Una tragedia se avecina. La confrontación con Némesis Prime comienza.
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*Optimus*

No pude procesar lo que estaba viendo. Ante mí tenía a un mech con mi misma cara, pero sabía que no era yo. Era alguien completamente diferente; probablemente de otro mundo.

Tenía muchas preguntas exigentes de respuesta, pero mis pensamientos se congelaron en el momento en que lo vi mostrar la cabeza de Megatron.

Lo había asesinado... tan sádicamente, pero además de eso, se atrevió a profanar su cadaver.

No puedo evitar que la ira se apodere de mí. Él fue... mi hermano alguna vez.

-Megatron fue un gran anfitrión, el mejor-Musita con descaro, tomando con ambas manos la cabeza, haciendo como que hablaba con ella. Burlándose en nuestras caras -¿No piensas lo mismo?

Mis compañeros están atónitos, emitiendo comentarios aún impactados.

-No puede ser...

-Ha matado a Megatron.

Escucho un bajo sollozo a mi espalda. Me giro a ver a Starscream de rodillas, boquiabierto de horror y tristeza, al borde de un desgarrador llanto.

Gatea tropesadamente, sin importarle sus fugas o piezas faltantes que se acumulan en la tierra.

- No...- Espeta con voz quebrada. -¡No...! Megatron...- Mi doble lo mira, doblegando su expresión con incógnita.

- ¿Te lo quieres quedar? Lo siento, lo trage especialmente para Optimus Prime, pero puedes decirle a él que te lo preste después. -Me mira, algo en mi interior se mueve con repudio. -Después de todo, reunirse con un viejo amigo es algo único en la vida, ¿no?

-¡¡¡AAAHHHH!!! ¡¡AAHHAAHHH!!-Starscream se derrumba en un llanto ensordesedor que me hace compadecerme de él, mientras llora desquiciado y sin consuelo.

-Tú, atrapa- Reacciono de mi transe cuando la cabeza de Megatron me es arrojada sin aviso e instintivamente la atrapo contra mi parabrisas.

Quedo estático al tenerlo entre manos mirandolo más de cerca. Su metal... está tan estropeado, sus ojos apagados y con grietas y una expresión de... ¿Resignación? ¿Tristeza?

Me es imposible descifrarla.

La tétrica voz de ese mech vuelve a atravesar mi aparato auditivo, agitando mi calma.

- Pensé en quedámelo, pero Megis no quiso hablar conmigo; así que es todo tuyo- Está por meterse en su nave de nuevo, mas no le permitiré retirarse tan rápido.

- ¡Alto! ¿A dónde te diriges?

- Quisiera quedarme a jugar con ustedes, pero estoy algo cansado después de destruir la nave de los Cons. Me tomaré mi tiempo para instalarme en este planeta y espero... que sus habitantes me entretengan.

-¡No te lo permitiremos!- Ruge Bulkhead apuntándole -¡Baja aquí y pelea!

- Bye, bye...- Un arma del costado de la nave es activada, apuntándonos con lo que parece un cañón explosivo. El mecanismo del interior brilla empezando a girar, preparando el disparo.

-¡Cubranse!- Apenas corremos unos pasos cuando una explosión a nuestras espaldas nos alcanza, levantando una nube de polvo y escombros donde vamos a parar al suelo, aturdidos.

- La próxima vez nos reuniremos para una emocionante competencia por sus vidas. ¡Les daré los detalles luego!- Fue lo último que alcancé a escuchar seguido del motor de la nave que se desvanecía en la distancia.

Entre mi nublada conciencia, la voz de Ratchet sonó por el comunicador, ayudándome a recuperarme.

-¡¿Que pasó, Optimus?! ¡¿Wheeljack?! ¡Bumblebee! ¡Que alguien me responda!- Hago un esfuerzo por ponerme de pie tras recibir una explosión tan de cerca.

Compruebo preocupado el estado de mis autobots buscándolos con la mirada por todos lados.

Afortunadamente, todos están cerca y sin daños graves, pero no mejor que yo.

-Estamos bien, Ratchet, pero temo que la peor batalla de nuestras vidas está por venir.

-¿Qué?

-Lo explicaremos de regreso a la base. Abre un portal.

