Breve sinopsis:

Esto debe ser un loco amor.

No quiero amar solo yo, quiero que me ames.

Esto es un loco amor.

No estoy loco.

Junkyu

Estoy enamorado de Watanabe Haruto desde la primera vez que lo vi.

Era un viernes en la noche, y había salido a festejar con mis amigos Doyoung y Jihoon porque recién terminábamos los exámenes parciales.

Bailaba tranquilamente con ellos disfrutando de la música, permitiendo que esta me dejara llevar y eliminara el estrés restante que me quedaba por tanto estudiar. Al menos obtuve buenas calificaciones.

Esta noche se basaba en pasarla bien, para que fuera inolvidable.

Y lo fue.

Mientras bailaba, riéndome porque extrañaba esto, que no lo experimentaba desde las vacaciones pasadas, antes de entrar a la Universidad: la música alta, las personas gritando emocionadas y los cuerpos sudados de tanto movernos de un lado a otro, lo vi.

Él estaba con dos chicos, suponía que sus amigos, recostado a una pared mientras miraba su teléfono, algo aburrido al parecer de lo que sucedía a su alrededor.

Me llamó la atención por su vestimenta, toda de negro, además de su apariencia de chico rebelde y sexy. Era alto, pero sin duda alguna lo que más destacaba era su mirada salvaje.

Él me estaba mirando bailar.

Me puse algo nervioso y traté de evitar su mirada, que no se apartaba de mí. Intenté concentrarme en mis amigos, disimulando que no lo había visto y que no me sentía incómodo a la par que intimidado, pero fue imposible.

Jihoon y Doyoung comenzaron a burlarse de mí porque mis mejillas se tornaron de color rojo. Yo solo los golpeé en broma, dejando en claro que nada sucedía y que solo quería bailar.

Pero claro, eso fue antes de darme unos tragos.

Mis amigos se percataron de la mirada intensa del chico alto y me empujaron para que me le acercara. Yo lo hice porque no me quedaba otro remedio que caer por mis impulsos.

A estas alturas ni siquiera me importaba si estaba acompañado o no. Fui hasta donde él estaba y me le paré enfrente, mirándolo de arriba a abajo.

-Creo que estoy enloqueciendo. Pero noto como no dejas de mirarme. Llámame raro, pero siento que nuestros cuerpos de alguna forma están conectados. ¿Quieres bailar?

El chico alto soltó una leve risita.

¿Le parecía gracioso lo que yo le había dicho? Daba igual ahora mismo, aunque prácticamente me le hubiera confesado a alguien del que ni siquiera conocía el nombre.

Comenzamos a bailar, mientras nuestros cuerpos se pegaban cada vez más, como si se trataran de dos imanes. Admitía que me había pasado al tomar, pero este chico era increíblemente atractivo. Yo no sabía lo que estaba haciendo, pero me le acerqué aún más, rodeando mis brazos en su cuello, y lo miré a los ojos. Él al parecer estaba sobrio, al no tener la misma expresión tonta que seguramente yo tenía.

Lo continué mirando durante unos segundos, apreciando su hermoso rostro y proporciones. Tenía el cabello negro, los ojos café oscuro, una nariz afilada y unos labios pequeños.

Esos labios. Mmmm...

Me pregunto a qué sabrán.

Sin importarme ni preguntarle me abrí camino solo porque sí. Digo, ya había aceptado bailar conmigo, estábamos tan cerca, era cuestión de segundos que nos llegásemos a besar.

Pero no pasó.

Cuando estuve a punto él se alejó, aflojando mis brazos y apartándose de mí, supuestamente porque tenía que irse. Pero estaba seguro de que se había burlado de mí, y peor aún, me había dejado con las ganas.

Los chicos me molestaron muchísimo camino a casa por lo que sucedió. Yo no dejé de pensar en él esa noche ni las que se avecinaban. Más tarde averigüé que su nombre era Watanabe Haruto.

Nunca fui una persona de ir tanto a fiestas. Pero desde ese día me prometí a mí mismo que debía besarlo. Todo porque quería conocerlo más. Porque se había robado toda mi atención desde que nuestras miradas se cruzaron.

Y hoy me encuentro de nuevo, mirándote, y aunque no respondas, mi corazón sigue llamándote.

Así como lo había hecho conmigo, descubrí que lo hacía con otros. Todo porque según lo que escuché, él no era un chico fácil. Bailar era una cosa... Pero besar... Iba más allá para él. Watanabe Haruto era todo un reto, pero era uno que estaba dispuesto a aceptar.

Sé que no soy el único que quiere estar contigo...Estoy enloqueciendo.

Desde ese día, nos seguimos encontrando. Y sucede lo mismo. Bailamos un rato, mas justo cuando pienso que es el momento y voy a lanzarme sobre él, solo se aleja.

Él me hace sentir cosas que nunca había sentido. Todo de mí está enfocado en la manera en que actúa, y porqué es así.

Pero...

¿Por qué te alejas cada que trato de acercarme a ti?

Me gustaría poder respirar cerca de ti. Supongo que no sabes como me siento. O quizás sí lo sepas y por eso lo haces.

Recuerdo una vez en que no se apareció. Mis amigos se percataron de cómo me sentía al respecto porque no dejaba de buscarlo con la mirada. Me hacía sentir mal no poder verlo. Después de todo, mi objetivo principal al venir aquí, cambió radicalmente una vez lo conocí. Ya no era bailar, ahora solo era...bailar con él.

No puedo borrar el aroma que has dejado en mí.

Estoy bailando como loco, mientras llamo tu nombre.

Aparece, estúpido, necesito verte. Esto no es lo mismo sin ti.

Me preocupo todos los días por ti. Creo que me estoy enamorando.

Mi cabeza no deja de dar vueltas pensando en ti.

Por eso es que, cierta noche, decidí acercarme a él, más decidido que nunca, y lo tomé por el brazo, invitándolo a que se uniera a mí en la pista de baile.

Esta vez no me iría a rechazar tan fácil. Llevaba pensando en lo que le diría durante meses. Estaba preparado para todo. Definitivamente iba a besarlo esta noche. Porque quería ganar su corazón y que me viera únicamente a mí, así como yo lo había hecho con él desde un principio.

-Watanabe Haruto...-Dije rodeando mis brazos en su cuello, como siempre, para después mirarlo y que él me sonriera-. Eres el único que quiero, ¿qué no te das cuenta? Mi corazón está esperando por ti. Pero al parecer tú no sientes lo mismo que yo siento, y eso me tiene al punto de enloquecer. Así como lo he hecho durante todos estos meses y debes de haberlo notado, no me rendiré contigo. Puedo ser tus alas y llevarte al cielo si así lo deseas. He caído por ti. Me he enamorado de ti, ¿vale? Te amo, así que por favor, dame la oportunidad de probar tus labios, al menos por una vez. Porque no puedo dejar de pensar en ti. Me tienes loco, Haruto.

Haruto sonrió, y, convincente por mi confesión, rozó su nariz con la mía y jugueteando un poco mientras reía, haciéndome temblar, me besó él a mí.

Y la música seguía, aunque nuestros cuerpos hubieran dejado de bailar. Todas las personas nos miraban.

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Resulta ser, que Watanabe Haruto había caído por Kim Junkyu desde el primer instante en que lo vio bailar, y esperaba a que este estuviera lo suficientemente enamorado de él como para permitir demostrárselo.

Nota:

Llegué, más rápida que Flash, con nueva historia. 💃

Y se preguntarán, ¿por qué debería leerme esta madre cuando hay tantos libros Oneshots Harukyu?

Pues porque es mía, okno.

Porque será diferente, las situaciones se desenvolveran de acuerdo a mis sentimientos por las canciones de Treasure. Y me imagino cada escenario, y es indudablemente hermoso.

Espero me apoyen ^•^ ❤