"Entregar las pruebas
¿Fué un error?"

★Últimos capítulos★

Trunks.
Llegué a la habitación dónde estaba mi despacho en casa y me puse a revisar los temas pero no me podía concentrar demasiado, me pesaba la promesa que le hice y no cumplirla muchísimo más, no puedo olvidar la mirada tan ilusionada con la que me vió yo no puedo negarle esa oportunidad de ser madre ¿quien soy para decidir por ella?

Suspiré y aclaré mi mente yo no odio a los bebés, si quiero una familia y Pan es la candidata perfecta, sería una madre muy amorosa pero deberé protegerlos, veamos si la boda es en seis meses luego de ella cuando decidamos ser padres puedo vender la empresa aunque no quisiera a mamá le costó demasiado levantarla así que lo mejor será nombrar otro ejecutivo, quizás Gohan ya que será mi suegro, nosotros podemos irnos a vivir a otro país donde podamos vivir tranquilos.

Con el tiempo podré regresar de vez en cuando acá para ver como va todo, puedo seguir como un accionista por medios virtuales desde otro país y no estaría mal buscar otro empleo allá, si nos mudamos en un fin de semestre de Bra no tendrá problemas para inscribirse en otra universidad y conforme a los papás de Pan podrían aceptar la propuesta de estar al mando de la empresa o venir con nosotros si desean, sí eso es lo que haré. Luego se lo platico a Pan y espero que Bra esté de acuerdo.

Pan.
—Me dijiste mentiras Trunks, yo confié tontamente en tí cuando siempre he sabido que odias a los bebés pero se acabó —derrame unas lágrimas al vestirme.

Luego al terminar sólo podía pensar en lastimarlo para que sintiera lo que yo siento cuando me miente pero mi corazón no me dejaba odiarlo a como quería, salí de la habitación y sentí unas enormes nauseas que casi me hacen devolver lo que me había comido pero no les presté atención y solo busqué la habitación que ocupaba la señora Bulma sin embargo esta casa es enorme abría puertas y solo me encontraba con habitaciones iguales y sin ser ocupadas.

Abrí como diez puertas más cuándo por fin encontré una que se veía grande y con más muebles, se parecía a la de Trunks y Bra, entré cerrando con cuidado la puerta y me dirigí hacia la cama, si es de dos colchones como dijo la señora Bulma, tuve que quitar los cobertores, sábanas y cubrecamas con cuidado, luego con mucho esfuerzo quité el colchón de arriba y le di la vuelta buscando...

Sí aqui está un pequeño cierre, abrí ese cierre y encontré un folder con muchos papeles adentro esto es lo que hundirá tanto a Vegeta cómo a otros mafiosos, bien, lo dejé sobre una mesita mientras acomodaba todo a como estaba antes y luego guardé el folder en mi espalda debajo de la camisa y la camiseta que llevaba espero que no se note, tomé un abrigo de la señora Bulma por si acaso y acomodé unas almohadas.

Al ver que todo había quedado como estaba voltee a ver al buró, ahí había una fotografia de la señora Bulma en un marco, la tomé y la observé por unos momentos luego me dí la vuelta y grité asustada al topar con Trunks dejando caer la fotografía.

—¿Se puede saber que haces en esta habitación? —me preguntó desconcertado.

—Sí, es que... Tenía frío —mentí cruzandome de brazos abrazando el abrigo—. Cómo el vestido de la otra vez me quedó pensé en tomar prestado uno pero no quería interrumpirte, además quería ver si tenías una fotografia en algún lado para conocer a tu mamá y... —guardé silencio cuando volteó a ver al suelo notando que el vidrio de la fotografía estaba roto, ambos nos agachamos al mismo tiempo a recogerlo—. Lo siento mucho...

—Déjalo Pan no la toques —me dijo mientras intentába levantar la fotografia pero me lastimé un poco un dedo con un pedazo de vidrio y en seguida empezó a sangrar, suspiró sacándo un pañuelo y me envolvió la herida con el—: te dije que lo dejaras amor, te lastimaste.

—Estoy bien —me levanté actuando fríamente mientras él levantaba todo del suelo—. Siento haberla roto.

—No te preocupes le pondré otro marco, lo único que importa es que estés bien amor —dijo poniéndose de pie dejando la foto de nuevo sobre el buró.

