“¡Siguen descubriendo mis mentiras!"

Goten.
—Oh-ho alguien está en problemas —reí burlándome de Pan pero ella estaba pálida.

Parecía tener miedo así que me arrepentí de haber dicho eso y no era para menos mi hermano la veian entre de serio, interrogante y enojado hasta me dio pena la situación en la que estaba Pan.

—¿Y bien? —cuestionó.

—Oh vamos hermano —intervine—. Relajate acabas de llegar del hospital.

—Goten silencio por favor.

—Sí pero vamos no veas así a mi sobrinita parece que la fueras a castigar, ¿Qué mal pudo haber hecho Pan? —me senté al lado de Pan abrazándola por los hombros pero mi hermano ni caso me hizo así que solo suspiré.

—Pan —continuó—. Queremos una explicación ¿Cómo es que la deuda que teníamos en el banco por la que nos quitarían la casa ya fue saldada y ahora misteriosamente la casa está a tu nombre?

—Wow —exclamé—. ¿Mi sobrina dueña de la casa? Bueno a cambio de perder la casa como dices Gohan está mejor ¿No lo crees?

—Goten...

—Si lo sé, ya me callaré...

—Hija, ¿Qué sucede? —preguntó Videl viéndola.

Pan.
—Muchas cosas mamá —me quedé pensando en lo que les diría mientras me sentaba.

No podría decirles que le propuse a mi jefe acostarme con él a cambio de dinero y al final si terminé haciéndolo y el regalándome la casa eso sonaría horrible, no creerían que nos amamos y eso solo mataría a papá, él no puede recibir duras noticias.

—¿Y bien hija? —preguntó papá—. Te escuchamos...

—Sí papá, lo que pasó es que cuando te desmayaste me asustaste demaciado y ya no me dio tiempo de contarle a nadie que... Que me dieron un nuevo puesto en la empresa ahora soy parte del equipo de propuestas, el jefe me ascendió de puesto y claro ahora ganaré más.

—Eso no explica nada hija, así ganes mucho es imposible que tú puedas haber pagado.

—Lo sé papá y justo por eso, escucha lo que sucedió, el jefe me ayudó a llevarte al hospital y luego de que nos informaran de que estabas bien fui por ropa para ti a casa y me encontré a los representantes del banco, ellos nos echarían a la calle, papá yo no podía permitir eso esta casa es nuestro hogar aquí tengo los mas lindos recuerdos de cuando era niña, aqui han estado ustedes desde que se casaron, no la podíamos perder y más porque sé que en parte la hipotecaste por mis estudios. Así que decidí pedir ese dinero prestado a la única persona que sé que tiene mucho dinero y para el esto que necesitábamos seria poco, así es papá le pedí otro préstamo al señor Trunks.

—Hija...

—Papá no le encontraba otra solución, era eso o nos echaban, sí ya sé que el señor Briefs nos ha ayudado mucho y por eso me dió mas pena pedírselo pero no se negó dijo que me prestaría el dinero y luego podía pagárselo ya que con el nuevo puesto ganaré mas papá, además le dije que era yo quién no quería perder la casa justo por eso aparezco en esos papeles como beneficiaría, él me prestó el dinero.

—Hija ¿Qué va pensar ahora él de nosotros?

—Nada malo papá, yo le pagaré todo te lo aseguro.

—Yo te ayudaré hija.

—No papá, es algo que yo pagaré.

—Pero supongo que ha de haber sido mucho dinero —pronunció la abuela—. Te tomará una eternidad Pan.

—No con mi nuevo puesto, con el podré pagar todo mas rápido —le aseguré y luego volteé a ver a papá—. Y tú no debes de preocuparte por nada de eso papá, tu debes estar tranquilo.

—Hija eres tan buena —suspiró—. Siento que solo soy una carga para ti.

—¿Cómo puedes decir eso papá? Tú eres alguien muy importante en mi vida —me acerqué y lo abracé fuerte papá estaba dolido casi juraría que lloraría y no quiero verlo así—. No vuelvas a decir que eres una carga porque no lo eres, tu siempre me cuidaste y procuraste que nada me faltara, ahora es mi turno papá, yo haría cualquier cosa porque ustedes esten bien.

—Bueno ya —intervino tío Goten—. Muchos momentos tristes ¿Por qué no cenamos mejor? Me muero de hambre.

