Un par de días habían transcurrido luego del "accidente" sobre la pregunta. Aquella mañana la mesa estaba puesta y con los alimentos servidos, pero sin el dueño del lugar, como comenzaba a ser costumbre. Solo estaba aquel joven de ojos esmeralda que parecía estar tranquilo ante la "desaparición" del que él mismo denominaba como padre.

-Realmente lamentamos si lo incomodamos de más- Luzu se disculpó nuevamente

-No pasa nada hombre. Focus de por sí es un poco reservado, le cuesta abrirse. Solo pasa que... Es un tema bastante delicado en el pueblo, y de cierto modo un poco más para él-

8cho tampoco era fan de socializar, pero algo en esos chicos le agradaba. Sabía que no le habían preguntado a Focus aquello con maldad, quizás solo simple curiosidad, pero habían abierto parte de una gran herida que realmente aún luchaba por cerrarse.

-Solo necesita algo de tiempo para pensar- Volvió a hablar el de ojos verdes

-Es horrible cuando se pierden compañeros- Habló Vegetta -Lo decimos por experiencia propia...-

Willy bajó la mirada, Alex suspiró, Luzu hizo una ligera mueca y Vegetta mordió levemente su labio. 8cho entendió de inmediato que ellos también habrían perdido a alguien que conocían.

-Si... Les queríamos muchísimo. Uno de ellos era como otro papá para mí, y no pude hacer nada cuando ocurrió-

Todos miraron con pena al chico, el cual había bajado la cabeza. Fargan se animó a llevar su mano hasta el hombro del pelinegro y dio un suave apretón en señal de apoyo. 8cho levantó la vista y dio una temblorosa sonrisa al verlo. Como extrañaba a su querido macho.

-Lo siento, me puse muy sentimental- Se aclaró la garganta

-No te preocupes, si algún día quieres hablar, puedes venir con alguno de nosotros- Fargan le sonrió

Y entonces el corazón de 8cho volvió a estrujarse.

-Gracias, lo tendré en cuenta...-

Vegetta, Willy y Luzu habían ido a casa de Auron para ver como podían ayudar en la solución al problema en el que estaban. Rubius y Alex dijeron que irían a explorar un poco por los alrededores, y Mangel y Lolito fueron simplemente a dar una vuelta por el pueblo. Fargan había decidido quedarse en la finca, con la aprobación de 8cho y de sus compañeros.

Salió a recorrer aquel terreno amurallado que el híbrido de cuervo poseía, sintiendo escalofríos cada que parecía reconocer ciertas secciones de esta; cosa que era imposible, jamás en su vida había estado ahí.

Llegó hasta la zona trasera de la finca, encontrando lo que parecía ser la estructura de una casa que, si bien estaba cerrada, parecía no tener nada más. Se adentró al lugar con curiosidad, mirando las paredes y cristales. Llegó a los pies de unas escaleras y subió por estas, escuchando un llanto, que se hacia más fuerte a cada paso que daba.

-¿Focus?- Susurró, viendo al nombrado en aquel suelo de madera

El contrario levantó la cabeza nada más escuchar aquella voz, viendo a quien era la razón de su llanto.

-Fargan...-

-¿Estás bien? Bueno, creo que es obvio que no, ¿pero necesitas algo? ¿Llamo a 8cho?- Habló preocupado

Jamás pensó en encontrarse a su "anfitrión" en aquella situación.

-No, no, no hace falta- Se negó de inmediato

-¿Puedo sentarme?-

Focus se quedó en silencio unos segundos, pero finalmente asintió. Fargan se sentó en el suelo, a su lado, y simplemente se quedó en silencio.

Suponía que si el cuervo se encontraba ahí llorando en soledad era porque no quería que nadie lo viera, claramente. No iba a darle el típico discurso de "sé como te sientes" porque realmente no era así, por mucho que lo intentará; no imaginaba lo que era perder a alguien tan cercano. Tampoco quería hacerle preguntas porque temía que el contrario nuevamente se pusiera mal.

Focus noto que el castaño tenía una lucha mental, así que tras unos cuantos ejercicios de respiración pudo calmarse y hablar.

-Lamento no acompañarlos estos días y no me lo tomen a mal, por favor. Hacía mucho que no hablaba de... Él-

Fargan le sonrió con tranquilidad

-No pasa nada Focus. Nosotros te pedimos una sincera disculpa a ti si preguntamos algo que no era de tu agrado contarnos-

-No es que... Era alguien muy importante para mí; íbamos a casarnos- Explicó

El búho abrió la boca con sorpresa, formando una pequeña "o" mientras se arrepentía completamente de haber indagado nuevamente en el tema.

-Lo lamento mucho. Sé que mis palabras no servirán de nada, pero algo me dice que esa persona te amó tanto como tú le amaste- Volvió a sonreírle

El pecho de Focus obtuvo una cálida sensación, haciéndole "llenarse" nuevamente. Como deseaba que un día simplemente abriera los ojos por la mañana y viera nuevamente al castaño de sonrisa coqueta frente a él, durmiendo tranquilamente, para llenarle el rostro de besitos, recibiendo una dulce risa y un "te amo" como antes sucedía cada mañana.

Sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas y miró a otro lado, limpiando su rostro rápidamente con su manga.

-Aprecio tus palabras en realidad-

-Por ahí dicen que el tiempo lo cura todo, y es fácil decirlo cuando no eres afectado por ese problema, pero verás que poco a poco todo irá para mejor. Tienes a tu "hijo" aún y él siempre va a estar para ti. Es un buen chico-

Focus rió bajito, negando lentamente.

-8cho es en mayor parte igual a él. Son igual de hiperactivos; eran como dos tornados arrasando por el pueblo- Contó el pelinegro

-No te creo, si 8cho parece muy tranquilo- Fargan rió también

-No le creas, es una fachada- Ambos rieron esta vez -Aprendió de él a explotar de todo, desde casas hasta estructuras gigantes. Le enseñó a colarse en propiedades privadas y salir libre de culpas. Le enseñó a ser un vago terrible cuando más apoyo se necesitaba- Sonrió -Pero también le enseñó que lo primero siempre era nuestra familia. 8cho quería mucho a su "macho" y aunque diga que ya no duele, yo sé que también lo extraña mucho día a día-

Todo volvió al silencio. Fargan estaba impresionado con la historia de aquella familia que, según lo contado, parecía ser muy unida. Una idea llegó a su mente, pero no sabía que tan bien podía salir.

-Focus, ¿te molesta si le enseño unas cuantas cosas a 8cho?- Le miró, temeroso a una respuesta negativa

Sin embargo, recibió una mirada curiosa.

-No, no, no me molesta. No veo porque no-

-Genial. Es más, ven con nosotros. Será divertido-

El cuervo lo pensó durante un rato. Ya no quería seguir deprimiendose por su amado. Por supuesto que dolía, y jamás iba a dejar de hacerlo, pero su hijo no se equivocó cuando dijo que Macho estaría muy triste de ver lo mal que se encontraba actualmente. Además, sentía que había descuidado mucho al menor por culpa de sus fantasmas y lo que menos quería era que 8cho volviera a sentirse solo.

Terminó asintiendo con una pequeña sonrisa.

-Claro, será divertido- Concordó con él

Aquí es donde comienzan los problemas porque ya no tengo más capítulos pre-escritos JAJAJAJAJAJA.

Prometo ponerme a escribir para no dejarlos sin capítulo durante mucho tiempo.

Muchas gracias por el apoyo.
L@s amo. 💜