Recuerdo la cabeza de mi enemigo que ya no está en mi regazo e igual la busco hayándola a metros de mí.

Ha rodado hasta quedar de frente, como si Megatron aún en la muerte me observara. Me pongo de pie aproximándome para contemplarlo con melancolía lo único que probablemente quedó de él.

Espera. Starscream. Estaba detrás de mí.

Miro a mi espalda, escuchando sollozos que me llevan a mirar más allá de la nube de polvo.

Starscream, malherido, peor que antes, tiembla y se retuerce con la cara contra el suelo, lamentandose.

Probablemente... por la trágica pérdida de su líder.
Me acerco comprendiendo su agonía; me inclino e intento hacer que me mire, mas soy rechazado abruptamente recibiendo un manotazo con escasa fuerza.

-Starscream, necesitas atención médica urgente.

-Lárgate, Prime... Quiero morir antes de volver a ver tu maldita cara...- No digo nada. Le doy espacio apartándome en silencio hasta darle la espalda.

Bumblebee y los demás nos miran desconcertados.

-Optimus, ¿lo vas a dejar ahí?

-No puedo obligarlo a nada. Él decidirá como quiere morir. Vámonos.

Sin mirar atrás, me aseguro que todos mis autobots ingresen a la base atravesando el portal. Bumblebee es el último, mira a Starscream con pesar una vez más antes de avanzar y yo le sigo.

//.....//

-¡¿Qué?!- El grito de Smokescreen resuena en toda la base tras escuchar lo sucedido.

-Un doble de Optimus... ¿Cómo es posible eso?

-No podemos alegrarnos de la muerte de Megatron después de esto, ni siquiera aunque lo intente.

-Cuando pensamos que no podía existir alguien peor que Megatron pasa esto.

-Ultramagnus no estaba delirando después de todo.

-¡¿Cómo puede tener la cara de Optimus?!

-Mantengan la calma- Guardan silencio y me miran. -Averiguaremos eso después; antes que nada, esperaremos a que Ultramagnus despierte y nos dé su apoyo en esta lucha. Sanaremos nuestras heridas y estableceremos planes de batalla, también vigilaremos todo el perímetro y obtendremos pistas de su paradero.

Ratchet me interrumpe.

- Pero no sabemos nada de él. Hasta ahora, nos mantuvimos vivos y desafiamos a Megatron porque lo conocíamos a la perfección y sabíamos contrarrestarlo, pero esto es diferente.

- Aunque está un poco loco, puede que su manera de hacer las cosas sea parecida a la de Prime- Argumenta Wheeljack. -Me refiero... al nuestro.

-¡No se parece nada a Optimus!- Arcee se acerca a un escandalizado Smokescreen.

- Lo sabemos, no se parecen en nada, pero en cuestión de apariencia, son casi idénticos.

-No podemos descartar ninguna posibilidad, pero cambiando de tema-, Busco a Knock Out que mantiene la distancia en un rincón de las instalaciones, más específicamente en el área médica. -Knock Out, no te detendremos si vas con Starscream.

-¿Ah? No creo que deba- Bumblebee se encamina hacia él.

- Escuchaste todo, ¿no?- Pone una mano en su hombro- Está destrozado y muy malherido, eres...eras su compañero y nosotros sus enemigos, morirá si no lo ayudas y tú eres el único que puede hacer algo por él. Te necesita - Knock Out ríe sarcástico y desvia la mirada.

-Te equivocas. No nos llevamos tan bien.

- K.O., si hablas con él, se entenderán. Eres todo lo que le queda. Nosotros no tenemos que ver con él, sólo aceptará ser ayudado por tí- Se queda en silencio, pensativo.

*Knock Out*

Después de pedirle a Ratchet que me prestara algunas cosas de su botiquín, decidí ir a ver a mi viejo amigo atravesando el portal.

Espero que no se haya ido.

Lo busqué por todas partes y no tardé en encontrarlo en medio de un lugar destrozado, -el mismo lugar donde seguramente fueron atacados-, de rodillas abrazando algo contra su pecho.

Suspiro dudando si acercarme. Pero cuando lo hago, la chocante escena bloquea mi capacidad de articular palabra. Starscream de rodillas, sosteniendo una cabeza... juntando su frente contra la de Megatron, hundido en un abrumador y triste silencio.