—Cómo sea...

—Amor sólo te pido una cosa, no entres sin permiso aquí, no hemos querido mover nada de como lo dejó mamá, es un tema muy doloroso para nosotros.

—Sí claro no te preocupes, para mí mejor si no vuelvo a pisar esta casa —me crucé de brazos suspirando.

—¿Qué pasa amor? No lo tomes a mal, estás actuando muy rara, lamento si no fué la forma correcta de pedirlo.

—Déjame no me pasa nada.

—Ah, ya sé, es porque no te desperté, lo siento mi vida quise dejarte descansar te veías agotada y muy tranquila.

—Sí claro...

—Cielo, ¿Por qué estas enojada conmigo eh? —preguntó observandome, me intentó abrazar pero no me dejé saliendo rápido de la habitación pero fué solo cuestión de segundos para que me alcanzara tomándome del brazo suavemente obligando a que lo viera—: ¿Qué tienes?

—No importa —espeté.

—¿Es una prueba a ver cuanto tiempo puedo estar de buenas? Ya te dije que cambiaré y así será.

—No me importa si cambias o no.

—Estás enojada por algo conmigo y no me quieres decir.

—No es eso ¿Ya nos vamos? —no esperé su respuesta y caminé hasta bajar hacia la planta baja.

Luego de salir de su casa y entrar a su auto suspiré intentando calmarme, momentos después entró él también, quiso acariciarme la mejilla pero voltee la cara y el suspiró profundamente.

Trunks.
—Así que no me dirás lo que te molesta... —intenté conversar pero ella seguía sin decir absolutamente nada sólo viendo por el vidrio hacía afuera, no entiendo que fué lo que le molestó si estábamos tan bien, decidí no insistir y conducir pero ella no volteaba, sólo seguía con la mirada perdida hacia afuera durante todo el recorrido hasta llegar a la empresa donde intentó salir sin embargo la detuve—: Amor... ¿Qué pasa? amor —seguía sin contestarme así que insistí en lo que creía—. Yo... Amor te amo y yo creo que ya se lo que es ¿Estás así porque no hemos hablado con tus padres? Sí es así no importa esta misma noche organizo una cena y se los decimos.

—¿Para tí todo es así de fácil no? Claro todo siempre es como tú quieres.

—Está bien tu pon la fecha ¿Cuándo amor?

—Nunca, ya no sé si me quiera casar contigo —espetó dejándome muy confundido ¿Qué había pasado?

—¿Qué estas diciendo? —cuestioné anonadado.

—Sólo déjame pensar mejor las cosas —me espetó.

Dejó el abrigo en el auto y abrió la puerta saliendo a toda prisa, parecía enojada, no pude hacer más que seguida hasta entrar a la empresa, allí la tomé del brazo, el caminador no le dejaba avanzar rápido.

—¿Por qué estas tan rara? —le pregunté.

—¿Acaso ahora te importa mi opinión? —me dijo volteando a verme, parecía muy exaltada o herida.

—Sí, siempre me ha importado —le aseguré.

—¿Y la has respetado alguna vez? —me preguntó tomándome por sorpresa.

Estaba por responderme pero de repente llegó su papá saliendo del elevador y obviamente me vió sujetándola así.

—¿Qué está sucediendo aquí? —preguntó confuso.

—Papá... —dijo Pan quedándose atónita.

—Gohan... —observé que seguía sujetando a Pan así que la solté—. Puedo explicarlo...

—No, tú no explicarás nada —me espetó Pan

—¿Acaso la sacaba a la fuerza por ya no trabajar aquí? —preguntó Gohan confuso.

—No Gohan yo no haría eso y menos a tu hija es sólo que no estábamos de acuerdo en algo pero por otra parte Pan seguirá trabajando conmigo.

—¿Qué? ¿Pero cómo?

—Sé que tienes muchas dudas acerca de...

—¡Basta! —nos interrumpió Pan.

—Ya díganme ¿Qué se traen ustedes dos? —preguntó Gohan observándonos mutuamente.

—Yo te lo diré... —dije suspirando.

Era mejor que el se enterara cuánto antes de la verdad, era algo que ya no podíamos seguir ocultando, sin embargo ella me interrumpió de nuevo.

—¡No! —dijo firmemente viéndome.

