N/A: Otro capítulo que me cura el alma, especialmente hoy porque lo necesito xD

Cap dedicado  fabi2713 ♡♡

Hoy os recomiendo 'Blindside' de mi artista favorito, James Arthur. Su música es otra cosa necesaria para curarme el alma.

[...]

"¡¿Qué hago?!"

"No lo sé, TaeHyung."

"Se acerca..." Murmuró, sus labios muy apretados mientras agarraba la muñeca de Jungkook, apretándola. "Que viene, que viene para acá."

Gong Yoo se encaminaba hacia el castaño a paso rápido, aunque ante sus ojos parecía ser a cámara lenta.

"TaeHyung, cálmate."

"¿Me dará tiempo a correr?"

"No, no te da tiempo."

"¿Y si finjo un desmayo?" Propuso. Jungkook le observó como si no pudiera creer lo que acababa de decir. Él se encogió de hombros. "¿Qué pasa? Situaciones desesperadas requieren medidas desesperadas."

El azabache bufó. "Esto no es una situación desesperada, ni siquiera sabes lo que quiere ese hombre."

"Sonsacarme información del señor Jang, eso quiere. Y no puedo dársela porque sino me mata."

"Pues no se la des."

Los nervios de TaeHyung se dispararon, estando al borde del colapso. "¡¿Y qué hago?!"

"Primero respirar hondo, segundo... No lo sé."

"Dios... Al final me desmayo de verdad." Lloriqueó, viendo como Gong Yoo cada vez estaba más cerca. Esto había pasado de ser un sueño a su peor pesadilla.

Jungkook le observó, notando la angustia en su rostro que procedía a tapar.

Gong Yoo llegó frente a ellos, esbozando una pequeña sonrisa. "Hola otra vez, muchacho."

"Señor Gong, hola..." Susurró, apretando la muñeca del azabache una vez más. "¿Cómo usted por aquí?"

"He venido para una sesión de fotos y quise pasarme a ver si Sebin estaba por alguna parte, pero justo me acaban de decir que se dio de baja."

Él inmediatamente asintió. "Sí, está de baja."

"¿Y sabes cuándo volverá?"

"Pues... La verdad es que no, le han recomendado mucho reposo, así que supongo que unas cuantas semanas."

Jungkook tuvo que apartarse en cuanto su teléfono comenzó a sonar con una llamada entrante de Sebin, viendo el terror en los ojos de TaeHyung tan pronto como supo que debía marcharse. Él se disculpó con la mirada, antes de alejarse unos metros.

"Señor Jang, hola."

"¿El novato me acaba de colgar en la puñetera cara?" Fue lo primero que preguntó.

"Eh... Sí."

"¿Se ha enfadado porque le he puesto su nombre a mi perro?" Quiso saber, casi viéndose preocupado. "Es que son iguales, me parecía lo más adecuado. Ese animal no se separa de mí ni para ir al baño."

Jungkook se apresuró a negar. "No, señor, no se preocupe, TaeHyung no está molesto, sólo tuvo que colgar de imprevisto."

"¿Y por qué? ¿Qué ha pasado?"

"Tenemos visita en la plantilla."

"Dame más datos, Jungkook."

Este observó a TaeHyung, quién se encontraba sumido en una conversación algo más animada con Gong Yoo.

"El actor Gong Yoo está en la revista, señor. Vino por una sesión de fotos y se pasó por nuestra oficina para verle." Dijo, y tan pronto pronunció aquellas palabras, se apartó el teléfono de la oreja, sabiendo lo que se vendría a continuación.

"¡¿Cómo?! ¡¿Otra vez ese gilipollas?!" Sebin chilló desde lo más profundo de su garganta. "Dios santo, qué suplicio de hombre..."

"No se altere, señor Jang."

"¡Claro que me altero, cómo no me voy a alterar! Dile a Kim que me coja el teléfono ahora mismo, Jungkook. Hablamos luego."

Él asintió incluso si su jefe no podía verle, la llamada finalizando de inmediato. Luego, se giró hacia TaeHyung, viéndole todavía en aquella situación incómoda con el actor y acercándose a ellos con rapidez.

"Todavía no se ha anunciado la fecha de estreno, pero creo que podría conseguiros algunas entradas a ti y a tus amigos para la premier."

"Oh, ¿en serio?"

"Por supuesto."

Jungkook llegó junto a él de nuevo. "TaeHyung, el señor Jang dice que le cojas el teléfono. Quiere hablar contigo."

Inmediatamente, Gong Yoo miró en su dirección, interesado en lo que decía.

"¿M-Me estaba llamando otra vez? No lo he oído..."

"Sí, dice que es importante, acaba de llamarme a mí para que te avise." Explicó, volviendo a mirar su propio teléfono, esta vez recibiendo un mensaje de Chaikamon.

Boss Chaikamon:

Ven a mi oficina. Urgente.

"Te veo luego, el gran jefe me reclama, TaeHyung."

