Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

✧c.-059

N/A: Esta semana se está convirtiendo en una de las peores de mi vida y la verdad es que me las estoy intentando arreglar para no volverme loca, pero bueno... Al menos este capítulo me alegra y calienta un poquito el corazón xD

Cap dedicado a medychristmas ♡♡

Hoy os recomiendo 'Fast Car' de Taio Cruz, una canción casi más vieja que yo, pero hace poco volví a escucharla y recordé lo muchísimo que me gustaba cuando era adolescente.

[...]

El gran día de TaeHyung llegó antes de que este fuese capaz de asimilarlo siquiera.

Después de casi una semana sin haber pisado la oficina tras su pequeño accidente, no podía sentirse más extraño y nervioso, apenas asumiendo que hoy entrevistaría a Park Jaechan, su actor favorito y la persona que más admiraba en la industria actualmente. Estaba pletórico, temblando a cada segundo que lo recordaba.

Había pasado toda la jornada laboral revisando su guion (el que Noeul previamente había editado), como si intentase memorizar algo que estaba en su cabeza a la fuerza, escuchando consejos por parte de Minnie y viendo por cuál ventana le salía más rentable tirarse si algo salía mal.

"Te sudan tanto las manos que podrías crear un nuevo ecosistema aplaudiendo." Señaló Noeul, apretando la susodicha aun así.

"Cállate." Siseó, apretando los labios. "Estoy nervioso."

"No hace falta que lo jures..."

TaeHyung le fulminó con la mirada. "Noeul."

"Vale, vale, me callo, me callo. Menudos humos... No se puede decir nada hoy en día..."

"Como vuelvas a decir algo más, te meto una patada."

El rubio bufó, luciendo ofendido a ojos de su mejor amigo, quien estaba al borde de un ataque de nervios, ambos adentrándose en la sala de ocio y descanso.

"Sí, vamos, lo que me faltaba ya, que con lo que te tiemblan las piernas, me rozas un poco y me desplazas la cadera de sitio." Negaba, dando pequeños golpecitos en el dorso de la mano ajena, sintiendo los latidos acelerados de TaeHyung en la muñeca. "Tú estate quietecito, mejor guárdate las energías para esa entrevista"

Entonces, TaeHyung comenzó a lloriquear, aprovechando que el sofá estaba vacío para dejarse caer allí dramáticamente. Noeul se puso de cuclillas a su lado, viéndole taparse el rostro con ambas manos, sollozando en silencio y sin lágrimas.

"¿Qué pasa? ¿Por qué te pones así?"

"Creo que no quiero hacer esto, Eul... E-Es demasiado para mí. No sirvo..." Se lamentaba, meneando la cabeza de un lado a otro. "No lo voy a hacer bien. Seguro que meto la pata y arruino toda mi carrera..."

Noeul ahora parecía consternado, apretando los labios al hacer una mueca de pesar, observando a su mejor amigo antes de soltar un suspiro. Él sabía mejor que nadie lo difícil que era esto para él, incluso si formaba parte de su mayor sueño. TaeHyung no podía evitar sentirse así: insuficiente, inútil, como si cada cosa que estaba a punto de hacer fuese a terminar en desgracia.

Y es que TaeHyung había pasado noches sin apenas pegar ojo, dando vueltas en la cama y terminando por irse a la cocina a comer helado, siendo esa su única terapia. Noeul siempre acababa acoplándose a él, muerto de sueño pero negándose a dejarle solo, pues su mente era su mayor enemigo.

"Esos pensamientos autodestructivos no van a llevarte a nada, TaeHyung." Le dijo, tomando su mano. "¿Qué te hace pensar que harás algo mal y tu carrera se irá a la mierda? ¿Por qué sería así?"

De nuevo, meneó la cabeza de un lado a otro. "No... No lo sé, sólo siento que ese es el único destino que me espera, incluso si no es así. Pienso constantemente que voy a fallar y ese pensamiento me acompaña al final de mis días. Sin excepción."

"Pues tiene que haberla, TaeHyung, porque no puedes estar así siempre."

