Hasta Que Te Conocí
Toda esta historia empieza en mi niñez, cuando solo era un joven osezno polar, la verdad nunca destaque en nada, era como los demás niños, tenia un montón de amigos en esa etapa de mi vida, y era relativamente feliz, hasta que llego la secundaria, sentía que seria agobiante al principio, y vaya que lo fue, al parecer hay ya no te toleran los errores, así que me empeñe para pasar todas las materias, lo cual no fue tan difícil, pero tampoco los profesores lo hacían fácil, pero aun así logre graduarme, después vino la preparatoria y la universidad, y con ello la etapa de auto descubrimiento y esas cosas, bueno la verdad es que, nunca me interese en ese tema, sabia todo sobre la reproducción y la sexualidad pero nunca me sentí atraído hacia nadie.
Bueno pero lo que le quiero contar no se encuentra en ese tiempo, si no muchos años después.
Estaba soltero en ese entonces y no me importaba, la verdad la mayoría de las cosas nunca me importaron, no hacia ejercicio, nunca me cuide como se debía, pensaba que "algún día eso me pasaría factura" pero aun así no le tome importancia.
Era un día cualquiera estaba en mi trabajo, era un contador en una empresa destacada de aquel entonces, fui al baño a orinar, pero cundo comienzo me empieza a doler en el lateral del abdomen y me empezaron a dar nauseas, así que salí del baño y me tome unas pastillas para el vomito que tenia en mi escritorio pero no funcionaron, y el dolor empezó a agudizarse y no pude soportarlo, así que le pedí a uno de mis compañeros que si podía llevarme a casa en su auto y el asedio y me llevo a casa, me baje a duras penas y entre a mi hogar.
Cuando me despierto sigo con el dolor en mi mi abdomen, así que hago una llamada a mi trabajo y hablo con mi jefe, diciendo que no iba a poder trabajar ese día, por que me sentía indispuesto, el no se lo tomo muy bien pero acepto, me levanto para comer algo.
Después de un rato termino de comer y voy al baño, pero en eso el dolor vuelve y creo que se intensifico, así que sin pensármelo dos veces voy a una clínica local, una que cobrara barato y me recetara algo para este puto dolor
Al llegar tuve que esperar mi turno, esos 17 minutos parecieron infinitos con el dolor que tenia, batallaba para no maldecir a los 4 vientos, en eso el doctor que era un Gran Danés me indico que entrara en su consultorio, así que le hago caso y me empieza a hacer la típica revisión, primero preguntando que que tenia, a lo que yo respondí
-me duele mucho en el costado de mi abdomen- dije
-¿algún problema al orinar?- respondió el doctor
-ahora que lo dice...- empece a recordar las dos veces que me dolió y efectivamente fue cuando fui al baño a orinar -si, me duele al orinar-
-podría ser serio, me podría entregar una muestra de orina para antes del medio día-
A lo que le respondí con un -si-
-bueno y antes de que se vaya, tome- escribió en un papel unas cuantos medicamentos -los pide en recepción, eso debería aliviar el dolor por un rato-
Le di las gracias y compre el medicamento y aparte pague la consulta, y fui a casa para preparar la muestra, así que busque una botella pequeña en la cual poder entregarla, después de un tiempo ya tenia lista la muestra, y volví con el doctor, el cual me dejo pasar a su despacho, acto seguido le entregue las muestra y el se les quedo mirando un par de segundos para luego decir
-mmm... bueno mañana puede regresar para ver sus resultados- dijo
-okey, gracias doctor- respondí y salí del consultorio, pagando el examen de orina y me fui a casa a descansar, al llegar me hice algo de comer y vi la televisión, procurando tomar las pastillas recetadas cuando tocaban, y entre capitulo y capitulo me quede dormido
Desperté con el cuello un poco adolorido pero la verdad no me importo mucho, casi siempre me quedo dormido en el sofá, así que ya estoy acostumbrado, me levanto del sofá para prepararme mi desayuno, lo cual no tardo mucho, luego me alisto para trabajar y salgo de mi casa.
