujoso condominio de apartamentos lo hizo callar. YoonGi negó para sí mismo, sabiendo que lo que sea que hubiese querido decir JiMin, no lo sabría por ese momento. —Bajemos. —Indicó, sin prestar más atención a YoonGi, observando fijamente como la puerta fue abierta y el rostro de su chófer apareció en su campo de visión.

YoonGi fue el primero en bajar, observando superficialmente el lugar. En sueños de un YoonGi de ocho años tal vez, su mirada siempre había estado puesta sobre los grandes edificios de Seúl, el lugar en donde equívocamente  pensaba, que todos eran lo suficientemente felices.

—Es bonito, ¿Verdad? —Cuestionó el omega empezando a caminar hacia la entrada. YoonGi asintió, siguiéndole en silencio durante todo el camino mientras veía a las personas saludar al omega con respeto. Recibió más de una mirada curiosa sobre él, pero YoonGi como todo alfa no se dejó intimidar, simplemente lo ignoró en todo momento hasta que subieron hacia el ascensor y notó que JiMin presionó el último botón que daba hacia un piso completo, un jodido penthouse.

—¿Por qué estas tan callado? —Indagó curioso JiMin. —Háblame, alfa. No te voy a comer. —YoonGi rió ante el tono sugerente empleado por el omega.

—No deberías hacer lo que creo que quieres. —JiMin le observó con inocencia, esperando el momento en que las puertas se abrieran para terminar de llegar a casa con el alfa.

—¿Qué se supone que es lo que quiero hacer? —Le observó, alzando las cejas con interés.

—En mi rutina, me gusta anudar. —Fue directo a lo que debía, sin maquillar nada. Simplemente expresando lo que él muy bien sabe. —¿Estás seguro de que puedes hacerlo? —Le retó. Un brillo inusual apareció en la mirada del omega, con una sonrisa lo suficientemente segura de sí misma mientras se detenía a mitad de camino, frente al alfa.

—Alfa Min. —Susurró bajo, saboreando la palabra entres sus labios mientras su cuerpo se acercaba al del alfa y sus manos recorrían el fuerte pecho del menor. —Creo recordar que me dijiste que cuando quisiera tu nudo, tendría que pedirlo, ¿No? —Le observó fijamente, mordiendo su labio inferior mientras su mirada fija estaba sobre los ojos del alfa. —Estamos aquí porque quiero, y porque se que me quieres... Soy el mejor omega con el cual pudieras pasar tu rutina, y eres mío. —Concluyó alejándose cuando observó las claras intenciones del alfa en querer besarlo. —Tómalo como un jodido regalo. —Sonrió orgulloso cuando distinguió un leve color rojizo en la mirada del pálido. —Y ven conmigo está noche y todo lo que necesites.

—¿Por qué siempre piensas que todo tiene que ser a tu manera? ¿Nunca te han enseñado que las personas tienen libre albedrío?

—¿No me quieres? —Cuestionó en un tono de voz bajo, dibujando rápidamente un puchero en su rostro, aunque el lobo en su interior estuviese a la expectativa de la respuesta del alfa, JiMin no demostró ningún otro tipo de emoción en su rostro, simplemente se quedó ahí, evaluando al alfa y la forma en la que pareció dudar un segundo. —¿Dudas? —Indagó mordiéndose la lengua para no decir más nada.

Era obvio.

Después de todo lo que JiMin había hecho y la forma en la que se había alejado, había fracturado la relación entre ambos. Sumado al último encuentro que tuvieron en su oficina, en dónde JiMin había sido todo menos, lo suficientemente amable, la renuencia del alfa era lógica.

Pero no por ello, era más aceptable para JiMin. Su lobo se inquietó completamente, dejando salir su aroma, intentando hacerse notar ante el soberbio humano que le tocó. YoonGi chascó la lengua, conteniendo para si mismo lo que iba a decir primeramente.

—Omega Park, ¿Estás seguro que las condiciones que estableces no cambiarán en ningún momento? —YoonGi no supo porque preguntó aquello, incluso notó que la pregunta tomo por desapercibido a JiMin.

—Nunca he cambiado mis reglas por alguien. —Fue su corta respuesta ante la pregunta, evadiéndola de cierta manera mientras veía a cualquier lado, menos al alfa. YoonGi asintió, empezando a caminar hacia la puerta del apartamento. JiMin dudó un momento antes de seguirlo.

—Supongo que esto es parte de todo el trato, es solo sexo. —Concluyó el alfa, ignorando por completo al omega. —No cambiará nada. —JiMin asintió complacido, aunque su lobo omega estuviera completamente en contra de la conclusión a la que el alfa había llegado.

—Siempre eres tan bueno cuando entiendes las cosas, Min. —Asintió el mayor, abriendo la puerta de su casa. —Bienvenido a casa, no te vas a arrepentir.

...

Holaaaaa 🌠

El día en que por fin JiMin se de cuenta que le gusta YoonGi y no es solamente sexo, lo felicitan. 🥴

He tardado en venir, porque tengo más tarea que descanso. De hecho, tengo encima el capítulo III de un proyecto, y ni siquiera sé por dónde empezar, porque ni entiendo como se hace.😫

Pero decidí actualizar porque tampoco quería pasar todo el mes ausente.

Nos leemos pronto, eso espero.

Cuídense mucho, tomen agua, no vean debajo de la cama, bai.

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