"Eh... Claro, hasta luego."

"Adiós, señor." Le dijo al actor, quién le dedicó una sonrisa a modo de despedida.

El castaño sacó su teléfono con las manos temblorosas mientras veía como Jungkook se alejaba, justo cuando la llamada del señor Jang aparecía. Antes de aceptarla, le dio una mirada de disculpa al actor.

"Perdone un momento..."

"Claro, sin problemas."

TaeHyung se llevó el teléfono a la oreja nada más aceptar la llamada. "Dígame, señor Jang."

"Novato, pásame con el actor de pacotilla que tienes en frente, hazme el favor."

"Oh." Apenas emitió, mirando a Gong Yoo una vez más. "E-En seguida..." Luego, le tendió su teléfono, un poco confundido. "Es para usted, señor Gong."

El hombre no tardó en tomar el teléfono ajeno, su ceño fruncido acentuándose mientras se lo llevaba a la oreja, sabiendo que se trataba del gran Sebin y sintiéndose un poco inseguro al respecto.

"Sebin, ¿qué...?"

Lo siguiente que sonó, interrumpiendo cualquier cosa que Gong Yoo estuviese a punto de decir, fue el grito ensordecedor del señor Jang, aquel que prácticamente resonó por toda la plantilla. Tan fuerte, que TaeHyung arrugó el rostro cuando comenzaron a pitarle los oídos.

"¡¿Qué parte de "no quiero volver a ver tu puñetera cara en mi puta vida" no has entendido, Yoo?! ¡¿Es que acaso hablo en otro idioma?!"

Gong Yoo se llevó una mano a la frente, esbozando una sonrisa triste que compartió con el muchacho allí presente, aquel cuyo corazón era frágil como una rosa y no tardó en sentir lástima por él.

"¿Por qué mejor no me gritas desde mi teléfono? Es algo incómodo tener al pobre chico aquí mirándome mientras me dejas sordo. Y además tienes mi número..."

"No, no lo tengo, ni tampoco quiero. Deja a mi novato en paz, date la vuelta por donde has venido y no vuelvas."

La voz de Sebin, un poco más calmada ahora, todavía podía sonar a través del parlante, logrando que con cada palabra, el actor se viera más y más angustiado, sus labios curvándose en lo que parecía ser una mueca avergonzada, llena de pena.

"Sólo quiero hablar contigo cara a cara una última vez, por favor. Después de eso no te molestaré más."

El señor Jang se aclaró la garganta. "Adiós." Pronunció, acabando con las esperanzas vacías del actor.

Apretando los labios, este se apartó el teléfono de la oreja, devolviéndoselo a su dueño con un pequeño suspiro.

"Toma, ha colgado... Gracias."

TaeHyung lo tomó de vuelta, haciendo una pequeña mueca.

"Lo siento mucho... ¿Necesita algo?"

"No, está bien, no pasa nada. Era de esperar." Dijo, en un tono de voz calmado, aunque sonando derrotado al mismo tiempo, como si tuviera un nudo en la garganta. Tanto, que incluso se rio de su desgracia. "Me marcho ya, gracias por todo."

"No es nada, señor Gong..."

"Mantengo mi palabra con esas entradas para la premier, ¿eh? No hagas planes importantes en un futuro, TaeHyung."

Y, el corazón del mencionado se sentía tan adolorido que ni siquiera pudo celebrar el hecho de que Gong Yoo (el grandioso Gong Yoo) conocía su nombre.

"Nos vemos en otra ocasión." Se despidió el hombre, sonriéndole. "Cuídate."

"Usted también." TaeHyung le devolvió la sonrisa, viéndole marchar.

Una vez no hubo rastro del actor, hizo un puchero, sólo entonces notando que toda la plantilla tenía la atención puesta en él, lo que le hizo sonrojarse de inmediato, aclarándose la garganta. Casi olvidaba que Gong Yoo era un famoso.

Al cabo de unas horas, cuando su jornada laboral estaba por terminar y se preparaba para ir a almorzar, guardando todas sus pertenencias en el bolso, TaeHyung seguía sin quitarse de la cabeza aquella situación con Gong Yoo y su jefe, donde claramente los rechazos de este último herían al actor.

TaeHyung no iba a posicionarse, pues estaba claro que esa no era su historia en absoluto y sabía de antemano que Gong Yoo actuó de manera egoísta y cruel con Sebin. Sin embargo, no podía evitar pensar que lo mismo que veía en Gong Yoo cuando el señor Jang le rechazaba sin reparo alguno: el dolor que transmitían sus ojos, la angustia e inclusive la desesperación, era todo lo que Jungkook había sentido cada vez que él le despreciaba con sus acciones. Y un sentimiento de culpa invadió su pecho, persistente.

Pensar que había hecho sentir a alguien de esa manera, a alguien como Jungkook, quien se preocupaba por él más de lo que cualquier persona en toda su vida hizo, que lo apoyaba a escondidas, ayudaba en silencio y quería incondicionalmente; le hizo sentir miserable, sus ojos no tardando en llenarse de lágrimas. Unas lágrimas que forzó a no salir.

Él sabía que, incluso si el sentimiento de culpa se desvanecía, tal vez jamás llegaría a perdonarse a sí mismo.

Unas manos se posaron en sus hombros, no llegando a sobresaltarle pero sí a acelerarle el corazón tan pronto como reconoció la fragancia de Jungkook.

"¿Todavía sigues aquí?" Cuestionó.

TaeHyung se giró, algo conmocionado, como si hubiera invocado al azabache con sus pensamientos autodestructivos.

"Oh, hola. Sí, estoy terminando de guardar las cosas, ya sabes... Para no perder la costumbre de ser el último en salir."

Soltando una risita, asintió, notando la falta de aquel brillo característico en sus ojos, lo que inmediatamente le preocupó, frunciendo el ceño.

"¿Va todo bien, TaeHyung?" Cuestionó, siendo consciente entonces del modo instantáneo en que su cuerpo se tensó tras formular aquella pregunta, viéndole asentir y esbozar una sonrisa que parecía forzada.

"De maravilla, ¿por qué lo preguntas?"

"No lo parece."

A pesar de que su voz salió suave, continuaba mostrándose preocupado, analizando cada pequeño detalle del castaño, cuyo cuerpo seguía en tensión, forzando reacciones positivas y sonrisas falsas que él claramente notaba, mientras guardaba cosas en su bolso.

Antes de que pudiera hacer un movimiento más, le tomó del rostro como siempre hacía, manteniéndole quieto y con los ojos fijos en él.

"¿Qué es lo que pasa?" Cuestionó de nuevo. TaeHyung fue a abrir la boca, cuando Jungkook volvió a hablar. "Y no me digas que nada porque te conozco."

Consternado, el castaño se mordió el labio inferior, pues sabía que no podía quedarse callado eternamente y batallar él sólo con aquellos sentimientos. No si quería hacer las cosas correctamente esta vez. Jungkook se merecía que fuese todo lo claro que él no pudo ser.

"¿Ha pasado algo con Sebin? ¿Con Gong Yoo?"

"No... Bueno, sí, algo así." Asintió, relamiéndose los labios. "Gong Yoo se fue al poco tiempo de que tú lo hicieras cuando Sebin le dijo que no quería nada. Estaba bastante triste."

Los dedos del azabache acariciaron sus mejillas con dulzura.

"Y tú también te pusiste triste."

"Me sentí mal por él, incluso cuando tal vez no debería después de todo lo que él señor Jang me contó sobre ellos, pero... Luego me paré a pensar en que eso mismo que Gong Yoo sintió antes de irse, era lo mismo que tú sentías cuando yo te rechazaba."

Jungkook suspiró ante aquellas palabras, moviendo su cabeza de un lado a otro. "TaeHyung..."

Este volvió a tomar la palabra inmediatamente. "Sé que no debería estar pensando en eso una y otra vez, que no me hace bien cuando todo lo que intento es enmendar mis errores contigo, pero no puedo evitarlo."

"Lo entiendo, no es algo que puedas controlar."

"Desgraciadamente no... Ojalá pudiera, pero parece que sentirme culpable es todo a lo que estoy destinado."

Jungkook negó una vez más, manteniendo un agarre suave en su rostro, no queriendo que este apartase la mirada. "No, claro que no, eso es momentáneo, TaeHyung. Sientes que debes culparte a ti mismo de todo porque yo no lo hago, pero dejará de ser así."

Dejando escapar un suspiro, TaeHyung se consoló a sí mismo pensando que, tal vez, como siempre, Jungkook tenía razón. Autoconvenciéndose incluso cuando quizás este sólo buscaba evitar que se sintiera más culpable aún.

"Sí, supongo que sí..." Murmuró, masticando su labio inferior poco después. Este le dedicó una sonrisa dulce.

Miró a Jungkook por unos segundos, memorizando cada detalle del rostro ajeno antes de observar a su alrededor, queriendo asegurarse de que no había nadie cerca, antes de acortar la distancia que los separaba y atrapar sus labios.

Besó a Jungkook con calma, disfrutando de la sensación de ser él quien iniciara un beso largo entre ambos, notando como las manos del susodicho se posaban en su cintura, apretando, mientras él le acunaba el rostro, estremeciéndose debido a los chasquidos que resonaban en el ambiente, llenando el silencio de una planta vacía.

"Gracias por salvarme el culo con Gong Yoo antes, no te lo había dicho." Susurró al separarse, siendo él esta vez quién acariciase el rostro del otro.

Jungkook rio, apoyándose en el tacto. "Bueno, sin duda alguna esa es una forma muy agradable de agradecer algo... Pero, ¿por qué no mejor me das las gracias viniendo a almorzar conmigo hoy?"

TaeHyung se mordió el labio, ni siquiera necesitando pensar su respuesta.

"Por supuesto."