✧c.-056
N/A: Otra montaña rusa de emociones y de mis capítulos favoritos por excelencia, estoy encantada xD
Cap dedicado a karlakilljoyallien ♡♡
Hoy os recomiendo 'Afraid To Love' de David Archuleta, uno de mis primeros crush en la adolescencia, lo amo.
[...]
Jungkook llegó al hospital tan sólo quince minutos después, tras avisar a Noeul, quien inmediatamente abandonó su puesto de trabajo para seguirle hacia el hospital. TaeHyung había ingresado para recibir los cuidados necesarios, Sebin alegando que se encontraba estable según los médicos. Él inmediatamente buscó a su jefe en la sala de espera, encontrándolo solo, del mismo modo en que encontró a TaeHyung cuando el accidentado fue él.
"Señor Jang, hola." Llegó a su lado, por lo que al instante se puso en pie, viéndose tan angustiado que no parecía él. "¿Qué le han dicho? ¿Cómo está?"
"Bien, le inyectaron algo en la ambulancia y se despertó al poco tiempo. Hablaba, pero le costaba un poco respirar."
"¿Dijo algo?"
"Sí, que había roto su récord... No le entendí, pero como normalmente no es algo que haga, pues tampoco le presté mucha atención." Dijo, asintiendo. Jungkook sonrió, pudiendo respirar con algo de alivio, pues esas bromas significaban que estaba bien. "Supongo que no es nada malo si te estás riendo, ¿no? Tú le conoces mejor que yo."
Él meneó la cabeza a modo de asentimiento. "Le conozco desde que teníamos ocho años, así que sí. Y no es nada malo, descuide, de hecho, significa que está perfectamente."
"Pues le voy a reducir el sueldo por el susto que me ha dado, al graciosito." Dijo, logrando que Jungkook riese nuevamente. "Justo antes de que se desplomara estaba diciéndole que no era más que un simple periodista, que no me importaba y por su culpa casi me da un infarto, pero esta vez completo."
Encogiéndose de hombros, vio a Noeul adentrarse por las puertas. "Mírelo por el lado bueno, va a estar súper contento, porque usted se ha preocupado por él."
"Ni que eso fuera importante."
"Pues para TaeHyung lo es, él le admira mucho como periodista." Dijo, y aquellas palabras fueron suficientes para que Sebin se quedara callado.
Noeul llegó hasta ellos, casi jadeando y con una mueca de preocupación inmensa. "¿Cómo está? ¿Sabéis algo?"
Como era de esperar, Jungkook se apresuró en tranquilizarlo, poniendo ambas manos sobre sus hombros antes de que el siguiente en ser ingresado fuera él.
"Está bien, está bien, tranquilo. Sebin dice que se despertó en la ambulancia y aunque le costaba un poco respirar, estaba estable." Explicó.
"¿Usted le ha acompañado en la ambulancia?"
El señor Jang asintió.
"Él estaba con TaeHyung cuando sufrió el shock, Noeul. Al parecer se comió una barrita que tenía frutos secos por accidente."
"¿Por accidente?" Su ceño se frunció, extrañado. "Pero tú mismo te encargaste de separarlas para que eso no ocurriese, Jungkook, ¿cómo se supone que ha pasado? Ni que fuera imbécil para autoenvenenarse."
El azabache suspiró, teniendo la sensación que sus intentos porque Noeul mantuviera la calma no estaban dando muchos frutos, así que le zarandeó un poco para que dejase de mirar a todos lados y se enfocara en él, observándole con una calma que pretendía contagiarle.
"¿Y tú cómo puedes estar tan tranquilo? TaeHyung pudo haberse muerto, sabes lo grave que es esto."
"Oye, cálmate, rubito." Indicaba Sebin, su ceño fruncido. "Que, de no ser por él, nadie hubiese sabido cómo reaccionar."
Jungkook ni siquiera se inmutó tras el ataque, pues sabía que Noeul no era más que un chico preocupado por su mejor amigo y no tenía forma de culparle, sino que además pudo confirmarlo cuando los ojos se le suavizaron, llenándose de lágrimas que no salieron.
"Respira hondo, ¿vale? Él está bien, ha sido un accidente, no se ha envenenado así porque sí. Alguien un poco descuidado debió mezclar las barritas y por desgracia agarró una que no era, pero afortunadamente está fuera de peligro."
Sorbiendo por la nariz y respirando hondo, Noeul asintió. "Lo siento, lo siento... No quería comportarme así contigo, es sólo que..."
"Estás preocupado, lo entiendo, no hay ningún problema. Todos lo estamos."
"Sí..."
"Noeul."
La voz de Khaotung, inconfundible, sonó a sus espaldas, este siendo acompañado por el señor Chaikamon, a quien Jungkook también había avisado. El menor de ambos hermanastros correteó hacia Noeul, llegando a su lado para abrazarle, pues este le había avisado casi llorando.
"Khao, hola..."
"¿Qué ha pasado? ¿Cómo está TaeHyung?"
Boss palmeó el hombro de Jungkook. "¿Sabéis algo?"
"Sí, está estable. Ha sufrido un shock anafiláctico por su alergia a las nueces, se comió una de esas barritas por equivocación y se desplomó delante del señor Jang, pero los médicos dicen que no hay peligro. Así que todo bien." Repitió, casi como si lo tuviera memorizado, logrando verse un poco angustiado también.
"Menos mal, me alegro. ¿Y tú cómo estás?"
"Bien, bien..."
El señor Chaikamon ladeó la cabeza, sabiendo que eso no era ni un poco cierto. "¿Seguro? ¿Por qué no me acompañas a la cafetería a por un poco de café?"
Y, conociéndose a sí mismo lo suficiente como para saber que quizás sí necesitaba hablar de lo sucedido con alguien, ni siquiera se molestó en negarlo, asintiendo. Noeul estaba con Khaotung, quien podía acompañarle y tranquilizarle en caso de ser necesario, así que ya no necesitaba ser el pilar de nadie.
"Vale, vamos." Accedió, yendo tras él.
Ambos se alejaron del resto en dirección al pasillo en cuestión de segundos, la mano de Boss sobre el hombro de Jungkook todo el tiempo, transmitiéndole apoyo y tranquilidad, una con la que quizás no contaba tanto como creía. Y es que parecía estar ocultando muchos sentimientos a la vez, como el miedo, la intranquilidad o angustia, todos ellos manteniéndose bajo llave al no querer alarmar a nadie más.
"Rachel dijo que actuaste con mucha rapidez, como si supieras lo que había que hacer en todo momento. ¿Es la primera vez que lo haces?" Quiso saber. Jungkook negó, con la mirada fija en el suelo.
"No, es la segunda."
"¿Alguien de tu círculo cercano a parte de TaeHyung tiene la misma alergia?"
Una vez más, negó. "Nadie más."
"Entonces fue a él."
En esta ocasión, asintió, su gesto torciéndose, pues no era algo que le gustase recordar.
"Sí, por desgracia sí..."
"¿Quieres contarme lo qué pasó?"
Boss se interesó en demasía, palmeándole el hombro hasta que consiguió que le observara. Y, Jungkook, quien no parecía demasiado entusiasmado por hurgar en el pasado, simplemente se encogió de hombros, apretando los labios, sabiendo que le haría bien hablar con alguien sobre aquello que llevaba tanto tiempo guardándose para sí mismo.
"Fue durante el viaje de fin de curso con el instituto, teníamos dieciséis. Fuimos a un campamento y TaeHyung se quedó a dormir en la que también era mi habitación, junto con Noeul y esos imbéciles de los que te hablé."
"¿Tus antiguos amigos?"
"Sí, esos."
"¿Y qué pasa con ellos?"
"Una de las actividades era la repostería, hicimos brownies y TaeHyung no pudo participar debido a su alergia. Dijo que era alérgico a las nueces, para ese entonces yo ya lo sabía, pero los demás, a excepción claramente de Noeul, no querían creérselo."
El ceño de Boss se frunció, pareciendo no comprenderlo. "¿Cómo que no se lo creían?"
"Pensaban que fingía para no tener que participar, así que quisieron comprobarlo. Esa misma noche, trajeron alcohol a la habitación. Él bebió, se emborrachó, Noeul no quiso unirse, yo tampoco, así que cuando fuimos a ducharnos y TaeHyung se quedó dormido por la bebida, le metieron un trozo de brownie a la fuerza en la boca."
"¿Me lo estás diciendo en serio?" Cuestionó, la incredulidad predominando en su rostro. "¿Le obligaron a comerse un puto brownie?"
"Sí. Cuando salí TaeHyung estaba ahogándose, todos se habían espantado porque su dichosa alergia era cierta y nadie sabía cómo actuar. Busqué en su equipaje, encontré la epinefrina y se la inyecté." Relató, una mueca de amargura en su rostro. "No pasó nada, no fue a más. Se calmó y volvió a quedarse dormido. Yo no pude pegar ojo."
"Menudos desgraciados, qué poca vergüenza hay que tener para hacer algo así." Bufó, negando con la cabeza en señal de desagrado. "¿Y él no lo sabe?"
