Capítulo 18: Reunión
Cuando llego al despacho de director, Dumbledore estaba sentado detrás de su escritorio, pero se levantó rápidamente cuando vio a Harry entrar junto a McGonagall. Había esperado que el hombre mayor, se viera un poco enojado, pero solo podía ver decepción en su viejo rostro.
Casi lo hizo resoplar, casi.
"Harry... "
"Director Dumbledore", Harry asintió y se quedo parado antes del primer escalón que daba al escritorio del director. Los dos se miraron por unos minutos, antes de que Dumbledore moviera su cabeza cuidadosamente, de un lado a otro.
"Honestamente, no tengo palabras para lo que hiciste"
"Tengo varias", Minerva resoplo. Harry la miro de reojo, notando que apretaba su bastón con fuerza. "Fue una tontería. Fue peligroso. Irresponsable. Usted no solo se escapo del castillo, sino que entró en el Ministerio de Magia y uso magia sin pensar en las consecuencias".
En silencio, Harry miro a Dumbledore.
"¿No tienes nada que decir, Harry?"
"¿Quieres que me disculpe, director?"
"Para empezar, si. Lo que hizo es... podrías haber causado consecuencias inimaginables, para todos".
"... ¿en serio?", Harry pregunto en voz baja, para luego resoplar con fuerza. "Hice lo que no quisiste hacer, pero que la mayoría de personas en esta isla, esperaba que hiciera".
Apretando un poco los labios para no sonreír con tanta fuerza, Harry lo miro por unos segundos más.
"Pensé que serías más inteligente, director".
Dumbledore frunció el ceño y hablo con más fuerza, causando que su bigote se estremeciera. "¿De que estas hablando, Harry? No te entiendo".
"Salir del castillo, es relativamente fácil. Solo tienes que saber que camino tomar. Y con una capa de invisibilidad, las cosas son mucho más fáciles. Sin embargo, ¿no se ha preguntado como es que logre entrar en el Ministerio? O más importante, ¿por qué Voldemort estaba en ese momento ahí?".
Ambos adultos se quedaron en silencio al escuchar las palabras de Harry. Los dos se dieron una mirada antes de volver a dirigirlas hacía Harry.
"Parece que no pensaron en esas cosas, ¿eh? Creo que lo sobreestime demasiado, director"
"Oh... por cierto, esa profecía... ", los hombros de Dumbledore se tensaron en ese momento. "La destruí. El orbe, quiero decir. No es necesaria".
"No se lo que te ha pasado, pero veo que no entiendes las consecuencias de tus actos".
"¿No es tu culpa?"
"¿Qué?"
"Decides quedarte callado sobre las cosas importantes. Le habías dicho a la orden, que comenzara a patrullar en el Ministerio de Magia, ¿verdad? Para proteger la profecía. Decidiste quedarte callado cuando se me estaba acusando por culpa de esos Dementores, hasta que apareciste de sorpresa en el juicio. ¿Querías que te considerará mi salvador?"
"¡No es así!", la barba de Dumbledore tembló un poco cuando levantó la voz.
"No me dijiste nada sobre la profecía. Nunca me has dicho las cosas importantes cuando se relacionaban a mi vida", Harry entrecerró los ojos un poco enojado en ese punto. "Ni siquiera cuando sabías que tenía un pedazo del alma de Voldemort en mi cicatriz".
Harry resoplo al ver la mirada sorprendida de Dumbledore y escuchar el jadeo de Minerva.
"Usted, sin quererlo, ha jugado con mi vida, señor".
"Eres joven... ", murmuro Dumbledore. "Yo pensé que... "
"¡¿Usted pensó?!", Harry levantó la voz. "¡Ese es el maldito problema! Piensas, piensas y sigues pensando, sin hacer una puta mierda".
"¡Señor Potter!"
Harry no reacciono ante la advertencia de McGonagall y continuó. "¡Piensas que tienes el derecho de manejar mi vida! ¡¿Pero que hay de mi?! ¡¿Acaso no tengo derecho a tomar las decisiones en mi propia vida?!"
Inhalando con fuerza y calmando su mente, Harry se paro más recto donde estaba.
"Hice más de lo que usted ha hecho desde que Voldemort regreso. Dime, ¿qué medidas tomaste cuando entendiste que ese idiota oscuro estaba en forma de espíritu, vagando por quien sabe donde?"
"Lo que hice anoche... fue lo mejor. Ahora mismo, todos saben que regreso. Ahora mismo, Madame Bones se ha preparado adecuadamente para cualquier ataque. Las personas comenzaran a cuestionar a Cornelius Fudge, por no hacer nada, incluso por esconder el hecho de que Voldemort realmente regreso".
"¿Entiendes? Las posibilidades de que el Ministerio sea tomado, son casi nulas. Los mortifagos que acompañaban a Voldemort, ahora están en celdas del Ministerio, sino en Azkaban. Él... está completamente solo, sin apoyo.
"Y lo mejor de todo... es que no tendré que soportar interminables voces que me digan loco".
"Las personas tendrán miedo", Dumbledore suspiro y se paso la mano por su cara. Aunque también pensaba en lo que Harry había dicho.
"¿Y estabas dispuesto a sacrificar a un adolescente en pos de que adultos no sientan miedo?"
El despacho se quedo en un tenso silencio. Harry miraba a Dumbledore, mientras este le devolvía la mirada. Y desde atrás, Harry podía sentir la presencia un poco inquieta de Minerva. En ese momento, ni siquiera los ruidos de algunos objetos en el despacho, parecían hacer ruido.
"Suficiente".
Una voz vino desde arriba. Harry frunció el ceño cuando se dio cuenta que la voz provenía de uno de los varios retratos en el despacho. Era un antiguo director.
"Está claro que no entiendes las responsabilidades de Albus, como director de Hogwarts. Solo eres un chico que no parece conocer el mundo real"
Harry paso su lengua por su labio inferior, bastante descontento. Y las palabras que salieron de su boca, tenían un tono afilado y peligroso: "No necesito la opinión de una reliquia del pasado como tú, Phineas Black. Así que cierra la boca, idiota endogámico".
"¡Señor Potter!"
"¿Acaso dije algo equivocado? Me dicen que no conozco el mundo real, cuando él es solo un retrato que no puede ver la realidad actual en la que se encuentra la comunidad mágica de este país. La gente de aquí... adultos que deberían proteger a los jóvenes, se recuestan en sus laureles, temblando de miedo, ¡esperando que yo los salve a todos! Y cuando piensan que hago algo mal, me apuntan con el dedo. Me dicen loco. Dicen que soy alguien que solo quiere gloría y cosas sin sentidos".
"Me cansé de esperar que dichas personas, hagan algo. Así que hice mis propios movimientos. Derrotare a Voldemort, pero bajo mis propias condiciones, bajo mis propios planes".
Después de decir eso, Harry se dio la vuelta y camino hacía la puerta, para poder salir y retirarse.
"Señor Potter, todavía no hemos terminado", Dumbledore dijo con seriedad.
"Yo he terminado. No me haga abrir la puerta a la fuerza, director".
"No puedes hacer eso", Phineas gruñó enojado y resentido por las palabras anteriores que se le dirigieron. "El despacho es solo para que el director lo maneje".
"Oh, no deberías haber dicho eso. El chico claramente es una mezcla poderosa de Slytherin y Gryffindor".
"El señor Fronsac tiene razón", Harry dijo antes de levantar la mano hacía Dumbledore, quien levantó sus cejas. Sin embargo, pronto se movió hacía un lado cuando sintió un ruido detrás de él. Sus ojos se abrieron en estado de shock al ver la espada de Gryffindor pasar volando frente a su rostro.
McGonagall había sacado su varita, pero se quedo quieta, mirando a Harry Potter, quien atrapo la espada sin problemas.
"Debería abrir... ¿O quiere que corte la puerta?"
Dumbledore inhalo con fuerza mientras cerraba los ojos por unos segundos. Cuando abrió los ojos, asintió y abrió la puerta con un movimiento de su mano. Harry asintió y salió con la espada en su mano.
"Ohohoho~ Que extraña es la vida. Nunca pensaría que Salazar Slytherin estaría orgulloso de un Gryffindor", Basil Fronsac comentó con una risa jovial.
"¿Qué sabes exactamente, Basil?", Phineas pregunto molesto. "Claramente sabes más que cualquier de nosotros".
"A mi también me gustaría saber, Basil", Dumbledore pregunto, dando varios pasos, bajando por la escalera frente a él y mirando hacía arriba, donde estaba colgado el retrato de Basil Fronsac.
"El señor Potter fue llamado aquí, justo después de lo que sucedió en el Ministerio. Muchos tendrían curiosidad por saber lo que hablaron, Albus".
"Ciertamente. Pero todavía sigo sin entender".
"Albus... ha tomado la espada de Godric Gryffindor sin pasar por una necesidad y mantener las condiciones que Godric ha impuesto. Un verdadero Gryffindor podrá tomar la espada, se dice. Y, sin embargo, él llamo a la espada mientras se comportaba como un Slytherin".
"A mi me pareció bastante impetuoso"
"¿Si? A mi no. Harry Potter hablo de sus planes, pero sin decir demasiado. Y salió con esa espada, con la que probablemente caminara por los pasillos, mostrándola a todo el que pase cerca de él. Si nadie aquí presente dice algo, entonces todos van a pensar que Albus estuvo de acuerdo con las acciones de Harry Potter, hasta el punto de ofrecerle la espada de Gryffindor".
"Eso... ", Dumbledore tenía los ojos bien abiertos, pensando que no podía ser verdad.
"No creo que el señor Potter haya pensado esas cosas", McGonagall frunció el ceño cuando dijo eso.
"Es un chico inteligente", Basil comentó con una pequeña sonrisa. "Hasta el punto en que Lady Rowena Ravenclow lo favorece".
"Quien sabe... ¿quizás el chico es un descendiente de las tres casas de Hogwarts? Eso explicaría muchas cosas".
"¿Cómo sabrías eso, Basil?"
"Hace días, el chico paso por el pasadizo que se encuentra detrás de mi otro retrato. Ese de las escaleras y que llega al cuadro de Lady Rowena cerca de la biblioteca. El pasadizo no es demasiado largo, así que pude escuchar algunas cosas".
"¿Qué escuchaste? ¿Qué dijo Harry?", Dumbledore pregunto preocupado.
"Solo algunos cosas: algo relacionado a un grupo de magos codiciosos que se escondían en las sombras y un horrocrux. Después de eso, se menciono la diadema de Ravenclaw. En ese momento, escuche la voz de Lady Rowena, pero era demasiado baja para entender bien"
"Ya veo... eso es preocupante. Ya no se lo que puede hacer".
. . .
"Bonita espada, Potter. ¿Quieres demostrar algo?"
"Ya quisieras, Draco"
En la sala de los requerimientos, Draco y Harry se habían encontrado una vez más. No sabían que Basil había soltado cosas importantes, pero incluso si lo supieran, no importaría. Los planes ya estaban en marcha, y pronto terminarían, para que puedan vivir sus vidas de mejor manera.
"Madame Bones ya ha comenzado los tramites necesarios para sacar una de esas cosas".
"Excelente. Si podemos sacar la copa sin demasiados problemas, solo quedaría el relicario... "
"Y fuera Voldemort", dijo Draco.
"Y fuera Voldemort", Harry asintió y sonrió.
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