—Hay tío —dejé de abrazar a papá y le sonreí acercandome y golpeándolo suave en el hombro—. Eres un glotón.

—Tengo hambre mejor agradece que ya todo esta bien y comamos en paz.

—Bueno a comer —nos sentamos a la mesa y papá encendió la TV mientras comíamos.

Almenos me creyeron la mentira aunque mamá no ha dicho ningúna palabra ni siquiera me ve, de seguro sigue muy enojada que mal por mí. Comíamos y durante un momento levanté la vista a la tv una noticia me puso muy nerviosa.

“Gran conmoción causó el hallazgo de una nota todo anota que fué en referencia de cuando se encontraron varios cadáveres dentro de unos autos, al parecer fueron asesinados por armas de fuego a causa de un ajuste de cuentas, cabe resaltar que los investigadores de la policía detuvieron la búsqueda de pruebas del por qué el asesinato de tantos al encontrar la nota en dónde se puede apreciar claramente que está a nombre del tan famoso mafioso el oscuro donde advierte que si se meten con su familia se meten con él, lo que hace pensar que fué un ajuste de cuentas..."

—Mas muertes —murmuró papá—. Quién sabe que tanto hicieron para morir así.

—El oscuro —susurré.

Esos tipos seguro los mataron la vez que nos estaban persiguiendo, el padre de Trunks ordenó sus muertes, él los mató.

—Hija —dijo mi abuela llamando mi atención—. ¿Qué pasa? estás temblando.

—No nada abuelita yo... —vi a mis manos, temblaban, ya no podía ni sostener el tenedor así que decidí soltarlo—. Lo siento ya no tengo hambre —me levanté de la mesa caminé hacia mí habitación.

Goten.
—Seguro le afectó la noticia —suspiré—. No es agradable comer viendo esa clase de noticias.

—Pero que extraño —dijo mamá.

—¿Aún crees que hay algo no extraño con Pan? —reí y ella sonrió.

—Ya nadie esta a salvo en esta ciudad —agregó mi hermano.

—Lo bueno es que no estamos metidos en problemas —asintió mamá.

—¿Cómo será la vida de esos mafiosos? —pregunté—. De seguro les sobra todo, dinero cosas mujeres etcétera.

—Pero les faltan muchas más cosas que las que les sobran —respondió Gohan.

—¿Cómo qué? —pregunté.

—Amor, ellos no quieren a nadie incluso su familia sale afectada por su culpa.

—Ay ajá hablas con mucha experiencia ni que supieras de esas cosas, de seguro viven felices.

—Sé más de esto de lo que crees Goten.

—¿Qué? —cuestionó mamá—. ¿A qué te refieres Gohan?

—Gohan ¿qué pasa? —preguntó también Videl.

—Nada —contestó mi hermano—. Entre menos sepan mejor.

—Gohan no nos asustes —insistió Videl.

—Dinos hijo —agregó mamá.

—Yo... Yo sé quién es realmente el oscuro.

—¿Qué? —cuestioné asombrado.

—¿Eso es cierto Gohan? —preguntó Videl.

—Así es —aseguró—. Su misma esposa me confesó quien es en realidad.

—¿Qué? ¿Quién es Gohan?

—Prometan que no le dirán a nadie y que guardarán siempre el secreto.

—Claro pero dinos —insistí.

—Es el padre de nuestro jefe.

—¡¿Qué?! —dije alarmado—. Eso no puede ser.

—Así es.

—¿Desde cuando lo sabes? —intervino Videl asustada.

—Desde hace poco más de un año antes de la muerte de la señora Bulma.

—¿Por qué nunca nos dijiste?

—Por la seguridad de todos, además la señora Bulma confió en mí y no quise decepcionarla.

—Oigan esperen —intervine, tenía que saber esto—. El padre de tú jefe es un mafioso entonces ¿También él?

—No, el señor Trunks no tiene nada que ver con el siempre ha salido adelante por sus medios, eso es lo que dijo la señora Bulma y yo lo he comprobado al trabajar con él, hasta despidió a su secretaria anterior porque se dió cuenta que era una espía de su padre pero aunque él lo sabe se lo oculta a su hermana ella no sabe que su padre es el oscuro.

—¿Tiene una hermana? —pregunté subiendo las cejas.

