Últimas palabras.

Tengo tantos escritos en mi baúl de recuerdos,tantos sentimientos revueltos,tantas emociones plasmadas en hojas de papel.Tantas notas guardadas con un solo fin;expresar lo que en mi corazón hay.

Entre tanto,en el fondo del baúl,encontré una carta en específico que nunca entregué,que nunca di a conocer y que siempre guarde.

No fue por egoísmo,simplemente en mi mente fue por “cuidar” mi corazón,por no salir lastimado/a, por no querer arriesgarme a perderlo/a sin siquiera tener aunque sea una parte de tu atención,una parte de tu amor.

Y es que en ocasiones,inventé miles de historias en mi mente con un sin fin de probabilidades,en dónde el universo me favorecía y otras veces no lo hacía.

Pero quién soy yo para juzgar la situación,si la vida no nos unió.

Tomar de nuevo la carta que nunca te di me recordó que:yo solo hago cartas a personas que aprecio.Y si,ahí estabas tú.La verdad,que lindo es eso,nunca lo supiste pero no está de más decirte que en ese tiempo eras más que un simple recuerdo,eras real y con eso bastaba entre los dos.

Cierta parte de mi alma permanece en quietud,“–Que alivio no haberte dado esa carta”.Porque,en ese entonces tenía muchas cosas que sanar,había mucho dolor, inseguridades y un gran vacío en mi interior.

Y si yo daba un paso más,tu serías como la pieza “faltante” que llenaría ese vacío.Cosa que,yo no quería para ti y para mí.

Quería buscar mi propia plenitud lejos de ti,quería encontrar el gozo,y ser feliz.No por alguien,sino por mi.

Me di cuenta que si...te ame.
Pero en ese momento,lo más importante era comenzar a amarme y mi primero y no...ahora que paso mucho tiempo,supe que,tome la mejor decisión para mi vida.

No me aferre a ti como algo “perdido”.Al contrario,me aferre a que tu también fueras feliz.