N/A: Un dato muy curioso, es que varios días después de escribir el capítulo 59 y este (sabéis que voy muy adelantada a lo que publico), donde Jaechan menciona su solo debut en el fanfic, el Jaechan real anunció que sacaría su álbum debut que salió hace un par de días. Y yo no sé si la coincidencia esta me da miedo o me gusta, porque no es la primera xD

Cap dedicado a  luavnkj ♡♡

Hoy os recomiendo 'SALTY BOY' de ONEWE, una de mis bandas favoritas que amo.

[...]

La entrevista comenzó tan sólo media hora después de que TaeHyung dejase al azabache solo a fuera del estudio, Noeul y Minnie habiendo llegado diez minutos exactos tras su partida y acompañándole.

Jungkook estaba con los nervios a flor de piel, al igual que Noeul, ambos pendientes de un TaeHyung que les daba la espalda, charlando animadamente con Jaechan sin siquiera verse dubitativo, nada parecido a lo que era cuando tan sólo faltaban un par de horas para el comienzo de la entrevista. Estaba animado, llevando la entrevista por un camino que sólo él era capaz, logrando que Jungkook se sintiese más orgulloso de él que nunca.

"La verdad es que no sé cómo me animé a entrar en la industria si soy una persona muy vergonzosa." Explicaba Jaechan, con una sonrisa de labios sellados conforme hablaba. "Siempre me han dado miedo las cámaras, desde que soy pequeño. Me escapaba de las cenas familiares cuando tocaba hacer fotos y terminaba haciéndomelas a la fuerza. Salía llorando o gritando en todas ellas."

TaeHyung soltó una risita. "Realmente suena como algo muy complejo, pero es bastante común que el pánico escénico y el mundo del entretenimiento vayan de la mano, ¿no? Yo he escuchado a muchos de tus compañeros decir eso y todos se dedican a lo mismo."

"Sí, es cierto, creo que todos somos un poco masoquistas, al fin y al cabo. O por lo menos yo lo soy."

"Yo también."

Ambos rieron al unísono. "¿Te dan miedo las cámaras?"

"Amo las cámaras. De hecho, tengo una más vieja que la cerámica y llevo usándola desde que entré al instituto, pero me aterra la multitud. Me bloqueo y no soy capaz de hacer nada."

"Oh, eso también me pasa." Jaechan murmuró. "No sé si te diste cuenta porque, bueno, esto no lo hemos contado y deberíamos haberlo hecho." Él buscó su cámara para hablar. "Pero TaeHyung y yo nos conocimos un día de pura casualidad, él iba saliendo de hacer la compra mientras que yo intentaba evitar un grupo de paparazis que estaban fuera de mi hotel."

El castaño se sonrojó inmediatamente. "¿Lo vas a contar?"

"Sí, es importante para lo que quiero decir. ¿Te molesta?"

"Para nada, para nada. Adelante."

"Bueno, eso. Yo estaba tan concentrado en esconderme entre los coches, que no vi a TaeHyung y ¡pum!"

"Nos chocamos."

Asintiendo, el actor hizo una mueca. "Me choqué con él y le tiré todos los helados al suelo."

"Una experiencia traumática, sin duda alguna." Dijo, logrando que Jaechan se viera falsamente conmocionado. "Pero ya te he perdonado y no te guardo ningún rencor."

"Te lo agradezco en el alma." Alcanzando su mano, Jaechan la apretó.

Fuera del estudio, Noeul soltó una pequeña risita, golpeando a Minnie y haciendo que tanto Jungkook como ella les prestara atención.

"No sé cómo lo hace, pero parece como si se conocieran de toda la vida y realmente esta es la segunda vez que se ven." Dijo, con el corazón hinchado de orgullo.

Ella asintió, estando de acuerdo con Noeul. "Tiene mucha carisma, es de lo primordial que se necesita para poder hacer esto y a él le sale tan natural que se lo transmite a cualquiera. Es muy bueno."

Alguien llegó tras ellos, jadeando, tan fuerte que los tres se giraron, sólo para ver al señor Jang quitándose el abrigo como si estuviera dentro de una sauna, apoyándose en la primera columna que vio.