—Así es, su hermana Bura y justo por eso fué que la señora Bulma estaba convenciendo a su esposo de entregarse a la policía incluso una vez me confesó que tenía pruebas contra él pero, con su muerte quién sabe donde quedaron. Lo último que supe es que había contactado a un investigador de la agencia de inteligencia nacional pero quién sabe en que quedó todo.

—Está muy grueso el asunto —acepté apesarado.

—Lo sé y justo por eso no se les ocurra decirle a nadie mas sobre esto.

—Sí esta bien —dijo mamá.

—Bueno —pronuncié—. Todo estuvo delicioso muchas gracias y con permiso — me levanté de la mesa para ir a la habitación de Pan.

¿Sabrá que el hombre al que ama es hijo de un mafioso? Toqué la puerta pero no me respondió, abrí y no estaba en la habitación quizá esté en el baño, iba a tocar la puerta pero escuché que susurraba.

Pan.
—Tranquila Pan, ellos no te harán nada, no fué nuestra culpa que los asesinaran, ¿Por qué rayos no lo denuncias Trunks? No sé si pueda vivir así —me limpié unas lágrimas y al abrir la puerta casi se cae mi tío ¿Qué hace aqui?—. Tío ¿Estabas escuchándome?

—He... He si, pero no entendí nada.

—¿Y con qué derecho?

—Lo siento no pude evitarlo.

—¿A qué viniste? Tengo sueño.

—Pues... ¿Tú jefe es tu novio?

—Shh te pueden escuchar, sí así es tío.

—¿Y tú sabes a lo que se dedica su padre?

—¿Por qué la pregunta tío? —se veía preocupado ¿Qué es lo que sabe?

—¿Lo sabes sí o no?

—Sí, si lo sé ¿por qué?

—¿Sabes que es de la mafia?

—Shh sí, ¿Cómo lo supiste?

—Pues Gohan lo sabía y nos contó.

—Es cierto Trunks dijo que papá estaba enterado de todo, ya lo había olvidado.

—¿Y acaso estas de acuerdo con eso?

—No, por supuesto que no pero sé que un día Trunks lo denunciará.

—¿Cuándo Pan? No te engañes es su padre el debe estar de acuerdo.

—No, Trunks es diferente, yo sé que nunca estará de acuerdo con él.

—Pan debes alejarte es por tu bien.

—No lo haré yo lo amo y si no me quieres apoyar mejor vete.

—Pan...

—Chao hablamos mañana tengo sueño —lo saqué casi a empujones de mi habitación.

Luego me dejé caer en la cama, que día tan pesado y ahora ¿Quién sabe que pasará? Me toqué el rostro, la bofetada de mamá me dejó rojo aunque me cubre el cabello, espero que se me quite aunque ya se va viendo como un moretón, sí que golpea demaciado fuerte y más por el coraje que sintió.

Ahora sí agradezco tener el cabello largo y poder usar maquillaje, tomé las cobijas e intenté dormirme pero no podia y entonces oí que sonó mi teléfono era un mensaje es de Trunks “te llamaria pero mejor te dejo descansar que tengas una hermosa noche y dulces sueños mi amor, te amo, ya cuento las horas para verte mañana" Es tan lindo, le respondí que yo también ya queria volver a verlo y le desee feliz noche almenos el logró hacerme sonreir. Dejé el teléfono y escuché a alguien entrar a mi habitación y encender la luz y sorpresa, era mamá.

—¿Estás dormida? —preguntó.

—Aún no —musité.

—Cariño —se sientó en la cama y me acarició el cabello—. Lamento haberte golpeado.

—Eso no importa, eres mi mamá y te dolió enterarte de lo que hice.

—Pan, quiero saber la verdad, él... ¿Él te propuso tener relaciones por prestarte el dinero?

—No mamá, él me ama.

—Hija...

—Está bien mamá, la verdad yo le propuse acostarme con él por algo de dinero, docientos mil y un prestamo de trecientos mil.

—¡Hija! —exclamó exaltada.

—Lo sé fué tonto mamá pero no tenía alternativa, de todas maneras no aceptó, sabía que algo mas pasaba por mi insiatencia.

—Pero Pan, él es tu jefe.