Hago el esfuerzo de endurecer mi chispa para acercarme. Adopto una postura firme caminando en su dirección de lo más natural. Me detengo a su lado y me inclino poniendo la caja de utencilios en el suelo, sin saber que hacer o decirle.

- Star...

- No me amaba - Musitó con una voz neutra y apagada. - Ambos lo sabíamos, siempre.

-...- No pude hacer más que quedarme callado, escuchándolo hablar con melancolía.

- Yo no merecía estar con lord Megatron y él me despreciaba por tener tan cerca un cuerpo tan mancillado como el mío; me lo decía solo con la mirada. Pero a mí no... - Cuando su voz se quebró, tuvo que hacer una pausa, fue entonces que el aceite comenzo a brotar de forma desconmesurada de sus ojos. - ¡...a mí no me importaba! Sí el era feliz, me bastaba con estar con él, ¡aunque no fuera de la forma en que yo quería!, ¡aunqué nunca me amara como yo le amo incluso ahora! Incluso si... pensara solo en tí o en Optimus Prime, yo... yo era feliz viéndolo todos los días...- Sentí un nudo tensarse en mi módulo, así como sentí una contracción en mis sistemas torsales. Sentía tanta lástima... pero también empatía. No me importaba en absoluto la muerte de Megatron, me afligía el alma ver a mi amigo en una situación tan deplorable, una similar por la que yo pasé.

- Estás muy mal herido. Permíteme curarte.

- ¿Para qué?

- Vas a morir si te dejo así. Primero hay que sellar las fugas y luego...- Se apartó de mí casi arrastrándose, sin soltar la cabeza acurrucándola en su regazo, mirandome con desdén.

- ¡Entonces largo!

- ¡No vine hasta aquí para nada! Sigo siendo un doctor.

- ¡Vete y déjame solo!

- ¡¿Te vas a quedar aquí a morir?! ¿Cómo si fueras chatarra? ¡Aquí no es un depósito!

- ¡Deja que me muera! ¡¿Escuchaste?! ¡Déjame morir en paz! No sabes por lo que estoy pasando- Oirlo decir eso último provocó mi ira. Le crucé la cara con un golpe. No fue muy fuerte, pero él estaba tan débil y roto que calló al suelo agarrándose desconsertado donde lo había golpeado.

Me levanté enojado, con un peso en el pecho que me lastimaba al hacerse cada vez más pesado.

- ¿Que no sé, idiota? ¡El mech de la cabeza que sostienes fue el que me arrebató a Breakdown! ¡Yo sé mejor que nadie como te sientes!- Mi grito cargado de pesar resonó kilometros a nuestro alrededor.

El silencio regresó. Estaba dolido y enojado. ¿Cómo se atrevía a decir eso? No debería sorprenderme, sin importar las circunstancias, era tan egoísta como siempre.

Su cara de incomprensión me dice... que no lo sabía.

- ¿Qué?- Giré el rostro para no mirarlo. -Lord Megatron... ¿Hizo que?

Me crucé de brazos intentando ser fuerte. Mi profundo herida aún era demasiado reciente.

- Megatron entregó a Breakdown a los humanos. Todo porque quería que fuera solo de él, su esclavo sexual. Pero cuando descubrí lo que había hecho decidí dejar a los decepticons- Baja la cabeza, dolido de escuchar la verdad.

- ¿Es por eso... que te fuiste?

- Sí... y creélo o no, los autobots me han tratado mejor en un día que Megatron en siglos.

- Con los... ¿autobots?

- Odiame si quieres, me da igual- Contrario a una crítica o sermón, que era lo que esperaba, solo se puso a llorar en silencio. Lo miré y no pude seguir conteniendo la inmensa tristeza que cargaba al identificarme de inmediato con él.

Me dejé caer de rodillas frente a Star y dejé escapar amargas lágrimas mirándole directamente.

- Te entiendo mejor que nadie... Tanto que me duele- Lloramos juntos y en voz baja, apaciguando la agonía emocional del otro. Teníamos tanto en común, incluso compartíamos el sentimiento de la pérdida de nuestro amado mech por un idiota.