"¿Llego tarde? Me he tenido que pelear con el chófer del taxi porque iba muy lento. El gilipollas quería cobrarme de más."

"No te preocupes, señor Jang, esto acaba de empezar."

El susodicho dejó su abrigo en cualquier parte. "¿Y qué tal?"

Jungkook le hizo una seña para que él mismo lo viera, justo cuando TaeHyung dijo algo que hizo a Jaechan reír hasta que un par de lágrimas brotaron de sus ojos, teniendo que quitárselas cuidadosamente para evitar estropearse el maquillaje.

"Aproveché que tenía mi cámara y la identificación de mi empresa para-" Kim se frenó de inmediato. "Uy... Igual si digo esto me echan... Bueno, no pasa nada, mi jefe está fuera, no se va a enterar. El caso es que usé todo lo que pude para hacerme pasar por uno de ellos y enviarlos al otro lado del hotel."

"Será cabronazo..." Mencionó Sebin, meneando la cabeza de un lado a otro.

Jaechan continuaba lloriqueando entre risas, quitándose más lágrimas mientras TaeHyung relataba el momento en que le salvó de un enjambre de paparazis hambrientos.

"Dios... Cuando lo viví en primera persona me mataba el estrés, pero ahora que lo recuerdo es maravilloso. Te vi corriendo desde el coche con la cámara apagada y el móvil en la mano gritando algo como ''¡Por la otra puerta, por la otra puerta!'' Fue buenísimo..."

"Yo pensaba que no me iban a creer."

"Ni yo." Carcajeó aún más, necesitando unos segundos para recuperarse. "Bueno... Lo que quería decir es que ese día había pasado por tres ataques de ansiedad seguidos. Me pasé el día estresado porque allá a donde iba alguien me seguía con una cámara. Y encima todos me preguntaban por lo mismo: cómo llevaba mi propia salida del armario, qué iba a pasar con mi personaje en la serie... Bla, bla, bla."

TaeHyung se puso un poco más serio ahora, asintiendo, queriendo así darle a entender que estaba escuchándole.

"Claro, debió ser un momento muy complicado para ti. Al fin y al cabo, para nosotros es una noticia con mucho poder, de las que nos gustan, pero en tu caso es una experiencia nefasta."

"Nefasta se queda corto, fue un sinvivir." Dijo, relamiéndose los labios. "Recuerdo que durante una semana entera me metía en Twitter y veía mi nombre en Tendencias, cuando eso normalmente no pasaba."

"Y te abrumaste mucho, imagino, ¿no?"

Él asintió. "Pero muchísimo. Yo estoy acostumbrado a que hablen de mí porque soy una figura pública, y no soy tonto, sabía que lo harían desde el minuto uno en que puse ese comunicado donde decía que soy abiertamente homosexual, lo que no me esperaba es la cantidad de mierda, con perdón, que me cayó después."

"Es que nadie está preparado para que su vida cambie por tener una orientación sexual distinta al resto, porque no es algo que debería ocurrir, en primer lugar." Haciendo una mueca de tristeza, TaeHyung habló, viendo como los ojos de Jaechan se llenaban de lágrimas que nunca llegaron a salir.

"Aun así, lamentablemente sigue ocurriendo. Hay gente, como yo, que no puede decir con libertad quién es, todo por miedo a que algo cambie drásticamente. Y no hacemos nada malo."

"Mira, yo no te voy a mentir, cuando leí ese comunicado tuyo, lo primero que pensé es ''Vaya, le han hackeado la cuenta...'', por el simple hecho de que me parecía imposible e irreal que alguien hiciera algo como eso público así porque sí." Relató, logrando que el ambiente triste se esfumara cuando Jaechan volvió a reír, meneando la cabeza como si hubiera recordado algo relacionado con el tema.

El actor puso un dedo en alto, tomando la palabra, sin dejar de reír. "De hecho, esa fue una táctica que me propuso mi mánager, pero yo dije que no. Estaba convencidísimo de seguir adelante y aún lo sigo estando, a pesar de todo lo que ha conllevado hacerlo."

"Es que por esa misma razón para mí significó tanto. En occidente es bastante más común que actores y artistas salgan del armario sin ningún problema, allí hay mucha más representación; aquí no."

"Aquí es complicadísimo." Estando de acuerdo, Jaechan se acomodó en la silla.

"Y encima el trato que tenéis no es el mismo, para colmo."

"Buah..." Un bufido abandonó sus labios. "Si ya de por sí a los artistas se nos trata como marionetas, no te puedes llegar a imaginar lo que es ser un artista gay en la industria. Horrible."

La mueca de TaeHyung no se desvaneció, sino que se acentuó, pues Jaechan confirmaba todas sus sospechas. Había leído artículos sobre cantantes, actores y actrices manteniendo su anonimato sobre lo mal que eran tratados por la industria sin necesidad de estar vinculados al colectivo, siendo usados como simples marionetas, como peones. Ni siquiera quería imaginar todo por lo que había pasado Jaechan.

"De hecho, yo lo hablaba con mi pareja, con Seoham." Inmediatamente, ante la mención del susodicho como su pareja, TaeHyung quedó de piedra, intentando mantener la compostura. "Él ya no forma parte de la industria por eso mismo, porque no quería seguir escondiéndose."

"¿Park Seoham, dices? Tu compañero en Semantic Error." Pudo decir, su garganta sintiéndose algo áspera cuando el actor asintió. "Llevaba tiempo sin verle actuar, creí que era porque estaba en otros proyectos... Qué pena que se haya retirado."

"Sí, bueno, yo no voy a poner palabras en su boca, pero Seoham estaba quemadísimo de todo."

"Normal..."

"En realidad, esta es la primera vez que hablo públicamente sobre mi relación con él, no pensaba decir nada, pero estoy tan cómodo hablando contigo que me sale solo." Señaló, logrando que este se sonrojara. "Eres peligroso, TaeHyung."

Riendo entre dientes, el castaño se frotó la mejilla. "Lo siento, lo siento, si quieres podemos recortar esta parte en edición."

"Qué va, no te preocupes. Lo dicho, dicho está."

Fuera del estudio, un chasquido sonó.

"El desgraciado está consiguiendo información sin tener que preguntar por nada, esto es increíble." Bufaba Sebin, meneando la cabeza de un lado a otro a modo de negación.

Su tono de voz era tosco, refiriéndose al novato de manera despectiva a oídos de un Noeul que prefería no decir nada, porque en el fondo todos sabían que tras aquellas palabras sólo se encontraba un hombre que sentía la admiración más pura por uno de sus trabajadores. Un trabajador al que casi le quitó la ilusión.

Jungkook no dijo nada, manteniéndose en casi completo silencio desde que dio comienzo la entrevista, no queriendo perderse ni un solo detalle, pues estaba sin palabras, hipnotizado por la naturalidad que hacía a TaeHyung destacar, por el modo tan sencillo en que se expresaba, hablando. Era mágico verle en acción. Satisfactorio a ojos de otro profesional. Un profesional que se volvía loco por él.

Una mano amiga se posó en el hombro derecho de Jungkook, del mismo modo que lo hizo en el izquierdo de Noeul, consiguiendo que ambos se dieran la vuelta para ver al señor Chaikamon tras ellos.

El rubio inmediatamente se estremeció por la cercanía, sintiéndose algo mareado por la fragancia dulce y encantadora de su jefe, bastante acorde, si le preguntaban, con la personalidad del hombre.

"¿Cómo va esa entrevista?"

"De maravilla, jefe, TaeHyung se está luciendo. Ha sacado titulares sin necesidad de preguntar."

"¿En serio?"

"Sí, Jaechan acaba de mencionar que está saliendo con su antiguo compañero de series, Park Seoham, sin que TaeHyung haya dicho nada al respecto. Dice que está tan cómodo que le sale solo." Explicaba Noeul, dejando atrás su nerviosismo para hablar de TaeHyung, su pecho hinchado en orgullo.

"A este paso vais a tener que buscar una jaula en la que encerrarle, porque como la Interpol se entere, nos lo quitan." Bromeaba la castaña.

"Que lo intenten si tienen huevos, me lío a puñetazos con quién sea como se atrevan a poner un pie en mi plantilla."

Sebin amenazó sin siquiera pensarlo dos veces, un bufido abandonando sus labios. Y es que él se veía muy seguro de lo que decía, siendo perfectamente capaz de llevarlo a cabo, logrando así que los otros cuatro rieran y Minnie se abrazase a él.

"Míralo... Si es el que decía no haberse encariñado con el novato..."

"Cállate, tonta, no me dejas escuchar."

En respuesta, todo lo que ella hizo fue reír más fuerte, satisfecha por haber conseguido su cometido.

Un par de horas más pasaron, Minnie habiendo tenido que marcharse debido a una cena con sus padres que estaban de visita por la zona y el señor Jang un poco después, al sentirse algo mareado. La entrevista siendo lo suficientemente amena como para que el tiempo volara entre el entrevistador y el entrevistado, quienes parecían haber congeniado increíblemente rápido, siendo una sorpresa para absolutamente nadie cuando Jaechan indagó más en su vida de lo que, tal vez, debía haberlo hecho.

Jungkook estaba un poco cansado incluso si se negaba a manifestarlo, absteniendo a responder con monosílabos cada vez que alguien decía algo, demasiado ocupado en la entrevista como para desviar su atención de otra cosa que pudiera gastarle la poca energía que le quedaba.

Y es que los últimos días había tenido una notoria falta de sueño que, tarde o temprano, sabía que le pasarían factura.

"...este disco es muy importante para mí, porque no sólo representa con claridad todo lo que soy, también considero que supone un antes y un después en mi carrera." Jaechan decía, mostrando la portada de su nuevo álbum con orgullo.

TaeHyung, sonriente, se acomodó en el sillón. "Desde que lo he visto, no paro de pensar en el nombre que le has puesto, Jaechan. Me resulta muy interesante y llamativo, ¿lo decidiste tú?"

"Sí, sí, puedo decir con total franqueza que todo ha sido idea mía. Las canciones han sido escritas y producidas por mí, el diseño de portada, el título, por supuesto... Todo. Por eso mismo estoy tan orgulloso."

"Debes estarlo, sinceramente. Ya no sólo por este álbum, ni por las series o películas que puedas hacer en el futuro que, espero, serán muchísimas." El susodicho reaccionó ante aquel deseo con una sonrisita. "Sino porque después de todo lo que ha pasado, de lo que has tenido que vivir desafortunadamente, has sabido mantenerte en pie. Y por desgracia eso no es algo que suceda mucho."

Asintiendo durante un par de segundos, sin borrar aquella sutil sonrisita mientras se mostraba pensativo, melancólico, Jaechan volvió a tomar la palabra. Y es que no había sido un proceso fácil para él en absoluto, TaeHyung lo sabía, pues el artista mucho menos se abstuvo de compartir en las redes todo aquello que pasó en su vida desde que decidió dar el paso más importante, el que cambió todo. Y eso era lo que convertía en Jaechan a alguien admirable a ojos de TaeHyung.

"Cuento con la suerte de tener muchísimo apoyo. Mi familia, mis amigos, mi pareja, todos... Todos han estado conmigo desde que decidí dar el paso."

"El apoyo de un ser querido es primordial en estas situaciones."

"Sí, por supuesto. Y lamentablemente no todo el mundo cuenta con ello, por eso en parte yo quise dar ese paso también, por esa gente que, a diferencia de mí, no tiene un hombro en el que dejarse caer."

La sonrisa de TaeHyung se volvió casi triste, porque incluso si él también contaba con el apoyo de sus seres queridos, estaba harto de oír historias de personas que no contaban con la misma suerte.

"Este chico es increíble, con razón a TaeHyung le gusta tanto." Dijo Noeul, en apenas un susurro.

El señor Chaikamon asintió. "Tiene muy buenos valores, lo que no es tan común en muchos artistas de esta generación..."

"Cierto..." Estuvo de acuerdo, atento a la entrevista hasta que notó su estómago removerse (afortunadamente, sin llegar a hacer mucho ruido), sintiéndose hambriento. "Eh... Señor, ¿le importa si pido comida para cenar? Me muero de hambre."

"Por supuesto que no, Noeul, adelante. Eso no se pregunta."

Inmediatamente sacó su teléfono, buscando la aplicación de comida rápida en busca de algo que le supiera a gloria en cuanto diera un bocado.

"Muchas gracias, señor..."

Boss le dio una sonrisa amplia y encantadora, lo que le hizo inmensamente atractivos a ojos de un Noeul que se sonrojó de pies a cabeza.

"¿Puedo hacerte una pregunta algo más personal?" Pidió TaeHyung, mordiéndose el labio inferior, un poco inseguro al respecto, pues temía fastidiarla.

Jaechan asintió. "Faltaría más."

"Hay... ¿Hay gente de tu círculo cercano que dejase de formar parte de él cuando saliste del armario? Gente con la que normalmente pasabas el tiempo y, a raíz de eso, ya no."

Lamentablemente, Jaechan volvió a asentir con la cabeza. "Sí, los hay, por desgracia más de los que me gustaría... Amigos de toda la vida, de la escuela, ya no me dirigen la palabra por el simple hecho de ser gay."

"Eso es una mierda... Y perdón por la palabra." Se disculpó con los de sonido, logrando que el actor soltase una risita.

"¿A ti te pasó lo mismo? Si se puede saber."

"No, la verdad es que yo sólo tenía un amigo y hasta el día de hoy sigue conmigo. Nada nos ha separado."

"Pues tienes muchísima suerte, TaeHyung, permíteme decírtelo."

Y, esbozando la mejor sonrisa que tenía, pues así lo sentía en el fondo de su corazón, asintió. "Lo sé... Soy un afortunado."

Alguien sorbió por la nariz fuera del estudio, ni Jungkook ni el señor Chaikamon necesitando preguntar para saber que se trataba de Noeul, cuyos hombros Boss apretó suavemente.

"Pero, ¿sabes? tú también lo eres, en realidad, Jaechan." TaeHyung volvió a tomar la palabra. "Porque esa gente que se fue de tu lado cuando quizás más los necesitabas, te hicieron un grandísimo favor. Imagínate que algo grave hubiera pasado de verdad y contaras con ellos ciegamente... Hubiese sido muchísimo peor darte cuenta ahí."

"Sí, es muy cierto. Al final terminaron quedándose los que de verdad merecían la pena." Corroboró. "Y, debo decir, que de todos los que permanecieron conmigo y permanecen hasta ahora, por muchos ni siquiera había apostado. Me sorprendieron muchísimo."

"En el buen sentido."

"En el buen sentido, claro." Repitió, asintiendo.

Noeul se sobresaltó tan pronto como su teléfono sonó, recibiendo una notificación del sitio donde había hecho su pedido de comida rápida. Para su sorpresa, había olvidado cambiar la dirección de envío y el repartidor estaba camino a su casa.

"¡No me fastidies!" Siseó, apretando los labios, algo que llamó la atención de los otros dos.

"¿Qué pasa?" Se interesó Jungkook, tomando la palabra después de mucho tiempo en silencio.

"Que soy gilipollas y en lugar de pedir que traigan la comida aquí, he puesto la dirección de mi apartamento."

El gesto de Boss se torció. "Ow... ¿Y no puedes cancelarlo?"

"No, es que el repartidor está de camino." Respondió, no tardando en lamentarse. "¿Qué hago? No quiero perderme la entrevista..."

Jungkook, con un oído pendiente a TaeHyung y el otro atento a Noeul, presentó su mejor idea, su cerebro necesitando ayuda extra para trabajar.

"Eh... Seguramente ya esté al acabar, no le queda mucho. Vete y yo me quedo aquí esperando a TaeHyung."

"¿Sí?"

El azabache asintió ante la mirada de arrepentimiento en los ojos de Noeul, sólo ellos dos sabían lo importante que era para TaeHyung tener a alguien acompañándole en aquel momento, incluso si era a la distancia.

"Claro, no pasa nada, ve tranquilo."

"Te puedo llevar, si quieres." Propuso Boss. "Tengo las cámaras de seguridad en mi teléfono y puedes ver la entrevista desde ahí mientras. No es lo mismo que en vivo y en directo, pero..."

"Se lo agradezco mucho, señor." Le interrumpió, asintiendo con suma emoción.

El señor Chaikamon simplemente asintió, devolviéndole la sonrisa. "Pues no se diga más, vamos."

Tan sólo tres minutos después, ambos abandonaron el estudio. Y, tal y como Jungkook había dicho, la entrevista duró sólo veinte minutos más antes de dar por terminada, Jaechan siendo el primero en salir del estudio hacia los camerinos y poco después, lo hizo TaeHyung, encontrando que sólo Jungkook estaba allí, esperando pacientemente por él.

En cuanto le vio, una enorme sonrisa apareció en sus labios. Una sonrisa que, incluso si Jungkook podía quedarse dormido de pie, no pudo no devolverle.

"Hola... ¿Qué tal? ¿Cómo me has visto?" Dijo, una vez se acercó a él y envolvió su cuerpo en un cálido abrazo.

Jungkook le apretó con todas sus fuerzas. "Igual de guapo y encantador que siempre."

Y su risa nerviosa no tardó en llegar. "Idiota, me refiero a la entrevista."

"Pues igual, sólo que agregándole 'talentoso' a la fila de adjetivos."

"Ay... ¿sí?"

Él asintió. "Deberías haber visto a Sebin, estaba alucinando por como Jaechan empezó a darte información sin tener que abrir la boca, fue un espectáculo."

"¿El señor Jang vino? Pensé que estaba en una reunión importante o algo así."

"Vino corriendo, no le he visto tan agitado en mi vida."

TaeHyung volvió a reír nerviosamente, ocultando su rostro en el cuello de Jungkook. "Estoy muy contento, pensé que iba a salir mucho peor... Aunque no sé si ha sido una entrevista como tal, lo he sentido más bien como una charla..."

"Y eso es mil veces mejor, TaeHyung, ni siquiera has tenido que esforzarte para que Jaechan estuviera cómodo hablando de todo eso contigo."

"Me alivia mucho que digas eso." Admitió, dejando escapar un suspiro antes de separarse tan sólo unos centímetros, mirando a su alrededor. "Oye, y ¿dónde están los demás?"

El azabache también miró a su alrededor. "Noeul hace poco Noeul tuvo que irse, pidió comida a domicilio para cenar aquí y en lugar de poner la dirección de la revista, puso la de vuestro edificio y se tuvo que ir corriendo. Boss lo acompañó. Pero ambos han estado aquí, junto con Sebin, Minnie y... bueno, conmigo."

"Ow..." Emitió, derritiéndose por la ternura que derrochaba su mirada, tomándole el rostro con ambas manos. "Estoy feliz de que hayas podido venir."

"¿Sí?"

"Sí, mucho. Probablemente no estaría ni la mitad de contento si no estuvieras aquí." Admitió, acariciándole las mejillas, notando su mueca de cansancio. "Aunque pareces cansado, ¿no has dormido nada?"

"Apenas... Pero estoy bien, no te preocupes."

"¿Por qué no te has ido a casa?"

"Porque no iba a dejarte solo." Respondió, como si fuera obvio. "Y tampoco quería perderme tu primera entrevista, ya descansaré cuando llegue a casa, primero déjame llevarte a la tuya."

TaeHyung se inclinó para depositar un beso en su barbilla. Jungkook sonrió. "Vale, vamos."

Ambos llegaron al aparcamiento en cuestión de minutos, buscando el coche del azabache que se encontraba a unos metros.

"¿Te importa conducir tú? No quiero coger el coche estando tan cansado."

"Claro, yo conduzco." Asintió ante la petición del azabache, viéndose un poco preocupado ahora que notaba su voz algo más ronca y pesada. "Pero, ¿cómo volverás a casa?"

Jungkook pareció quedarse en blanco, para sorpresa de TaeHyung. "Eh... No lo sé."

"¿No puedes quedarte en casa de Shinhye?"

"Es que está cenando con Jinseok, su hija y la prometida de esta. Van muy en serio..."

"¿Y qué hay de Minnie?"

"Sus padres han venido de visita y está cenando con ellos. De todos modos, puedo arreglármelas para volver a casa, no te preocupes."

Negando, el ceño de TaeHyung se frunció mientras doblaba en una esquina. Nunca jamás había visto así a Jungkook, tan cansado como para admitir que no se encontraba bien e incluso su poca disposición al volante. Era un adulto responsable hecho y derecho, pero aún así se volvía difícil para él admitir que las cosas iban mal con él.

"De eso nada, por supuesto que me preocupo, Jungkook. No me gusta verte así ni mucho menos pienso dejar que vayas solo hasta tu casa en ese estado, así que esta noche te quedas conmigo. Y no quiero reclamos."

"No es-"

"Que no quiero reclamos, he dicho."

En cuestión de minutos, aparcaron frente al aparcamiento que TaeHyung compartía con Noeul, quien recibió a su mejor amigo con globos, pizza y una enorme sonrisa en el rostro, ni siquiera viéndose sorprendido al ver que Jungkook le acompañaba, cuando ambos entraron por la puerta.

"¡Feliz primera entrevista, corazón de melón!" Chilló, dándole los globos.

El castaño soltó una carcajada, soltando el brazo de Jungkook para abrazar a Noeul. "Muchas gracias, jo... Qué bonito. ¿Lo has planeado?"

"Para nada, pero buscando el cortador de pizzas encontré estos dos globos y me dio por ser creativo... Ya que mañana no podré estar desde un principio celebrándolo con todos vosotros, pues algo quería hacer."

TaeHyung lloriqueó, abrazándole con más fuerza. "Eres el mejor."

"El mejor se muere de hambre, así que vamos a darnos prisa en comer porque a este paso le meto un bocado al globo."

"Vamos, vamos." Asintió, viendo al rubio alejarse. Él tomó la mano de Jungkook, quien tras el viaje en coche logró sentirse un poco más espabilado. "Por cierto, Eul, Jungkook se va a quedar a dormir esta noche, ¿vale? Espero que no te importe."

"Bienvenido es. Además, así me acostumbro para cuando sea el tercero en discordia entre vosotros..."

Ambos soltaron una risita, acomodándose alrededor de la mesa. "Qué exagerado eres..."

Una hora más tarde, felizmente, Jungkook, quien vestía una camiseta extra ancha y unos pantalones de hacer deporte, los cuales había sacado de su bolsa del gimnasio, se acomodó junto a TaeHyung en su cama, suspirando cuando su cabeza chocó contra la almohada blandita. Estaba tan cansado que ni siquiera tenía fuerzas para decirse a sí mismo que debía estar dando saltos de alegría, pues tenía a TaeHyung apunto de dormir a su lado.

Posiblemente, al día siguiente despertaría y creería estar dentro de un sueño, pero ahora no era ese momento. Sólo quería dormir.

"Descansa, Jungkook." TaeHyung murmuró, antes de apagar la luz.

"Tú también." Susurró de vuelta, mirando su rostro en la oscuridad.

El castaño carraspeó, removiéndose incómodo. "Huh... ¿Puedo...?" Quiso preguntar, pues para él era dificultoso dormir sin abrazar algo.

Sin embargo, antes siquiera de formular la pregunta, Jungkook ya estaba estrechándolo suavemente entre sus brazos. TaeHyung suspiró, sintiendo la calidez de su cuerpo contra el suyo dejándole adormilado, seguido de un beso en la sien.

"¿Podrías repetir lo que me dijiste antes de esa entrevista?" Jungkook pidió, su voz baja haciendo cosquillas en el cuello de TaeHyung.

"¿Qué te dije? Tengo mala memoria."

"Cuando te llamaron para ir a maquillarte, me besaste y dijiste algo. Algo que quiero volver a escuchar."

Entonces, lo tuvo claro como el agua. "Oh." Musitó, mordiéndose el labio inferior.

"Pero si tú no quieres..."

Esta vez, fue él quien se adelantó a las palabras de Jungkook, dándose la vuelta, besando castamente sus labios sin siquiera verlos, y susurrando contra estos: "Te quiero."

La sonrisa del azabache fue inmediata.

"Te quiero." Repitió.