—Pero es el hombre mas tierno que he conocido a pesar de que es algo pervertido, él no dejó que me le vendiera me propuso regalarnos ese dinero, yo no quise aceptarlo insistí entonces en que fuera un préstamo al que aceptó con varias condiciones, tenia que aceptar el dinero de unos bonos ademas ser su novia y otra que era secreta pero acepté, en fin el si quería estar conmigo y yo acepté por mi propia voluntad.

—Pan, tú no debiste hacerlo, admiro tu gesto pero ¿Sacrificarte tanto por nosotros? No debiste venderte por dinero Pan, perdiste algo muy valioso por solo esta casa.

—No mamá yo me entregué a él por amor, lo amo nunca me vendí y justo después de que despertamos juntos hoy me entregó ese papel, la tercera condición fué que él me regalaría la casa no tuve opción mamá.

—Hija lo vez te está comprando así te diga que no.

—Es lo que también pensé mamá pero él dice que no.

—No sé cómo pero debemos pagar ese dinero.

—Tú no lo conoces no lo aceptará lo sé, él dice que eso es poco para él.

—Lo vez Pan, él tiene demasiado dinero y ahora sólo juega contigo simplemente está dándote cosas para que no te niegues a nada.

—Mamá él no es así yo lo siento cuando estoy con él, nos amamos.

—Hija eso es lo que crees pero ya consiguió lo que queria ahora sigue que va querer haciendo lo mismo una y otra vez hasta que de un día a otro te deje.

—No mamá eso no pasará ya lo verás, incluso quiere que nos casemos un día.

—Eso es mucho peor hija ¿Sabes de quien es hijo?

—Sí mamá pero no me importa, lo amo y sé que un día denunciará a su padre.

—Se que eso no pasará pero recuerda que yo te lo advertí mi cielo.

—¿Por qué no me quieres ver feliz mamá?

—Es lo que más quiero, precisamente por eso te lo digo pero esta bien, vive tus propias experiencias, de las caídas sacas fuerza para levantarte, si nunca te caes nunca te levantarás, una caída más una caída menos.

—Me encantaría contar con tu apoyo.

—Y lo tienes, siempre te apoyaré así estés tomando malas decisiones.

—Gracias mamá y te aseguro que pronto cambiarás tu opinión de Trunks.

—No lo creo.

—Que suegrita mas enojona no querrá a su yerno.

—Me haces sentir mas vieja.

—Lo siento mamá.

—Cómo pasa el tiempo, de una vez te digo que no quiero nietos pronto hasta dentro de muchos años.

—Mamá que cosas dices —me sonrojé y ella después de besar mi frente salió de la habitación apagando la luz.

Qué ocurrente es, já no me imagino a mi mamá con nietos seguro será mas enojada que conmigo ¡Nietos! ¿Qué rayos? Olvidé esa pastilla que dijo Trunks y ahora ya es muy noche no puedo salir ¿con que excusa lo haría? por favor que no pase nada, fué la primera vez ¿No pude quedar embarazada o sí? Espero que no aunque no recuerdo exactamente la última vez que me llegó para saber si estoy en días fértiles o no, solo me queda rogar porque no sea así, espero que no.

Casi no pude dormir con la preocupación pero ya no podía hacer nada incluso al otro día al desayunar estaba distraída, no sé si aún me funcionaria si me la tomo.

—Oigan ya se les esta haciendo tarde —anuncia la abuela captando nuestra atención.

—Hija no has comido nada —regañó mi madre.

—Mira esas ojeras pareces mapache —rió mi tío.

—Goten ni te burles —advirtió papá

—Da igual ni escucha ¿Quién sabe donde estará? Pero aquí no.

—Pan... hija... —susurró mamá tomándome de la mano haciéndo que levantara la vista a ella.

—¿Eh? ¿Qué?

—Nada importante pero estas muy distraída.

—Disculpen es que me duele la cabeza y no dormí bien anoche.

—Ya te traigo una pastilla.

—No, mejor pasaré por la farmacia.

—Imposible hija —intervino papá—. Mira la hora es tardísimo y el taxi ya nos espera afuera.

—¿Trabajarás papá?

—Claro ya estoy bien.

—Deberías descansar.

—No hija, vamos a trabajar, yo ya estoy perfectamente bien.

—Sí papá —salimos y en el transcurso del taxi me puse los audífonos escuchando música.

Pero no lograba tranquilizarme, vamos Pan fue solo una vez pero lo peor es que a veces soy tan irregular que no sé si estaba o no en días fértiles quiero creer que no por ser tan irregular, si eso es vamos piensa positivo soy muy irregular a las chicas que son así aunque esten casadas les cuesta demasiado embarazarse osea que no hay muchas probabilidades de que eso pase, ¿Yo embarazada? No eso suena ridículo, eso no pasará tranquila Pan.

Llegamos a la empresa y al subir al último piso me puse a ordenar las cosas del escritorio de Trunks me gusta hacer esto pero de pronto lo sentí abrazándome por detrás.

—¡Trunks me asustaste! —le grité.

—Lo siento mi amor, solo quería sorprenderte —me dió la vuelta tomándome por la cintura, me besó colocando sus manos en mi cadera sonriendo enmedio del beso.

—Trunks... —murmuré contra sus labios separandome del beso.

—Lo siento, la costumbre je je.

—¿Costumbre? Que no se te haga costumbre eso he —le sonreí separándome de él, caminando para salir de su oficina, sentí que seguía mis pasos.

—Pan ¿a donde vas?

—A trabajar señor Briefs.

—Oh vamos Pan, ¿No podemos tener un momentito para nosotros?

—Son horas de trabajo —le recordé.

—Y soy tu jefe y te ordeno que me des muchos besos ahora mismo —me dijo tomándome por la cintura frente a mí escritorio, con su otra mano acarició mi mejilla y se extrañó un poco ahí recordé el golpe—: Pan ¿Qué te pasó? —preguntó confuso.

—Nada, por tonta me golpee con la puerta —mentí.

—No mientas —respondió de inmediato—. Tú sola no te pudiste haber echo esto, ¿Quién se atrevió a golpearte?.

—Nadie amor.

—A ver amor, no permitiré que nadie te ponga un dedo encima, dime quién fué.

—Mamá, se enteró de que tuvimos relaciones —lo vi apenada y el estaba mas pálido que una hoja en blanco y se quedó atónito por unos segundos—: lo siento cuando llegué a casa estaba ahí y sabes como es, descubrió marcas que me dejaste en el cuerpo también.

—¿T–tú m-mamá? —tartamudeó—. ¿Tú mamá sabe que... Que nosotros...

—Sí, se enojó mucho conmigo luego le expliqué todo pero piensa que juegas conmigo.

—No puede ser —lo ví pasarse las manos sobre el cabello tirándo de él hacía atrás con la vista perdida.

—Tranquilo ella comprendió no esta nada feliz pero tampoco me odia, ni a tí, además ella no se atrevería a reclamarte a tí.

—Es que ¡No debió enterarse Pan! —gritó.

—Yo... —aparté la vista musitando—. Lo siento...

—Demonios...

—Tranquilízate ella no vendrá a reclamarte.

—¡¿No lo entiendes?! —gritó tratando de recuperar la calma—. Ahora mi reputación estará por los suelos.

—¿Tú reputación? —pregunté en un hilo de voz.

Me senté en el aciento de mi escritorio y unas lágrimas empezaron a salir sin permiso, en seguida se serenó poniéndose de cuclillas frente a mí.

—¿Qué pasa? —preguntó.

—Nada, no me pasa nada —sollocé.

—No creo que llores solo por nada.

—Pues así es lloro por nada, por nada porque eso es lo que soy para ti nada, lamento que hayas manchado tu reputación metiéndote conmigo.

—Pan ¿cómo dices eso? Tú eres todo para mí.

—¡Tú lo dijiste! —grité—. Ahora tú reputación está por los suelos te metiste con tu secretaria la que jamás estará a tu altura has de sentir que caiste muy bajo, mi madre tiene razón jamás me querrías en serio, a tu lado siempre seré basura.

—¡Nunca vuelvas a decir eso Pan! —gritó para mí sorpresa—. Tú si eres todo para mí, te amo, te amo como nunca pensé poder amar, yo no me refiero a mi reputación ante todos sino ante los ojos de tu mamá.

—No mientas...

—No lo hago amor —tomó mis manos hablándome mas calmado—voy a hablar con tu mamá no te preocupes, aclararé todo con ella.

—No Trunks ¿Por qué?

—Porque te amo y no quiero que me tenga en contexto de patán y si quiere que nos casemos, pues nos casamos y ya.

—Pero Trunks...

—No te preocupes hablaré con ella y no importa si me reclama te aseguro que me ganaré a mi suegrita déjalo todo en mis manos ¿Sí?

—Sí —lo besé pero me separé pronto, no podía parar de sonreir y me limpié las lágrimas, si es como lo pensé de verdad me ama.

—También quisiera hablar con tu padre Pan.

—Aún no es tiempo para eso Trunks, acaba de salir del hospital y una noticia así...

—Lo sé, sería muy dura esa noticia.

—Además hay algo más.

—¿Qué pasa?

—Saben lo de tu padre y... Y eso son puntos en contra de nuestra relación ellos no querrán que estemos juntos.

—Tendrán que aceptarlo Pan, de alguna manera.

—No lo sé Trunks, tal vez lo harían si tú lo denuncia...

—No —me interrumpió—. Yo no puedo hacer eso nunca Pan, pídeme lo que quieras pero eso no.

—Pero amor si tu lo haces tal vez...

—No Pan, no lo haré nunca y por favor no insistas es un no definitivo y punto, no abras más el tema por favor.

—Si amor —bajé la mirada triste.

Trunks.
—Es mi padre Pan, sea lo que sea, jamás podría hacer nada contra él, además ¿Es una relación de dos no? Podemos vivir nuestra vida sin que nos importe la de nuestros padres —le levanté el rostro y la besé pero no correspondía.

Aún así me provoca demasiado aún, abracé sus brazos a mi cuello y la cargué hasta sentarla sobre su escritorio colocándome entre sus piernas pero me detuvo.

—No quiero Trunks —susurró.

—Solo un momentito vamos.

—No quiero.

—¿Ahora te vas a enojar porque no quiero cumplir con lo que quieres?

—No estoy enojada, pero si pensé que lo harías con el tiempo por nosotros.

—Pues pensaste mal Pan porque eso nunca pasará.

—¿Acaso no tienes miedo?

—No, no tengo miedo y tú tampoco deberías tenerlo.

—No lo tendría si tú te decidieras, hazlo por favor por mí y yo te prometo que le diré a mi padre de lo nuestro.

—¡No lo haré entiéndelo! he cumplido con todo lo que querias pero eso nunca y como no quiero terminar discutiendo contigo mejor hablamos después.

—Es una charla de la que nunca podrás huir y de una vez te digo que yo no podré vivir tranquila sabiendo eso y que tú no hagas nada al respecto, eso te hace como él, deberías pensar si me quieres más a mi que a él.

—¡Pues te jodes Pan! No soy como él pero mas bien yo te doy un consejo piénsalo tú y muy bien piensa si de verdad quieres seguir conmigo o no porque yo nunca haré eso —la solté y me di la vuelta enojado.

Jamás le haría eso a mi padre aúnque ella me lo pida, mi padre nunca me ha dado la espalda aunque muy a su manera y sea lo que sea lo respeto ella no logrará que yo haga eso mi padre es la única figura masculina que tengo en mi vida, el bien o mal siempre estuvo conmigo, en cambio Pan acaba de aparecer, no es que no la ame pero... Pero yo nunca le haré eso a papá.

Estaba tan furioso y con ganas de gritarle a alguien que estuve a punto de gritarle al señor que recogía la basura en la esquina del pasillo, un momento, se supone que nadie sube aquí sino sólo muy temprano por la basura ¿Quién es él?, me quedé viendolo fijamente pero una capucha ocultaba su rostro y su ropa no parecía de personal de la empresa y al ver asus zapatos pude comprobarlo son de última moda ¿Qué conserje usa zapatos de moda? Intenté acercarme pero salió corriendo y yo tras él, para mi mala suerte mi hermanitas Bra se interpuso en mi camino.

—Hermano ¿Por qué corres? —preguntó confundida.

—Estoy ocupado Bra ¿Qué quieres? —cuestioné intentando pasar.

—Pues que salgamos a comer y de compras me debes eso.

—Estoy ocupado pero ve con mi novia chao Bra lo siento ahora no puedo —contesté haciéndola a un lado volviendo a correr.

—¡Oye! ¿Cómo de dejas sola? ¡Trunks vuelve acá!