Nunca lo dijimos en voz alta ni lo admitimos, pero para mí, Starscream fue... y és, mi único y mejor amigo.

Starscream comenzó a ponerse débil, no había llorado haciendo justicia a lo que estaba atravesando, lo hacía débilmente porque sus fuerzas iban en decadencia.

Cuando noté que estaba perdiendo la conciencia, lo agarré y llevé con cuidado al árbol más cercano dejándolo recargado en el tronco.

Contemplé su cuerpo abatido y más destrozado de lo que había notado. Una de sus alas fue desprendida a tirones, fue golpeado en todas partes, pero lo que me hizo horrorizar fue la ausencia de su brazo derecho.

¿Cómo puede seguir vivo en ese estado tan deplorable? ¿Ha querido seguir vivo solo para llorar la muerte de Megatron? Miro la cabeza colocada sobre sus piernas. No puedo sentir compasión por él.

Me apresuro a tomar la caja de herramientas agarrando la mecha para comenzar con el tratamiento. Antes de que la llama toque su armazón, su mano me detiene, mirandome con súplica.

- No... por favor- Tose ahogado, dejando escapar el energon que sale y escurre de su boca.

Su mirada me ruega que no lo cure, que le deje descansar y le permita un último momento de paz. No quiere ser salvado, no tiene razón de ser.

- No vale la pena, Knock Out. Vete... no pierdas... tu tiempo conmigo- Al principio no estaba dispuesto a hacerle caso, pero al entender su anhelo por el fin de su sufrimiento me hizo entender que era mejor para ambos dejarlo así.

- De acuerdo. Si estás tan seguro, entonces me iré- Me levanté y di la espalda con melancolía. Oprimí el botón de comunicación pidiendo un portal de vuelta. No tardó en aparecer frente a mí en el mismo lugar cuando llegué.

Caminé dispuesto a marcharme en silencio, cuando lo escuché.

- Gracias...- Aturdido, me detuve. - Gracias por...venir...a verme... K.O...- Permanecí de pie en el lugar, sintiendo mi chispa agitarse desbocada, hasta que... reuní la fuerza que necesitaba para mirar atrás.

Starscream estaba ahí, bajo el árbol, abrazando cariñosamente la chatarra en su cobijo. Parecía como si estuviera dormido. Sus ópticos se quedaron mirando a lo que quedaba de su preciado amante, estando totalmente apagados.

Adiós, Starscream.

*Bumblebee*

Knock Out había regresado por el portal después de ir en ayuda de Starscream. En cuanto lo veo, me acerco intrigado.

—¿Qué pasó?— Cuestioné extrañado. No se había comunicado con nosotros todo el rato que estuvo allá, mas que para regresar.

No hizo falta que respondiera.

Negó con la cabeza, decaído. Eso me hizo deducir que tal vez... no lo había logrado.

Todos guardamos silencio con pésame. Esta no es la forma... en que acabaría nuestra batalla contra los Cons. No les teníamos mas que resentimento e ira; habían hecho cosas que no merecían el perdón de nadie, pero aún así... Nadie quería que acabara así. No tenía qué.

Megatron y Starscream debieron pagar por sus fechorías y pecados, no... ser asesinados como cualquier cosa, mientras jugaban con ellos. Me pregunto si Optimuss piensa lo mismo.

Knock Out se posiciona ante Optimus encarándolo con expresión neutra y nuestro líder, claro, le devuelve el gesto.

— Optimus Prime. A pesar de mi larga historia de batalla contra los autobots y sus principios, ustedes me recibieron en su base como un aliado tras traicionar a los míos. No importa si fue por lástima o compasión, pero hoy y ahora, permíteme decir algo...— Quedamos atónitos de la sorpresa cuando K.O. se arrodilla ante él bajando la cabeza, mostrándole respeto. —Debido las circunstancias y lo que me has dejado ver de ustedes, más allá de mis erróneas creencias como ex-Con, yo, Knock Out del Distrito 15 de Vilaris, te ofrezco a tí, líder supremo de los autobos, mi eterna confianza y lealtad. Te ofrezco mi fuerza para tus próximas batallas contra nuestro enemigo en común ¡Y haré todo lo que esté a mi alcance para llevarte a la victoria contra ese maldito impostor que se hace llamar un mech de Cybertron!

Escuchar su inesperado discurso me ha dejado, no solo a mí, también a mis compañeros con la boca abierta del shock.

Knock Out... Que solía ser un orgulloso y arrogante Decepticon, acaba de... jurarle lealtad a Optimus, quien fue su enemigo por tanto tiempo.

— Levántate— Pide nuestro líder. —Agradecemos este gesto de tu parte. Con tus limitadas acciones hasta ahora, has demostrado que eres capaz de ayudarnos más de lo que esperabamos. Sin embargo... —K.O. levanta la cabeza, encontrándose con la mano estirada de Optimus. —Nuestra confianza y el compañerísmo deberás ganartelos buscando la redención por los daños que causaste en el pasado, poniendo tus servicios a nuestra disposición. ¿Lo entiendes?— Tras una mirada de seriedad, Knock Out analizó un poco sus palabras, pero no se retracto poniendose de pie, aceptando estrechar la mano de su nuevo líder.

Veo a Smooky sonreír emotivo. No puedo evitar imitarlo.

—A partir de hoy, eres parte de nosotros.

*Némesis*

La pequeña nave de batalla va ascendiendo hasta la atmósfera con el objetivo de volver a mi fortaleza flotante que espera fuera de este diminuto planeta.

Aprecio desde una ventana el panorama de los paísajes en la lejanía, encontrando algo que llama mi atención a lo lejos.

Eso parece... ¿una ciudad? Entonces hay formas de vida inteligente. Son tan pequeños... adorable.

¿Esos cybertronianos viven escondidos de las criaturas terrestres que habitan este planeta? Que decepcionante, Optimus.

Un interruptor en mi cabeza hace "clic", asaltándome con una divertida idea. Me entusiasma tanto que no puedo evitar torcer mi boca en una traviesa sonrisa. Sin querer, una carcajada se me escapa, sobresaltando al mech que pilotea el transporte, haciéndome compañía.

—Oye, piloto.

—A sus órdenes, señor...— Me le acerco por la espalda, posicionando una mano sobre su asiento, aproximando mi boca a su auricular, sintiendo cómo el miedo lo hace temblar de pies a cabeza.

—Cambia el curso en esa dirección, también quiero que hagas una llamada— Entregándome a un urgente deseo, asomo mi glosa, pasándola descaradamente por su aparato, como una caricia. Brinca sobre su asiento acallando cualquier tipo de sonido que pueda emitir.

—¿Entendido?

—S-sí... mi amo...

Esto ya me esta gustando...

Lo agarro de la cabeza sorpresivamente con la mano que tenía en el asiento, asustándolo; aun así, continúa en su labor tratando de mantenerse en curso.

Cedo a mi monstruoso impulso y ataco su receptor auditivo con mi afilada dentadura que fuerzo a hundirse más en su aparato, mordisqueándolo hasta estropear su metal.

—¡¡AAHHH!!— Su voz se desgarra por el repentino dolor. Se retuerce y patalea rogando a gritos su libertad.

Sujeto mejor su cabeza evitando que se aleje penetrando en su aparato con mi punteaguda dentadura casi deshaciéndolo, hasta que logro arrancar un pedazo de golpe.

Mi subordinado cae al suelo agitado de dolor, mientras juego dentro de mi boca con el pedazo de metal que le he quitado, mordisqueándolo con extasis.

—Hey, hey ¿Qué demonios haces ahí descansando?— Lo pateo no muy fuerte, empujándolo contra los controles donde queda recargado mientras se cubre la parte de su receptor auditivo que emite energon. —Párate y haz lo que te ordene, ¿quieres?— Articulo en un tono gentil.

— ¡S-s-sí, amo...!— Contesta entrecortado. No necesito mirarle la cara para saber que lo dice entre lágrimas.

Escupo el trozo del receptor con satisfacción y vuelvo a pararme frente al ventanal, recargando mis manos en este, mirando con maldad la pequeña población a la distancia.

Una sonrisa se extiende en mi rostro, signo de mi emoción.

— Ya sé que es lo primero que quiero hacer.

CONTINUARÁ...

NOTA: Capítulo dedicado a chipi187