—Se acabó Pan, no más mentiras —frunció un poco el cejo como si esas palabras le hubieran molestado y desvió la vista de mí.

—No estoy entendiendo nada —dijo Gohan confundido. Entonces volvió a hablar Pan.

Pan.
—Papá lo que pasa es que el señor Briefs quiere invitarlos a una cena a tí y a mamá para hablar sobre cosas muy importantes, será pasado mañana en la noche si están de acuerdo, eso es lo que pasa.

—Por mi está mas que perfecto —dijo Trunks suspirando.

—¿Sobre que tema hija? —me preguntó papá.

—Ya se enterarán allá papá —voltee a ver un momento a Trunks y luego noté que varios compañeros de trabajo estaban al pendiente escuchándolo todo, de seguro harán chismes.

—Cuándo haga las reservaciones les doy la dirección —agregó Trunks volteando a ver a papá—. Gohan vamos hay una junta y no tenemos mucho tiempo.

Caminamos en dirección hacia el elevador, el único problema era que un pasado mañana no llegaría para nosotros por lo que pensaba hacer.

—Claro vamos —le respondió papá volteando a verme pero yo solo bajé la mirada—. Me gustaría que me adelantara algo del tema —insistió

—Ya te enterarás Gohan —le dijo Trunks—. Pero no te preocupes no es nada malo.

—Eso espero —dijo en un suspiro, el elevador empezó a subir.

Se veía un poco indagante respecto al asunto pero no insistió tanto, sé que él no se imagina cuál sería el tema de esa cena, lo más seguro es que piense que es algo con respecto al padre de Trunks. Al llegar al penúltimo piso el elevador se abrió.

—Señorita Son —me llamó Trunks captando mi atención—. ¿Podría revisar los archivos que dejé en mi computadora por favor?

—Claro señor Briefs en seguida —ellos salieron del elevador caminando a la sala de juntas.

Yo pulsé un botón más subiendo hasta el último piso, es obvio que quería que los dejara solos ya que no me compete estar en esa junta pero bueno ni quién quisiera estar por lo general son muy aburridas, siendo sincera sí quería estar pero estaba tan enojada que todo me daba igual.

Al llegar al último piso entré a su oficina y revisé la computadora ¿Qué podía tener para que revisara? Era obvio que sólo eran sus artimañas para alejarme pero aun así la revisé y tenía mucha información sobre catálogos de salones para fiestas al parecer ya había estado planeando lo de la boda. ¿Qué? hay que hacer las reservaciones con más de cuatro meses de anticipación, el alquiler sólo por un día es carisimo con esto podría comprar la mitad de una casa o completa con todo y muebles ¿Qué rayos piensa Trunks que nuestra boda será un espectáculo?

Nuestra boda... Sigo pensando así y no creo que llegue a suceder, si pasa será una vil farsa, todo por las mentiras de Trunks, fué por eso que cambie con él. Saqué el folder que había escondido y lo comencé a revisar habían demasiados documentos de fraudes cometidos por muchas personas pero de todas solo conocía al padre de Trunks.

Salí de la oficina y los dejé sobre el escritorio mientras iba por un café y unas donas a la vuelta del pasillo ya que de pronto me dió hambre, volví a revisar los papeles al regresar, definitivamente esto hundirá completamente a Vegeta y está en mis manos, cerré los ojos sintiendo un frío escalofrío al recordar todo el terror que ese hombre me inspiraba pero se acabó no pienso callarme más, Trunks me va odiar y eso me dolerá en el alma pero es lo correcto ya no me puedo echar para atrás.

Las horas transcurrieron, llegó la hora de salida así que tomé los papeles y al dirigirme al elevador tropecé con Trunks dejando caer los papeles, me agaché a recogerlos rápidamente, él me ayudó pero por suerte no los vió.

—¿Ya te vas? —me preguntó.

—Sí, ya es hora —dije aún cortante. Quizá por eso no me preguntó que eran esos documentos.

—Pan... —me llamó por mi nombre al ver que no volteaba a verlo—. ¿No me dirás que te molesta?

—Nada con su permiso —dije pasando por su lado.

—No —interpuso su brazo frente a mi bloqueando la entrada al elevador para que no me alejara entonces levanté la vista a él interrogante—: por favor Pan...

—Creo que sabes perfecto porque estoy así contigo —le dije arqueando una ceja.