Ya en en trabajo todo paso tranquilamente, me tomaba mis pastillas cundo tocaban, hasta que una cervatillo, que es una compañera, me pregunto
-¿que te paso? ¿por que no viniste ayer?-
A lo que le respondí -me empece a sentir mal y le pedí al jefe el día libre-
-¿y que tienes?-
-no se, es lo que voy a averiguar cuando vaya al medico-
En eso entra uno de los supervisores y la cervatillo se va a su puesto. mientras que yo sigo con lo mio, esperando a salir del trabajo
Después de unas cuantas horas salgo de mi trabajo y me despido de mis colegas, para luego tomar el autobús, e irme a casa a cambiarme de ropa y tomar una pequeña ducha, al llegar a mi casa saco mis llaves y entro, dejando mis cosas en la entrada encima de una mesita y cerrando la puerta detrás mía, después me empece a quitar la ropa y la pateo hacia una esquina para entrar a la ducha de una, es una de las ventajas que le veo tener una casa propia, empiezo a ducharme, limpiándome el sudor que genere tanto en el trabajo, como en el autobús, para después de un rato estar fresco como una lechuga, lo que me recuerda que tenia que preparar algo de comer, así que me vestí con algo cómodo y puse manos a la obre y me hago algo de comer
Después de un rato veo el reloj de mi teléfono y me dirijo a la clínica, espero a que termine de atender a su cliente, espere como unos 3 minutos, creo que llegue justo a tiempo, el doctor me ve y me deja pasar a su despacho, ya dentro de este el me menciona
-es lo que me temía- dice mientras toma mis examen y lo mira
-¿que tengo doctor?- le pregunte
A lo que el respondió -tiene un cálculo renal-
Me quede en shock por un rato, sabia que por no cuidarme como debería algún día me pasaría factura, y ese día al parecer es hoy
-pero aun no es tan grave, ¿verdad doctor?- dije
-yo no sabría decirle con certeza que tan grave es, eso se lo pueden decir en el hospital que esta por el centro, ahí conozco a alguien que estudio esa área- en eso toma una hoja de libreta y empieza a escribir en el, y luego me lo entrega junto con mi examen -entregue esto junto con su examen en la recepción del hospital y pregunte por el doctor Arturo-
Tomo el papel y le digo -gracias-
Salí de la clínica, me asuste de que mi estado de salud se fuera a peores, así que voy a casa, tomo mi billetera, mi celular, mis llaves y alguna papelería típica que te piden en los hospitales, todo por si acaso, me pongo una ropa para salir y voy a la parada de autobús, en la cual espero durante unos 10 minutos aproximadamente, cuando llego me subí, pago al conductor el peaje y tome asiento y me dispuse a mirar por la ventana, dos horas pasaron para que llegara al centro, ya en el, me dirijo a el hospital, donde entro y veo a gente enferma y a un tipo muy mal herido en una camilla siendo llevado a dentro del hospital con rapidez, en eso me dirijo enfrente de la recepción y le llamo la atención a una señora cocodrilo que estaba leyendo un periódico, la cual me pregunto
-que necesitas- dijo con un poco de frialdad en su voz
-eh busco, a el doctor Arturo- y le entrego la nota del otro doctor junto con la hoja con mi prueba, ella me voltea a ver un poco raro, pero después se levanta de su silla y se va, no sin antes decir
-espera aquí, ahora vuelvo-
Yo solo asentí y espere en una de las sillas metálicas, después de un rato regresa con un caballo con bata blanca, que supongo que sera el doctor Arturo, el cual extiende su mano para saludarme y yo correspondo cordialmente a su saludo y luego el me dice
-hola soy el doctor Arturo y seré su doctor en la prueba de imagen con ecografía-
-hola doctor Arturo, yo soy Ramiro- dije
-bueno ¿alguna duda antes de empezar?- pregunto, a lo que le respondí
-si, ¿en que consiste la ecografía?-
-vamos a usar un ultra sonido para ver si lo que tiene es muy grave o se puede controlar-
-okey doctor-
-una pregunta mas, ¿cuenta con seguro?-
-si-
-okey, sígueme entonces-
después de eso el me guió a una sala, ya dentro de ella había una camilla, una pantalla, un especie de ordenador y barios tubos, luego el doctor me pide que me recueste, lo cual hago sin dudar, después el doctor levanta mi camisa y aparta un poco mi pelaje y pone un liquido en uno de mis costados y empieza a mover un tubo por mi abdomen, y en la pantalla se muestran mis órganos, en eso divisa mis riñones y miro unas bolas grises un tanto grandes en mi riñones, y por lo que llegue a ver eran muchas, la cara del doctor cambio a una un poco mas preocupada, en eso el me dice
-wow, es mas serio de lo que pensé-
-¿que fue doctor, es tan grave?-
-bueno señor Ramiro, en pocas palabras, sus riñones están llenas de piedras por la absorción de minerales, como la sal o el gas y esas cosas, ¿a tomado algún tipo de agua mineral últimamente?-
-eeeh, si, tomo agua mineral cada vez que como en el trabajo-
-mmm, con razón, necesito que firme aquí y que me entregue la papelería que pide para comenzar con una cirugía para extraerle esas piedras de su vesícula lo antes posible- yo solo asentí, firme y entregue todo lo que me pedía
Después de un rato algo largo de preparación me anestesiaron y comenzaron con mi cirugía, al despertar veo todo borroso por unos momentos hasta que se aclara mi visión, y estoy en una habitación un tanto pequeña de hospital, estoy conectado con un tubo a un suero, y tenia un tubo saliendo de uno de mis costado y estaba sacando un liquido café amarillento y lo llevaba a una especie de contenedor de plástico, no se cuanto a pasado de la cirugía, pero en eso me volteo y veo a una pug enfermera de... Talla grande, que al parecer aun no se da cuenta de que desperté y al voltear se asusta un poco, pero luego se presenta
-oh, hola soy Kathleen- y pone uno de sus dedos en su pecho señalando una pequeña placa con su nombre -seré su enfermera por todo lo que quede de estancia en el hospital, uf, me dio un susto señor, ¿cuanto tiempo lleva despierto?-
-acabo de despertar, y lo siento, no fue mi intención asustarla-
-no se preocupe-
-oh, que modales los míos, mi nombre es Ramiro-
-jeje, un gusto señor Ramiro-
En eso entra el doctor Arturo y la enfermera se despide de mi moviendo su mano de un lado a otro y saliendo de la habitación
-como se encuentra-
-un poco adolorido-
-bueno, es normal que se sienta así, así que no se preocupe mucho
-doctor tengo algunas preguntas ¿Si ya me extrajeron las piedras, se me puede formar otras? ¿Qué tanta agua y líquidos debo tomar todos los días? ¿Cómo sé si estoy bebiendo lo suficiente? ¿No hay problema si tomo café, té o refrescos? ¿Qué alimentos puedo comer? ¿Qué alimentos debo evitar?-
-no se preocupe por eso por ahora, cuando se mejore le daremos una lista de lo que no podrá comer-
- eh, esta bien doctor-
En eso el doctor sale de la habitación, dejándome solo, así que me aburro de inmediato pero vi que había televisivo así que busco el control y lo encuentro en una mesita que estaba al lado de mi cama, así que lo tomo y enciendo la televisión, pero no tienen televisión por cable, solo los típicos programas de televisión abierta, así que la apago volteo y veo mis cosas a un costado de mi cama así que tomo mi teléfono, llamo a mi trabajo diciendo que tuve problemas de salud y no podre trabajar en unos cuantos días, después de hacer el comunicado empiezo a perder el tiempo en internet, hasta que la señorita Kathleen entra con un plato con comida, y me lo entrega
-aquí tiene señor, provecho-
-gracias-
así durante varios días, tres veces al día, en eso días, empece a sentirme un poco, no supiera como decirlo, pero era una bonita sensación, así que me arme de valor y espere a que me trajera la comida de ese día
-aquí tiene señor Ramiro, espero que lo disfrute-
-¡espere! eeeh, podría quedarse un poco, estoy aburrido y no tengo nada que hacer-
-oh, esta bien ¿y que quiere que haga?-
-mmm, no se, me podría hablar de su día-
ella sonríe y responde -¿mi día eeeh? pero mi día fue muy aburrido-
-creo que cualquier cosa ahora es mejor que nada, no cree-
ella se ríe un poco y dice -bueno, si insiste, mi día empezó...-
ella empezó a contarme todo lo que había echo hasta llegar a este momento en el que le pregunte, pero al terminar ella fue llamada para que trabajara, así que se despidió y se va, pero cada vez que ella venia le preguntaba cosas sobre ella, su color favorito, su comida, sus gustos tanto de ropa, como musicales, y me parecía un poco mas... atractiva cada vez que ella me respondía, sentía como si ella fuera la indicada para dejar mi vida de soltero
pero tenia miedo de que ella me rechazara, así que lo pospuse, pasaron los días y me había mejorado y ese seria mi ultimo día en el hospital, así que cuando ella entra con la comida me arme de valor y decidir decirle lo que ciento
-señorita... eh... enfermera, Kathleen, yo, yo, me gustaría, me gustaría decirle...- decía con nervios
en eso ella me interrumpe y me dice -eeeh esto es vergonzoso, pero me gustaría pedirle que si le gustaría ir a cenar con migo este domingo-
me quede en shock, ella me estaba pidiendo una cita primero que yo a ella, eso hirió un poco mi hombría, pero no le diría que no llegado a este punto
-si, me gustaría ir a cenar con usted- respondí
ella sonríe y saca una pequeña libreta en la que anota algo en el papel para luego arrancarlo y entregármelo -este es mi numero, llámame y paso por ti-
-eeh gracias, ¿a que horas dijo?- pregunte
a lo que respondió -a las 7-
-a las 7 sera-
Ella sale de mi habitación y yo con el corazón a mil, sentía que se me iba a salir de la emoción, miro el papel y sale un numero telefónico, en eso llega el doctor y me da de alta, así que tomo mis cosas, me cambio dentro del pequeño baño que había en la habitación y salgo de hospital, no sin antes que me dieran la lista de lo que debo hacer y debo evitar, por un momento pensé que todo esto seria un sueño, pero al caminar se me doblo el tobillo y hay me di cuenta que no era un sueño
ya fuera del hospital camino unas cuantas cuadras hasta llegar a una estación de autobuses era algo tarde, así que el autobús tardo un poco en llegar, pero cuando llego me subo, y pago la taza requerida y tomo asiento, y me quedo mirando por la ventana todo el camino, pensando en todo lo que me esperaba esa semana, especial mente ese domingo
varios días pasaron desde que salí del hospital, aun tengo el tubo conectado a mi riñón y sigue sacando ese liquido amarillento, y si se lo preguntaban, si, tengo que cargarlo a cada puto lado ese tubo y ese contenedor y vaciarlo cuando se llena, y mis compañeros no paran de comportarse como unos niños curioseando, "que, que es lo que tengo en el abdomen" y claro, se pusieron pesados y así que me comporte mas distante, por lo menos hasta que me pueda quitar esta cosa, llega el fin de semana, me preparo para la cita con la señorita Kathleen, me alisto y compro unas rosas, des pues de eso subo al autobús y voy al centro, no se donde vive, pero creo que si la espero en la plaza publica del centro me encontrara,al llegar ya eran las 6:48 pero la llame para confirmar la cita y decirle donde me puede recoger
en eso toma mi llamada y le menciono que si ya estaba lista para la cita, a lo que ella responde por el teléfono
-si, solo me faltan unos retoques-
-bueno eeeh, voy a estar en la plaza del centro esperándote-
-si, esta bien, te espero-
-okey, bay- en eso ella cuelga
espere durante 30 minuto hasta que vi un auto que se estaciono frente a mi y me pito, luego baja la ventanilla del copiloto mostrando a una hermosa pug con un vestido de gala negro, con detalles florales, me acerco al vehículo y me subo en el
-h, hola señorita Kathleen...-
ella me interrumpe y me dice -puede decirme Katy-
-oh, okey Katy, y ¿a donde vamos a ir a cenar?- pregunte
a lo que ella responde -iremos a las pampas-
-vaya, aaah, ese lugar es un... poco caro- dije
- no te preocupes, yo pago-
-no, no, no, déjeme que mínimo yo pague lo mio-
-pues a mi no me importaría pagarle su cena-
-y a mi no me importa pagar mi cena-
ella se ríe y me da la razón -esta bien, usted gana, puede pagar su cena-
-okey-
¿que acabo de hacer? acabo de rechazar una cena gratis, ah, aveces mi hombría no me deja pensar con claridad
ya en el lugar todo fue muy bien, ella pidió uno de los famosos cortes de carne, yo solo podía comer carne baja en grasa, osease pescado y eso y verduras, así que pedí una ensalada de pescado, después de un tiempo trajeron lo que pedimos, y comenzamos a comer, platicamos un poco sobre nuestras vida, y indagamos uno en el otro, descubriendo al otro, como si de un juego de ajedrez se tratase, después de un rato de charlas y risas ya habíamos terminado, en eso, pagamos cada quien lo suyo, y salimos del restaurante y entramos a su auto, y me pidió una cita para la siguiente semana
-oiga, ¿que le parece ir al cine para el sábado?- me dice
-¿esta bien, en el mismo lugar y a la misma hora?- digo
-esta bien para mi- responde
ya en medio camino ella me pregunta
-ey, ¿y donde vives? te puedo ir a dejar-
a lo que yo respondo -eh, es que mi casa esta a dos horas de aquí-
-mmm, okey, tu dime por donde y yo te voy a dejar-
-no señorita, yo puedo irme en autobús-
-no, para nada, lo voy a llevar a su casa, así que dígame donde vive-
con mi hombría dañada, otra vez, le voy indicando por donde debe ir--
ella se ríe un poco y conduce casi dos horas de ida para mi casa, cuando me bajo del auto, le doy las gracias por la cita y me despido, ella también se despide y toma rumbo a su casa
en eso entro a mi casa y me voy a dormir, a esperar ese sábado
pasaron unos días y llego el sábado, yo ya estaba en el sitio acordado esperando a la señorita Katy para la cita, la espere en el mismo parque, esta vez con una vestimenta un poco mas casual, yo tenia puesta una camisa negra con un diseño de una imagen histórica que me encantaba, y un shorts color marrón, ella llega después de varios minutos, ella traía una blusa lila con tonalidades blancas acompañando la blusa, y un pantalón negro, me acerque a su vehículos, y ella desde dentro de este me abre la puerta del copiloto y entro, ya adentro me pongo el cinturón de seguridad y ella empieza a conducir en dirección al cine, después de un tiempo llegamos, ella se estaciono y nos bajamos de su auto, después caminamos hasta adentro del cine, al llegar yo me forme, y pague los boletos, en cuanto a ella, ella se formo para los bocadillos, después de un rato ya era hora de la película así que entramos a la sala indicada, entregando nuestros volteos y nos dejaron pasar, nos sentamos en nuestros respectivos lugares, era un poco incomodo tener que caminar cargando con el contenedor, y espero con ansias el día en el que lo pueda quitar, la película comenzó y yo comía palomitas light, mientras que Katy esta comiendo unas palomitas con mantequilla y chile juntos con unos nachos, después de un rato ella se quedo sin palomitas, así que le ofrecí de las mías, y en eso, nuestras manos se tocan por un momento, asiendo que yo sacara la mano un poco avergonzado y me decidiera en robarle un beso, pero ella se me adelanto y yo cuando quise robarle yo el beso, ella me beso en los labios primero, era una sensación dulce, tanto como comer un caramelo, en eso nos separamos del beso y nos quedamos miramos unos segundo el uno al otro, para luego sonreírnos mutuamente y tomarnos de las manos mientras mirábamos la película
4 años pasan desde esa hermosa cita, y yo ya no tenia el tubo saliendo por mi abdomen pero tenia una cicatriz enorme, al llegar a los 4 años de relación y una muy bonita por cierto, yo le pedí matrimonio, esta vez lo hice primero que ella, así que en tu cara Katy, ella con lagrimas en los ojos acepta y me abrasa con todo el amor que ella siente por mi, y yo correspondo como se debe, respondiendo a el abraso con el mismo amor y cariño que ella siento por mi
pasan los meses de ese cuarto año, y me ella me da la noticia de que estaba embarazada, yo me alegre un montón, tendríamos a nuestro primer hijo, pasaron los nueve meses y nació un lindo osezno polar macho como su padre, ella lo sostuvo en sus brazos y lo miro por un rato, y comenzó a llorar de la emoción, yo la abrase junto con mi hijo, por fin tendría una familia
pasaron los años, específicamente 7, nuestro hijo ya tenia 6 años y tenia una sorpresa para mi esposa en el cumpleaños de nuestro hijo, los llevaría a el y a ella a un lugar que siempre quiso visitar mi esposa, Hawaii, ya tenia los boletos preparados para el cumpleaños del pequeño Ramiro, pero mi esposa le empezó a sentirse mal, así que le di unas cuantas pastillas para el dolor, y al parecer funcionaron, pero pasaron los días y empezó a empeorar, así que la lleve al hospital, y hay nos dan una terrible noticia...
-señora, lamento decirle esto, pero usted sufre un cáncer terminal- decía la doctora lobo con pena en su voz
nos quedamos en estado de shock, mi esposa empezó a llorar, yo también, como era posible que esto estuviera pasando le eso a una persona tan buena como a ella
pasaron los meses y ella iba a tratamientos de quimioterapia cada semana, pero un día, cuando íbamos con nuestro pequeño niño al parque, hablando de que, que seria el regalo sorpresa, pero en eso ella simplemente se desploma, pero antes de que tocara el piso, la alcanzo a agarrar y saco mi celular y llamo a una ambulancia, llegan minutos después, nos llevaron a mi y a mi hijo junto con ella en la ambulancia, ya en la ambulancia ella ve a nuestro pequeño, este sin entender mucho me pregunta que si se pondrá bien, yo con todo el dolor del mundo, le tuve que mentir
-si, hijo, tu mamá es fuerte, ella se pondrá mejor- aun que supiera que era mentira, tenia la esperanza de que lo que dije se hiciera realidad
en eso mi esposa toma una de las mejillas de el pequeño Ramiro con su mano y le dice -has muchos amigos hijo, nunca te quedes solo-
nuestro hijo la abrasa agradeciendo el consejo de su madre, después de un rato ella pierde la conciencia otra vez, así que el conductor acelera y llegamos en tiempo récord a el hospital, ya en el, nos sentamos en la sala de espera, y pasaron horas que se hicieron infinitas, sabia que todo terminaría en algo malo, pero tenia la esperanza de que todo saldría bien, de que ella saldría de eso con vida, cada minuto que pasaba me hacia sentir más y más ansioso, no podía estar sin hacer nada, mientras mi esposa esta a punto de morir, pero en sale un doctor y pregunta
-¿quien es el señor Ramiro?- pregunto un doctor buho
-soy yo doctor... dígame que mi esposa esta bien- respondí y pregunte
-lamento decirle que... ella... no lo logro-
-no... no, no, dígame que no es cierto- decía quebrandome por dentro
-lo siento mucho señor- dijo el buho para luego irse con otros pacientes
la noticia me llego fuerte, lo único que pude hacer es aguantar mi llanto, no quiero que mi hijo viera a su padre llorar, pero esas palabras me cortaron mas que mil cuchillos en mi corazón, en eso mi hijo me estira de la camisa y me pregunta
-¿y donde esta mamá?-
con seas palabras no pude mas y comencé a sollozar mientras me arrodillaba quedando a la altura de mi hijo y deje salir toda mi tristeza en el pequeño hombro de mi hijo, el sin entender nada, me abrasa y me dice
-todo estará bien papá, mamá hará la cena y te sentirás mejor-
y yo no pude evitar llorar en con lo que dijo, mi hijo solo me da palmadas en la espalda para tranquilizarme
paso una semana desde la muerte de mi esposa, hubo un funeral en su honor, ya en el funeral tuve que decirle a mi hijo que su madre ya no estaba en este mundo, así que el también lloro su perdida, y todo esto antes de su cumpleaños, en eso me doy cuenta que aun tengo los boletos, así que decido cumplir el deseo de mi esposa de ir a Hawaii, así que pido la cremación a mi esposa y así fue, después me entregan sus cenizas, unos días después, tomamos el vuelo a Hawaii revisaron nuestro equipaje y nuestras pertenencias, incluida las cenizas de mi esposa, pero con respeto, y subimos al avión y despegamos, ya llegado al sitio vacacional, visitamos los mejores lugares de Hawaii, estuvimos un rato en la playa, y caminamos por la costa, en la noche, mi hijo se quedo dormido en la habitación del hotel, así que yo decido pacer con lo que queda de mi esposa, le platico como la extrañamos, y que el deseo de cumpleaños que pidió nuestro hijo es que, ella regresaras, y en eso llego a un muelle, en el cual pensé en liberar a mi esposa para que fuera libre, y que disfrutara Hawaii, pero cuando abrí la tapa de la urna... simplemente no pude, salen unas cuantas lagrimas de mis ojos y vuelvo a tapar la urna, y regreso a la habitación del hotel, me acuesto en la cama y comienzo a dormir, en todo lo que quedo del viaje no pude esparcir sus cenizas, cada ves que lo intentaba me llegaban esos bellos recuerdos con ella, y no quería que lo único que me quedaba de ella se fuera, se que fue egoísta de mi parte, pero yo aun no estoy listo para dejarla ir, todavía no
los días pasaron, y regresamos a casa, mi hijo regresaría a la escuela, y yo a mi trabajo, el se levantaría, se prepararía su almuerzo, se bañaría, se alistaría para la escuela y se iría, dejándome descansar hasta que sea hora de ir con el, el iría solo a la escuela, pero yo lo traería a casa y luego iría a trabajar, estaba tan deprimido por la muerte de Katy que pensé varias veces en el suicidio, y una vez llegue a casi jalar el gatillo, pero luego pensé en el pequeño Ramiro, y baje el arma y la volví a dejar en su sitio
el día de que regresáramos a nuestra vida cotidiana volvió, suena mi despertador, me levanto, me cambio, desayuno, me arreglo y voy a pie a la escuela para ir a recoger a mi hijo, espere a que sonara el timbre para poder llevármelo, los minutos pasan y veo a las madres platicando entre si y me recuerda los momentos junto a Katy, lo que me hace lagrimear un poco, pero en eso mi hijo llega y me seco las lagrimas, y lo tomo de la mano y nos dirijamos a casa, en el camino el pequeño Ramiro me pide un helado, pero le dije que se me haría tarde para ir a trabajar si se lo compraba, para no comprárselo, pero el me hizo una carita tan tierna que no podía decirle que no
-aah, esta bien, te compro un helado-
-yeeey-
en eso vemos una heladería y caminamos hasta ella, y vemos a un mapache algo regordete que atendía, el cual nos ve y pregunta
-¿que va a llevar señor?-
en eso digo -¿que vas a querer, Ramirin?-
-mmm...- ve el letrero con los sabores de helado y decide cual quiere -quiero el de nuez-
-jeje, saliste igual a tu padre, okey, deme 2 helados de nuez- dije
-enseguida- en eso el prepara los helado y le entrega el de mi hijo y luego me entrega el mio
me voy comiendo mi helado un poco nostálgico, por que recuerdo que a Katy también le gustaban los helados, en eso el mapache me pregunta
-oiga lo veo algo agüitado, ¿le paso algo?-
yo solo me quede mirando mi helado, preguntándome si valía la pena contarle, el miro mi acción y dijo
-no se preocupe, no me tiene que contar si no quiere-
pero yo respondo con un suspiro, para luego decirle -es que... mi esposa...-
-que hizo ella, ¿lo engaño?- dice
-no, ella nunca haría eso- respondí
entonces el pregunta -¿entonces que fue?-
-ella... ella...- no pude terminar mi oración por que se me hizo un nudo en la garganta y mis lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos, cayendo en mi helado
-oooh, entonces ella... ya no esta con vida- dice un tanto avergonzado
yo solo asentí ante la declaración del heladero
-lo siento mucho señor, no debí haber preguntado- dice avergonzado
-no, no, esta bien, creo que es mejor decirlo, y intentar sacarme esta tristeza que siento- dije
en eso el tipo me habla y me dice
-si necesita desahogarse, estoy disponible entre semana en este puesto, por si le interesa venir y tomarnos unas cervezas-
-je, suena bien- en eso mi hijo me estira de la camisa y veo que ya se acabo su helado, y luego veo el mio que se esta medio derritiendo y para no desperdiciarlo se lo doy a mi hijo
-oh, cierto, ¿cuanto va a ser?- pregunte
-sabe que, yo invito, ¿que le parece?- dice el heladero
-no, no podría hacerle eso, ¿cuanto va a hacer?- volví a preguntar
-y yo no puedo dejar que pague pasando por un momento tan triste- me responde
-pero insisto...- en eso el me interrumpe
-oiga, esta bien, deberás- y pone su mano en mi hombro, yo le sonrió por el gesto y le doy las gracias
-me lo agradecerás cuando vayamos por esas cervezas-
-je, si... mi nombre es Ramiro por cierto- dije
-oh que descortés por mi parte, mi nombre es Raul- dice
-okey, Raul, nos vemos-
-adiós Don Ramiro-
en eso tomo la mano de mi hijo y lo llevo a casa para que haga su tarea y descanse, después de llegar a casa le preparo algo rápido para que coma, y me preparo para el trabajo, ya alistado me despido de mi hijo y voy a trabajar
pasan los días y siempre pasábamos por la heladería de Raul, para saludarlo, mientras que mi hijo comía su helado, a excepción de los viernes, que era el día en el que me juntaba con Raul para tomaron unas cervezas y hablar de MIS problemas, aveces el se emborrachaba tanto que andaba de puto diciendo "que bonitos ojos tienes" o también "acabo de perder tres besos bajo tu camisa, me ayudas a buscarlos" e invadía mi espacio personal y ese tipo de cosas, clara mente estaba borracho, así que yo también le seguía el juego, levantándome la camisa o coqueteando de juego con el, así durante los meses venideros, exceptuando la estación del invierno, por obvias razones, pero regresando a la primavera volvimos a ver a Raul, y no se por que, pero al reencontrarnos con Raul empece a sentía una sensación dulce, la misma sensación que la que sentía por Katy, y en un día cuando fuimos a la heladería de Raul y le compre el helado a mi hijo
-ey, y ¿como se la pasaron esta navidad?-
y en lo que me hablaba, me arme de valor y yo... lo bese, el beso fue corto, pero volví a sentir felicidad, en eso Raul un poco sorprendido, toma mi rostro y me regresa el beso con delicadeza y dulzura, estuvimos así un rato, hasta que mi hijo tira de mi camisa y con lagrimas en sus ojos me dice
-¡papá, se me cayo mi helad!...- en eso nos mira que nos estábamos besando y pregunta -¿que le estas haciendo al señor Raul?-
no supe que decirle y lo único que salio de mi boca fue un -eeehm...-
-lo estoy besando- dijo Raul
-guacala- dijo mi hijo ante la respuesta de Raul
en eso nos reímos Raul y yo y le compro otro helado a mi hijo
un año pasa desde el beso y en ese año le propuse matrimonio a Raul, a lo que el me dijo que si, y nos casamos, mi hijo fue el paje de la boda entregándonos los anillos, fue hermoso, el segundo día mas feliz de mi vida
pasaron 3 años, mi hijo ya iba a cumplir 11 años, ya estaba grande el cabrón, y esta ves cumpliré mi promesa, compre unos boletos de ida y vuelta a Hawaii con hotel incluido, iríamos para el día del cumpleaños de mi pequeño pero no tan pequeño Ramiro, el día llega, y alistamos todo para ir a la playa, tomo la urna y nos vamos a Hawaii, nos revisaron las maletas y todo lo que llevamos y nos dejaron pasar al avión, ya en el me quede mirando hacia la ventana, estaba dudoso de si hacerlo, no quería dejar ir a Katy, pero mi esposo toma mi hombro y me dice
-tu puedes hacerlo, se que puedes hacer el sueño de tu esposa realidad-
con lagrimas en los ojos le doy un beso corto y le doy un abraso, después de unas horas llegamos a Hawaii, llegamos cansados, así que nos fuimos al hotel y nos fuimos a dormir los tres, ya por la mañana desayunamos y salimos para dar un paseo, pero tomo las cenizas de Katy y me las llevo con migo, y le voy platicando lo que sucedió en estos últimos años
-bueno, cuando te fuiste, me deprimí, pensé que no podía seguir viviendo si ti, pero luego conocí a Raul, y el me salvo de un destino horrible, el te caería bien-
-hola, perdón por quitarte a tu esposo, pero el juramento dice que hasta la muerte los separe y puees...-
en eso mi hijo le da un golpe en el hombro a Raul -ey, no digas esas cosas-
yo me rió un poco por el pequeño escándalo que estaban haciendo los dos y luego sigo contando -en efecto, me case con el, y la verdad estoy muy feliz a su lado, aun te extraño Katy, pero creo que es momento de que puedas descansar en paz-
en eso llegamos al muelle, al mismo muelle de hace unos años atrás, el sol estaba a su punto mas alto, el día era hermoso, era el momento, en eso abro la urna, pero empiezo a dudar, pero en eso Raul y mi hijo me toman del hombro para darme todo su apoyo, así que me decidí y lance las cenizas... las cuales se dispersaron en el cielo, suspire y unas cuantas lagrimas salieron de mis ojos y digo
-adiós Katy, nunca te olvidare-
en eso mi esposo y mi hijo me dan un abraso y yo les devuelvo el gesto, dejando la urna en el respaldo del muelle, para después irnos a disfrutar nuestras vacaciones
FIN
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro