"¡Esto es sorprendente, Harry!", Sirius exclamo mientras comenzaba a ver más detalladamente su reloj Lilium. El suyo no tenía cuero, como el de Draco Malfoy. En cambio, parecía hecho completamente de metal, en un color rojo, casi como si fuera puramente rubí.

"Ciertamente. Es un objeto muy útil. Ayudara mucho a las personas. Felicitaciones, Harry", Remus felicitó a Harry, quien estaba sentado frente a él. Su reloj, era de un color negro metálico, con una carcasa plateada.

Harry se rasco un poco la nuca. A decir verdad, él se sentía algo avergonzado. Recibir las felicitaciones de personas que le importaban, fue mucho más gratificante. Y fue mejor cuando escuchaba el tono orgulloso que tenía Sirius.

Aún así, tenía otras cosas de las que hablar, al parecer. Sirius lo había contactado para que fuera a hablar con él, en Grimmauld Place. Cuando entró en la vieja casa, se quedo parado mirando el pasillo de la entrada, que había cambiado por completo, por paredes de una madera más clara, al igual que el suelo. Había una alfombra más colorida en el suelo; era larga e iba desde un poco después de la entrada, hasta el final del pasillo.

Era un cambio bastante sorprendente, tomando en cuenta lo vieja, sucia y oscura que se veía la casa. Pero cuando llego al salón, casi se río al ver una gran habitación de distintos colores. Parecía como si Sirius y Remus, estuvieran con el trabajo a medio terminar, pero también indecisos sobre que colores y decoraciones usar.

"Por cierto, Sirius, ¿sobre qué querías hablar?"

"¡Vacaciones, Harry! ¡Vacaciones!"

"¿Qué?", un Harry confundido, pregunto.

Un Sirius emocionado, puso los brazos en la mesa y se inclino un poco hacía delante, mirando directamente a Harry, con una gran sonrisa. Su bigote incluso parecía estremecerse ante su sonrisa.

"Ahora que ya no soy un prófugo, quiero divertirme un poco. Ya sabes, disfrutar de la libertad. Y Remus aquí, me dio una buena idea: ¡Irnos de vacaciones!".

"Entonces... ¿quieres ir de vacaciones y me estas invitando?"

"¡Si! Tenía pensado ir a Italia, las primeras dos semanas de vacaciones. Luego de eso, a donde el viento nos lleve. ¿Qué dices?".

"Bueno, tener unas buenas vacaciones, creo que sería grandioso", Harry comentó mientras pensaba detenidamente. "Tengo que arreglar algunas cosas. Y lo siento, ¿pero puedes posponer el viaje unos días?"

"Oh... ¿Por qué?"

"Le prometí a Draco llevarlo a Londres Muggle. Junto a su novia, Astoria. Y la hermana de ella, Daphne".

Sirius parpadeo, luego miro a Remus, quien le devolvía la mirada, totalmente confundido.

"¿Draco, Harry?", pregunto Remus.

"Draco Malfoy.... Ah, lo siento. Es verdad que no les he dicho. La razón de porque todos los mortifagos fueron capturados, se debe a la ayuda de Draco. Vio los errores de su padre. Y el infierno en que vivía su familia, así que hemos trabajado juntos. Fue quien convenció a Narcissa. Y luego, ambos acorralaron un poco a Lucius".

Harry se encogió un poco de hombros.

"Supongo... que hemos terminado con nuestras diferencias. De hecho, creo que somos amigos. Aunque algunas veces me dan ganas de golpearlo en la nariz".

Los dos hombres adultos mantuvieron el silencio por un largo momento, hasta que Remus decidió hablar. "Bueno, Harry... eso es... sorprendente, por decirlo menos. Cuando te conocí, eras más... ".

"¿Impulsivo? Si, he visto mis errores, Remus".

"Por mi parte, no me importa mucho", Sirius comentó antes de soltar un suspiro un poco cansado. "Ya he tenido suficiente de luchas familiares, desprecios y amenazas. Sin embargo, no confió totalmente en ellos. Pero, si tu has trabajado con él, confiare en eso, Harry".

"Gracias... ", Harry sonrió, notando que Sirius parecía mucho mejor desde la última vez que lo vio. No se veía tan flaco y, de hecho, se notaba lo limpió y ordenado que estaba.

"Bien, no hablemos de cosas deprimentes. Mejor hagamos planes, o cualquier otra cosa que no sea demasiado estresante".

Harry apunto hacía los dos ante eso. "Un tema que creo importante, se trata de mi casa. Hice que repararan la casa en Godric's Hollow, así que si quieren pasar por ahí, o quedarse cuando lo necesiten, simplemente vayan. Dobby se encarga de mantener todo en orden".

"¡¿Lo hiciste?! Eso es genial, Harry, muy genial. Ha pasado tiempo desde que no he visitado la casa de tus padres... Oh, bueno, ahora tuya".

"También me gustaría echar un vistazo", Remus comentó.

"El fin de semana es buen momento, ¿verdad? Pueden ir a comer y beber algo".

"Me gusta como suena eso", Sirius sonrió con fuerza. Después de todo, pasar tiempo con Harry, era uno de sus objetivos. Después de días y semanas de tener libertad, había pensado mucho. Remus había ayudado en ese punto, diciendo que no podía tratar a Harry como a su padre, James. Podrían ser parecidos físicamente, pero no eran lo mismo.

Aunque, no es que Remus supiera demasiado. Sin embargo, después de ver y escuchar sobre todo lo que Harry había hecho, entendió que no necesitaba un padre. Tampoco una madre. Necesitaba que Sirius, como padrino, fuera eso. Necesitaba que Remus, como una especié de tío honorario, sea eso. Ya había pasado el punto en el cual Harry necesitaba un padre y una madre.

"Podría enseñarte algunas cosas relacionados al alcohol. Después de todo, ya estás en la edad de poder probar, aunque sea un poco".

"Solo espero que no te sobrepases".

"Oye, ¿cuando he hecho tal cosa?"

Remus le dio una mirada sin emociones, causando que Harry riera un poco y Sirius tosiera.

"Dejando de lado la visita a casa de Harry, quería hacer otra cosa más. A decir verdad, lo recordé hace poco, pero fue algo que tenía pensado hacer con tus padres"

Harry miro con curiosidad a Sirius. Eso fue algo nuevo, y también interesante.

"¿De que se trata?"

"¡Una película!"

Harry parpadeo, un poco desconcertado. Sin embargo, cuando le pensó un poco, tenía algo de sentido. Estaba claro que su madre conocía tal cosa, y es muy probable que su padre junto con Sirius, tuvieran curiosidad.

"Entonces quieres ir al cine. Claro, no es mala idea. Tampoco he ido nunca a un cine, así que puede resultar en una experiencia divertida".

"¡Genial! Entonces ha sido decidido".

"Podemos ir ahora, si quieres".

"¿En serio? ¿No hay que pedir, ya sabes, un asiento?"

"No... por lo que se, los asientos son escogidos ahí mismo. Simplemente compras una entrada y algo para comer y beber mientras miras la película".

"Oh... ¡Oh! ¡Entonces vamos! Ire de inmediato por mi abrigo", Sirius avanzo y subió corriendo por las escaleras, dejando a Remus y Harry.

"A veces, todavía parece un mocoso", Remus comentó con una sonrisa.

"¿No es bueno? ahora disfruta de su vida. Solo falta que conozca una buena mujer para que tenga pequeños Sirius".

"Por el amor de Merlín, no. Eso sería desastroso. ¿Te imaginas niños pequeños tan revoltosos causando desastres? Y tendrían que ir a Hogwarts. Minerva seguro que se retira antes de que lleguen".

"¡Ja! Toda la razón, Remus", Harry soltó una carcajada mientras imaginaba tal cosa. Pero, casi de inmediato, miro a Remus con algo de seriedad. Eso llamo la atención inmediata del hombre lobo.

"¿Qué pasa?"

"Hablamos de Sirius, ¿pero tú?".

"Yo... ", Remus no pudo continuar. Se detuvo, un poco incomodo. "Yo... lo intento, creo".

"¿Nymphadora?"

Los ojos de Remus se abrieron de par en par con pura sorpresa.

"¿Cómo lo sabes?"

"Eso no importa. Pero Remus, asegúrate de hacerlo bien. Hazte responsable de tus emociones y decisiones. No culpes al lobo por lo que sucede contigo".

Pasando su mano por la nuca, Remus miro hacía otro lado. A decir verdad, Harry había dado justo en el clavo. A pesar de lo que sentía por Nymphadora Tonks, todavía dudaba mucho. Había muchas preocupaciones en su mente: desde dañar a la mujer que amaba por accidente, o que cualquier futuro hijo, naciera con su condición.

Harry negó con la cabeza al verlo así.

"Recuerda que tienes personas que te apoyan a tu alrededor. Quizás no seamos tantos, pero seguimos contando".

"Harry... ", Remus lo miro, sintiendo un nudo en su garganta. Sus ojos incluso brillaron por culpa de lagrimas contenidas.

"Gracias".

Los dos sonrieron en ese momento, contentos con lo que se había dicho. Con el apoyo que los dos tenían en el otro.

"¡Ya llegue! Vamos rápido".

"Está bien. Bien. Sirius, que infantil puedes ser".

"Es mi primera vez".

"Esas palabras pueden ser fácilmente malinterpretadas. No las digas de nuevo".

"Ja, ja... qué gracioso".

"¿Viajaremos en moto? Recuerda que recuperaste tu moto de Hagrid".

"Cierto. Hagamos eso, pero sin volar".

Harry asintió, esperando el viaje. Pero también pensando que sería útil tener una licencia de conducir. De hecho, ya estaba pensando en investigar que hacía falta para tener una. En cuanto a un vehículo, Sirius podría comprar uno con el dinero que le pueda entregar. Tenía mucho de eso.

Aunque, ahora mismo, es mejor pensar en esa película. Otras cosas complicadas, para después.

Al fina, era hora de divertirse por un par de horas.

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