—No, no lo sé no soy adivino para meterme en tu cabeza y saber lo que piensas —me dijo observándome fijo, es increíble el nivel de cinismo que tiene para mentir viéndome a los ojos, hice un intento por irme pero volvió a retenerme—: dímelo por favor ¿Acaso es por los nervios de hablar con tus padres?

—No, y eso pregúntaselo a tu conciencia.

Trunks.
—Pero Pan... —ya no me hizo caso y se marchó casi a la fuerza.

Suspiré dejándola ir, fuí a mi oficina únicamente a traer mi portafolios, necesitaba calmarme y pensar con claridad.

Para cuándo bajé al piso de abajo ella y su padre ya estaban subiendo a un taxi así que no pude detenerla y muchos empleados me miraban extraño, con solo eso ya me imaginaba todos los chismes que inventarían, sin embargo eso no me preocupaba ahora sino lo que habiamos hablado con Pan, me dijo “pregúntaselo a tu conciencia" ¿Eso que significa? Creo estar en paz conmigo mismo justo ahora ¿porque ella mencionó eso entonces? o yo le estoy dando mucha importancia a nada en realidad?

Salí de la empresa y conduje directo a casa, al llegar y entrar ahí estaba Bra, que tenía servida la mesa con café y pastelillos.

—¿Y esto? —pregunté confuso.

—Pues... Pensé que te gustaría probar esto.

—Bien... —dije con extrañeza mientras ella apartaba la mirada tímidamente— ¿Qué me vas a pedir?

Bra.
—Nada hermanito ¿por qué debería pedirte algo?

—No lo sé, dímelo tú...

—No hermanito no es nada —tomé la taza de café tomando un poco de ella.

Él seguia viéndome interrogante y sí, si pasaba algo habiamos seguido hablando con Goten por chats y justo me invitó a salir mañana en la tarde será como una primera cita y quizá me pida que sea su novia eso me emociona pero no quiero ocultarle absolutamente nada a mi hermano.

—¿Segura que no pasa nada?

—Bueno sí...

—Lo sabía —dijo bebiendo un sorbo— ¿Qué quieres comprar?

—Nada, de hecho te quería platicar de algo.

—Dime.

—Es sobre un chico —en cuanto dije eso casi se ahoga con el café.

Luego volteó a verme muy serio cuándo se trata de cosas así no sé si sea bueno hablar con él ya que actúa como si él fuera mi padre pero debo decírselo de todas maneras.

—¿Y quién es? —interrogó.

—Pues alguien que me gusta bastante —bajé la mirada ya que la de él me intimida y no la cambiaba para nada.

—¿A sí?

—Sí así es, quería decírtelo.

—¿Cuánto tiempo llevan saliendo?

—No hemos salido, de hecho mañana en la tarde iremos al cine es nuestra primera cita creo.

—Entonces no es muy importante para ti si apenas lo conoces.

—Te equivocas, me gustó desde que lo ví y te lo digo porque no me gusta ocultar nada.

—Quiero conocerlo.

—Ya lo conoces.

—¿Eh?

—Así es... Es el tío de Pan, Goten —cuando se lo dije casi se vuelve a ahogar con el café y volteó a verme confundido.

—¿Goten? ¿El chico que conocimos en ese centro comercial? ¿El tío de Pan? —preguntó como intentando asimilarlo por sí mismo.

—Sí, es justo lo que te dije —le dije con obviedad.

—Vaya pues ¿Qué te digo? No me lo esperaba ¿Te trata bien?

—Sí hermanito.

—Claro se ve que es buen muchacho y... Aunque me duela ya no eres una niña para que te prohibiera salir con él pero...

—¿Qué pasa? —le interrumpí.

—Quiero que le adviertas que si te hace llorar o te lastima de cualquier forma se las verá conmigo ¿Okey?

—Claro, pensé que cuando te lo dijera reaccionarías mal.

—Pues sí es lo que haría pero comprendo lo que es estar enamorado, sé que si los padres de Pan no aceptaran nuestra relación no seríamos felices y sé que no soy tu padre sino tu hermano pero te quiero como si lo fuera enana.

—Pero no más de lo que yo a tí —me levanté de la mesa acercándome a el y lo abracé con fuerza.

Correspondió un momento, luego me hizo una señal que me sentara de nuevo asi que me senté a su lado y el me tomó de la mano sobre la mesa.

—Escucha hermanita, quiero que sepas algo.

—Dime.

—Mira, después de la boda con Pan nos mudaremos.

—¿Me abandonarás? Yo sabía que esto pasaría —casi lloré cuando dijo eso.

Estaba pasando lo mismo que con Mai pero esta vez él no queria avandonarla ni yo queria que lo hiciera, mi hermano tiene derecho a hacer su vida pero me interrumpió rápidamente.

—No, no, no, yo no te abandonaré solo quiero que todos juntos comencemos de cero en otro país, dónde nadie nos conozca ni conozcamos a nadie.

—¿Pero por qué?

—Porque es hora de que comencemos una nueva vida sin recuerdos dolorosos que nos duelan, yo no puedo olvidar la muerte de mamá.

—Pero fué un asalto.

—Pero yo no pude hacer nada para salvarla y ese recuerdo me mata, me hace querer no tener hijos en este lugar ya que pienso que les puede pasar algo como a mamá, este país es muy violento e inseguro, no quiero más pérdidas en mi vida.

—Sí lo sé y sé que el trauma que viviste fue duro pero debemos seguir adelante hermanito no debes temer.

—Lo siento hermanita pero es una decisión tomada.

—¿Pan está de acuerdo?

—Lo estará te lo aseguro.

—¿Y qué hay de Goten y yo? Siento que ya lo quiero no quiero dejarlo.

—Que venga también o tendrán que tener una relación a distancia por un tiempo la comunicación con él no es algo que perderás.

—No es justo...

—Pero ya lo decidí.

[...]
Pan.
—¿Qué te pasa cariño? —me preguntó papá.

—Nada papá —voltee por la ventanilla del taxi abrazando fuerte esos papeles, sé que debí decírselo pero ya no hay vuelta atrás y el también me mintió.

—Te ves muy desanimada.

—No, es tu imaginación solo estoy cansada y quiero llegar a casa nada más.

—Pan... ¿Acaso tienes problemas con tu novio?

—Un poco pero nada grave o quién sabe —dije en un suspiro.

—¿Y quién es? No te fué ni a ver al hospital.

—Te equivocas papá, él si estuvo ahí y... —guardé silencio, no es el momento de decirlo—. No importa, mira ahí está ya la casa.

—No Pan, explícame antes lo que dijiste ¿A qué te refieres?

—¿Pagarás tú o yo? —le dió un billete al del taxi y yo salí de inmediato caminando hacia casa.

Traté de ir rápido para evitar esa conversacion pero el caminador en el pie no me ayudaba mucho y me alcanzó antes de entrar.

—Pan ¿Qué me ocultas?

—Nada ya te enterarás de todo —dije dándole una respuesta vacía.

—Quiero saberlo ahora.

—Todo a su tiempo.

—Pan ya basta de misterios.

—Papá... —ya no le dije nada y entré a casa pero al llegar a la sala me sorprendí de ver a Luzardo y mamá tomando café.

—Hola bienvenidos —nos saludó mamá—. El comandante los esperaba desde hace unos momentos.

—¿A que debemos su visita? —preguntó papá.

—Esta vez es por trabajo —respondió.

—Siéntense ya les traeré un café a ustedes también —nos dijo mamá.

—Gracias mamá —me senté en el sofá y papá a mi lado, yo abrazaba los papeles a los que Luzardo no les quitaba la vista de encima.

—Pues usted dirá... —empezó diciendo papá.

—¿Son las pruebas que necesitamos? —me preguntó él aún viendo los papeles que abrazaba.

—Así es pero... —volteé a ver a papá y se veia muy confundido viéndonos interrogante pero en ese momento no me importaba solo quería ya por fin deshacerme de tanto peso encima pero ¿Podía confiar en él? ¿Y si estuviera cometiendo el peor error de mi vida por el que mi familia pagaría?—: prometa que todo saldrá bien.

—Así es confia en mi.

—¿Alguien me explica que pasa? —preguntó más confuso papá interrumpiendo.

—La señora Bulma me dijo dónde encontrar las pruebas para hundir al Oscuro —le solté.

—¿Qué? —preguntó mamá dejando la bandeja con los café sobre la mesita—. Esa señora está muerta.

—Así es —le acompañó papá— ¿Por qué dices esas cosas Pan?

—Porque es la verdad la señora Bulma no murió —les aseguré.

Comencé a contar lo que me contó la señora Bulma y ellos me veían sorprendidos sobre todo cuando dije que ella nos ayudó en esa cabaña pero no les quise decir que casi nos matan, ni que no fué un asalto sino que fué a causa de enemigos del padre de Trunks esa mentira la mantuve pero obviamente Luzardo si lo sabia.

También omití todos los detalles amorosos que pasamos con Trunks ese día, aún no es tiempo de que se enteren pero papá se veía ya muy afectado por todo lo que les estaba contando y para cuando terminé todos se quedaron en un profundo silencio por unos segundos, luego mi padre habló.

—¿Por qué no me lo dijiste antes hija?

—Era un secreto papá no debían saber nada hasta que se llevara a cabo —lo vi triste y el tomó el frasco de su medicamento tomandose dos pildoras a la vez.

—Es que me parece increíble, irreal.

—Lo sé papá yo también me sorprendí.

—Bueno si esa señora está viva ojalá sea mucho mejor persona que su hijo —dijo mi madre.

—Mamá —le dije llamando su atención diciéndole con la mirada que no era el momento.

—¿Por qué lo dices Videl? —le preguntó papá.

—Porque creo que a veces su jefe los explota mucho —mintió para mí tranquilidad.

—Te equivocas, suficiente es con que nos espere para pagarle en lugar de mandarnos a la carcel. Pero hay una cosa que no logro entender ¿Cómo conseguiste las pruebas Pan?

—Estaban dentro de la casa del señor Briefs, fuimos por unos archivos y aproveché para buscarlas, aunque el señor Briefs no lo sabe y siento que traicioné su confianza.

—Lo hiciste por ayudar hija además la señora Bulma te lo pidió.

—Sí en esa parte tienes razón papá.

—¿Me dejas ver esos papeles? —preguntó Luzardo. Por unos momentos me había olvidado de su presencia.

—Sí pero... ¿Me asegura que no estaremos implicados en nada de esto? —pregunté.

—Claro que sí, incluso les pondré seguridad personal.

—No tengas miedo hija —dijo papá colocando una mano en mi hombro—.  Es hora de acabar con ese reino de terror.

—Sí papá —dudé en darselas pero al final terminé sediendo y entregándoselas.

Empezó a revisarlas con mucha atencion y yo me empezaba a sentir como una traidora con Trunks, recuerdo los motivos por que lo hice pero aun así no dejaba de sentirme mal.

—Perfecto —dojo Luzardo luego de  unos momentos—. Con esto vegeta se hundirá completamente y no sólo él, fuiste muy valiente Pan con esto varios mafiosos más pagarán, le daremos un duro golpe a la delincuencia, puede que sea el golpe definitivo.

—Yo sólo quiero que ya acabe esta pesadilla —dihe suspirando.

—Acabará —me aseguró—. Con su permiso prepararemos el operativo ahora mismo, mientras no salgan por nada de esta casa.

—Sí comandante —le respondió mi madre.

—Gracias por todo me retiro por ahora —dijo levantándose del sofá, tomó los papeles y salió de casa.

[...]
—Lo conseguimos mendez ahora a la comisaria —dijo Luzardo entrando al lugar del piloto en su auto.

—¿Así que consiguió las pruebas jefe?

—Así es, por fin después de tanto tiempo esos delincuentes pagarán.

—Pero señor usted sabe que esos delincuentes tienen infiltrados entre nosotros.

—Sí y ellos tambien caerán, solo contaré con oficiales de confianza como tú, agentes federales, encubiertos e incluso internacionales, los demás irán cayendo poco a poco, movilizaremos mas de diez mil soldados, ese pez no se nos escapa Méndez.

—Sí señor, además si usted me lo permite quiero estar siempre a su lado como su mano derecha.

—Claro que si hombre, confio en tí.

—Gracias señor »Así que consiguió las pruebas en la casa de la novia de Briefs, ah que hijo tan estúpido por este error el padre caerá« ¿Vamos a la comandancia?

—Claro de inmediato, ya está oscureciendo así que daremos el golpe en unas horas...

[...]
Pan.
—No estes triste hija hiciste lo correcto —me dijo papá.

—Eso espero papá, bueno con permiso —me alejé entrando a la habitación dejándome caer sobre la cama.

