Llegamos al despacho de la directora, no puede hablar estaba paralizada por el temor. Ray una vez más tuvo quedar el paso por mi y hablar con la directora, aunque no le creyó al principio tras enseñarle la foto comprendió. El miedo invade mi cuerpo una vez más. Tanto miedo siento que le ocurra algo a esa persona que mis manos tiemblan, mi cuerpo entero lo hace; Si le ocurre algo a mi hermano muero.

-No se preocupe señorita Cook, encontraremos al responsable.

Busca la directora en la PC que tiene encima de la mesa de su oficina, el responsable en las cámaras; Pude contemplar como su rostro se torno palido y gotas de suder caian por su frente, estaba paraliza. Sus ojos café avisaba que el peligro estaba cerca. Al ver a alguien encapuchado meter por una de las rendijas de mi taquilla la foto y luego irse.

Pero lo que más temor daba era la manera con la que se detuvo a saludar la cámara, como si supiera que lo observaban y no le diera miedo en lo absoluto. Entonces eso solo implicaba una cosa, era la prueba evidente de que lo sucedido esa noche no fue un sueño.
Al mirar al lado y ver a Ray cerca de mi me dolía, sabía que lo estaba poniendo en peligro a el y a mi hermano. No era conciente del peligro en que lo estaba poniendo ahora.

-Directora Raven lo ve, hay que hacer algo- digo sujetandola de la mano haciéndola brincar del susto.

-Si, nos pondremos en contacto con la policia- agarro el teléfono en su mano marcandole a la policia.

Estaba entrando en ese momento en un ataque de anciedad, comencé a moverme de un lado a otro como si estuviera loca. Entere las uñas en mis muslos haciéndome daño, sentia las gotas de sangre correr por mis muslos. No senti dolor alguno, lo unico que sentia era la inquietud constaté de que mientras yo estaba aquí, mi hermano podia morir.

-Hey, ¿Qué haces? Te estas haciendo daño- sus cálidas manos me sujetaron atrayéndome hacia el.

-¡No, suéltame!. No eres conciente del peligro- empuje su cuerpo hacia atrás.

-Eres tonta, soy consiente del peligro desde esa noche - la sinceridad en su voz, me confirma que dice la verdad.

-¡¿Por qué no me dijiste nada?!, ¡Como coño quieres que confie en ti ahora! Me hiciste crecer que fue un sueño- vocifere.

-Porque desde esa noche yo...-dío uun paso adelante-Yo se lo dije a tu hermano, ambos te estamos protegiendo Jess. Mis gualdas espaldas nos estan protegiendo todo el tiempo a los tres.

-No puedo creerte... Lo siento, quiero hacerlo pero no puedo- vi el dolor en sus ojos, con cada palabra que le decía y tomando una ultima gota de valor pronuncie lo ultimo-yo confié en ti y tú me fallaste.

-Jess, no seas así- vi la suplica en sus hermosos ojos verdes.

Se que esto que le diria me doleria con el alma, porque a pesar de su mentira yo lo queria. Comprendia que lo hacia por mi bien pero debia protegerlo.

-No quiero verte más. A partir de hoy Ray Jobs, para mi estas muerto-pronucie cada palabra con fingido enfado. Aguantando el nudo que se formaba en mi garganta.

-Muy bien, entonces para ti no existo- luego de eso salio hecho una furia tirando la puerta de la oficina al salir.

Las lagrimas que llevaba aguantando terminaron cayendo por mi rostro, y sin importar en donde estaba termine rompiendome ahí.

(...)

Despues de tener una charla con mi hermano con respecto a lo sucedido. Lo entendí debíamos tener cuidado ambos y a ver a lejado a Ray de mi fue lo mejor. Aunque sentía que esto que sentía me estaba matando.

-Hermana.

-He- solté sin prestar atención.

-Alguien vino a verte.

-No quiero ver a nadie.

-Tarde ya lo dejé pasar. No seas cobarde si lo eres solo dejaras ganar a esa persona- dicho lo ultimo salio de la habitacion dejandome con alguien que habia visto hoy.

-¿Qué haces tu aquí?- pregunte mirando fijamente al chico de ojos avellana que se encontraba frente a mi.

-Cuñadita, es manera esa de tratar a alguien que vino a verte-respondio con el mismo tono burlón de siempre.

-que te trae por aquí.

-Asi me gusta. Mi hermano me mando para saber como te encontrabas.

-Pues dile a tu hermano que muy bien. Que se olvide de mi.

-Tranquila, mi hermano esta muy dolido... pero conociendolo como lo conozco se que odiaras su comportamiento.

-¿ A que te refieres?- pregunte algo curiosa.

-No que se olvidara de ti.

-Edén, solo dilo sin mas.

-Sabes lo bonito que se oye mi nombre en tus labios- la exprecion de su rostro cambio a una de pura malicia.

-¿te sucede algo?.

-Por que te gusta mi hermano Jess.

<<Porque se comporta tan raro>>

<<¡¡Sacalo de la habitacion, ahora!!>>

-creo que deberias irte- digo señalando la puerta.

-Sabes cuando una persona esta obsecionada contigo, lo peor que puedes hacer es dejar que gane... Si lo dejas terminaras dejando que acabe contigo Reina.

No se porque ahora todo el que habla conmigo siento como si estuviera en peligro. Como si todos supieran algo menos yo y me dijeran una indirecta.

-Adios, cuñadito- hable agarrandolo del brazo y sacandolo de la habitacion.

Me acoste en la cama escuchando canciones sad que me acordaban a el. Termine llorando y acordandome en estos dias lo felices que fuimos. Mi ojos se cerraron tras un recuerdo:

<<-Eres tan idiota.

-Y tu...tan hermosa.

-Te quiero para siempre a mi lado.

-Siempre estare ahí >>.

Desconocido.
...

Todo aquí es tan oscuro aunque de igual forma no me molesta, yo soy una con ella. Recuerdo y mientras me adentro de el,  más real lo siento.

<<Estábamos completamente desnudos en nuestro mundo. El suelo estaba cubierto de sangre, habían cuerpos colgando del techo completamente abiertos, y nosotros estábamos bañándonos en la sangre de aquellas personas. Sus manos recorrían mi cuerpo completo la lujuria que había en sus ojos me ponía a mil. Cada caricia, mordida, succión de sus sensuales labios en mi cuello bajando con desespero hasta llegar a mi pecho donde jugaba con ellos, los amasa, succionaba, pechizcaba mis pezones haciendo que gemidos salieran de mi boca. Llevo una de sus mano a mi intimidad trazando círculos en ese punto tan sensible. Jugo un par de minutos.

-Estas tan mojada, tan deliciosa para mí que creo que no durare mucho mas así- hablo, con esa voz que ponía solo para mí.

-te deseo- hable jadeante.

-¿Lo deseas?- pregunto, llevando dos de sus dedos al interior de mi intimidad.

-Así es mi rey. Lo deseo.

-tus deseos son órdenes para mí. Mi hermosa, amada y sanguinaria reina- pronunció cada palabra con firmeza.

Comenzó a mover sus dedos dentro y fuera, mi cuerpo no pudo aguantar tanto placer y termine corriéndome en sus dedos. Llevo los dedos que tenía en mi interior a su boca, la vista se me hacía tan provocativa. Me tomo del cuello besándome desesperadamente en un beso tan caliente, tentador que mi mente se nublaba cada vez mas. No se en que momento llegamos a eso solo se que yo estaba en cuatro y el entraba violentamente dentro de mi, era tan delicioso, enloquecedor. No podia parar de gemir. Se separo de mi sentandose en el suelo, me posicione encima suya, estaba tan duro, delicioso, lleno de mis fluidos. Me comence a mover de manera rapida, alocada.

-Jodeeer- se le escapo en forma de jadeo.

Mis manos acariciaban su pecho sudado, con sangre. Esta tan bueno que podria correr nada mas de mirarlo, su cabello lo tenia pegado en su rostro cubriendole sus hermosos ojos. Esos ojos que guardaban tanto pecado. En caje mis uñas en su espalda haciendolo tensarse con cada, toque, arrañazo y cada movimiento de mis caderas. Sabia que no le faltaba mucho por la manera en la que apretaba mi trasero. Me acerque a su oido haciendo pequeños circulos con mi lengua en su lobulo.

-I hate you and I love you my bloody, tempting and malicious king- susurre sensualmente en su oido.

Tome el cuchillo que estaba a nuestro lado haciendole un fino corte en su espalda. Me tomo del cuello obligandome a mirar a sus ojos en lo que nos corriamos a la vez. Su corrida se sentia tan caliente, deliciosa y la difrute.

-You are mine my Hate>>

Con eso el recuerdo desaparecio. Pero la humedad entre mis piernas no.

¡¡Hay mamá!!, ame este capítulo que creen ustedes déjenme sus comentarios esperen que lo disfruten estoy muy ocupada por eso me demoro tanto en subir
Adiós y besitos sangrientos 😘😘.