Él miró a Noeul con los ojos llorosos. "¿Crees que no lo sé? ¿Qué me gusta estar así? No, pero tampoco puedo hacer nada para evitarlo."

"Claro que puedes, eres el único capaz, de hecho." Insistió, su ceño fruncido. "Pero si te quedas aquí, lamentándote por algo que nunca ha ocurrido y sufriendo sin siquiera poder disfrutar de las cosas buenas que te suceden, terminarás amargándote."

"Ya lo estoy..."

"Para nada." Muy convencido, el rubio negó, casi llegando a verse molesto.

"Que sí... Sólo veo las cosas malas de todo, soy incapaz de asimilar que algo bueno va a pasarme porque sí y creo que no lo merezco aunque así sea. Estoy destinado al fracaso."

"¿Y por qué en lugar de conformarte con eso, no haces algo para cambiarlo? ¿Es que acaso es más cómodo para ti vivir con pensamientos negativos todo el tiempo?"

Lentamente, el castaño se encogió de hombros. Había vivido así toda su vida, desde que era un niño entrando en la escuela de educación primaria, únicamente escuchando malos comentarios y opiniones sobre su persona. Todo porque no era más que un niño enérgico, extravagante y feliz que se terminó convirtiendo en una uva pasa con pelo. Hicieron que odiara cada pequeña cosa de sí, positiva o negativa.

"Tal vez..."

"Pues no, TaeHyung, ese no es el camino." Insistió, ahora sí, muy molesto.

Una risa sin emoción abandonó sus labios. "¿Y cuál es?"

"Darte cuenta de que nada de lo que haces es en vano, que tus esfuerzos tarde o temprano darán sus frutos, en lugar de asumir que todo va a ir mal porque sí. Estás tan enfocado en autosabotearte que no ves lo lejos que has llegado."

TaeHyung apartó la mirada, sintiendo el pecho caliente y con una presión indescriptible, miles de lágrimas habiéndose agolpado en las esquinas de sus ojos, todas ellas amenazando con salir cuando menos se lo esperase. Noeul suspiró, sin soltarle la mano.

"Hace un mes estabas decidido a irte de aquí porque no estabas teniendo el trato que te merecías. Sin embargo, ahora no sólo te has convertido en el favorito del jefe, sino que tu artículo lleva cuatro semanas consecutivas en el puesto número uno, el actor sobre el que escribiste lo leyó y quedó encantado hasta el punto de pedir que fueses tú quien le entrevistaras, TaeHyung." Enumeró punto por punto, creyendo que necesitaba oírlos, pues parecía haberse olvidado de todos ellos.

Él sorbió por la nariz. "Ya..."

"Estás cumpliendo todas y cada una de tus metas, pero en lugar de celebrarlas te encierras en ti mismo, esperando a que alguna catástrofe ocurra y todo vaya todo lo mal que crees merecer. Cuando no mereces nada de eso." Noeul usó su mano libre para tomarle el rostro y poder ver sus ojos. "Deja de verte como a un fracasado cuando todo lo que has hecho desde que llegaste aquí, ha sido demostrar tu talento. Deberías sentirte orgulloso, no un fracasado."

El castaño asintió, permitiendo que algunas lágrimas salieran a empapar sus mejillas, respirando hondo.

"Así que ya puedes estar limpiándote esas lágrimas y poniendo la mejor sonrisa que tengas, porque en... ¿cuánto tiempo queda para la entrevista?"

"Una hora."

"Eso. Porque en una hora vas a entrevistar a Park Jaechan y eso no sucede todos los días."

Y, haciéndole caso a Noeul a la hora de esbozar su mejor sonrisa, TaeHyung rio suavemente entre dientes, llenándose los pulmones. "Vale, sí. Tienes razón."

"Muy bien." Eul también asintió. "¿Dónde está el señor Jang?"

"No puede venir, está en una rueda de prensa con el gobernador o algo así... La verdad es que no me he enterado de mucho, sólo sé que no estará aquí hoy."

"Bueno, tampoco nos hace falta. ¿Has visto ya cómo es el estudio?"

Kim negó, apretando los labios. "Aún no... Me daba miedo que fuese más grande de lo que parece, temía abrumarme."

De inmediato, el rubio se puso en pie, jalando a TaeHyung para llevárselo consigo. "Pues venga, vamos a echarle un vistazo para que te familiarices con el sitio."

Ambos salieron de aquella sala sin pensárselo dos veces, sosteniendo la mano del otro como si se les fuera la vida en ello. Y es que, un poco, para TaeHyung se sentía así, como si se le fuera a salir el corazón.

Fuera, TaeHyung divisó al señor Chaikamon, quién casualmente salía de su despacho con algunos documentos en manos. Él caminó hacia ellos, esbozando una pequeña sonrisa amable. Golpeó sutilmente el brazo de Noeul para que este también lo notase, sonrojándose tan pronto como vio a Boss acercándose.

"Buenas tardes, chicos, ¿qué hacéis?"

"Justo íbamos al estudio, quiero ver un poco el sitio antes de la entrevista." Explicó el castaño, tratando de devolverle la sonrisa sin parecer que estaba estreñido.

Boss asintió, sus ojos viajando por al menos un segundo en dirección a Noeul, antes de mirar de nuevo a TaeHyung.

"¿Cómo llevas la entrevista? ¿Todo bien?"

"Sí, bien, pero nervioso. Muy nervioso."

"Bueno, eso es normal para ser tu primera vez, TaeHyung. Tú ve tranquilo, que ya verás como con la práctica todo mejora."

TaeHyung asintió. "Sí, señor, muchas gracias."

"No es nada." Asintió también, sin borrar su sonrisa. "Luego me pasaré para ver qué tal va todo, ¿vale? No os quiero quitar más tiempo."

"Será un placer tenerle allí." Dijo, y la sonrisa del gran jefe se volvió más amplia.

"Perfecto, pues allí estaré. Os dejo, chicos."

"Adiós, señor Chaikamon."

"Adiós..." Noeul apenas murmuró, tragando saliva cuando su siguiente sonrisa fue dirigida especialmente a él.

El señor Chaikamon se alejó por el pasillo, no sin antes darle un pequeño golpecito al rubio en la barbilla, desapareciendo tras una puerta al final de este. TaeHyung codeó a su mejor amigo, riendo silenciosamente.

"¿Qué ha sido eso?" Quiso saber, olvidando por un momento su propio nerviosismo. "¿No decías que al señor Chaikamon no le interesabas en absoluto?"

Bufando, Noeul puso los ojos en blanco. "Y así es."

"Pues esas miradas no parecían decir lo mismo, yo creo que él está bastante interesado en ti. Y tú en él."

Un suspiro prolongado abandonó los labios del rubio, mientras ambos se dirigían hacia el ascensor.

"¿Es que acaso vas a negarme que te gusta?"

"No, definitivamente no voy a hacer eso."

"Entonces sí que te gusta."

Noeul asintió. "Pensé que eso era más que obvio."

"Y lo es, del mismo modo en que lo es que le gustas."

Frotándose el rostro, terminó por convencerse a sí mismo de que lo mejor para su salud mental era simplemente ser honesto con el castaño y darle las respuestas deseadas.

"Mira, ¿sabes qué?" Pulsó el botón de la última planta." Te voy a dejar que me molestes con este tema sólo porque estás nervioso. Así que sí, quizás le gusto."

TaeHyung asintió, satisfecho de poder saliese con la suya. "Por fin lo admites."

"Lo admito porque me ha invitado a una segunda cita. Sin esa excusa tonta del trabajo."

Inmediatamente, le observó con los ojos ensanchados. "¡¿Qué?! ¡¿Una segunda cita?!"

"Así es. Iba a ser esta noche, pero como era de esperar le dije que estaba disponible cualquier día menos hoy."

"¡¿Por qué le has dicho eso?!"

"Porque es tu primera entrevista, no me la puedo perder ni siquiera por ir a cenar con el hombre más guapo que he conocido en mi vida. Existen prioridades, TaeHyung."

Y, sin capacidad para reclamarle nada, debido al modo instantáneo en que se le calentó el corazón, el mencionado hizo un puchero, abrazándole.

"Ow... Qué bonito eso que has dicho... Has rechazado una cita por mí."

"Soy un gran amigo, me merezco lo mejor."

"Totalmente."

"Por eso mismo he aceptado cenar con él mañana." Sentenció, antes de que las puertas se abrieran, dejándoles a tan sólo unos metros del gran estudio. "Llegamos."

TaeHyung fue a decir algo, pero nada salió de su boca, quedándose maravillado en cuanto vio aquel lugar, tanto que la cita de Noeul y el señor Chaikamon pasó rápidamente a segundo plano.

Era un estudio amplio, lleno de cámaras por todos lados, luces artificiales y una mesa justo a la izquierda, con sillones rodeándola y algunos micrófonos sobre esta. Había varios empleados poniendo cada cosa en su lugar, preparando con rapidez el sitio que TaeHyung prontamente ocuparía.

Pensar en aquello le hizo temblar.

"Dios mío... Este sitio es gigante."

A su lado, Noeul asintió. "¿Verdad? Da hasta miedo." Murmuró, luego pensó en lo que había dicho de forma inconsciente y no tardó en corregirse al ver la cara de TaeHyung. "Q-Quiero decir, que es precioso."

"No..., sí que da miedo. Tanto que creo que me voy a desmayar..."

Una de las puertas traseras del estudio se abrieron y, Khaotung, que les había visto llegar, salió, acercándose con su usual sonrisa.

"Chicos, ¿qué tal?" Llegó hasta ellos. "¿Queréis que os haga un tour por el estudio?"

"Sí, sí, vamos." Noeul de inmediato asintió.

"Pues venid."

Siendo el primero en entrar de vuelta, Khaotung abrió la puerta para que pudieran seguirle, viendo como Noeul empujaba sutilmente a TaeHyung, como si se hubiese quedado con los zapatos pegados al suelo.

El tour fue rápido, pero suficiente para que TaeHyung pudiera familiarizarse un poco con aquel lugar, confirmando cosas que ya sabía sobre el funcionamiento de las entrevistas y respirando hondo en cuánto notó que no era tan horrible como esperaba. Que incluso podía respirar sin ahogarse y que su corazón ahora latía con normalidad.

"Luego se edita el video en bruto y de ahí sacamos pequeños clips, normalmente los más interesantes, y se van subiendo." Explicaba Khaotung, su mano en el hombro del castaño, mientras los tres salían de allí.

"Ah, ya, pero primero suben el vídeo de la entrevista completa, ¿no?"

"Sí, claro, antes que nada se sube completa, exceptuando algunos cortes que ocurren en edición, después por partes. Si a lo mejor el entrevistado ha hablado sobre, no sé... El calentamiento global, por ejemplo, o algo así que pueda ser interesante, pues se sube ese fragmento."

Kim asintió. "Entiendo, entiendo. Yo es que soy más de ver las entrevistas completas, por eso no estoy tan al día con todo esto de los clips."

"La vieja usanza, claro, me pasa igual."

Noeul frenó en seco, atrapando la mano del castaño y obligándole a hacer lo mismo.

"Ay, ¿qué-?" Este fue a preguntar, confundido, luego miró hacia el frente también, queriendo saber qué era lo que había hecho que Noeul se detuviera tan abruptamente.

Park Jaechan, junto con Minnie y una mujer alta y robusta, acababan de salir del ascensor.

"Este es nuestro estudio, recientemente lo reformamos para añadirle algunas mejoras, así que está como nuevo." Minnie decía, señalando el amplio espacio con una enorme sonrisa.

La otra señora se dirigió al actor.

"Tienes que entrar a que te maquillen." Avisó ella, mientras que Jaechan miraba hacia todos los lados, en busca de algo desconocido.

"Sí, pero espera, que primero quiero..."

"Oh, ahí está TaeHyung." Minnie señaló al susodicho, por lo que las palabras de Jaechan quedaron en el aire en cuánto vio al periodista. Entonces, sonrió.

"Dame un momento, Sieun."

Él se alejó sin siquiera esperar una respuesta por su mánager, llegando hasta el castaño, quién estaba de pie junto a dos chicos más.

"TaeHyung, hola."

"Jaechan... Qué alegría volver a verte, ¿cómo estás?"

"Nosotros vamos a por café, volvemos en seguida." Le dijo Minnie, llevándose a Noeul consigo, siendo él quien se había quedado perplejo esta vez.

"Eh, sí, eso... Khao, ¿vienes?"

"Yo iré a preparar mi equipo de grabación. Os veo luego." Respondió, siendo el primero en marcharse de vuelta al estudio.

Mientras tanto, los otros dos pasaron junto al artista, asintiendo a modo de saludo y despedida cuando este les sonrió, desapareciendo tras las puertas del ascensor.

TaeHyung se aclaró la garganta, riendo nerviosamente. "¿Qué tal?" Repitió.

"Muy bien, ¿y tú?" Su sonrisa se hizo más grande. "¿Estás nervioso? Me dijiste que no habías entrevistado a nadie cuando nos conocimos."

TaeHyung rio entre dientes. Luego, recordó lo que Jungkook le había dicho.

"La gente nota tu nerviosismo, TaeHyung. Esto es como cuando vas al médico por unos resultados y sientes que el doctor está algo tenso. ¿Tú qué haces? Te empiezas a poner paranoico, ¿a qué sí Piensa que eres algo así como el capitán de un barco, tienes que mantener la calma para transmitírselo a los demás."

"Y seguía siendo así hasta hoy, sí." Asintió. "No te voy a mentir, estoy un poco nervioso, pero me alegra que tú seas mi primera entrevista, Jaechan. Te agradezco de todo corazón que hayas confiado en mí para entrevistarte, significa muchísimo.

La sonrisa de Jaechan se suavizó y sus ojos brillaron con intensidad. TaeHyung se felicitó por no titubear.

"Después de que un grupo de periodistas desaparecieran de mi vista porque tú te libraste de todos ellos, no podía no confiar en ti para esto." Le dijo, logrando que su corazón se acelerase. "Me alegro de estar aquí."

"Yo me alegro de que te alegres."

Ambos soltaron una risita conjunta, antes de que Jaechan le tendiera algo, sólo así TaeHyung notando que llevaba una bolsa consigo.

"Esto es para ti."

TaeHyung lo tomó. "Oh."

"Es mi primer disco, está firmado. Sale el mes que viene y quería que tú fueses el primero en tenerlo."

Inmediatamente, sintió como las lágrimas se agolpaban en sus ojos, debilitando toda su coraza. "¿De verdad lo dices...?" Susurró, viéndole asentir. "Jo, muchísimas gracias, es de los mejores regalos que me han hecho nunca, te lo prometo. Y tengo un mejor amigo súper creativo..."

La risa del más bajito sonó, palmeándole el hombro amistosamente. "Espero que lo disfrutes mucho."

"Por supuesto, pienso enmarcar la photocard, ¿tiene photocard?"

"Sí, me he asegurado de que pongan una exclusiva sólo para ti."

"Ow... Te lo agradezco de todo corazón, de verdad... Lo atesoraré de por vida."

La puerta más cercana al estudio se abrió, un miembro de producción apareciendo tras ella. "Jaechan, te esperan en maquillaje."

"En seguida voy." Aseguró, sin borrar su sonrisa. Luego, miró a TaeHyung. "Nos vemos dentro de un rato."

"Sí, hasta luego."

"TaeHyung, en quince minutos entras tú a que te maquillen, estate atento." Le dijo el chico de producción.

"Claro, gracias."

Una vez Jaechan desapareció por la puerta, siendo seguido automáticamente por su manager, quien únicamente le dio un asentimiento como forma de saludo al castaño, este vació sus pulmones, apreciando la bolsa que tenía en sus manos, y, dejando escapar un pequeño suspiro, sacó el disco con una sonrisa tímida. Le había regalado su primer disco en solitario... No podía creérselo.

Tenía a Jaechan en la portada, tumbado en el césped bajo un cielo azul precioso lleno de palomas blancas, todas ellas estratégicamente distribuidas. «FREEDOM ≠ IDOL: Dreamland. Park Jaechan 1st Mini Album» Podía leerse justo encima del paisaje, siendo este el nombre de dicho álbum. Él quedó aún más maravillado, si es que eso era posible siquiera, nada más leer la dedicatoria que Jaechan había escrito.

«Para TaeHyung, mi periodista de confianza y fan más cercano, al que conocí un día cualquiera de la manera más caótica posible. Espero que tu mal de amores se curase, aunque también puedes escuchar mi nuevo disco para una mayor efectividad, jajajaja. Siento lo de tus helados, todavía me siento culpable. Gracias por tu apoyo y por librarte de todos esos paparazis,

—Jaechan.»

"TaeHyung, aquí estás." La voz de Jungkook, aquella que reconocería en cualquier sitio, incluso con la sordera que Noeul le hizo creer que tendría meses atrás, sonó, sacándolo de su pequeña burbuja.

Miró hacia el frente, hallando al azabache a tan sólo unos metros. Se veía cansado, como si no hubiese dormido en años, pero muy sonriente. Él no dudó en acercarse a él rápidamente, lanzándose a sus brazos sin pensarlo.

"Vaya... Alguien tenía muchas ganas de verme." Bromeó, riendo entre dientes.

Jungkook estrechó el cuerpo de TaeHyung entre sus brazos, disfrutando del momento íntimo como si sólo ellos dos estuvieran allí, acariciándole la espalda y besando su frente.

"Pensé que estabas ocupado y no vendrías hasta que empezase la entrevista..."

"No, ya he terminado todo lo que tenía que hacer. Quería verte antes, para saber cómo estabas."

Kim levantó la cabeza. "Muy nervioso, Jungkook... Sentía que me desmayaba a cada segundo, pero ahora estoy un poco más tranquilo. Ha venido Jaechan, hemos estado hablando e incluso me ha regalado su primer disco en exclusiva que sale dentro de unas semanas. Estoy muy feliz."

"¿En serio?"

"Sí, mira." Él le mostró el álbum. "Tiene hasta una dedicatoria."

Jungkook observó con atención, riendo en cuanto leyó la parte donde mencionaba su mal de amores, meneando la cabeza de un lado a otro.

"Eres un privilegiado por tener esto cuando ni ha salido oficialmente, que lo sepas. A Jaechan has debido de caerle genial."

"Eso parece, sí. Le gusto."

"Y me alegro mucho de que así sea." Dijo, acariciándole el rostro. "Significa que no tienes nada de lo que preocuparte, ya hay un pequeño vínculo entre vosotros dos. La entrevista irá por sí sola."

TaeHyung se mordió el labio inferior. "¿Tú crees?"

Y él asintió. "Estoy seguro. Confía."

"Vale..."

Una vez más, la puerta que llevaba a la zona de estilismo y maquillaje se abrió, el chico de antes apareciendo, esta vez en busca de TaeHyung.

"TaeHyung, te toca pasar a maquillaje."

De inmediato, observó a Jungkook, no queriendo irse de allí. "Me tengo que ir, Minnie y Noeul deben estar al llegar, han ido a por café, diles que me están maquillando, ¿vale?"

"Vale, yo se lo digo. Ve con cuidado."

TaeHyung se giró, aún mordiéndose el labio. Sin embargo, estaba intranquilo, como si le faltara algo. Entonces, volvió a darse la vuelta, acercándose nuevamente a Jungkook e inclinándose hasta besar sus labios.

"Te quiero. Adiós." Dijo nada más separarse, sintiéndose lo suficientemente nervioso como para pensar en ello por más de un segundo, girándose a toda prisa y desapareciendo de la vista de Jungkook antes de que este pudiera procesar nada.

Cuando lo hizo, esbozó una sonrisa dulce, su corazón acelerándose sin poder evitarlo, lleno de plenitud, calidez y la felicidad más pura que podía llegar a existir.

Siempre creyó que sería él el primero en decir las palabras clave, sin embargo, TaeHyung se le adelantó. Y no podía estar más feliz de que así fuera, porque después de tantos años luchando, por fin tenía su deseada recompensa. Era mutuo. TaeHyung le quería.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro