Capítulo 11
••• Compras Y Revelaciones •••
Ir de compras es algo que muchas chicas disfrutan, no estoy generalizando, pero ¿Quien no ama tener un par nuevo de zapatos o un bello vestido para acentuar su belleza? O bien, si no te gustan esas cosas también podrías ir de compras por un libro, por un instrumento musical o alguna cosa así ¿No? Al final de cuentas a todos nos gusta tener cosas nuevas y escogerlas por nosotros mismos. Regresando al tema principal, a muchas chicas les gusta ir de compras... Pero en mis años de vida jamás había conocido a alguien que mostrará la emoción que muestran las tres chicas que corren de un lado al otro con atuendos que desean probarse, son como niñas pequeñas que buscan en cada aparador cosas que van desde vestidos de gala para la fiesta de esta noche, hasta cosas que no tienen nada que ver cómo trajes de baño, sombreros, miles de pares de zapatos, lentes de sol y otros artículos de moda... Y debo decir que me parece adorable que estén tan felices, yo estoy consciente de que esto es nuevo para ellas, tener una chequera disponible para sus antojos y poder tener la oportunidad de disfrutar de sus jóvenes vidas es algo que ellas no han tenido... O al menos no de una forma desinteresada.
¿Ya sabes que te llevarás? -pregunte hacia la rubia que caminaba hacia mi-
Solo este vestido -dijo con un vestido negro entre sus manos-
¿Solo eso? -pregunte extrañada- Si te vi desfilar con mil millones de cosas...
No queremos abusar de ti... -susurro mientras veía a las chicas regresar las cosas a sus aparadores-
No lo hacen -suspire exasperada- ve y diles que pueden tomar lo que ellas deseen... Y tú puedes tomar lo que quieras de esta tienda o de la tienda que quieras, Grace... Eres mi reina, mereces el universo entero y te lo daré si lo deseas
Okey... -sonrió ligeramente y regreso con sus amigas, habló un momento con ellas y estás se mostraron aún más emocionadas-
Tara y Carla son sus nombres reales... Dos chicas que al igual que mi lindo ángel tuvieron la mala fortuna de caer en el Sapphire, las tres chicas poseedoras de una belleza deslumbrante, con sonrisas radiantes en sus rostros y con pasados tormentos que las orillaron a trabajar en ese lugar... Verlas a las tres disfrutar tanto de una actividad como está me hace preguntarme cómo han sido sus vidas, lógicamente entiendo que fueron muy distintas a las mías, pero quisiera profundizar en ellas... Sobre todo en la de Grace por qué después de todo me voy a casar con ella y al hacer eso no solo me voy a casar con su presente, sino también con su futuro y con su pasado. A mi mente regreso el día que entró por primera vez a la biblioteca de mi casa... Y la palabra orfanato regreso a dar vueltas en mi cabeza, la curiosidad surgió en mi sistema dando paso a muchas preguntas a las que pronto les buscaría respuestas.
Paso un rato antes de que las chicas decidieran que comprar, salimos de ella tienda con varias bolsas y tres chicas felices disfrutando de el momento que me alegró proporcionarles. Subimos de nuevo al auto y me dispuse a llevarlas a la casa.
Muchas gracias por todo lo que nos compraste, Nicole... Grace tuvo suerte de encontrarte -afirmo Tara antes conocida como Natasha-
Al contrario, yo tuve suerte de encontrarla -sonreí sin dejar de mirar el camino-
Oww eso me hace creer que son una de esas parejas clichés en los libros -dijo Carla antes conocida como Luna-
¿Pareja cliché? -pregunto la rubia a mi lado-
Si, es que en las historias cliché el hombre rico se compra una esposa así como Nicole te compro a tí, luego pasan dos segundos y ellos ya se profesan amor eterno, tienen un hijo y son felices por siempre -hablo rápidamente la castaña-
No es nuestro caso -afirme divertida- para empezar yo no compre a Grace... nosotras firmamos un contrato en el que ambas salimos ganando y para terminar yo no creo que el amor pueda surgir en un segundo, pienso que es más complicado que eso
Ah, ya veo... -susurro y pude sentir la desilución que mis palabras le causaron-
¿Cuando será su boda? -pregunto la pelinegra-
En dos semanas -respondió Grace-
¿¡Dos semanas!? -gritaron al unisono las dos chicas en la parte de atrás-
Tenemos que casarnos lo más pronto posible para que yo tomé posesión de los bienes -admití-
¿Y no se considera fraude el hecho de que te cases solo por obtener la herencia? -pregunto Carla- podrías meterte en problemas y meter también a Grace...
Todo estará bien -declare- si tenemos algún problema tengo los medios para solucionarlo, pero tengan por seguro que no voy a ocasionarle ningún problema a Grace
¿En qué trabajas exactamente? -cuestiono Tara-
Soy arquitecta -respondi sin despegar la mirada del caminó-
¿Cuál dijiste que era tu apellido? -pregunto de nuevo de forma incriminatoria-
Harrington -declare confundida por sus palabras-
Ah... Tu padre era Frederick... -me detuve en un semáforo y mire por el espejo hacia la castaña que me miraba de forna extraña-
¿Que con eso? -pregunte sería-
Lo conocía... No pretendo ser maleducada, pero el era mi Daddy -declaro con una mueca divertida-
¡Tara! No puedes decir esas cosas... -la regaño Grace-
El jamás te menciono -afirme-
Nunca lo veías, era lógico que no supieras de mi existencia -sonrió-
El no era precisamente un gran padre que tuviera mi cariño... -susurre mientras volvía a poner en marcha el auto-
Si lo sé y lo comprendo... -afirmo-
No sé por qué te estás portando así, pero ya deja de hacerlo, Tara -pidió mi chica- estás hablando de el padre de mi prometida, no te comportes como si fueran mejores amigas
Lo siento -susurro avergonzada-
El resto del camino fue silencioso y bastante incómodo, podía sentir la molestia que irradiaba el lindo ángel a mi lado... Y la verdad la entiendo por qué es obvio que no quiere incomodarme, es normal.
Honestamente no sé que pensar sobre el vínculo que tenían Tara y mi padre, sin duda me parece extraño y un poco asqueroso, pero eso no es lo que me preocupa... Me preocupa el hecho de que es posible que ella conozca la verdad que se esconde detrás de el apellido Harrington.
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