Jungkook negó. "Nunca se lo dije, Noeul tampoco se enteró jamás. TaeHyung estaba demasiado contento creyendo que le habían incluido en nuestro grupo como para decírselo. No tenía valor... A día de hoy sigo sin encontrarlo."
Suspirando, Boss frotó su espalda con pesar, masticando su labio inferior. "Entiendo tu punto, Jungkook, quizás yo tampoco encontraría el valor para decírselo, pero debes hacerlo. TaeHyung tiene que saber lo que pasó esa noche, porque quién sabe lo que hubiera podido pasar de no ser porque tú llegaste."
"Lo sé, lo sé." Él asintió, sorbiendo por la nariz y eliminando unas lágrimas cuya existencia no conocía.
Para el momento en que TaeHyung despertó ya habían pasado alrededor de tres horas, Noeul siendo el primero en entrar a verlo cuando tuvo oportunidad, como si no se hubieran visto en años. Al poco tiempo, salió de la habitación, permitiendo que Jungkook fuese el siguiente en entrar a verlo, pues este parecía algo ansioso a ojos del rubio, quién se le acercó.
"Preguntan por ti ahí dentro." Señaló, por lo que Jungkook inmediatamente sonrió, masticando su propio labio inferior.
Él se adentró en dicha habitación sin siquiera dudarlo, viendo a TaeHyung sentado en la cama, con una sonrisa y un gotero conectado a su brazo.
"Jungkook, no te lo vas a creer: es un niño." Bromeó tan pronto como este apareció.
El azabache meneó la cabeza de un lado a otro, suspirando mientras reía.
"Idiota..."
"¿Te has asustado mucho?"
"Bastante, sí, pero no más que el señor Jang." Apartándole el cabello del rostro, otra acción que se había vuelto cotidiana entre ambos, respondió.
TaeHyung hizo una mueca. "Ya... Noeul me ha contado que vino conmigo en la ambulancia, pobrecito... Creo que he debido de causarle algún trauma."
"No, qué va, seguro que no ha sido nada. Sebin ha visto cosas peores." Le dijo, restándole importancia. "¿Tú qué tal? ¿Cómo te sientes?"
"Bien, estoy bien, ya se me ha pasado prácticamente la molestia del pecho y ahora sólo me duele un poco la pierna, pero nada que no se vaya a quitar con el tiempo. No me quejo."
Haciendo una mueca de culpa, el azabache pasó los dedos por su rostro, acariciándolo suavemente. "Lo siento, no quería hacerte daño."
TaeHyung frunció el ceño.
"¿Daño? Me has salvado de morir asfixiado, Jungkook." Le recordó, como si hubiese olvidado ese pequeñísimo detalle. "Eso no es más que un daño colateral de todo lo que podría haberme pasado si no hubieras llegado tú."
"Seguro que alguien más lo hubiera hecho."
Ante aquellas palabras, Kim no pudo ocultar su molestia, viéndose en la necesidad de mostrarse serio al respecto.
"Jeon Jungkook, ni se te ocurra quitarte mérito porque te prometo que me voy a enfadar contigo como no lo he hecho nunca, y mira que tenemos un largo historial por delante."
Entonces, el mencionado soltó una risita, asintiendo con la cabeza y rindiéndose. "Vale, vale... Lo acepto, te he salvado."
"Muy bien, eso quería escuchar." Finalizó, satisfecho. Luego, apretó la mano de Jungkook que estaba sobre el colchón. "Y muchas gracias, por cierto. Ya casi he perdido la cuenta de todo lo que te debo..."
"No me debes nada por esto, TaeHyung, ni lo pienses. Salvarte la vida no es algo que tengas que devolverme."
Entonces, los labios del castaño se apretaron. "Bueno..."
"Pero todavía me debes una por elegir esa hamburguesa que tanto te gustó." Dijo antes de el otro pudiera decir algo más, encogiéndose de hombros tras escucharle bufar. "Lo siento, no me conformo con un café."
TaeHyung le fulminó, incluso si él tampoco creía posible saldar su deuda con un simple café.
"Desagradecido..."
Riendo, se inclinó para besar su frente.
"¿Quién más está fuera?"
Quiso saber TaeHyung, al cabo de un par de minutos en silencio, en los que Jungkook simplemente se había dedicado a acariciar cada parte de su cuerpo a la que tuviera fácil acceso, minutos que Kim disfrutó más que cualquier cosa, deseándolos eternos.
"Ha venido el señor Jang, tus amigos, Boss y hace poco se fueron Minnie y Shinhye también."