Tálvez papá y mamá ahora charlarán acerca de que la señora Bulma sigue viva, yo no sé cómo enfrentar está situación.

Quizá mañana todo estará solucionado y Trunks puede que me valla a odiar cuando le diga que fuí yo quien entregué a su padre, cerré los ojos pensativa, me quedé así unos momentos hasta que escuché a alguien entrar, abrí los ojos y era mamá.

—Hola.

—¿Pasa algo? —le pregunté.

—¿Por qué no me contaste que esa mujer está viva?

—No tenía caso.

—Claro que sí ¿Acaso fué una coincidencia o lo planearon todo?

—Fué coincidencia mamá.

—Empiezo a creer que no fué un asalto ¿Acaso los perseguían para matarlos?

—Eso no importa.

—Así que si es eso.

—Sí pero ya pasó.

—No del todo... Pero por fin acabará esa pesadilla y debes pensar qué harás después.

—Sí aún me quiere Trunks los planes de la boda siguen.

—Si atrapan a su padre podría considerar aceptarlo a pesar de todos los errores que ya cometieron.

—¿Acaso eso era lo que te preocupaba? Estabas en desacuerdo desde antes de saber quién era su padre.

—Así es pero, viéndo las cosas diferente esa boda nos conviene.

—¿Qué? —pregunté incrédula.

—Ese tipo seguirá siendo millonario y si ya echaste a perder tu vida con él, es hora de que veas que puedes sacarle.

—¿Qué estás diciendo?

—Que aproveches el momento para conseguir todo lo que siempre te has merecido y no has logrado, puede que a su lado ya que estas tan obsecionada con él seas feliz un tiempo y no tendrás que preocuparte por tu futuro ya que está asegurado a su lado pero asegúrate de que la boda sea por bienes comunes así si se divorcian te quedarás con la mitad de todo lo que poseé.

—¡¿Qué?! —exclamé alarmada— ¿Cómo crees que yo haria algo así? Yo lo amo a él no a su dinero, sería mejor si él no tuviera ni un solo zeni.

—Sí lo que digas y cambiando de tema ¿Cuál fué el resultado?

—¿De qué hablas?

—¿Te hiciste la prueba de embarazo no?

—No.

—Que descuidada eres ¿Y si resulta positivo que harás?

—No lo sé, es clarísimo que Trunks no quiere bebés.

—Hija —dijo acercándose a la cama, me senté y cuándo menos lo esperaba me sorprendió con un abrazo.

—Mamá... —la abracé fuerte casi llorando hace mucho que no me abrazaba así.

—No te preocupes cariño cuentas con mi apoyo.

—¿De verdad?

—Así es y ya me habías dicho que si salia positivo no te des harias de él ¿Cierto?

—Sí mamá no lo haria pero ¿Por qué este cambio tan repentino? —nos soltamos y ella me vió de frente sonriendo lo cual me extrañó mucho.

—¿No lo entiendes aún? Si resulta que quedaste embarazada ese niño será su primogénito, el heredero de parte de su fortuna o toda si es que no tiene más, y si no se quiere hacer responsable yo me encargaré de defender lo que te corresponde.

—No mamá —musité.

—Sí, tú eres muy inocente aún pero yo me encargaré de que nadie se burle de tí y —sacó una cajita de su bolsillo—. Es una prueba debes hacerla siguiendo las instrucciones aúnque yo puedo asegurar que saldrá positiva por los síntomas.

—Pero... —tomé la cajita con la mano temblorosa, se escuchó que alguien abría la puerta así que la escondí bajo las colchas.

—Aquí están —dijo papá, luego me vió—. Pan te hablan en el teléfono.

—¿A mí? —pregunté extrañada.

—Sí, es una chica.

—Qué extraño —salimos de mi habitación y contesté el teléfono, al hacerlo noté que es la voz de Bra la hermana de Trunks—. Hola —respondí a su saludo.

Papá y mamá me observaban de lejos.

—Perdón que te moleste a estas horas Pan, es solo que antes de ir a dormir quiero estar tranquila.

—¿Sucede algo?

—Sí pero como no tienes teléfono aún decidi llamarte a tu casa, encontré el número en el directorio telefónico, tienes que convencer a Trunks de que no lo haga.

—¿De qué hablas?

—Es que el me contó que luego de la boda de ustedes nos mudaremos.

—¿Qué?

—Lo siento, él no te lo había dicho y arruiné la sorpresa pero es que no me quiero ir de aquí, yo nací en esta ciudad aquí están mis amigos y mis seres queridos.

—A ver para, explícame mejor ¿Por qué decidió eso?

—No lo sé, dice que quiere comenzar de cero en algún otro lugar y formar su propia familia contigo pero yo se que en el futuro mis sobrinos serían felices aquí, yo sé que tu puedes convencerlo de eso Pan... —dijo casi llorando, guardé silencio un largo momento hasta que volvió a hablar—. ¿Pan?... ¿Estás allí?

—Sí perdón —casi lloraba al escuchar lo que dijo ¿Qué hice? Trunks si queria cumplir lo que me juró y yo lo traicioné entregando a su padre ¿Y ahora que haré? Me va odiar ¿Por qué no le pregunté? ¿Por qué fui tan tonta? Ahora que él quiere complacerme y que empecemos de cero en otro lugar con nuestros futuros hijos yo lo eché todo a perder—: Bra escucha ¿Ya tiene teléfono Trunks?

—Así es.

—Dame su número debo hablarle.

—Está bien pero se enojará conmigo.

—No le hablaré de eso dimelo —tomé una libreta y comencé a anotar los numeros que me decia pero ya casi lloraba al hacerlo—. Ajá... Si ya lo tengo gracias Bra —le colgué el teléfono sin esperar respuesta.

Mis padres estaban a poca distancia de mí, seguro escucharon lo que yo dije.

—¿Qué pasó hija? —me preguntó papá—. Era Bra ¿Cierto? ¿Por qué le pediste el número del jefe?

—Por nada es por un documento que olvidé entregarle y Bra me avisó que el señor Briefs va a recogerlo en la empresa y yo debo llamarlo para decirle dónde está.

—¿Segura hija?

—Sí papá, permiso —dije regresando a mi habitación.

Cerré la puerta y empecé a revisar unos cajones sin poder evitar las lágrimas, sé que guardaba un teléfono antiguo por aquí, aún debe funcionar, debe estar aquí. Lo encontré y por suerte aun encendió, guardaba otras targetas SIM así que marqué rapido el número que me dió Bra, tardó un momento en contestar pero si era él.

—¿Quién habla?

—Soy yo Trunks —musité.

—Amor que sorpresa ¿Ya estás más tranquila?

—Sí.

—¿Por qué lloras?

—Porque hice algo muy malo —le respondí.

—No me asustes Pan, no pudo ser tan malo ¿Qué fué eso tan malo que hiciste?

—Denunciar a tu padre —le solté.

—¡¿Qué?! —me gritó al otro lado de la línea.

—Le entregué unas pruebas a Luzardo que encontré en tu casa.

—¡¿Por qué demonios hiciste eso?!

—Por tonta, perdóname.

—Trataré de solucionar lo que hiciste no hagas nada más, nada, ¿Me escuchaste? Tú y yo hablaremos de esto pero en persona espera mi llamada.

—Sí

Trunks.
Le colgué el teléfono muy enojado ¿Cómo se atrevió y tuvo el cinismo de decírmelo? Esto no te lo pasaré tan facil Pan pero ahora hay algo más importante, le marqué a mi padre muy alarmado pero no me contestaba, contesta maldita sea, papá contesta debes irte, no funcionaba, no contestaba ningúna de mis llamadas.

Salí al pasillo y me encontré con Bra quién me observaba preocupada.

—¿Qué te pasa hermanito? —me preguntó.

—¡Qué te importa! —le grité sin pensarlo.

—Trunks...

—Perdón pero algo mas me molestó, no salgas para nada de la casa.

—¿Vas a salir?

—Así es.

—¿A dónde vas hermanito?

—No lo sé pero no salgas, llámame por cualquier cosa —salí a toda prisa de la casa y entré a mi auto.

Conduje rápidamente si no me equivoco papá tiene otra casa en esta ciudad pero no a la que llevé a Pan, conducí rápidamente pero al llegar cerca me di cuenta que ya era tarde ya estaba todo el rededor rodeado de soldados y le ordenaban salir por altavoces incluso habian helicópteros sobrevolando la zona.

¿Abré llegado tarde? ¡Maldición!