TaeHyung logró incorporarse con algo de dificultad, sus ojos ensanchados.
"¿El señor Chaikamon y Noeul están en la misma sala?"
Con el ceño fruncido, Jungkook asintió, no logrando comprender la razón de su evidente entusiasmo, sintiendo que algo se le escapaba.
"Claro... Otra no hay."
"¿Y has notado algo entre ellos? ¿Se han mirado mucho?"
Los ojos de TaeHyung brillaban intensamente, como si un montón de estrellas se le hubieran quedado pegadas. Estaba tan emocionado, que a Jungkook le resultaba chocante, encogiéndose de hombros sin saber qué decir.
"Pues no lo sé, la verdad, yo es que he estado bastante preocupado por cierto señorito ingresado como para darme cuenta, pero si quieres ahora mismo salgo y hecho un vistazo."
Entonces, le dedicó una enorme sonrisa. Su mejor sonrisa, mejor dicho, ignorando completamente el sarcasmo.
"Vale." Aceptó, felizmente.
Jungkook rodó los ojos, pues no podía creerlo. ¿En serio ese de ahí era el mismo TaeHyung que casi moría en sus brazos hacía tan sólo unas horas?
Un pequeño bufido abandonó sus labios, porque, a pesar de que se sentía irreal, allá iba él, dejando atrás al amor de su vida para acercarse a la puerta y observar por el cristal, viendo como Noeul y Boss charlaban animadamente, mientras que Khaotung, a lo lejos, hablaba por teléfono.
"¿Están haciendo algo?"
"No, sólo hablan."
"¿Cómo de cerca están el uno del otro?"
Él mordió su labio inferior. "Bastante."
"¿Sí?"
"Sí." Asintió, esbozando una pequeña sonrisa casi imperceptible, antes de soltar un sonoro jadeo que alertó a TaeHyung.
"¿Qué pasa?"
"Se están besando."
Kim chilló. "¡¿Qué?!"
Y, como era de esperar, Jungkook no pudo ocultar su risa, dándose la vuelta sólo para hacerle ver que había caído de lleno en su trampa. TaeHyung le fulminó, conforme este se acercaba.
"Eres un imbécil, ¿por qué juegas así con mis emociones?"
"Bienvenido al club."
De inmediato, frunció el ceño, mostrándose ofendido tras su respuesta. "¡Oye!" Se quejó. "¿Dónde quedó eso de que no podías ser rencoroso conmigo?"
Con el labio inferior apresado por sus pulcros dientes, Jungkook posó una mano en el estómago ajeno. "Sigue en pie, descuida."
"Más te vale..."
"¿Y tú por qué estás tan pendiente de lo que Noeul y Boss hagan?" Quiso saber. TaeHyung se encogió de hombros, apretando los labios.
"No te lo puedo contar..."
"Hm, ya veo."
"Pero si insistes, diré que fue bajo presión..."
Jeon rio, acariciándole el abdomen. "Insisto, insisto, ¿qué pasa entre esos dos? Necesito saberlo para poder continuar con mi vida."
"Oh, entonces es asunto de vida o muerte." Señaló, sus ojos brillantes. "Tendré que contarlo..."
"Sí, por favor."
"Pero Noeul..."
"No se enterará."
"Bueno..." Él suspiró casi dramáticamente. "El señor Chaikamon ha invitado a Noeul a cenar este sábado. Los dos solos."
Jungkook de inmediato se hizo el sorprendido. "¿Qué me dices?"
"Sí."
"¿En serio?"
"Te lo prometo. Pero no puedes decirle nada a nadie, ¿eh? Es un secreto."
El azabache dibujó una línea invisible sobre sus labios, como si estuviera cerrándolos cual cremallera.
"Soy una tumba."
Sin embargo, TaeHyung no parecía del todo convencido, por lo que negó. "Ese método no es efectivo."
"¿No?"
"No. Ven, acércate." Pidió. Jeon hizo lo pedido, acortando un poco la distancia.
Una mano viajó a su nuca, empujándole hacia abajo hasta que estuvo a la misma altura que el rostro de TaeHyung, este ahuecando sus mejillas con ambas manos. Luego, posó sus labios en los del contrario, besándole de manera muy dulce. Tanto, que Jungkook por un momento llegó a olvidar donde estaban.
Cuando se separó, parecía sumamente satisfecho con lo que acababa de hacer, pues tenía una sonrisa brillante en el rostro. "Ahora sí, mi secreto está a salvo contigo."
Jeon suspiró. "No hace falta que lo jures..."
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro